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Saludo a los ministros	2006-03-15	1		Manaus	Amazonas	BR	00:00:00	false		true

Muy buenas noches, ministros compañeros en el Reino del Señor Jesucristo; es una bendición grande para mí estar con ustedes en esta ocasión, para saludarlos y pedirle a Cristo Sus bendiciones sobre cada uno de ustedes.

Que las bendiciones de Jesucristo, el Ángel del Pacto, sean sobre todos ustedes y sobre mí también, y les use grandemente en Su Obra en este tiempo final y a mí también. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén.

Aprecio mucho todo lo que ustedes han estado haciendo para el pronto pago de la compra del terreno en Puerto Rico. Que Dios les bendiga grandemente por lo que ustedes junto a sus congregaciones han hecho.

Ya se dio el pronto pago del terreno, ya nos entregaron el terreno y ahora estaremos en los pagos mensuales, lo cual también le agradezco a ustedes, la colaboración que ustedes estarán haciendo para los pagos de las mensualidades de ese terreno.

Y que Dios les bendiga, les prospere grandemente junto con vuestras congregaciones, y les dé abundancia de prosperidad y también bendiciones espirituales y bendiciones materiales, que Dios añada muchas personas a vuestras congregaciones, y muchas otras congregaciones sean abiertas por ustedes en el Estado de Amazonas y también en todo Brasil. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén.

Estamos viviendo en un tiempo muy importante, en donde todo lo que pasó en el pasado en la Iglesia de Jesucristo, ahora viene a ser un tipo y figura de lo que Dios estaría haciendo en este tiempo. “Porque lo que será, ya fue; y Dios restaura lo que pasó.” Eso está en Eclesiastés, capítulo 3, versos 10 al 15.

Por lo tanto, lo que estará sucediendo en nuestro tiempo ya sucedió en edades pasadas, se recorre de nuevo el Programa Divino, como fue en el pasado ahora en una escala mayor.

Así como en la música está la escala hasta el siete; y cuando se toca una octava, es lo mismo pero en una nota más alta. De eso habló el Reverendo William Branham acerca de una nota más alta, y eso solamente puede suceder cuando se toca una octava. Y cuando se toca una edad octava, ahí viene la repetición de lo que pasó en el pasado en las siete edades, pero en una escala más alta, en una nota más alta.

En una ocasión él estaba cantando, y cambió de una nota a una nota más alta, algo así sucedió; y eso nos habla de Dios a través de Jesucristo, el cual a través de las edades estaba tocando la hoja musical, interpretando la hoja musical correspondiente a cada edad correspondiente a las siete edades.

Y ahora, en una octava Él recorre de nuevo el camino ministerial en Su iglesia en la Edad de la Piedra Angular, y por consiguiente lo que sucedió en el pasado es el tipo y figura de lo que Dios estará realizando en este tiempo final. Y lo que sucedió allá viene a ser (como dijo Miguel):

¿Cómo fue, Miguel? Para este tiempo es en una forma magnificada. Pero el reverendo Miguel Bermúdez Marín estuvo hablando algo acerca de lo que sucedió allá en los tiempos pasados, y lo que sucedió en el reverendo William Branham fue un ensayo. O sea, en el tiempo del Reverendo William Branham, Dios dio una muestra, un ensayo de lo que será en este tiempo final, lo que será en la Tercera Etapa.

Por lo tanto, ya tenemos una muestra. “Y para muestra (dicen la gente) con un botón basta.” Ahora lo que queremos no es una muestra, es lo que fue mostrado allá, la muestra fue dada ya, ahora queremos lo que ha sido prometido con una muestra, lo queremos cumplido en la Iglesia de Jesucristo.

No será una muestra, será la promesa de la Tercera Etapa siendo cumplida, no una muestra de la Tercera Etapa, sino la Tercera Etapa en sí. La muestra ya la tuvimos a través del reverendo William Branham.

Es como cuando usted se encuentra con una persona que está vendiendo en la calle piña ya preparada, cortada o sea, limpiada, y le da un pedacito y usted se lo come; eso es una muestra, pero usted no le va a pedir otro pedacito ni él tampoco le está dando una muestra para que después le pida otro pedacito más de muestra, él está dándole esa muestra para que usted sepa lo rica que está esa piña o alguna otra fruta; o si es café, para los que les gusta el café, le dan una muestra en un vasito pequeño.

