114 KiB
| title | date | activity | place | city | state | country | duration | public | youtube | translations | files |
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| La Venida del Reino | 1976-06-19 | Sabana Seca, Toa Baja | PR | 00:00:00 | false |
Muy buenos días, amados hermanos, el Señor nos continúe bendiciendo en esta mañana en que podemos congregarnos, para adorar y glorificar a nuestro Dios y oír Su gloriosa Palabra. En este día y en esta mañana, pues es un día de fiesta para todos nosotros, y así como es para los habitantes de Colombia, y hoy es un día de fiesta muy especial en lo natural para el pueblo de Colombia, y vemos que hoy no es día de trabajo, más bien hoy es un día de fiesta y según he sabido, es día de celebrar jubileo.
Entonces sabemos que conforme a la Ley de Dios dada a través de Moisés, había también un tiempo de jubileo en donde no se habría de hacer ningún trabajo, y en donde era un tiempo para regocijarse y recibir nuevamente lo que se había perdido o lo que había sido quitado de las manos, volver a las manos de los dueños originales.
Bueno, esto me recuerda también el Día de Pentecostés, cuando pueblo religioso estaba celebrando también un día de fiesta, el cual era el Día de Pentecostés; y encontramos que mientras el pueblo religioso celebraba ese día, había otro pueblo, el pueblo aquel allí reunido de ciento veinte, un grupito pequeño, que estaba participando o recibiendo esa fiesta dentro de ellos. Los otros ¿tenían qué? Los otros tenían esa fiesta, pero de una forma intelectual y la celebración en una forma intelectual, pero aquel grupito de ciento veinte estaba celebrando esa gloriosa fiesta, la tenía por dentro y eso era lo más grande, ¿ve?
Bueno, nosotros no planeamos estar aquí en un tiempo como este, pero nosotros a través de la Escritura sabemos que hace tiempo nosotros estamos en ese jubileo, ¿ve? Bueno este jubileo, pues ya sabemos que comenzó hace tiempo.
En esta mañana, vamos a buscar nuestras Biblias, quiero leer un pasaje por aquí, déjeme ver en la ocasión en que el Señor oró, déjeme ver si lo consigo (el Padre nuestro). Vamos a buscar entonces en San Mateo, capítulo 6, (es que uno con las cosas al frente no las ve), aquí mismo lo tenía marcadito ahí, capítulo 6, verso 10. Es lo que nos pasa con el Mensaje de la hora, todo está ahí, lo pasamos por encima y no lo vemos. Bueno, pero gracias al Señor que hay hermanos que pueden ayudar en todo esto, para que uno pueda ver estas cosas, gracias al Señor porque Dios tiene eso.
Vamos a comenzar en el verso 8 de San Mateo, capítulo 6, y vemos que ésta fue una oración muy sencilla que hizo el Señor; porque Juan le había enseñado a orar a sus discípulos, y los discípulos del Señor le dicen: “Señor, enséñanos Tú a orar también porque Juan enseñó a sus discípulos a orar.” Vemos que esta oración es una oración profética aquí, y así como vamos a ver en esta mañana algunas cositas aquí, las cuales están señalas. Dice:
“No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.
Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.”
Vea usted:
“Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.”
Y luego mire lo que le dice Jesús:
“Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.
Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.
Y no nos metas en tentación...”
Según podemos entender es no nos dejes caer, pero vamos a leerlo así.
“Y no nos metas en tentación mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.”
Oremos al Señor:
Padre eterno, he aquí en esta mañana ante Tu presencia estamos, Te damos gracias por Tus bendiciones ¡oh Dios! Y Te rogamos que en esta mañana Tú hables a nuestros corazones y nos edifiques en esta hora.
Dios eterno, edifícanos hasta que todos lleguemos a la Estatura de un Hombre Perfecto, Señor. En Tus manos estamos ¡oh, Dios eterno! Y Te lo pido en el Nombre del Hijo de David, William Marrion Branham. Amén.
En esta mañana vamos a hablar sobre el tema: “LA VENIDA DEL REINO DE DIOS,” o “LA VENIDA DEL REINO.”
Encontramos que ese es un tema, pues es bastante importante para nosotros, en el cual en esta mañana entraremos lo más profundo que podamos, pero de la manera más simple en que el Señor nos ayude para entender todo lo más que podamos entender relacionado a ese tema: “LA VENIDA DEL REINO.”
Recordamos las Palabras del Señor allá cuando le hicieron la pregunta sobre el reino, y le preguntaron al Señor, porque lo que los hebreos estaban esperando era la restauración del reino. Y ellos esperaban la Venida del Mesías para que restaurara el reino; porque el reino había caído, el reino de Israel había caído, y ahora estaba reinando sobre el pueblo de Israel, estaba reinando Roma, ¿ve? Y ellos esperaban la Venida del Mesías conforme a como estaba profetizado a través de los profetas que lo señalaban como el Poderoso, el Príncipe de Paz, el Dios Fuerte, y así por el estilo. Encontramos que en el Antiguo Testamento los profetas señalaron la Venida del Mesías, pero encontramos que señalaron la Primera y la Segunda Venida del Mesías.
