obsidian/es/conferencias/2002/05/spa-2002-05-20-1-ministros_con_entendimiento-SANCO.md

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title: 'Ministros con entendimiento'
date: 2002-05-20
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Muy buenas tardes, amados ministros, compañeros en la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino; es para mí una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final. Para esta ocasión leemos en Efesios, capítulo 3... vamos a ver capítulo 1, verso 3 en adelante de Efesios, dice... vamos a buscar aquí a ver el pasaje que Miguel había colocado para... del 15 en adelante, dice:

“*Por esta causa también...”* Vamos a leer un poquito antes, 13 en adelante, dice:

“*En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,*

*que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.*

*Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos,*

*no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones,*

*para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis*

*cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos,*

*y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza,*

*la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales,*

*sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo, sino también en el venidero;*

*y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia,*

*la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.”*

Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla.

Nuestro tema para esta ocasión es: **“MINISTROS CON ENTENDIMIENTO.”**

“**MINISTROS CON ENTENDIMIENTO.”**

Ahora, San Pablo nos dice que Dios nos dé espíritu de sabiduría y revelación para el conocimiento de El, para que podamos conocer a Cristo y el misterio de Dios en Cristo. El misterio de Dios en Cristo es el misterio de Dios hecho hombre en medio de la raza humana. El misterio de Dios siendo velado y revelado a través de Cristo nuestro Salvador.

En San Juan, capítulo 1, verso 18, dice:

“*A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.”*

Y en el capítulo 1, verso 1 de San Juan (verso 1 en adelante), dice:

“*En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.*

*Este era en el principio con Dios.*

*Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.”*

Y luego el mismo capítulo, verso 14, dice:

“*Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.”*

Y ahora, para Dios llevar a cabo Su Obra de Creación, Dios en Cristo en Su cuerpo angelical, que es el Angel de Jehová, trajo a existencia todas las cosas, por medio de El, Cristo (que es la imagen del Dios viviente, el cuerpo angelical de Dios), Dios trajo a existencia todas las cosas, habló por medio de Cristo, el Angel de Jehová, el cuerpo angelical de Dios; y a medida que iba hablando, iban viniendo a existencia todas las cosas.

Por eso los pensamientos divinos para la creación fueron colocados en Su Angel, el Angel de Jehová, y también fue colocado el Nombre de Dios en Su Angel, el Angel de Jehová; porque donde está el nombre, ahí está el dueño del nombre. Y Dios estaba ¿dónde? En Su Angel, el Angel de Jehová.

Por eso cuando le apareció el Angel de Jehová a Moisés en aquella llama de fuego sobre un árbol, sobre una zarza, Moisés fue a ver y le dice: “Moisés, Moisés.” El dice: “Heme aquí.” Dice: “Quita el calzado de tus pies porque el lugar donde estás, tierra santa es.”

Y ahora, dice la Escritura que era el Angel de Jehová. Y ahora cuando se revela a Moisés le dice: “Yo Soy el Dios de tu padre (o sea, el Dios de Amram, que es el padre de Moisés).” Amram era descendiente de Coat, y por consiguiente descendiente de Leví.

Y ahora, el Angel de Jehová le dice: “Yo Soy el Dios de tu padre, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, y Dios de Jacob (y Dios de Jacob).”

Ahora, vean cómo el Angel de Jehová le dice a Moisés que El es el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. ¿Y cómo puede ser el Angel de Jehová, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob? Porque en el Angel de Jehová está Dios, y es Dios el que está hablando a través de Su Angel, a través de Su cuerpo angelical.

Ahora, podemos ver el misterio de Dios en Cristo, Cristo en Su cuerpo angelical.

Vean, el cuerpo angelical de Cristo, el Angel de Jehová, el Angel del Pacto. Por eso podía decir Cristo: “Antes que Abraham fuese, Yo Soy.” ¿Cómo era Cristo antes de Abraham? Pues vean, era el Angel de Jehová, el Angel del Pacto, y El se iba a hacer carne en medio de Su creación, en medio de la raza humana, y en medio del pueblo que El creó como pueblo, como nación, que es el pueblo hebreo.

La Primera Venida de Cristo corresponde al pueblo hebreo, el pueblo creado por Dios, porque tiene que ser Su Venida en medio del pueblo creado por Dios.

Y ahora, ¿por qué la Iglesia del Señor Jesucristo en el Nuevo Testamento está esperando la Venida del Señor? Porque es el pueblo creado por Dios del Nuevo Testamento, el pueblo Celestial creado por Dios, creado por Cristo, es el pueblo señalado como la nueva creación descendiente del Segundo Adán. En medio de ese pueblo es que tiene que ser cumplida la Segunda Venida de Cristo.

Y ahora, encontramos que necesitamos tener espíritu de sabiduría y de conocimiento, y solamente puede darlo Cristo a cada ministro como individuo, a cada persona como individuo, y a la Iglesia de Jesucristo como Cuerpo Místico de creyentes.

Y ahora, ¿cómo vino la sabiduría y conocimiento en el Antiguo Testamento al pueblo hebreo, a Moisés, al pueblo hebreo, y luego a Daniel? Vamos a ver: al pueblo hebreo vino la sabiduría, el conocimiento, por medio del Angel de Jehová, el Angel del Pacto, el cual se reveló a Moisés y Moisés dio a conocer toda esa revelación divina que recibió de parte del Angel del Pacto, del Angel de Jehová, que es Cristo en Su cuerpo angelical; por eso la Ley fue dada por comisión de Angeles. Y allí no solamente estaba el Angel de Jehová, Cristo en Su cuerpo angelical, sino que hubo más Angeles allí también, fue un gran evento allá en el Monte Sinaí.

Ahora, vamos a ver en el libro del Profeta Daniel; capítulo 9, verso 20 en adelante, dice... capítulo 9 de Daniel, verso 20 en adelante, ice:

“*Aún estaba hablando y orando, y confesando mi pecado y el pecado de mi pueblo Israel, y derramaba mi ruego delante de Jehová mi Dios por el monte santo de mi Dios;*

*aún estaba hablando en oración, cuando el varón Gabriel, a quien había visto en la visión al principio, volando con presteza, vino a mí como a la hora del sacrificio de la tarde.*

*Y me hizo entender, y habló conmigo, diciendo: Daniel, ahora he salido para darte sabiduría y entendimiento.*

*Al principio de tus ruegos fue dada la orden, y yo he venido para enseñártela, porque tú eres muy amado. Entiende, pues, la orden, y entiende la visión.”*

Y ahí le es revelado a Daniel por el Arcángel Gabriel lo que él podía recibir para comprender.

Ahora, encontramos también en otro lugar... vamos a ver qué lugar es este... el 8:15 al 19, aquí lo tengo marcado también, dice:

“*Y aconteció que mientras yo Daniel consideraba la visión y procuraba comprenderla...”*

¿Ven? No la comprendía, él consideraba, examinaba la visión, y se preguntaba: “¿Qué significará esto?” Buscaba (siendo Daniel un hombre sabio y teniendo las dos conciencias juntas, porque es un Profeta), Daniel estaba tratando de entender, pero no podía entender. Dice:

“*Y aconteció que mientras yo Daniel consideraba la visión y procuraba comprenderla, he aquí se puso delante de mí uno con apariencia de hombre.”*

Por eso éste que tiene apariencia de hombre, su nombre significa: “Hombre de Dios.” También es llamado: “Varón de Dios,” que es “hombre de Dios.” Y también: “Fuerte de Dios.” Eso es como cuando se dice de un... por ejemplo de una compañía: el hombre fuerte de esa compañía es *tal*, es el dueño o el presidente; el hombre fuerte de *tal* país, pues es el presidente del país; y si es un reino, pues es el rey.