Pero cuando usted termina la muestra, cuando termina el momento de la muestra, no es para pedir otra muestrecita, es para pedir el paquete completo de café. Siempre se da muestra de lo que es bueno; de lo que no es bueno no se puede dar muestra porque entonces no comprarían.

Y ahora, por cuanto es tan buena la Tercera Etapa, tan gloriosa, y hay tantas grandes bendiciones de parte de Dios, Dios nos dio una muestra a través del Reverendo William Branham, una muestra de cómo será la Tercera Etapa en la Iglesia de Jesucristo en la Edad de la Piedra Angular, la Edad eterna de la Iglesia de Jesucristo, a la cual sube la Iglesia de Jesucristo para tener la bendición de la Tercera Etapa.

Estamos en el tiempo más glorioso de todos los tiempos. Para ver la Tercera Etapa será sencillo, ¿por qué? Porque en la muestra, la Tercera Etapa manifestada se veía cuando el Espíritu Santo ponía Su Palabra en la boca del reverendo William Branham, y él hablaba esa Palabra y las cosas sucedían.

En palabras más claras, estaremos viendo la Palabra que sale de la boca de Dios saliendo de la boca de un hombre, y lo que ese hombre estará diciendo, estará sucediendo. Eso es la Tercera Etapa, será la materialización de la Palabra hablaba.

Para cada manifestación de la Tercera Etapa antes se escuchará la Palabra creadora de Dios siendo hablada, y entonces podremos decir como dijo el Profeta Elías cuando supo de parte de Dios, y Dios le reveló, que iba a traer una gran lluvia; Dios puso esa Palabra en la boca de Elías, y era en un tiempo de una sequía que llevaba tres años y medio. Pero el Profeta Elías había dicho en el capítulo 17 de Primera de Reyes: “No habrá lluvia, ni aún rocío, sino por mi Palabra.” Ese hombre tenía la Palabra creadora para hablarla y las cosas suceder.

Para el Día Postrero tenemos la promesa del ministerio de Elías en su quinta manifestación, ahí estará la Palabra creadora para ser hablada y las cosas suceder; las cosas que deben suceder, sucederán de esa forma. El Profeta Elías dijo: “No habrá lluvia, ni aún rocío sino por mi Palabra.”

Y luego de transcurridos tres años y medio de sequía, lo cual produjo una hambruna muy grande en medio del pueblo, una situación de hambre en extremo sobre el pueblo, luego el Profeta Elías escuchó de parte de Dios, y luego el Profeta Elías dijo: “Una grande lluvia suena.”

Nadie escuchaba esa lluvia, pero el Profeta sí, el Profeta sabía lo que tenía que suceder en ese tiempo, y él sabía que por su Palabra vendría la lluvia, él tenía que hablar la Palabra, y la habló, y le dijo al rey que regresara a su casa de prisa, porque una grande lluvia venía.

El Profeta Elías se fue al monte a orar y envió a su siervo a mirar hacia el mar, por consiguiente miró hacia el Oeste, y le dijo que mirara hacia el Oeste, o sea, hacia el mar para ver si veía algo, o sea, una nube; porque cuando va a llover, se ven las nubes cargadas de agua.

Y en aquel tiempo no se veían nubes, porque era tiempo de sequía y no habían nubes de agua, y el siervo del Profeta regresó a Elías y le dijo: “No veo nada.” El Profeta le dijo: “Regresa siete veces, ve siete veces.”

Vean ustedes, se recorre siete veces el camino y la lluvia tiene que venir, luego de las siete veces, mientras Elías oraba para que viniera la lluvia, el siervo del Profeta fue las siete veces, en la última ocasión el siervo regresa diciendo: “Una pequeña nube del tamaño de la palma de la mano de un hombre, sube del mar.”

Y el Profeta Elías supo que esa nube, aunque era pequeña, era una nube que crecería y se formaría la nube grande que traería la grande lluvia que él escuchó que sonaba; y así fue.