Pero en aquel tiempo encontramos que los intérpretes de la Ley, que eran los escribas, habían confundido la Venida del Mesías, diciendo la profecía, una profecía doble, señalando las dos veces que el Mesías habría de venir, pues los escribas hicieron de las dos Venidas del Mesías, la Primera y la Segunda Venida, hicieron una sola, y estaban esperando al Mesías ¿cómo? Como habría de venir en Su Segunda Venida, ¿ve? Por es que el pueblo de Israel, encontramos que en una ocasión trataron de coronar al Señor como Rey. El Señor cuando vio el pensamiento del corazón de ellos, dice la Escritura que se fue de ellos, sabiendo que querían arrebatarlo, tomarlo y proclamarlo Rey de reyes y Señor de señores, proclamarlo como el Mesías, y Él huyó de eso; porque Él sabía que eso era para Su Segunda Venida. Por eso fue que Él leyó en Isaías 61, y se paró donde tenía que pararse; porque el resto era para Su Segunda Venida.
Ahora, encontramos que en Su Primera Venida Él cumplió lo que habría de cumplir; y así no era que los judíos lo estaban esperando, pero así fue que fue profetizado que Él vendría en medio de los judíos; y también fue profetizado que lo habrían de rechazar y habrían de crucificarlo, así como decía Isaías 53, ¿verdad? Ahí hablaba de lo que le habría de pasar al Mesías en Su Primera Venida, y también en unos de los Salmos, (no recuerdo si es el 22, o por ahí, o el 20, uno de ellos), hablaba también de la condición en que estaría el Mesías en la Cruz del Calvario.
Entonces, encontramos que mientras allá en el templo en aquella ocasión cantaban ese Salmo, allá ellos ¿tenían qué? La letra de ese Salmo, practicándola; pero allá en el Monte Calvario estaba ¿qué? La vida de esa letra, el cumplimiento de esa letra estaba allá en el Monte Calvario, y la religión de aquel tiempo veía la letra y estaban gozándose en la letra y cantando la letra, pero la realidad de esa letra estaba allí en carne humana y no la veían, ¿ve? Lo que pasa es lo que siempre ha dicho el hermano Branham que cuando Dios cumple Su Palabra, es diferente a la tendencia moderna, la tendencia moderna de la forma en que la interpretan la gente, entonces cuando Dios la cumple es muy diferente a como la habían interpretado la gente y entonces las gente esperan una cosa de una manera y cuando Dios la cumple es muy diferente a la interpretación intelectual que le habían dado.
Ahora vemos la Primera Venida del Mesías para resolver el problema del Edén, allá el pecado del Edén y por su sangre, como sangre lo que ocasionó el primer pecado, fue sangre, y por la sangre fue que vino Caín, porque la vida está en la sangre y en el gene lo que hay es una célula de sangre, la cual al ser colocada en el vientre de la mujer, entonces ahí es engendrado y se va reproduciendo y ahí está todo lo que uno es; ahí está el color de los ojos de uno, el color del pelo, y ahí está todo. ¿Ve? Por eso es que los científicos para averiguar quién es el padre de una persona, entonces le sacan la sangre, le chequean la sangre al papá y al muchacho (si hay alguna duda); y entonces la prueba de la sangre es lo que identifica quien es el padre de ese muchacho.
Bueno, entonces vemos en este tema de esta mañana: “LA VENIDA DEL REINO,” que es un tema muy importante, y que los judíos, los hebreos estaban esperando la Venida del Reino. Por eso es que el Señor, encontramos que cuando ellos lo abordaron al Señor , ya cuando el Señor se iba a ir, ya el Señor se está despidiendo allí en el libro de los Hechos, se está despidiendo y ellos les preocupa una cosa; los discípulos mismos le preocupa una cosa, porque ellos sabían que aquel era el Mesías; y ellos no habían entendido que la restauración del Reino era en Su Segunda Venida. Y como ellos lo estaban viendo allí, y estaba con ellos, y había resucitado, antes de irse, ellos están muy preocupados y le dicen al Señor: “Pero, Señor. ¿Restaurarás Tú el Reino a Israel? ¿Cuándo será eso, Señor, lo has de restaurar ahora? ¿Cuándo Señor?” El Señor le dice: “No toca a vosotros saber (¿ve?) las cosas que el Padre puso en Su sola Potestad.”