“*Y oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a éste la visión.*

*Vino luego cerca de donde yo estaba; y con su venida me asombré, y me postré sobre mi rostro. Pero él me dijo: Entiende, hijo de hombre, porque la visión es para el tiempo del fin.*

*Mientras él hablaba conmigo, caí dormido en tierra sobre mi* *rostro; y él me tocó, y me hizo estar en pie.*

*Y dijo: He aquí yo te enseñaré lo que ha de venir al fin de la ira; porque eso es para el tiempo del fin.”*

Vean, el Arcángel Gabriel sabe lo que tiene que venir en el fin del tiempo, él sabe lo que tiene que venir en el fin de la ira. ¿Y por qué ese Arcángel sabe tantas cosas? Porque ese es el Arcángel de la revelación divina, ese es el Arcángel que le mostró a Daniel todas esas cosas que iban a suceder con el pueblo hebreo, y también con el reino de los gentiles.

Vean, fue el Arcángel Gabriel el que le hizo conocer estas cosas a Daniel, y están ahí escritas en forma profética, pero ya muchas han sido comprendidas, y muchas han sido ya cumplidas, diferentes etapas del reino de los gentiles.

Ahora, encontramos que está hasta la etapa de los pies de hierro y de barro cocido, que es el reino del anticristo.

Ahora, este Arcángel, que es el Arcángel de la revelación divina, no vino a Daniel haciendo milagros, sino trayéndole la revelación divina a Daniel. Aunque cuando se tuvo que enfrentar con el príncipe del reino ¿de Persia era Miguel? De Persia; o sea, ese príncipe espiritual, que era el que gobernaba a través del príncipe o rey terrenal que estaba allí.

Recuerden que este planeta Tierra es gobernado por el príncipe de las tinieblas, y él tiene sus agentes, sus príncipes de ese reino, para hacer esa labor. Así como Cristo dice a los Apóstoles: “Ustedes se van a sentar en doce tronos y van a juzgar a las doce tribus de Israel.” Y así como Dios colocó a David sobre el reino de Dios aquí en la Tierra, vean, colocó a David, pero detrás de David está el Angel de Jehová; o sea, desde otra dimensión, pero usando a David y después a Salomón; estaban ungidos para esa labor.

Ahora, el Arcángel Gabriel yo siempre le he llamado: El Arcángel Profeta de la sexta dimensión, porque viene dando a conocer, profetizando las cosas que van a suceder, y se las da a conocer a Daniel. Por lo tanto, Daniel no profetizó nada, fue el Arcángel Gabriel, Daniel lo que hizo fue escribir la profecía que trajo el Arcángel Gabriel, que trajo Gabriel, el hombre de Dios de esa otra dimensión.

Este Arcángel fue también el que vino al sacerdote Zacarías y le dijo que la esposa del sacerdote Zacarías iba a tener un hijo, o sea, que Zacarías iba a tener un hijo por medio de su esposa, le dijo: “Tu oración ha sido oída.” Es el Arcángel también que trae la respuesta de las oraciones al Profeta Daniel, al sacerdote Zacarías también. Por eso aparece ¿dónde? Junto al altar del incienso; y el altar del incienso, cuando ahí se coloca el incienso y se quema, sube el humo del incienso hasta la presencia de Dios, y suben las oraciones de los santos.

Ahora, está al lado derecho ¿es? Del altar. Eso es muy importante también: la posición donde se encuentra. Trajo la respuesta a Daniel cuando estaba orando, y trajo la respuesta a Zacarías cuando estaba allí orando y ofreciendo el incienso a Dios, ¿ven? Donde iban las oraciones del pueblo hebreo.

Le profetiza a Zacarías que va a tener un hijo, le dice que va a ser Profeta de Dios, y le dice que va a venir con el espíritu y virtud de Elías, para tener un pueblo bien dispuesto para el Señor, va a convertir el corazón de los padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos. Eso está en San Lucas, capítulo 1, en todo ese capítulo está la venida de Gabriel, tanto al sacerdote Zacarías, y seis meses después a la virgen María.

Y ahora, el sacerdote Zacarías, sabiendo que su esposa ya estaba avanzada en edad, ya era una señora mayor de edad, y él también, le dice: “¿Cómo puede ser, cómo va a ser esto?” O sea, no creyó. Vamos a ver cómo es que le pregunta aquí al Arcángel. Vean, él no se identificó, no se identificó con Zacarías, tampoco se identificó con María, y tampoco se identifico con Daniel. Pero dice Daniel que él escuchó a otro hombre de otra dimensión, a otro varón que dijo: “Gabriel, enséñale a éste la visión.” Y entonces supo que el que estaba con él, frente a él, con apariencia de hombre, era el Arcángel Gabriel; o sea, que la revelación la recibió del Cielo.

¿De quién era ese Angel que estaba, de ese varón? Estaba para darle la revelación de todas esas cosas que iban a suceder, siendo el Arcángel Gabriel que tiene acceso al libro de la Verdad, por lo tanto tiene que conocer la verdad de las cosas que van a suceder.

Y ahora, vamos a ver lo que dice aquí el sacerdote Zacarías, capítulo 1, verso 11 en adelante, dice... verso 8:

“*Aconteció que ejerciendo Zacarías el sacerdocio delante de Dios según el orden de su clase,*

*conforme a la costumbre del sacerdocio, le tocó en suerte ofrecer el incienso, entrando en el santuario del Señor.*

*Y toda la multitud del pueblo estaba fuera orando a la hora del incienso.*

*Y se le apareció un ángel del Señor puesto en pie a la derecha del altar del incienso* (dice, vean dice: ‘un Angel del Señor.’)*.*

*Y se turbó Zacarías al verle, y le sobrecogió temor.*

*Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída* (o sea, que Zacarías había orado a Dios por tener un hijo, y también estaba orando allí por el pueblo; y como el pueblo estaba orando afuera, entonces ahí iban las oraciones del pueblo, en ese incienso que era quemado y subía a la presencia de Dios; y vean dónde está el Arcángel Gabriel ahí)*...*

*Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan.*

*Y tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán de su nacimiento;*

*porque será grande delante de Dios. No beberá vino ni sidra, y será lleno del Espíritu Santo,*

*Y hará que muchos de los hijos de Israel se conviertan al Señor Dios de ellos.*

*E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto.”*

Aquí lo presenta como precursor: “Para prepararle al Señor un pueblo bien dispuesto.” Para que así en la Venida del Señor el pueblo estuviera esperando al que vendría después de Juan el Bautista.

“*Dijo Zacarías al ángel: ¿En qué conoceré esto?...”*

María dijo: “¿Cómo será hecho esto?” Pero Zacarías aquí dice: “¿En qué conoceré?” Son dos preguntas diferentes. El estaba pidiendo una señal.