Ahora, podemos ver que tenía que ser por la Palabra del Profeta, él la tenía que hablar primero, y después transcurriría un lapso de tiempo y se materializaría esa Palabra, pasaría por el proceso correspondiente para materializarse y traer la lluvia grande que dijo el Espíritu Santo a través del Profeta, porque era la Palabra creadora de Dios colocada en la boca del Profeta Elías para traer la grande lluvia.

Y ahora, encontramos que ha sido prometida una lluvia tardía y temprana, o sea, dos lluvias a la misma vez. Así como hay lluvia literal de agua, hay lluvia espiritual: tenemos la Lluvia Temprana de la Enseñanza de la Palabra de Dios del Evangelio de la Gracia para la Dispensación de la Gracia; y tenemos la Lluvia de la Enseñanza de la predicación del Evangelio del Reino para la Dispensación del Reino.

Tenemos la promesa que ambas lluvias estarán cayendo sobre la Tierra, y para eso se necesita a Elías de regreso, el ministerio de Elías para que hable esa Palabra de Dios, y tengamos ambas lluvias cayendo sobre la Iglesia y luego sobre el pueblo hebreo a la misma vez.

Para este tiempo no habrá lluvia ni temprana ni tardía, a menos que sea por la Palabra de Elías en su quinta manifestación, para traer las bendiciones de Dios a Su Iglesia y luego al pueblo hebreo; y eso está ligado a la Tercera Etapa de la cual habló el reverendo William Branham y experimentó como una muestra para él y para la Iglesia del Señor Jesucristo, que supo acerca de lo que sucedió cuando el reverendo William Branham habló la Palabra creadora de Dios y las cosas sucedieron.

Ahora, ustedes podrán observar que de todas las veces que él habló la Palabra creadora, fueron escogidas cinco ocasiones en las cuales abarca todas las cosas que van a suceder.

Cuando le habló a la tormenta, eso abarca toda la naturaleza, y eso nos habla de la Palabra creadora para tener control sobre toda la naturaleza, y eso corresponde al ministerio de Elías y de Moisés, que tendrán poder, autoridad sobre toda la naturaleza, para hacer con la naturaleza lo que ellos quieran que sea hecho. Y pondrán la naturaleza a trabajar en su favor, en favor del Programa que Dios tiene para ese tiempo, encomendado a los dos Olivos. También tenemos la muestra que fue dada acerca del tumor en uno de los ovarios de su esposa. Eso nos habla de autoridad, de poder y control sobre las enfermedades. También nos muestra la ocasión en que él - ahí en esa ocasión estando su esposa en el Oeste, Tucson, Arizona, y él estando en Jefersonville, Indiana, él habló la Palabra y ella quedó sanada estando a una distancia muy grande.

Luego tenemos otras manifestaciones de la Palabra creadora siendo hablada, por ejemplo, la Palabra para que aparecieran ardillas en diferentes ocasiones, o sea, en diferentes momentos él habló la Palabra donde no habían ardillas y apareció la ardilla que él habló a existencia, eso es poder para crear, poder para crear cosas que no existen. Pero las cosas que se ven, que existen físicamente, son hechas de las que no se veían, y por consiguiente vendrá momentos en que por la Palabra creadora vendrán a existencia cosas que serán habladas; en ese caso era para alimento.

Moisés recibió la Palabra creadora para hablarla, para que viniera maná del Cielo y para que vinieran aves para el pueblo hebreo, y así sucedió. También hay otros casos como el de Elías y Eliseo, en donde la harina de la tinaja fue multiplicada, no escaseó y el aceite de la botija no menguó.

También eso... hay dos casos similares: el ministerio de Elías y el ministerio de Eliseo, y también en el ministerio de Jesús la multiplicación de los panes y los peces. También tenemos dos muestras más. Vamos a pedirle a Miguel nos diga cuáles son las otras dos muestras: Palabra para salvación de los dos hijos de la hermana Hattie Wright.

Por lo tanto, hay esperanza para los familiares de los creyentes en Cristo del Día Postrero, esperanza para salvación de ellos.