A ellos no le fue permitido saber esas cosas y entenderlas completamente en ese tiempo, y ellos estaban muy preocupados porque ellos esperaban que el Reino comenzara luego que el Señor resucitó, ¿ve? Ellos esperaban que comenzara allí mismo, y ellos lo que estaban esperando allí comenzara todo el establecimiento del Reino de Dios. Entonces el Señor les dice que no le tocaba a ellos saber esas cosas, las cuales Dios había puesto en Su sola Potestad. Por lo tanto, Él habría de revelar a un cierto tiempo, a quienes Él hubiera predestinado para darle a conocer esas cosas, pero a ellos no le fue concedido saberlas en ese tiempo.
Entonces, encontramos en otro lugar, en Lucas 17:20, donde el Señor dice:
“El Reino de Dios no vendrá con advertencia.”
¿Ve usted? No vendrá con advertencia el Reino de Dios; así que vendría ¿cómo? Como Él dijo también, vendría ladrón en la noche. Por lo tanto, viendo todas estas cositas, vamos a ver entonces cuando el Señor estuvo aquí en la Tierra, y cuando Juan el Bautista estuvo aquí en la Tierra, Juan el Bautista anunciaba que el Reino de los Cielos se había acercado; pero cuando el Señor llegó Él dijo: “Está entre vosotros.” Ahora vea ¿qué era el Reino de los Cielos? Era Dios hecho carne.
Ahora, viendo nosotros esas cosas, y sabiendo que las cosas de la segunda dispensación son ahora tipo de las cosas que serían en la tercera dispensación, así como los de la primera también son tipo de la tercera dispensación, vienen a ser sombras, tipos y figuras. Entonces, si queremos saber dónde estamos y qué cosas han de acontecer acá, miramos para atrás y vemos lo que aconteció allá, y entonces vemos lo que acontecerá acá; así dice el hermano Branham: “¿Usted quiere saber lo que viene? Mire lo que ya pasó. Mire lo que ya pasó en la primera dispensación y en la segunda dispensación y usted sabe lo que viene para la tercera dispensación.”
Entonces, no pierda usted esto de vista, que cuando el Señor estuvo aquí en la Tierra; Él dijo: “El Reino de los Cielos entre vosotros está.” ¿Era qué? Era Dios hecho carne en medio del pueblo. Ahora encontramos que el Reino de Dios está prometido que ha de venir, que ha de ser establecido aquí en la Tierra.
Ahora, entonces ya usted vio cómo vino en el Reino de los Cielos, ahora usted sabe cómo vendrá cómo vendrá el Reino de Dios. Cuando el Reino de Dios venga y sea establecido aquí en la Tierra, ¿qué será? Será la misma cosa. Será Dios hecho carne.
Entonces encontramos que el hermano Branham, hay ocasiones donde él dijo: “El Reino de Dios entre vosotros está.” ¿Ve? Entonces, vemos que la Venida del Reino era lo que los hebreos estaban esperando; y ellos sabían que cuando el Reino viniera, entonces estaría el Rey sobre la Tierra.
Ahora, sabemos que Él sería el Rey de reyes y Señor de señores, el Rey de Israel, el cual ellos estaban esperando, el Hijo de David; pero cuando vino en la primera ocasión no le reconocieron de esa manera, aún aunque pusieron un rotulo, un título sobre Él cuando fue crucificado: “El Rey de los judíos,” pero no lo pudieron ver, y Él vino más bien para redimir, Él vino como Redentor, como Cordero; pero cuando Él viniera como León, como León es Rey, como León es el Hijo de David, ¿ve? Y eso es el orden de Su Segunda Venida. Eso es lo que nos dice el hermano Branham, ahí en el mensaje titulado: “Hoy se ha Cumplido esta Escritura.” Y también en el mensaje titulado: “La Señal,” página 26 y página 27, y “El Rapto,” es en la página 6 y 7. Ahí él nos dice que el Señor leyó hasta donde tenía que leer, porque el resto era para Su Segunda Venida.
En Su Primera Venida, Él venía bajo el símbolo de la Virgen, por eso nació de una virgen. Luego en Su Segunda Venida, (eso fue en Su primera), en Su Segunda Venida Él vendría bajo el símbolo del Zodiaco del León, como el León de la Tribu de Judá; eso sería entonces en Su Segunda Venida para traer juicio al mundo ¿ve? Por lo tanto Él vendría ¿cómo qué? Como Juez. Como Juez Él es León; como Sacerdote, Él es Cordero, para hacer intercesión, y eso fue durante las edades de la Iglesia. Pero cuando Él deja Su Trono de Intercesión, Él está en Su Trono de Intercesión con la cinta en la cintura puesta, pero cuando la cinta es quitada de la cintura y es colocada sobre el hombro, ya la cosa cambia, y entonces es el mismo Señor, pero tomando otro ministerio, el ministerio de León, de Juez para juzgar.