“*Porque yo soy viejo, y mi mujer es de edad avanzada* (ya pasada del tiempo que las mujeres pueden tener bebé, que es de 40 a 50 años, ya a los 50 años, ya por cuando no tienen la costumbre de las mujeres que dice la Biblia, pues entonces no están ovulando y no pueden entonces concebir)*.*

*Respondiendo el ángel, le dijo: Yo soy Gabriel* (vean, aquí sí se identificó)*... Yo soy Gabriel, que estoy delante de Dios* (es uno de los Arcángel que están delante de Dios; el otro Miguel; de otros, pues no sabemos, pero ya aquí sabemos que éste está delante de Dios)*; y he sido enviado a hablarte, y darte estas buenas nuevas* (estas buenas noticias)*.*

*Y ahora quedarás mudo y no podrás hablar, hasta el día en que esto se haga, por cuanto no creíste mis palabras, las cuales se cumplirán a su tiempo.*

*Y el pueblo estaba esperando a Zacarías, y se extrañaba de que él se demorase en el santuario.*

*Pero cuando salió, no les podía hablar; y comprendieron que había visto visión en el santuario. El les hablaba por señas, y permaneció mudo.”*

Ahora vean, quería una señal, ahí tiene la señal. Cuando uno por incredulidad busca una señal, no puede esperar que le venga una señal que le agrade.

Ahora, veamos cuando le apareció a la virgen María, dice:

“*Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret,*

*a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María.”*

El doctor Lucas, compañero de Pablo, dice al comienzo del Evangelio que él investigó las cosas de todas las cosas que habían sucedido, por eso aquí él identifica a este Angel como el Arcángel Gabriel.

Si estaba vivo Zacarías o alguno de los familiares, o la virgen María, a la cual él entrevistó; como la virgen María, pues había visitado a Elisabet y eran de la familia, parientas (parientes eran) por lo tanto tuvieron su conversación; y ahí entonces de seguro Elisabet y el sacerdote Zacarías le explicarían sobre el niño que iban a tener y el nombre que le iban a poner. Aunque Zacarías no pudo hablar hasta que vino el tiempo del nacimiento, pero podía escribir, y de seguro le escribió también de todas estas cosas a su esposa Elisabet: que iban a tener un niño, y todas estas cosas; y la señal era que estaba mudo.

Y ahora, la virgen María obtiene también todo ese conocimiento y cuenta también a Elisabet y al sacerdote Zacarías, porque él podía oír todo lo que había sucedido con ella, la experiencia que había tenido, y que el Arcángel Gabriel, que el Arcángel le había dicho, le había dicho que a la que llamaban estéril, iba a tener un niño. Por lo tanto, aunque no le dijera a María que él era el Arcángel Gabriel, ya al decir que a la que llamaban estéril (Elisabet) iba a tener un niño, pues saben entonces que aquél que le habló a Zacarías es el mismo que le habló a la virgen María.

“*Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María* (si sacamos la cuenta desde el mes sexto en adelante, entonces nos da por ahí por el mes tercero el nacimiento de Jesús, por el mes tercero del otro año siguiente, o mes cuarto; depende por dónde estaba el mes en el cual le apareció a la virgen María)*... a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María.”*

Cuando se dice: ‘de la casa,’ es de la familia, de la descendencia. Cuando Dios dice que levantará la casa, digamos, de David, pues eso es la familia de David.

“*Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres.*

*Mas ella, cuando le vio, se turbó por sus palabras, y pensaba* *qué salutación sería esta.*

*Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios.*

*Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS.*

*Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre;*

*y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.”*

Vean, tenía toda la revelación de todo el Programa divino para el Reino de Dios en la Tierra, Milenial, y para toda la eternidad, porque es un Reino que será para siempre.

“*Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón.*

*Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios.*

*Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su vejez; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril.”* Por lo tanto, cuando apareció el Angel a Zacarías, fue en el primer mes o antes del primer mes, depende del tiempo que le tocaba a Zacarías su ministerio en el templo para ofrecer el incienso, porque después no sabemos cuantos días más estuvo ministrando, y luego llegar a la casa.

“*porque nada hay imposible para Dios.*

*Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia.”* Ahora, vean aquí cómo el Arcángel Gabriel trae la revelación divina de la Venida del precursor y también el nombre del precursor, y cómo también trae la revelación divina de la Primera Venida de Cristo y el Nombre que tendrá el Mesías en Su Primera Venida de Cristo, y trae la revelación divina a la que sería el instrumento a través del cual nacería el Mesías, y esa sería la mujer por la cual vendría esa simiente de Dios.

Y ahora, vean, cuando Dios dio la promesa allá en Génesis, capítulo 3, verso 15, de una mujer, la simiente de la mujer, ahora miren dónde aparece la mujer: miles de años después, y el Arcángel Gabriel la identifica, va directamente a ella, y le habla la palabra profética, y ella al creerla, vean ustedes, viene a ser la mujer bienaventurada. Y vean lo que sucede después:

“*En aquellos días, levantándose María, fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá;*

*y entró en casa de Zacarías, y saludó a Elisabet.”*

Vean, el Arcángel le había hablado de su parienta Elisabet, y ahora ella va para donde su parienta Elisabet.

“*Y aconteció que cuando oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabet fue llena del Espíritu Santo.”*

Ahí fue donde Juan el Bautista fue lleno del Espíritu Santo, aun desde el vientre de su madre.

“*Y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres.”*

Lo mismo que había dicho el Arcángel Gabriel a la virgen María. El Arcángel Gabriel había dicho: *“¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres.”* Y ahora Elisabet también le dice:

“*Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre* (o sea, Jesús)*.*

*¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí?”*

Ahora vean, ya Elisabet sabía algo muy importante, pues la revelación que le había dado el Arcángel Gabriel a Zacarías, era que ese hijo que iba a tener Zacarías a través de su esposa Elisabet, le iba a preparar el camino al Señor; ya entonces Zacarías sabía que le vendría preparando el camino al Mesías ese niño que él iba a tener; sería el precursor conforme a la profecía de Malaquías 3.

“*Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre.*

*Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor.”*

El Arcángel Gabriel habló de parte ¿de quién? Del Señor, el Mensajero del Señor a Daniel, a Zacarías y a la virgen María.

Y ahora, vamos a examinar un poquito aquí lo que dice el Rvdo. William Branham acerca de este Arcángel. Vean, le trajo sabiduría y conocimiento a Daniel, de las cosas que iban a suceder; le trajo sabiduría y conocimiento a Zacarías, de las cosas que iban a suceder en cuanto al precursor de la Primera Venida de Cristo, le reveló quién sería el precursor de la Primera Venida de Cristo y el nombre que tendría. Y le dijo: “Le pondrás por nombre Juan.” Y le dijo a través de quiénes vendría: el hijo que vendría a través de Zacarías y su esposa Elisabet. Y a la virgen María también le reveló el misterio de la Primera Venida de Cristo y el Nombre que tendría el Mesías en Su Primera Venida.