El otro caso: Palabra para la resurrección mostrada en la resurrección de un pecesito que ya llevaba alrededor de media hora de haber muerto. Y eso nos habla de la Palabra creadora para la resurrección de los muertos en Cristo, y sobre todo para la resurrección de los hijos de Dios de la Edad de la Piedra Angular que han muerto físicamente en este tiempo final.

O sea, que habrá Palabra creadora siendo hablada, esa Palabra creadora para la resurrección es la gran Voz de Trompeta, porque a la final Trompeta los muertos en Cristo resucitarán primero, y nosotros los que vivimos seremos transformados. Esa es la Palabra creadora para resurrección: la Palabra de la gran Voz de Trompeta, la Palabra de la Trompeta de Dios, representada en la Fiesta de las Trompetas.

Y ahora, viendo que todas estas bendiciones están prometidas para la Iglesia del Señor Jesucristo, para ser manifestadas antes de la Iglesia irse de este planeta Tierra con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero, tenemos que estar con nuestro oído atento para oír esa Palabra creadora que vendrá en el Mensaje del Evangelio del Reino siendo predicado, en donde el Evangelio del Reino y el Evangelio de la Gracia estarán siendo predicados a la misma vez en la Edad de la Piedra Angular; pero que habrá una separación entre el Evangelio del Reino y el Evangelio de la Gracia, porque uno es para la Dispensación de la Gracia y el otro es para la Dispensación del Reino.

Pero cuando se llega al final de una dispensación, se entrelazan el mensaje de la dispensación nueva, con el mensaje de la dispensación que ha llegado a su final. Así será para este tiempo final.

Por lo tanto, estemos atentos, no vaya a ser que se nos escape la Voz de Dios, la Palabra creadora de Dios hablando las cosas que deben suceder, las cosas que están prometidas para suceder.

Las cosas sucederán a medida que esa Palabra creadora esté siendo hablada para cada una de las esferas correspondientes a la Tercera Etapa.

Vimos que la Tercera Etapa tiene que ver con la naturaleza, eso será control total de la naturaleza por la Palabra creadora de Dios siendo hablada, y eso corresponde a los dos Olivos que son los que tienen poder sobre la naturaleza.

Y así por el estilo podemos ver que la Tercera Etapa tendrá una manifestación sobre la naturaleza, sobre las personas para salvación, sobre las personas para sanidad, sobre cosas que no existen para traerlas a existencia, como la creación de las ardillas.

Y también la resurrección de los muertos en Cristo está ligada a esa Palabra creadora, porque la Palabra creadora para la resurrección de los muertos, es la gran Voz de Trompeta o Trompeta Final, y por consiguiente la Iglesia de Jesucristo estará escuchando esa Palabra creadora de la gran Voz de Trompeta o Trompeta Final.

Por eso el pueblo hebreo también estará escuchando a los Ángeles del Hijo del Hombre, enviados con Gran Voz de Trompeta, para llamar y juntar ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, para el recogimiento de ellos, y juntarán a Sus escogidos con gran Voz de Trompeta para traer esa resurrección del pueblo hebreo como nación.

Una resurrección completa y por consiguiente una restauración a lo que era Israel en el tiempo del rey David y del rey Salomón, una restauración del pueblo hebreo a la monarquía, al Reino de David, que es el Reino de Dios en este planeta Tierra, en donde un descendiente de la dinastía de David, tomará el Trono de David y por consiguiente el Reino de David. Y quedará restaurado el pueblo hebreo a la monarquía, al Reino de David, bajo un descendiente de la dinastía del rey David.

Pero antes de eso, la Palabra creadora para que eso suceda tiene que ser hablada, y habrá un hombre en el cual Dios colocará esa Palabra creadora, y así como en los días de Elías, que no llovía por tres años y medio; y ahora, Elías habla y dice que va a llover, que una grande lluvia suena, cuando ni siquiera rocío caía sobre la Tierra, todo parecía inconcebible a la mente humana. Pero ese era el Programa de Dios para ese tiempo, y Elías habló y luego se materializó todo lo que Elías dijo.

Actualmente parece que es imposible que Israel sea restaurado al Reino de David, lo más que parece que va a suceder al pueblo hebreo es que va a ser borrado del mapa y por consiguiente del planeta Tierra. Esas son las apariencias; pero lo que dice la Palabra de Dios es que Israel va a ser restaurada.