Sabemos que así era que estaba prometido que Él habría de venir como Juez, para juzgar a todos en la Tierra; y por eso vendría como dice en “Las Edades,” con una peluca blanca, ¿ve usted? Entonces ya eso se cumplió, porque el hermano Branham dice que cuando vinieron los siete Ángeles, ellos le subieron allá arriba donde ellos estaban, y entonces cuando tomaron el retrato allá arriba, dice que allí el Señor apareció ¿con qué? Con una peluca blanca formada por los siete Ángeles. Sabemos que Él no estaba allí, y entonces, encontramos que cuando los libros fueron abiertos encontramos que fueron abiertos como Juez, y por eso entonces ahí encontramos que fue el Juez, el León de la Tribu de Judá el cual abrió los Sellos, fue leído lo que había ahí, y entonces fue hecho juicio, fue hecho un juicio espiritual, fueron condenadas las denominaciones, ¿ve? Y entonces fue también declarado el grupo escogido, fueron declarados ahí los escogidos, y los nombres de los escogidos también están ahí, ¿ve?
Ahora, encontramos que fue hecho un juicio conforme a la Palabra, fue hecho un juicio en el Reino de Dios, un juicio espiritual; nada cambiará en el juicio final después del Milenio. Lo mismo que ha sido declarado en este juicio espiritual, es lo que será declarado en el juicio literal después del Milenio, ¿ve?
Ahora, encontramos que la Venida del Reino, fíjese la Venida del Reino sería también establecido el Trono para ese juicio final. Porque ha sido este juicio final, un juicio final espiritual, ¿ve? En el campo espiritual, en el campo religioso. Ya pues vemos el dictamen de parte del Señor.
Ahora vemos que el Reino no vendría con advertencia, o sea, que vendría, sería establecido, sería colocado aquí en la Tierra, y nadie se daría cuenta a menos que no vigilase y supiese cómo Él había prometido que habría de venir. Él dijo que vendría como ladrón en la noche, ¿ve? La gente no se daría cuenta, pero habría un grupo de escogidos que sí se daría cuenta, porque ellos son aquellos que serían tomados, y serían raptados, ¿ve? Serían raptados de esta Tierra.
Ahora vea en lo espiritual, vamos a hablar en lo espiritual; ya que estamos hablando de un juicio espiritual, también hablamos de la Venida del Señor en ese campo espiritual, como el Esposo, como ladrón en la noche viniendo, ¿para qué? Para tomar de esta Tierra... Y recuerde que cuando hablamos de tierra, está la tierra literal, pero también hay una Tierra espiritual, porque usted y yo, nuestros cuerpos son tomados de la Tierra. Por lo tanto, estos cuerpos son tierra, ¿ve? Lo que pasa es que es tierra en un estado más avanzado, en un estado superior. Por eso es que si Dios va a formar Sus hijos, Él no tiene que tomar aquella tierra. Hay una Tierra que está en un mejor estado, en un estado superior, y entonces esa es la Tierra que Él usa y de esa Tierra, de ahí es que Él hace o forma a Sus hijos (los hijos de esta Edad) y los forma y los hace, ¿cómo? Por la Palabra Hablada.
Ahora, Él llamaría a Sus hijos ¿de dónde? Del polvo de la tierra, ¿ve? Pero sabiendo que esta es una Tierra en un estado más avanzado. ¿De dónde lo llamó a usted? Por la Palabra hablada. Ahora
estamos hablando en esta ocasión en términos espirituales, lo que venga en términos literales después del Milenio o en el Milenio, pues ya eso es otra cosa que tenemos que esperar, ¿ve? Pero tenemos ahora, en este tiempo que agarrarnos de lo que corresponde a este tiempo y de la manera que corresponde a este tiempo.
Por ejemplo, cada cosa tiene su tiempo, y lo que le es de provecho a cada uno de los hijos de Dios, es lo que corresponde al tiempo en el cual ellos están viviendo. Si lo que corresponde al tiempo que ellos están viviendo en las cosas que Dios prometió que haría en lo literal, pues los hijos de Dios tienen que agarrarse de esas cosas en lo literal; pero si lo que corresponde a Dios hacer es en la escala espiritual, pues de eso espiritual es que tenemos que agarrarnos; lo literal si tratamos de agarrarlo no nos es de ningún provecho porque eso está para otro tiempo.
Ahora fíjese, la Venida del Reino es de lo cual estamos hablando en esta mañana: “LA VENIDA DEL REINO.”
Vemos que la Venida del Reino es como fue allá en el Monte de la Transfiguración, ese es el orden de la Venida del Reino, así como leyó nuestro amado hermano Candelario en el “Libro de Notas,” y que yo voy a leer en esta ocasión, en el libro de “Los Sellos,” (es la misma cita), está en la página 59 del libro de “Los Sellos.” Y dice: [“Las Edades”].
“Ahora en Mateo 16:28, el cual está antes de Mateo 17:1 al13, Jesús había dicho...”