En la página 33, párrafo 282, dice el Rvdo. William Branham en el Mensaje: *“La creencia de María,”* predicado en el año 1960, dice:

“*Y parado allí estaba un ángel: El poderoso Gabriel. El es un mensajero a los Judíos. Recuerden Gabriel anunció la primera venida de Cristo, el ángel Gabriel anunciará la segunda venida de Cristo. La Biblia lo dijo así.”*

Y ahora, vamos a ver aquí en la página 18 del libro o de este folleto titulado: *“Compendio de Angeles,”* en una entrevista imaginaría que va a hacer el Rvdo. William Branham aquí, para traer una ilustración, va a entrevistar a Abraham y luego va a entrevistar al Arcángel Gabriel, y él hace la entrevista y luego también dice lo que Abraham contesta y dice lo que contesta el Arcángel Gabriel. Página 18, que tiene un extracto del Mensaje: *“Elías y la ofrenda de harina,”* Vamos a ver si es este... tiene que ser, no, es el primero; si está colocando primero las citas, entonces tiene que ser del Mensaje: *“Sedientos por vida,”* predicado en el año 1960. Dice:

“*Si tomáramos un viaje en esta noche hacia el Cielo, y me encontrara con el padre Abraham, y le dijera: ‘Abraham, ¿Cuál es la cosa más gloriosa que jamás has conocido? ¿Cuál es la cosa más esencial que jamás hayas conocido?’*

*Abraham me diría: ‘La Vida Eterna.”*

Pues al encontrarlo allá y estar viviendo todavía, pues le dice:

“Pues lo más grande y más glorioso es la Vida eterna; aunque mi cuerpo físico murió, cuando Cristo resucitó, resucité yo también.”

¿Ven? Así que sigue viviendo el padre de la fe.

“*Entonces tomaríamos otro viaje y nuevamente iríamos, y llegaríamos con el gran Arcángel Gabriel, el cual es el Mensajero del Pacto, para la gente judía, y está parado a la diestra de Dios* (eso fue lo que le dijo al sacerdote Zacarías: ‘Yo soy Gabriel, que estoy delante de Dios.’)*, uno de las órdenes más altas de Angeles en el Cielo...”*

O sea, uno de los Angeles o Arcángeles de posición más alta; después del Arcángel Miguel está el Arcángel Gabriel, son las dos posiciones más altas en el Cielo que Cristo tiene para Sus Arcángeles Gabriel y Miguel. Son las dos posiciones más altas en el Cielo para Angeles o Arcángeles.

“*Y yo le diría: ‘Gabriel, eres un Angel poderoso. Eres amado de Dios, y has estado aquí por tiempo incalculable; y quizás conozcas todo con respecto al Cielo, donde cada cosa está ubicada, por cuanto eres uno de los Angeles a la diestra de Dios. Y conoces todos los secretos del Cielo. Tocaste la trompeta en la Primera Venida del Señor Jesús. Anunciaste Su Primera Venida, y anunciarás Su Segunda Venida, por lo tanto debes ser un hombre o un Angel poderoso. Te quiero hacer esta pregunta. En todos los tesoros de Dios, ¿cuál es la cosa más tremenda que has hallado en todos Sus tesoros?’*

*Puedo ver a Gabriel enderezándose en forma muy atenta, y diciendo: ‘Lo más grande que he hallado entre los tesoros de Dios desde que me creó a mí, es la Vida* (o sea, la Vida eterna)*. Dios me hizo para que pudiese vivir Eternamente, por la Eternidad. Y la Vida es lo más grande que hay”*

No hay cosa más grande para el ser humano que la Vida eterna, y esa solamente la puede obtener de parte de Dios, a través de Jesucristo nuestro Salvador. No hay otra forma de Vida eterna, porque Cristo es el Arbol de la Vida. Toda persona que reciba Vida eterna, la recibe a través de Jesucristo nuestro Salvador.

Y ahora, hemos visto que este Arcángel tocó la Trompeta en la

Primera Venida de Cristo, reveló el misterio de la Primera Venida de Cristo, se lo reveló a la virgen María, y después a alguien más. San Mateo, capítulo 1, versos 18 en adelante, dice:

“*El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.*

*José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.*

*Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.*

*Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.”*

Aquí podemos ver que este Angel le revela también a José el misterio de la Primera Venida de Cristo, le muestra a José que la virgen María ha concebido del Espíritu Santo. La primera ocasión que en la historia de la raza humana haya concebido del Espíritu Santo. Por lo tanto es la mujer más bienaventurada de todas las mujeres.

Y ahora, encontramos que el Arcángel Gabriel sonó la Trompeta, dio el Mensaje revelando la Primera Venida de Cristo. Siendo que la virgen María representa la Iglesia del Señor Jesucristo, es la Iglesia del Señor Jesucristo la Iglesia virgen, la que tendrá la revelación de la Segunda Venida de Cristo. Y Daniel recibió del Arcángel Gabriel la revelación, que él habla aun también de la Venida del Mesías, habla ahí de la Primera Venida de Cristo.

Vean, el Arcángel Gabriel le dijo a Daniel que sesenta y nueve semanas estaban determinadas, y entonces vendría el Mesías a la mitad, y a la mitad de la semana setenta moriría el Mesías, le sería quitada la vida al Mesías.

Vean, el Arcángel Gabriel tenía toda la revelación, aun de la Primera Venida de Cristo y toda la trayectoria de la vida de Jesucristo, y cuando era que moriría para quitar los pecados del ser humano; conocía el Programa de Redención.

Ahora, este Arcángel sonó la Trompeta en y para la Primera

Venida de Cristo, y dice el Rvdo. William Branham que tocará la Trompeta para la Segunda Venida de Cristo. Por lo tanto, la revelación del misterio de la Segunda Venida de Cristo está ligada a la Trompeta que suena el Arcángel Gabriel; por lo tanto habrá una intervención divina para la Iglesia Novia del Señor Jesucristo recibir la revelación de la Segunda Venida de Cristo.

Ahora, podemos ver que esto es para un tiempo muy importante. Dice el Rvdo. William Branham en el Mensaje: *“La encrucijada del tiempo,”* página 11, párrafo 94, vamos a ver:

“*En el tiempo del fin aparecieron Angeles. Todos los Profetas y señales nos muestran que en este día los Angeles aparecerán, se levantarán Profetas con señales y maravillas. Y si Dios hizo en aquellas pequeñas encrucijadas, ¿qué hará ahora cuando todo el infierno está suelto? Todo el Cielo también se desatará, apareciendo Angeles, señales y maravillas en la Tierra. Los que van a contrarrestar también se están levantando. Y Dios está probando quién está bien y quién no.”*

En el párrafo 97, dice:

“*Fijense cómo desciende el fuego cada vez, vean cómo vienen los Profetas siempre, cómo son hechos los milagros, cómo Dios se vindica a Sí mismo en sanidad y en poder todo el tiempo en las encrucijadas* (o sea, en esos entrelaces dispensacionales)*. Nunca antes, sino en las encrucijadas, en el cambio de dispensación, en el cambio del tiempo.”*

Cuando leemos en algunos Mensajes que el Rvdo. William Branham habla de la sinfónica de Dios, y habla de esas hojas musicales y esos cambios que hay, en donde va la música en cierta forma, y de momento se levanta la música y sube a un nivel, ¿ven? Hay unos cambios ahí. Hay cambios de edades y hay cambios de dispensaciones; cuando es un cambio de dispensación, entonces ahí el cambio es grande, cambia de una forma que va suave a una forma fuerte.