Muchos hablan negativamente diciendo que Israel debe ser borrado del mapa, pero eso no es Palabra de Dios. Pero vendrá uno hablando positivamente, en el cual Dios pondrá Su Palabra creadora, y lo que parece ser imposible: La restauración del pueblo hebreo al Reino de David va a ser posible, porque será hablada esa Palabra creadora y todo va a obrar en favor de esa restauración del Reino de David al pueblo hebreo, y del pueblo hebreo al Reino de David.

Por lo tanto, la Palabra prometida es que Israel va a ser restaurado, el Reino de Dios va a ser restaurado al pueblo hebreo, y un hombre ungido con el Espíritu de Dios vendrá, y Dios colocará en él la Palabra creadora, o sea, Su Palabra creadora.

Ese hombre hablará por medio del Espíritu Santo, o sea, el Espíritu Santo hablando a través de él, el Ángel del Pacto, hablando a través de ese hombre traerá la Palabra creadora, la cual se materializará, y en este séptimo milenio de Adán hacia acá o tercer milenio de Cristo hacia acá, se materializará la Palabra creadora de la restauración del Reino de David al pueblo hebreo. Tan simple como eso.

Por esa causa en este tiempo final tenemos que tener nuestros ojos espirituales bien abiertos, y nuestros oídos bien abiertos y atentos a lo que estará hablando Dios, porque eso será la Palabra creadora para crear todo lo que Dios ha prometido para este tiempo final. Y esa es la Palabra que yo quiero escuchar.

“Profeta como yo os levantará el Señor vuestro Dios, a él oiréis,” dijo el Profeta Moisés al pueblo hebreo en Deuteronomio, capítulo 19, verso 15. Y el verso 18 al 19, dice el Profeta Moisés que Dios va a levantar ese Profeta.

El mismo Dios hablando a través del Profeta Moisés dice que va a levantar ese Profeta. Dice: “Y pondré mi Palabra en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare, y cualquiera que no oyere lo que él hablare en mi Nombre, yo le pediré cuenta.” En el libro de Hechos, capítulo 3, verso 18 al 23 también el Apóstol Pedro cita esa Escritura.

Por lo tanto, estemos atentos porque este es el tiempo para aparecer en la Tierra... [Corte del audio original]...será el Profeta más grande que Dios haya enviado a Su pueblo: al pueblo hebreo y a la Iglesia del Señor Jesucristo, será un Profeta para la Iglesia de Jesucristo y para el pueblo hebreo y para toda la humanidad.

Por lo tanto, estemos atentos porque ese será el Profeta que el pueblo hebreo está esperando, como el Elías prometido que estará precursando para el pueblo hebreo la Venida del Señor.

Ese será el mismo Profeta que Cristo tendrá en medio de Su Iglesia en este tiempo final, con la manifestación del quinto Elías para Su pueblo. Será bajo el ministerio de los dos Olivos que los grandes milagros y maravillas prometidos estarán sucediendo.

Por lo tanto, estemos atentos, vigilando por la venida, por la aparición de ese Profeta Mensajero que Dios enviará a Su Iglesia y al pueblo hebreo.

Ha sido una bendición grande para mí estar con ustedes en esta ocasión, mostrándoles estas cosas que deben suceder pronto en este tiempo, en la Edad de la Piedra Angular, para que estemos en este tiempo atentos y reconozcamos ese Mensajero, y estemos brazo a brazo con él trabajando en todo aquello que él estará trabajando bajo la dirección de Dios. Para que estemos brazo a brazo con él trabajando en la Obra de Dios, que le será encomendada para este tiempo final.

Muchas gracias. Y que Dios les bendiga, les use grandemente, y les cuide de todos los peligros, y les prospere espiritualmente y materialmente. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén.

Hasta aquí, pues de seguro ya están esperando los hermanos para la actividad de esta noche, que será a las 7:00 ó 7:30. ¿Y qué hora es? Ya es la hora para ellos estar aquí.

Así que Dios les bendiga, y con ustedes nuevamente el misionero, reverendo Miguel Bermúdez Marín.

Dios les bendiga.

“PALABRAS DE SALUDO.”