Eso fue cuando fue obtenida la revelación de quién era ¿quién? De quién era el Hijo del Hombre. Cuando bajó de arriba, entonces después de eso el Señor dijo: “Hay algunos de los que están aquí que no gustarán la muerte hasta que hayan visto al Hijo del Hombre viniendo en Su Reino.”
Ahora observe bien: el Hijo del Hombre viniendo en Su Reino. El Reino viene ¿con quién? Con el Hijo del Hombre. Y el Hijo del Hombre, ¿es qué? Siempre es un profeta, la Venida del Reino, ¿es qué? Bueno, vamos a seguir. Cuando venga el Reino. ¿Qué es lo que vamos a ver? Pues el Hijo del Hombre, un profeta en la escena será visto siempre que venga el Reino. Cuando vino el Reino de los Cielos y estuvo entre los hombres. ¿Qué había allí? El Hijo del Hombre allí presente, ¿ve? Y allí estaba el Reino de los Cielos entre ellos, ¿por qué? Porque el Reino de los Cielos era Dios hecho carne entre ellos, era el Hijo del Hombre entre ellos. Sigue diciendo:
“Y los tres apóstoles vieron eso: el orden de Su Segunda Venida (eso fue cuando subieron al Monte de la Transfiguración. Vamos a ver,) Ellos lo vieron transfigurado allí en el monte.”
Fíjese vieron el orden de Su Segunda Venida, el orden, la forma en que habría de Venir el Señor en Su Segunda Venida, allí le fue mostrado. Por lo tanto, como le fue mostrado allí, entonces cuando el Señor viniera en Su Reino, en Su Segunda Venida; porque la Segunda Venida del Señor es viniendo Él en Su Reino, y como les fue mostrado allí. Cuando se cumpliera en la realidad, cuando fuera hecha una cosa real, la Segunda Venida del Señor sería, y sería visto así de esta manera, no podía ser de otra manera.
“Ellos lo vieron transfigurado allí en el monte. Su vestido era resplandecientemente blanco, y Su rostro brilló como el sol en su cenit (yo no sé leer bien esa palabra ahí). Y cuando Él apareció...”
Fíjese, su rostro brilló, ¿cómo? Su rostro brilló como el sol. ¿Cómo dice en Malaquías? “Y a los que temen mi Nombre, ¿qué? Nacerá el Sol de Justicia y en Sus alas traerá, ¿qué? Salud. Ya mismo les voy a leer que significa eso:
“Y cuando El apareció, allí estaban Moisés y Elías, uno a cada lado. (¿Ve?) Así es exactamente como Él vendrá.”
¿Cómo es que viene otra vez? Con Moisés y Elías, o Moisés y Elías a cada lado. Será visto Moisés y Elías, uno a cada lado. No los dos juntos. No los dos en un lado, sino uno a cada lado. En verdad, ahora uno a cada lado. Bueno, la pregunta entonces: Bueno, ¿y cuál vendrá primero? ¿Vendrán los dos juntos? No, dice que uno a cada lado, uno de un lado y otro en otro. Pero Él es el Sol de Justicia. Ahora recuerde que el sol es visto dos veces; en un día el sol es visto dos veces, ¿ve? Y cuando Él viene es visto Moisés y Elías uno a cada lado, ¿ve usted?
Es visto Moisés y es visto Elías, y sol de un día es visto dos veces, es algo raro pero lo va usted a ver dos veces si es que atiende bien. Si usted lee en el libro del Génesis, cuando el Señor habló la Palabra y en esos días, en esos siete días, encontramos ahí en la Biblia, usted encuentra que dice: “Y fue la tarde y la mañana el primer día. Y fue la tarde y la mañana, segundo día. Y fue la tarde y la mañana tercer día.”
Y ahora vea usted, siempre el sol es visto dos veces, porque los días comienzan por la tarde; no como actualmente encontramos que la economía mundial, científica y religiosa , y de todo creen o piensan que los días comienzan a la media noche; ahí no está comenzando ningún día, eso es noche, ¿qué día comienza por la noche? Ninguno; ahí lo que hay es noche, los días comienzan en la tarde, y donde termina un día ahí comienza el otro. Es algo así a las 6:00 de la tarde por ahí, termina uno y comienza el otro ahí mismo se entrelazan el uno al otro.
Y encontramos que en lo normal, el ser humano trabaja por el día, pero ya a las 6:00 de la tarde, ya todo el mundo ha trabajado lo que va a trabajar en ese día,(a menos que no trabaje de noche). ¿Ve? Pero el Señor hablando de eso dijo: “Me conviene obrar las obras del que me envió entre tanto que el día dura, la noche viene cuando nadie puede obrar.” [San Juan 9:4]. ¿Ve usted?