Y ahora viene, más abajo dice en el párrafo 102:

“*Gabriel era el Angel que estaba allí, él apareció en la encrucijada del tiempo. ¡Gloria a Dios! Como treinta y tres años* *antes de que sucediera, Dios comenzó en la plenitud del tiempo a advertir anticipadamente que la encrucijada estaba a la mano. Los incrédulos se pusieron peor, se rebajaron más, pelearon más, trataron de apartarse de eso. Finalmente mataron a todos los que habían sido enviados. Pero Dios siguió moviéndose en los milagros igualmente, porque El es Omnipotente, tiene que hacerlo. El es Dios.”*

Y ahora, vamos a ver otro lugar en la página... en el Mensaje: *“Compendio Angeles,”* aquí vamos a ver algo muy importante, dice en la página 2, al comienzo dice:

“*Ahora, Angeles menores pueden llegar. Por ejemplo, el que viene y me visita, es un Angel menor. Pero cuando vemos bajar a Gabriel, algo grande está en camino. Gabriel anunció la Primera Venida de Jesús, y El anunciará la Segunda Venida de Jesús. El tocará la trompeta, los muertos en Cristo resucitarán. Gabriel, el gran Arcángel de Dios.”*

Y ahora, vean cómo está ligada también la resurrección de los muertos en Cristo con Gabriel tocando la Trompeta. Ahí tenemos Voz de Arcángel y Trompeta de Dios.

Ahora, así es que estará sucediendo desde la dimensión invisible para este tiempo final. Por lo tanto, los Arcángeles Gabriel y Miguel estarán con la Iglesia del Señor Jesucristo, y después con el pueblo hebreo.

Y ahora, encontramos que el Arcángel Gabriel siempre ha estado trabajando en la Obra de Dios, ha trabajado con el pueblo hebreo y ha trabajado con la Iglesia del Señor Jesucristo, y ha tenido que ver con los cambios también del reino de los gentiles de cada una de esa etapa, en esos cambios del reino de los gentiles, en la cabeza de oro; luego de la cabeza de oro el pecho y brazos de plata, luego el pecho y brazos de plata que fue el imperio Medopersa; luego al reino de Grecia, que es el vientre y los muslos de bronce; y luego del imperio de Grecia al imperio romano, a la parte de las piernas de hierro; y ha tenido que ver con todos esos cambios y ha estado siempre respaldado, ¿por quién? Por el Arcángel Miguel.

Dice a Daniel que el príncipe de Persia se le opuso, o sea, el príncipe espiritual del mundo espiritual que estaba a través del príncipe de Persia terrenal obrando.

Y ahora, encontramos que el Arcángel Gabriel tiene que ver con esos cambios, y sale en su ayuda el Arcángel Miguel.

Y ahora, encontramos que para el cambio también de los pies de hierro y de barro cocido al Reino de Cristo; cambiar del reino de los gentiles en la etapa de los pies de los pies de hierro y de barro cocido, al Reino de Cristo, al Reino de la Piedra no cortada de manos, que hiere los pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuza, y entonces esa piedra crece y se forma un monte, un gran reino; porque monte tipifica un reino.

Y ahora, encontramos en Apocalipsis, capítulo 12 y Daniel capítulo 12, que se levantará Miguel. ¿Ven? Estará brazo a brazo con el Arcángel Gabriel para ese cambio del reino de los gentiles, del reino del anticristo al Reino de Cristo. En la página 101, párrafo 68 del Mensaje: *“Las setenta semanas de Daniel,”* predicado por el Rvdo. William Branham, dice:

“*El espíritu de sabiduría viene a la Iglesia, para hacer conocer a la Iglesia por la revelación del Espíritu Santo, introduciéndole a la Iglesia y revelándole en qué día estamos viviendo. Lo mismo como Gabriel vino a Daniel, el Espíritu Santo viene a la Iglesia en estos últimos días, para revelar estas grandes y profundas y secretas cosas. ¿Lo entienden ahora?”*

Y ahora, Cristo dijo en una ocasión “Tengo muchas cosas que decirles a ustedes, pero ahora ustedes no las pueden llevar o sobrellevar.” San Juan... vamos a ver en qué pasaje de San Juan: 16:12, dice:

“*Aún tengo* (¿ven? No lo había dicho todo)*...*

*Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.*

*Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.*

*Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.”*

¿Para qué viene el Espíritu Santo como vino Gabriel a Daniel? ¿Para qué viene el Espíritu Santo a la Iglesia del Señor Jesucristo? Para revelar las cosas que deben ser conocidas por la Iglesia de Jesucristo.

“*Y os hará saber las cosas que habrán de venir.”*

En San Juan, capítulo 14, verso 23 en adelante, dice:

“*Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.*

*El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.*

*Os he dicho estas cosas estando con vosotros.*

*Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.”*

Y ahora, en el Nuevo Testamento, luego de la partida de Cristo, viene el Espíritu Santo para guiar a Su Iglesia y mostrárle, enseñárle, todas las cosas que han de venir, que han de suceder. Y en San Juan, capítulo 15, verso 26 y 27, dice:

“*Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí.*

*Y vosotros daréis testimonio también, porque habéis estado conmigo desde el principio.”*

Y ahora, es el Espíritu Santo el que viene revelando todas las cosas que han de suceder. Por eso el Angel del Señor Jesucristo enviado a Juan viene con el Sello del Dios vivo, viene ungido con el Espíritu Santo, para poder revelar a Juan todas esas cosas; y siendo ese Angel un Profeta, como dice el Rvdo. William Branham, viene ungido con el Espíritu Santo, para poder dar a conocer las cosas que han de suceder.

Y ahora, para el tiempo final vendrá en medio de la Iglesia de Jesucristo, como dice Apocalipsis, capítulo: “Con el Sello del Dios vivo.” Ese es el Angel que sube de donde nace el sol, y viene para llamar y juntar ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. Pero antes tiene que llamar y juntar los escogidos de la Iglesia del Día Postrero en la Edad de la Piedra Angular.

El viene ungido con el Espíritu Santo, y el Espíritu Santo a través de él estará revelando a la Iglesia de Jesucristo las cosas que deben suceder pronto en este tiempo final, las cuales están contenidas en esas visiones, revelaciones que el Angel del Señor Jesucristo, el Angel de Jesucristo, le dio al Apóstol San Juan.

Y ahora, encontramos que ese Angel viene ungido con la Columna de Fuego. Y para este tiempo final la Columna de Fuego estará en medio de Su Iglesia, como ha estado en otras ocasiones de edad en edad, guiando al pueblo que sigue la Columna de Fuego, de etapa en etapa.

Ahora, miren ustedes una cosa: el pueblo hebreo que estaba siendo guiado por la Columna de Fuego, digamos que llegó hasta el Monte Sinaí, y luego cuando Dios ordenó a Moisés continuar viajando, vean, los que estaban allí en el Monte Sinaí con Moisés, estaban siendo guiados por la Columna de Fuego, desde Egipto. Luego cuando salen del Monte Sinaí, siguen siendo guiados por la Columna de Fuego que va con ellos.

Si alguien se quedó en el Monte Sinaí y dijo: “No, aquí están las cosas buenas, ¿para qué me voy a ir de aquí?” Ya esa persona no estaba siendo guiada por el Espíritu Santo, no estaba siguiendo la Columna de Fuego, porque se quedó y la Columna de Fuego ya se fue para otro sitio.

Luego tuvieron una parada en otro lugar, y allí estaba la Columna de Fuego con ellos; cuando la Columna de Fuego se detenía, Moisés y el pueblo se detenían. Y en Números, capítulo... vamos a ver qué capítulo fue el que leímos anoche, creo que fue 14... 10, verso 33 al 36 de Números, dice:

“*Así partieron del monte de Jehová camino de tres días; y el arca del pacto de Jehová fue delante de ellos camino de tres días, buscándoles lugar de descanso.”*

Los que se quedaron en el Monte Sinaí y no siguieron, pues no siguieron la Columna de Fuego.

