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Palabras de saludo	2008-01-19	1		Goiânia	Goiás	BR	00:00:00	false		true

Muy buenos días, Miguel Bermúdez Marín y ministros: pastores, evangelistas y colaboradores de Venezuela, de Puerto Rico, de Chile, Perú, Bolivia, Colombia, México y demás países que se encuentran ahí en Venezuela, en esta reunión internacional que están llevando a cabo en esta ocasión, y en donde también están para poner las metas correspondientes, que están haciendo con relación a Puerto Rico, y también formas de trabajar en este tiempo tan importante en que estamos viviendo, en el cual se esperan grandes bendiciones.

Grandes políticos han hablado de que el año 2008 es muy importante, y que se espera que venga la paz. También líderes religiosos y otras personas han dicho que este año es el año del Arcángel Miguel.

Por lo tanto, hay una expectativa a nivel mundial en este año y para este año, en el cual esperamos importantes eventos siendo cumplidos para bendición de los seres humanos: el de los judíos y de los musulmanes y de toda la familia humana.

Es muy importante que los ministros estén unidos en Amor Divino los unos con los otros, trabajando arduamente en el Programa Divino correspondiente a este tiempo final. Esperamos una labor grande de parte de Dios para la Iglesia del Señor Jesucristo, para los judíos y también para los musulmanes y para todas las naciones.

Estamos esperando la culminación del Programa Divino, en donde está prometido un evento importante que impactará a toda la humanidad, y fue descrito como La Tercera Etapa, que será para la Novia, o sea, para la Iglesia del Señor Jesucristo, compuesta por los creyentes en Cristo nacidos de nuevo. Y esa Tercera Etapa también será para las vírgenes insensatas, o sea, que será para el cristianismo completo, que contiene las vírgenes prudentes y las vírgenes insensatas: las vírgenes que tenían aceite, o sea, tenían el Espíritu Santo; y las vírgenes que no tenían aceite, o sea, que no tenían el Espíritu Santo; esto es así para individuos como también para el grupo religioso del cristianismo.

Y también esa Tercera Etapa está prometida que será para el mundo, o sea, que impactará a toda la humanidad, impactará al cosmos, o sea, a todos los sistemas mundiales y nacionales de todas las naciones, lo impactará en todas las esferas de la sociedad; y también va a impactar, por consiguiente, a los judíos: impactará a ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, doce mil de cada tribu; o sea, que impactará a los descendientes del reino del Norte, llamado Israel, y a los descendientes del reino del Sur, llamados Judá. Así que impactará a los hebreos en este tiempo final, impactará a los hebreos en todas sus esferas.

Así va a ser coronado el Programa Divino que Dios llevará a cabo en este tiempo final. Y ocurrirá la resurrección de los muertos en Cristo bajo esa Tercera Etapa, y la transformación de los vivos en Cristo nacidos de nuevo. Todas esas son promesas para la Iglesia del Señor Jesucristo, la cual será experimentada por el cristianismo, el judaísmo, el islam y todas las esferas religiosas de la familia humana; y también todas las esferas de la sociedad.

Está prometida la aparición de una carpa o catedral grande (o sea, gigante), donde se estará predicando y en donde habrá llamamiento al altar para salvación, y donde habrá oración por los enfermos, en un lugar pequeño de madera, dentro de esa carpa o catedral gigante; y de donde saldrán sanas las personas, saldrán sanas por la puerta de salida; entrarán por una puerta y saldrán por otra; entrarán por una puerta enfermos o con dificultades, y saldrán sanos por otra puerta, libres de sus problemas físicos; y darán testimonio de que han obtenido su sanidad, y será todo grabado como fue mostrado.

Todo eso está prometido para ser cumplido en medio del cristianismo en el tiempo final; por lo tanto, ese es un proyecto divino en el cual todos los creyentes (en este proyecto que fue mostrado en visión al reverendo William Branham) estarán trabajando. Estar trabajando en este proyecto, eso es estar trabajando en un plan divino que está prometido para ser cumplido en este tiempo final.

Mi deseo sería que en muchos países pueda surgir o haber lugares semejantes a ése que fue visto en esa visión. Aunque habrá uno que cumplirá todo lo que fue visto en esa visión. Y cada ministro quisiera que fuera el de su país.

Ahora, estamos dispuestos a respaldar de todo corazón, con nuestras congregaciones, ese proyecto divino que fue mostrado en esa visión, y por consiguiente estamos trabajando para que una carpa o catedral gigante sea establecida en Puerto Rico; y después veremos que en otros países también es factible (posible) que se haga lo mismo; pero primero tenemos que comenzar con un lugar, y ya hemos comenzado y continuaremos hasta que veamos levantada una carpa o catedral gigante, en donde esperamos que el ministerio del Día Postrero, del día final o séptimo milenio, sea manifestado, el cual está prometido que será el ministerio de Elías junto al ministerio de Moisés, o sea, el ministerio de los dos Olivos; porque los grandes milagros, señales y maravillas para el Día Postrero están prometidas para el ministerio de los dos Olivos, el ministerio de Moisés y Elías; y en donde esté el instrumento en el cual estará el ministerio de Elías, ahí estará el cumplimiento para la Visión de la Carpa.