Entonces encontramos, que conforme a la Palabra... no es que vayamos a decir que los hermanos que tengan necesidad de trabajar de noche pues no puedan trabajar, más bien estamos hablando en términos espirituales, y del trabajo en lo espiritual. De las 6:00 de la tarde en adelante ya es otro día, pero con la luz de ese otro día, ya nadie puede trabajar, sino que ya ha trabajado hasta las 6:00 de la tarde con la luz de ese día que amaneció, pero que esa luz de ese día que amaneció, primero había sido visto la tarde anterior.
Y ahora, cuando vemos que el día de la Dispensación de la Gracia terminó, porque las edades terminaron. ¿Cuándo? ¿En qué tiempo? En el tiempo de la tarde terminaron las edades y entonces está prometido que en el tiempo de la tarde ¿habría qué? Luz, al tiempo de la tarde habrá luz. Pero vea que esa Luz de la tarde se entrelaza con la Luz de las edades de la Iglesia, con la Luz de la segunda dispensación; y el que no sabe que los días comienzan en la tarde, pues cree en que esa Luz es la luz de las edades de la Iglesia; creen que esa Luz es la Luz de la Dispensación de la Gracia, la segunda dispensación, y creen que se está en la segunda dispensación cuando ven la Luz de la tarde brillando, ¿ve? La Luz de la tarde vino y era Malaquías 4:5.
Y mientras la Luz de la tarde estuvo brillando, todo el mundo pensaba que se estaba en la segunda dispensación, creían que esa era Luz del día de la segunda dispensación, pero esa era Luz de otro día, del tercer día. Lo que pasa es que cuando la Luz de la tarde de ese otro día que ha de brillar luego por la mañana, cuando esa Luz en la tarde aparece, con esa Luz no se trabaja. Solamente con esa Luz es que se recibe un testimonio, y es más bien una profecía de que vendrá un nuevo amanecer, de que amanecerá un nuevo día en el cual se va a trabajar en ese nuevo día, pero esa Luz de la tarde lo que hace es que está dando testimonio de que viene un día para trabajar. Pero usted en ese tiempo de la tarde lo que hace es reposar y descansar, porque ya trabajó lo que iba a trabajaren ese día que ya pasó a la 6:00 de la tarde.
Entonces encontramos que lo que anuncia esa Luz de la tarde. ¿es qué? Que viene un día y que ha de salir la Luz, ¿ve? Sino por ejemplo: si de las 6:00 de la tarde en adelante no hay luz, pues entonces no hay esperanza de que haya un amanecer, Ve? Algo ha pasado. Ahora vemos entonces que la Luz de la tarde es Malaquías 4:5, la luz de la tarde es Malaquías 4:5.
Ahora vemos que el Reino de Dios, el orden de la Venida del Reino de Dios, ¿es qué? Moisés y Elías, o Elías y Moisés. Cuando venga el Reino de Dios para ser establecido y sea establecido aquí en la Tierra, entonces cuando venga y lo veamos, lo que estaremos viendo ¿es qué? Estaremos viendo dos profetas: Moisés y Elías. Ese es el orden de Su Segunda Venida; cuando el Señor venga por segunda vez, estarán en la escena dos profetas. Ese es el orden de Su Segunda Venida, nadie lo puede cambiar.
Ahora, la pregunta es: ¿Quién aparecerá primero? ¿O aparecerán los dos juntos? Dice que uno a cada lado, es lo primero; lo segundo es que Dios nos ha dicho a través del hermano Branham, que Dios no tiene dos profetas mayores al mismo tiempo.
Por lo tanto, no los puede tener ministrando a la misma vez; si estuvieran vivos los dos en ese tiempo, uno ministraría primero y el otro después, como fue con Elías y Elíseo, (lo que nos citó el hermano Candelario anoche.) Mientras Elías estaba, Elíseo no podía hacer nada, ¿ve? Pero cuando se fue Elías, Elíseo entonces tuvo una doble porción, un ministerio doble, tuvo un ministerio doble, ¿ve? ¿Y dónde terminó Elías? ¿Qué pasó? Ahí comenzó Elíseo, ¿ve? Porque era la continuación del ministerio de Elías, porque ese fue el segundo Elías.
Bueno, ahí vemos al cuarto Elías, el Elías que habría de venir, entonces la pregunta es: ¿Quién vendrá primero? ¿O Moisés o Elías? ¿Quién ministrará primero? Bueno eso no es problema para nosotros, porque lo único que tenemos que hacer es preguntarle a Elías quién viene primero; y aquí él dice, aquí mismo él dice:
“En verdad, Elías vendrá primero (No hay duda. Elías vendrá primero, ¿y qué va a hacer?) y convertirá los corazones de los hijos (Novia) a la Doctrina Apostólica de la Palabra de los padres.”
Ahora, mire el trabajo que va a hacer Elías, cuando él venga, ¿y eso es qué? Eso es la Venida del Reino, eso es la Segunda Venida del Señor que viene con Moisés y Elías; Elías aparece primero, Viene primero ¿y restaura qué? A los hijos de Dios de vuelta a la fe original. Los restaura y los coloca ¿dónde? En el Reino de Dios.