“*Y la nube de Jehová iba sobre ellos de día, desde que salieron del campamento.*

*Cuando el arca se movía, Moisés decía: Levántate, oh Jehová, y sean dispersados tus enemigos, y huyan de tu presencia los que te aborrecen.*

*Y cuando ella se detenía, decía: Vuelve, oh Jehová, a los millares de millares de Israel.”*

O sea, que la Columna de Fuego no siguiera sola, sino que se quedara con ellos allí porque se habían detenido; porque es muy importante estar donde la Columna de Fuego está; y cuando viaja de un territorio a otro y de una edad a otra y de un Mensajero a otro, pues hay que caminar hacia donde viaja la Columna de Fuego, el Angel del Pacto, el Angel de Jehová. Los que se quedan atrás, en una edad pasada, los que se quedan en una edad pasada, se quedan en tinieblas, porque ya no está allí la Columna de Fuego, la Luz, no hay Luz allí, y entonces mueren espiritualmente; porque la Vida está en la *Shekinah,* la Columna de Fuego, el Verbo.

“En El estaba la Vida y la Vida era la Luz de los hombres.” Por lo tanto, no hay Luz espiritual ni vida espiritual fuera de la Columna de Fuego, el Angel de Jehová, el Angel del Pacto, Cristo, nuestro Salvador. El es la Columna de Fuego, por eso le dijo a Saulo: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?” Saulo pregunta: “¿Quién eres Señor?” La Columna de Fuego le dice: “Yo Soy Jesús, a quien tú persigues.”

Y ahora, la Columna de Fuego, el Angel del Pacto, ha estado viajando de edad, como viajó de Egipto hasta la tierra prometida, en donde tuvieron diferentes etapas, tenían que seguir adelante hacia donde la Columna de Fuego los guiara; y así ha sido de edad en edad.

Y ahora, nos encontramos en la etapa de la Edad de la Piedra Angular, donde está Cristo, el Angel del Pacto, el Espíritu Santo, la Columna de Fuego, con nosotros.

Y ahora, Cristo dice:

“*Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.”*

Es que en el Angel del Señor Jesucristo viene Cristo en Espíritu Santo, la Columna de Fuego, manifestándose y revelándole a Su Iglesia todas estas cosas que deben suceder en este tiempo final. Así como vino el Arcángel Gabriel a Daniel, viene el Espíritu Santo en este Día Postrero en el Angel del Señor Jesucristo, así como vino en cada edad en el Angel Mensajero de cada edad.

Y ahora, vean lo sencillo que es ser ministros entendidos y sabios en este tiempo final, recibiendo la revelación divina, la enseñanza de Cristo, el Angel del Pacto, el Espíritu Santo, conforme a como El ha prometido para este tiempo final. Y El tiene que tener un instrumento a través del cual enseñarnos.

El Espíritu Santo siempre ha tenido un instrumento. De edad en edad, vean ustedes, los Apóstoles, luego San Pablo, luego cada Angel Mensajero de cada edad, y luego en este tiempo final y para este tiempo final tenemos la promesa del Angel del Señor Jesucristo, que viene con el Sello del Dios vivo, para el Espíritu Santo enseñarnos a través de él todas las cosas que deben suceder pronto. Apocalipsis, capítulo 1, verso 1, dice: *“Sube acá.”* Cristo con esa Voz de Trompeta dice:

“*Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas.”*

¿Cómo las va a mostrar? Pues dice también Apocalipsis 22, verso 6:

“*Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor,*

*el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que han de suceder pronto* (o que deben suceder pronto)*.”*

Es por medio de Su Angel Mensajero que Cristo en Espíritu Santo, que el Espíritu Santo enseña a Su Iglesia todas estas cosas que deben suceder pronto en este tiempo final, es enviado para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto, esa es la forma en que el Espíritu Santo, Cristo en Espíritu Santo, la Columna de Fuego, estará enseñando a Su Iglesia todas estas cosas que deben suceder pronto; como enseñó a Daniel todas las cosas que debían suceder ¿cómo? Por medio del Arcángel Gabriel, enviado delante, de delante de la presencia de Dios.

Y ahora, el Espíritu Santo viene de edad en edad a Su Iglesia manifestado en el Mensajero de cada edad, cada Mensajero es ungido con la Columna de Fuego, con el Espíritu Santo.

Y ahora, para este tiempo final tenemos la promesa de que él nos dará a conocer todas las cosas que deben suceder pronto, por lo tanto tendrá un instrumento aquí en la Tierra, al cual tendrá ungido, y a través del cual nos hablará todas estas cosas que deben suceder pronto.

Por eso el Rvdo. William Branham cuando habla de este Angel dice que ése es un Profeta. Dice: “Pudo haber sido Elías.” Eso está en la página 15 del Mensaje de *“Las Siete Edades,”* sin editar, y también está en el Mensaje de *“Los Siete Sellos,”* página 301 y 302. Ahora, hay que saber hacer la diferencia entre Jesucristo y Su Angel, porque si la persona no hace la diferencia, no sabe hacerla, entonces va a decir que Jesucristo es el Angel, que el Angel es Jesucristo. Pero hay que saber hacer la diferencia, para saber que el Angel es un redimido por la Sangre de Cristo. El le dijo a Juan, cuando quiso Juan adorarlo, no aceptó la adoración de Juan, y le dijo: “No lo hagas, yo soy consiervo tuyo y con tus hermanos los que retienen el nombre de Jesús.” Y también le dijo: “Soy consiervo contigo y con los Profetas, adora a Dios.” No aceptó la adoración de Juan, porque es un Profeta, y enseñó cómo adorar.

Ahora, encontramos que esa es la diferencia entre Jesús y Su Angel: que el Angel no es Jesucristo, él es instrumento de nuestro amado Señor Jesucristo para este tiempo final. Aunque hemos visto a través del libro del Apocalipsis, que le dio a Juan el Apóstol la revelación del Apocalipsis estando en cuerpo teofánico, cuerpo espiritual. Por eso el Rvdo. William Branham dice: “Este es el espíritu de un Profeta.” El espíritu de una persona es el cuerpo espiritual de la persona, que es parecido a su cuerpo físico, pero es de otra dimensión. Si no es un creyente, pues es de la quinta dimensión, si es un creyente en Cristo nacido de nuevo, pues es de la sexta dimensión, porque obtuvo el nuevo nacimiento y obtuvo ese cuerpo espiritual de la sexta dimensión.

Ahora, este es un espíritu de Profeta, dice el Rvdo. William Branham. Por lo tanto, si es un espíritu de Profeta, en algún tiempo de la historia de la Iglesia tiene que venir en carne humana, y venir ungido con el Espíritu Santo, con la Columna de Fuego.

Vean que en la Visión de la Carpa, el Rvdo. William Branham dice que la Columna de Fuego se fue de él, y se fue para otro lugar, y estaba hablándole a otra persona más arriba; y de eso depende todo lo que estará sucediendo en la Visión de la Carpa.

Vean, siempre es más arriba; habló en la primera edad en la parte de abajo, luego de la etapa de los Apóstoles; luego en la segunda edad habló más arriba la Columna de Fuego. ¿Ven? Fue subiendo; en la tercera edad habló más arriba, al Mensajero de esa tercera edad y al pueblo de esa tercera edad, que estaba más arriba de las otras dos edades anteriores.