Por lo tanto, tenemos que vigilar para que ambas cosas concuerden, y podamos ver ambas cosas siendo cumplidas: el ministerio de Elías y la Visión de la Carpa siendo cumplida.

Por lo tanto, podemos comprender y ver lo sencillo que será todo, así como Moisés tuvo una carpa, donde estaba el Arca del Pacto, y donde estaba la mesa de los panes de la proposición, y donde estaba también el altar del incienso, y donde estaba el candelero o candelabro con sus siete lámparas, pues Moisés fue el que mandó a construir ese tabernáculo por orden divina.

Vean ustedes, para el Día Postrero así como hemos visto también muchos evangelistas que han tenido una carpa, el reverendo William Branham también ministró bajo carpa en algunos países: en Norteamérica y otros países; para el Día Postrero, Elías ministrará bajo carpa junto al ministerio de Moisés, y eso dará lugar a una manifestación grande, plena, de parte de Dios, en donde maravillas, señales, milagros, serán efectuados; y también miles de personas recibirán a Cristo, recibirán salvación; y muchas personas también recibirán sanidad divina.

Esperamos ver pronto estos ministerios de los dos Olivos, porque para ellos serán los milagros y maravillas en medio del pueblo de Dios, ellos tendrán el poder, porque Dios estará en ellos manifestando Su poder. Y esperamos que los ministerios y la Visión de la Carpa surjan unidos en este tiempo final, y veamos las dos cosas unidas: la Visión de la Carpa y los ministerios de Moisés y Elías operando en esa carpa o catedral gigante que ha sido prometida.

Y si fue visto por el reverendo William Branham al ser transportado al futuro, tiene que aparecer en algún lugar del planeta Tierra; y por cuanto la Tercera Etapa será cumplida aquí, y está en un idioma desconocido al reverendo William Branham, que hablaba inglés; por lo tanto, no será inglés, será en otro idioma. Y nosotros sabemos que será en el Occidente, y por consiguiente será el español; y si hay que traducir a otro idioma, pues habrá traductores, no habrá problema.

Ahora, no solamente oramos sino que trabajamos para que se haga una realidad la Visión de la Carpa: surja una carpa gigante, una carpa o catedral, la cual dedicaremos a Dios para que Él se manifieste en toda Su plenitud, como está prometido; y por consiguiente ya estamos trabajando para que una carpa o catedral gigante aparezca; y después, si tiene que aparecer otra para que el mismo ministerio sea manifestado en otros países, pues trabajaremos también en esa labor; pero primero tenemos que trabajar por la primera, hasta que se haga todo lo que hay que hacer y esté lista, no solamente con el techo sino también con los asientos, con el sistema de sonido, con el sistema de alumbrado; y si tenemos que colocarle aire acondicionado, también le colocaremos. Eso veremos si habrá necesidad de eso.

Así que ya hemos comenzado, y continuaremos hasta que veamos una carpa o catedral gigante levantada para la gloria de Dios.

Así que adelante trabajando en este proyecto, en el cual ya ustedes han comenzado a trabajar junto al misionero, doctor Miguel Bermúdez Marín y demás ministros que están brazo a brazo con él, y cada uno de ustedes que han estado brazo a brazo con él.

Yo le pido a Dios Sus bendiciones sobre cada uno de ustedes, que han creído de todo corazón que esa Visión de la Carpa sería levantada o sería cumplida en este tiempo final, y que trabajarían (y ya están trabajando) para que se haga una realidad lo que fue visto en esa visión que Dios le dio al reverendo William Branham. Él desde el Paraíso o sexta dimensión está mirando y viendo todo lo que ustedes están haciendo. Y él está viendo que todos han creído lo que él dijo que él vio, en donde él vio la Tercera Etapa manifestada.

Cualquier persona puede preguntarnos: “¿Y por qué están trabajando en la construcción de un edificio, carpa o catedral tan grande?” Porque creemos lo que Dios le mostró al reverendo William Branham, el cual sabemos y creemos que fue el precursor de la Segunda Venida de Cristo; por lo tanto, adelante trabajando en este proyecto, y Dios les dará la victoria a ustedes y también a mí, porque yo también lo creo de todo corazón.

Así que adelante trabajando en este proyecto, y que Dios los bendiga con vuestras congregaciones, y los use grandemente en toda Su Obra, y que en este proyecto de Su Obra les use grandemente; y que también Dios llene vuestras congregaciones de escogidos en este tiempo final y les prospere espiritualmente y materialmente también; en el Nombre del Señor Jesucristo. Amén.

Muchas gracias, Miguel, y a todos los que están escuchándome en estos momentos en Venezuela y en otros países. Y les agradezco todo lo que están haciendo por Puerto Rico y por el proyecto que se está desarrollando en Puerto Rico.

Que Dios les bendiga y les guarde. Y adelante Miguel Bermúdez Marín.

“PALABRAS DE SALUDO.”