Por eso usted encuentra que el hermano Branham nos dice que la Novia, los hijos de Dios han regresado de nuevo al Edén y que están en el Reino de Dios con Vida eterna. ¿Quién los llevó para allá? Elías los llevó a todos para allá como grupo, los llevó a todos, como grupo llevó a todos los hijos de Dios de regreso al Reino de Dios, los restauró a su lugar original; porque a eso fue que Él vino y si Él vino a eso , entonces tenía que hacer aquello para lo cual Él vino. Entonces encontramos que eso fue cumplido completamente como estaba profetizado que sería cumplido.
Pero ustedes, siendo ustedes ministros ustedes han leído todo eso y hay que dejarle trabajo a ustedes también para que después, ustedes escudriñen a ver si lo que estamos predicando es cierto o no es cierto. Encontramos que así nos dice el hermano Branham, que la Novia ha regresado al Edén, y está en el Edén en el Reino de Dios con Vida eterna. ¿En el qué? En el Reino de Dios, ¿por qué? Porque es la Dispensación del Reino de Dios, y son colocados en la dispensación del Reino de Dios que es la tercera dispensación, ¿ve? Entonces, usted encuentra que también el hermano Branham dice que es la dispensación de la Venida del Señor, encuentra también en otros lugares que dice que es la dispensación del Hijo del Hombre, ¿ve?
Entonces podemos ver que la Venida del Reino sería sin advertencia, y si sería sin advertencia cuando viniera el Señor por segunda vez, vendría sin advertencia; aparecerían Elías y Moisés en la escena y cuando apareciera, pues ahí está la Venida del Reino, la Segunda Venida del Señor, por eso es que podemos decir que el Señor ha venido por Segunda vez. ¿Cómo vino? ¿Y en dónde vino? Pues vino en Elías, ¿por qué? Porque el Elías de esta Edad, (mírelo aquí) el Elías de esta Edad, ¿es quién? Eso está por ahí por la página 25, déjeme ver, página 25, 55, 56 y 59 del mensaje titulado: “Tratando de Hacer Servicio a Dios Fuera de Su Voluntad.”
Ahí encontramos que él nos habla de que el Elías de esta Edad es el mismo Señor Jesucristo. Aquí vamos a leerlo en la página 55, dice:
“Ahora, El prometió eso, así es que eso lleva a la Biblia exactamente a este día. Y la Sodoma y Gomorra. Y ese no fue Elías, eso fue el Espíritu de Dios en Elías. Elías fue tan sólo un hombre. Ahora hemos tenido Elías y abrigos de Elías, y manto de Elías, y toda cosa de Elías. Pero el Elías de este día es el Señor Jesucristo. Él ha de venir de acuerdo a Lucas 17:30,dice que el Hijo del Hombre se revelará a Sí Mismo entre Su pueblo, no en un hombre, Dios. Pero vendrá a través de un Profeta. Y Él nunca tuvo dos profetas mayores al mismo tiempo, nunca en el mundo.”
Ahora, ¿se dio usted cuenta? Él dijo en Lucas 17 :30, que habría de venir de esa manera, entonces el Elías de esta Edad, el cuarto Elías, ¿es quién? El mismo Señor Jesucristo viniendo en
Su Reino, ¿ve? Entonces si está viniendo en Su Reino, ¿vienen cómo? Como Rey, como Rey de reyes y Señor de señores, y por eso es que el Nombre lo trae, ¿quién? Cuando viene, pues lo trae en Su manifestación en carne, en Elías, pues ahí lo trae colocado, ¿ve?
Entonces; porque vemos y sabemos que el Hijo del Hombre, siempre, cuando se manifiesta, cuando es la Venida del Hijo del Hombre, entonces trae el Nombre de Dios, para esa dispensación que está comenzando o que está introduciendo, o la introduce siempre en el tiempo de la tarde. El Señor, también vino en Su Primera Venida en el tiempo de la tarde, en el tiempo de la tarde en la edad de la Ley; Él apareció allí, y cuando Juan el Bautista apareció, allí estaba terminando la dispensación de la Ley, cuando estaba bautizando al Señor, allí estaba terminando una dispensación y comenzando otra en las aguas, ¿ve? Porque allí era el tiempo de la tarde para la Ley, y el tiempo de la tarde de la segunda dispensación, ¿ve? Ahí en el tiempo de la tarde estaba terminando la Dispensación de la Ley y la gente no se estaban dando cuenta.