Y luego en la cuarta edad subió más arriba, la Columna de Fuego, el Espíritu Santo, y habló al Mensajero más arriba, en una edad más arriba, y al pueblo en una edad más arriba, y colocó al pueblo en una edad más alta, más arriba; y así fue de edad en edad: subiendo. Porque el Reino de Cristo viene de abajo hacia arriba, va subiendo, el reino de los gentiles viene de la cabeza de oro hasta los pies, y en los pies se vuelve nada.

Ahora, luego de la séptima edad, en donde habló a través del Rvdo. William Branham, Cristo, la Columna de Fuego, luego tiene que subir más arriba, a la Edad de la Piedra Angular, para hablarnos todas estas cosas que deben suceder pronto, y tiene que ungir un Mensajero, un Profeta, para por medio de él hablar, y así continuar la Columna de Fuego guiando a Su pueblo, a Su Iglesia, al Israel Celestial.

Y ahora, así como tuvieron que venir los siete espíritus de Dios, las siete lámparas que están delante de la presencia de Dios, que son los siete espíritus de Dios, que están delante del Trono, en Apocalipsis, capítulo 4 (está ahí), verso 5 en adelante, dice:

“*Y del trono salían relámpagos y truenos y voces; y delante del trono ardían siete lámparas de fuego, las cuales son los siete espíritus de Dios.”*

Y ahora, encontramos que cuando esto se materializa en la Iglesia de Jesucristo, porque la Iglesia de Jesucristo es representada en el templo que construyó el rey Salomón y el tabernáculo que construyó el Profeta Moisés; y por consiguiente el templo de Salomón y el tabernáculo que construyó Moisés es tipo y figura del Templo Celestial. Por eso estas lámparas de fuego están en el Cielo, en el Templo Celestial, y se tienen que materializar en el Templo Espiritual de Cristo, que es la Iglesia del Señor Jesucristo. Y cuando se materializan, pues se hacen carne en cada edad y son los Mensajeros de cada edad.

Dios hace a Sus Angeles espíritu y a sus ministros llama de fuego. Por eso estos Angeles son los siete espíritus de Dios y son siete llamas de fuego, siete lámparas de fuego en el Trono Celestial, delante del Trono de Dios.

Y ahora, en la Iglesia de Jesucristo se tiene que materializar todo lo que está en el Cielo. Por eso también cuando nos habla de los Dos Olivos y de los Dos Candeleros de Oro, en Apocalipsis, capítulo 11, dice verso 3:

“*Y daré a mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio.*

*Estos testigos son los dos olivos, y los dos candeleros que están en pie delante del Dios de la tierra.”*

Están en pie delante del Dios de la Tierra en el Templo Celestial; y así como están delante del Trono de Dios las siete lámparas de fuego, las cuales se convierten en una realidad en la Iglesia de Jesucristo, cuando se cumple, se cumplen las siete edades con los siete Angeles Mensajeros. Ahí tenemos las siete lámparas de fuego, fueron representadas también en las siete, en el candelero o candelabro con siete lámparas.

Y ahora, después de las siete edades y los siete, y las siete lámparas de fuego, y las siete edades, ¿qué viene? Pues vienen los Dos Olivos y los Dos Candeleros que están en pie delante del Dios de la Tierra, que son los Dos Ungidos que están en pie delante del Dios de la Tierra.

En Zacarías es que nos dice, capítulo 4... Zacarías, capítulo 4, nos

dice del verso 10 en adelante, dice:

“*Porque los que menospreciaron el día de las pequeñeces se alegrarán, y verán la plomada en la mano de Zorobabel. Estos siete son los ojos de Jehová, que recorren toda la tierra.”*

Y los siete ojos de Jehová que recorren toda la Tierra son los siete Angeles Mensajeros en los cuales está el Espíritu Santo, el Espíritu de Cristo, la Columna de Fuego, guiando a Su Iglesia, el Israel Celestial. En esos hombres se hace carne, se manifiesta en ellos cada uno de esos espíritus teofánicos celestiales.

Para cada Angel Mensajero está el espíritu teofánico que le corresponde, y eso es su cuerpo angelical de la sexta dimensión, del Reino de Cristo. Por lo tanto, esas personas, esos Mensajeros, tienen una posición muy alta en el Reino de Cristo.

“*Hablé más, y le dije: ¿Qué significan estos dos olivos; a la derecha del candelabro y a su izquierda?*

*Hablé aún de nuevo, y le dije: ¿Qué significan las dos ramas de olivo que por medio de dos tubos de oro vierten de sí aceite como oro?*

*Y me respondió diciendo: ¿No sabes qué es esto? Y dije: Señor mío, no* (y hay muchas personas que no conocen el misterio de los Dos Olivos, de las Dos ramas de Olivo y de los Dos árboles de Olivo)*.*

*Y él dijo: Estos son los dos ungidos que están delante del Señor de toda la tierra* (los Dos Ungidos que están delante del Señor de toda la Tierra)*.”*

Ahora, podemos ver que aquí hay un misterio muy grande, el cual es cumplido en Apocalipsis, capítulo 11; bajo el misterio de los Dos Olivos, bajo los ministerios de Moisés y Elías manifestados en el Angel del Señor Jesucristo, el Angel que viene de donde nace el sol, que viene con el Sello del Dios vivo; el Espíritu Santo, que es el Sello del Dios vivo, estará operando esos ministerios, y estará respaldado el Angel del Señor Jesucristo por el Arcángel Gabriel y el Arcángel Miguel.

Por eso veremos que la Obra que estará haciendo ese Angel Mensajero, no será la Obra de un hombre, sino la Obra de Cristo, la Columna de Fuego, el Espíritu Santo, respaldado por todo el Cielo.

La gente dirá: “¿Cuál será el secreto que tendrá para que crezca la labor que hace?” El secreto está en la Columna de Fuego, el Angel del Pacto, el Angel de Jehová, que será el que estará haciendo la Obra prometida para este tiempo final, y estará respaldada esa Obra por el Arcángel Gabriel y el Arcángel Miguel, porque esa Obra tiene que ver con el cambio que va a haber de reino, el cambio del reino de los gentiles al glorioso Reino de nuestro amado Señor Jesucristo. Y eso es para este tiempo en donde hay un entrelace dispensacional, una encrucijada, un lugar donde se están entrelazando dos caminos, dos dispensaciones con dos Mensajes, uno: el Mensaje del Evangelio de la Gracia para la Dispensación de la Gracia, y el otro camino: la Dispensación del Reino con el Mensaje de la Dispensación del Reino, que es el Mensaje del Evangelio del Reino, que gira alrededor de la Segunda Venida de Cristo; así como el Mensaje del Evangelio de la Gracia gira alrededor de la Primera Venida de Cristo.

Y en este tiempo final estaremos viendo que habrá un respaldo celestial. Y por eso el resultado. “No es con ejércitos ni con fuerzas, le dijo el Angel a Zacarías, sino con mi Espíritu.” Y le está hablando de la Obra del Templo y su construcción.

Por lo tanto, el Templo Espiritual de Cristo siendo construido con piedras vivas es ese Templo; y esa Obra de construcción no es una obra humana, es con el Espíritu del Señor, el Espíritu Santo en medio de Su Iglesia, creando, construyendo, el Templo Espiritual para Dios, formado por seres humanos.

Ahora, hemos visto que Dios ha estado dándole sabiduría, entendimiento e inteligencia a sus ministros, y también a los hermanos en cada edad, y esto viene del Cielo por medio del Espíritu Santo en cada edad ungiendo a un hombre, al cual viene la revelación de Dios, y él la proclama, la da al pueblo, y así Dios hace la Obra, llama y junta a Sus escogidos, porque es una Obra de creación divina, ypor consiguiente tiene que ser una Obra por medio de la Palabra creadora siendo hablada en cada edad. De otra forma no sería una Obra de creación divina, porque todas las cosas son hechas por medio del Verbo.

Y Cristo, el Angel del Pacto, el Angel de Jehová, habla a existencia todas las cosas que tiene que hablar a existencia en Su Iglesia, para que vengan a existencia. Es una Obra de creación la que El está realizando.

De edad en edad, vean, cuando se acaba una edad, la Columna de Fuego, el Espíritu Santo, que es Jesucristo, viene, envía un hombre, lo unge con Su Espíritu, coloca en El la revelación divina, y ese hombre habla ungido por el Espíritu Santo; y donde no hay una nueva edad, abre una nueva edad, es una creación de una nueva edad; y donde no hay personas para esa nueva edad, llama y junta a Sus hijos, y los coloca en esa nueva edad; y así es creada esa nueva etapa o edad de la Iglesia.

Y Cristo no se detiene en una edad que ya terminó, cuando termine con una edad, ya terminó y se mueve para abrir otra nueva edad, y cuando termina con un Mensajero ya terminó con ése; no lo va a resucitar para después volver con él, porque daría el Mensaje de una edad que ya pasó; levanta otro Mensajero, le revela Su Palabra, se hace carne en él esa Palabra de esa edad, la proclama y entonces se crea una nueva edad, y son colocadas las piedras vivas, las personas correspondientes a esa nueva edad, y así se crea esa nueva parte del Templo Espiritual de Cristo, hasta que se completa el Lugar Santo del Templo Espiritual de Cristo.

Y luego cuando todo el mundo pensaba que no vendrían más edades, ni más Mensajeros, ni más Mensaje, Cristo abre una nueva edad: la Edad de la Piedra Angular, y forma el Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual, y tiene que ser en el Oeste, porque en el Oeste estaba el lugar santísimo del templo literal que construyó Salomón y del que construyó Moisés. Por eso Dios le ordenó ubicar el templo a Salomón en esa forma y a Moisés también.

Y esa es la etapa de la Venida del Señor y para la Venida del Señor; porque cuando vino el tabernáculo que construyó Moisés y el templo que construyó Salomón, vino para morar ¿dónde? En el lugar santísimo sobre el propiciatorio.

Y ahora, ¿para dónde dice el Rvdo. William Branham que viene la lluvia tardía? Dice: “La lluvia temprana fue en el Este, la lluvia tardía es en el Oeste.” La lluvia tardía de la enseñanza de la Segunda Venida de Cristo, ¿es para qué lugar? Para el Oeste, para el territorio latinoamericano y caribeño en el continente americano. La lluvia tardía fue en el Este, la luvia tardía de la enseñanza de la Primera Venida de Cristo, de ahí salió, de ahí vino, porque allí fue que se cumplió la Primera Venida de Cristo.

Y ahora, el Espíritu Santo ha venido para darnos sabiduría, entendimiento, y así ser ministros con entendimiento del Cielo, y con sabiduría del Cielo, recibiendo la enseñanza por medio de la sabiduría celestial, que trae el Espíritu Santo, el Angel de Jehová, Jesucristo a través de Sus instrumentos de edad en edad. Para este tiempo la revelación más completa, más abarcadora y plena, Cristo, la Columna de Fuego, estará dándola a Su Iglesia, ypor consiguiente a Sus ministros y a todos los hermanos del Día Postrero, para lo cual dice:

“*Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.”*

Así es como recibiremos sabiduría, conocimiento yentendimiento de todas las cosas del Reino de Cristo, correspondientes a este tiempo final, y también de las que ya han transcurrido.

“MINISTROS CON ENTENDIMIENTO,” entendimiento de las cosas de Dios por medio de la sabiduría del Cielo, no por medio de sabiduría terrenal, sino por medio de la sabiduría del Cielo, que viene por medio del Espíritu Santo, del cual Cristo dijo: “El os enseñará todas las cosas, y os recordará las cosas que yo les he dicho.”

Por lo tanto, estará enseñándonos historia y enseñando las cosas que ya Jesús dijo, y estará enseñándonos también las que han sucedido en las edades pasadas, y las que están sucediendo en nuestro tiempo, y las que están para suceder más adelante. Todo eso viene por el espíritu de sabiduría, viene por el Espíritu Santo a la Iglesia de Jesucristo y a todos los ministros de la Iglesia del Señor Jesucristo, de edad en edad.

Y para este tiempo final, ¿a quiénes viene ese conocimiento y esa sabiduría por medio del Espíritu Santo? A todos nosotros. Para lo cual dice:

“*Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.”*

Por medio de ese Mensaje, de ese testimonio, de esa revelación divina, todos los ministros obtendrán sabiduría e inteligencia, conocimiento, entendimiento, de todo el Programa de Dios, de todas las cosas de Dios con Su Iglesia y en Su Iglesia, y por consiguiente de todas las cosas celestiales.

“**MINISTROS CON ENTENDIMIENTO.”**

Ha sido para mí una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, dándoles testimonio de nuestro tema: **“MINISTROS CON ENTENDIMIENTO.”**

***Que las bendiciones de Cristo, el Angel del Pacto, sean sobre todos ustedes y sobre mí también; y pronto Cristo complete Su Obra, complete Su Iglesia, y se levante del Trono del Padre, tome el Título de Propiedad, el Libro de los Siete Sellos, lo abra en el Cielo, y haga Su Obra de Reclamo, y resucite a los muertos creyentes en El en cuerpos glorificados, y nos transforme a nosotros los que vivimos, y nos lleve con El a la Cena de las Bodas del Cordero. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.***

Fue para mí una bendición y privilegio grande estar con ustedes, dándoles testimonio de: **“MINISTROS CON ENTENDIMIENTO.”**

Muchas gracias por vuestra amable atención, y dejo nuevamente a nuestro hermano Bermúdez, Miguel Bermúdez Marín, para finalizar nuestra parte en esta ocasión, y nos veremos mañana Dios mediante en la actividad de la mañana. Oren mucho por mí para que Dios me dé todo lo que debo yo hablar mañana a todos los que estarán allá presentes, porque no deseo hablar nada de mí mismo. Ni tampoco tengo tiempo para hablar nada de mí mismo, ni quiero tampoco hablar nada de mí mismo, porque para la Obra de Dios ser hecha, tiene que ser hablando la Palabra de Cristo, porque es una Obra de Creación divina.

Así que, oren mucho por mí para que El me dé todo lo que yo debo hablar mañana en la mañana a todos los que estarán allá presentes.

***Que Dios me los bendiga a todos y me los - y los use grandemente en Su Obra, y los llene de un pleno entendimiento de todo el Programa Divino, los llene de sabiduría, de conocimiento y entendimiento Divino. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.***

Bueno, con nosotros nuestro hermano y amigo, el misionero y Rvdo. Miguel Bermúdez Marín, para finalizar nuestra parte en esta ocasión.

Que Dios les bendiga y les guarde a todos.

“**MINISTROS CON ENTENDIMIENTO.”**