Pero luego en el tiempo de la mañana del Día de Pentecostés, comenzó la segunda dispensación o comenzó ese día a ser manifiesto y a trabajarse en ese segundo día, o segunda dispensación. Pero vemos que en el tiempo de la tarde, mientras el Señor estuvo, solamente era un tiempo de introducción, introduciendo ¿qué? Introduciendo lo que habría de ser proclamado y practicado del Día de Pentecostés en adelante. Allí estaba siendo colocado ¿qué? El fundamento de la segunda dispensación, porque en el tiempo de la tarde es que es colocado ¿qué? El fundamento de lo que vendrá... [Corte de audio].
Bueno, entonces lo encontramos que la Segunda Venida del Señor ¿sería cómo? Ya vimos el orden no puede fallar, cuando el Señor venga por segunda vez, ¿allí estará quién? Elías primero, dice, Elías vendrá primero, ¿y después qué? Moisés.
Ahora, ¿quiere usted ver cómo vino el Sol de Justicia, cómo se manifestó cuando vino en el tiempo de la tarde? Vamos a leer por ahí en el mensaje: “¿Cuál es la Atracción en el Monte?” Página 20, solamente lo vamos a tocar ahí, página 20, dice... el hermano Branham está leyendo a Malaquías 4, dice... mire vamos a tener que comenzar un poquito antes en la página 19 al final dice:
“Abramos a otra Escritura en el Antiguo Testamento, Malaquías el capítulo 4, y leamos ese pequeño capítulo 4.”
“... he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios... todos
los que hacen maldad serán estopa.”
“Ahora, esto no es. . . allá en Malaquías 3, fue la primera Venida, y ahora es la próxima (Malaquías 3, era la primera, Malaquías 4, ¿qué? La próxima, la segunda). Aun aquí él Doctor Scofield, yo ciertamente no estoy de acuerdo con sus apuntes, pero él aquí lo tiene alineado muy bien...”
Eso fue lo que fue leído en esta mañana, ¿verdad? Fue leído, usted dice no fue leído eso, sí en Zacarías también dice eso, sí. Malaquías 4, habla ahí de Moisés y Elías, Zacarías también habla y Apocalipsis 11, también habla. Es lo mismo. Entonces mire dice:
“...la comisión de Juan, para Malaquías 3; y la Segunda Venida de Cristo, y Elías de
antemano. Todos los soberbios serán quemados, ha dicho Jehová de los ejércitos, y no les
dejará ni raíz ni rama. (Entonces ¿dónde está el infierno “eterno”?)
¿Dónde está el infierno eterno entonces? ¿Ve? Si no le va a dar raíz ni rama, pues entonces van a desaparecer completamente serán extirpados totalmente.
“Dice: Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el sol de Justicia (mire usted cómo va a ser esto). Se levantará con campañas de Sanidad. (¿Ve usted?) Y en sus alas traerá salud y saldréis y saltaréis como becerro de la manada.
Hollaréis a los malos, los cuales serán cenizas bajo las plantas de vuestros pies, en el día que yo actúe ha dicho el Señor de los ejércitos.
Acordaos de la ley de Moisés mi siervo, al cual encargué en Horeb ordenanzas y leyes para todo Israel.
¡Aquí está la Venida de Elías! He aquí yo os envío a Elías el Profeta.”
Ahora, vea usted cómo viene el Sol de Justicia, porque así fue que en el Monte de la Transfiguración el Señor se mostró. Su rostro resplandeciente como el Sol; porque así sería como Él habría de venir en Su Segunda Venida, como el Sol de Justicia y en Sus alas traería, ¿qué? Salud. Ahora, vea que el sol brilla y sale dos veces, en la tarde y en la mañana, el mismo sol, el mismo sol de ese día. ¿Ve usted?
El Sol de la tercera dispensación que es Cristo, salió en la tarde al finalizar las edades de la Iglesia, de ahí para adelante el Sol estuvo brillando, ¿y era qué? Era el Sol de Justicia en Sus alas, ¿trayendo qué? Salud, apareciendo con campañas de Sanidad Divina; y eso ya nosotros sabemos que fue el hermano Branham, apareciendo con campañas de Sanidad Divina, ¿por qué? Porque era el Sol de Justicia, Cristo, en él llevando a cabo todo eso.
Ahora, vea usted, ¿viene cómo? Con Elías, en Elías y Moisés; porque Elías viene primero. Ahora vemos cómo el Sol brilló a través de Elías; vea usted el ministerio, que era un ministerio no de un hombre; sino el ministerio, ¿de quién? El ministerio del Señor en Su Segunda Venida. Entonces, encontramos que si ya vino el Sol de la tarde, es el Sol de la tarde es Sol que aparece en el tercer día, pero que aparece por la tarde, por eso dice que al tiempo de la tarde habría, ¿qué? Luz, y el tiempo de la tarde teniendo Luz es Malaquías 4:5, Lucas 17:30. ¿Y qué es eso? Apareciendo el Sol con campañas de Sanidad Divina, eso es Dios a través de Elías, y eso es nada menos que el Sol brillando en la tarde; porque dice que era el tiempo de la tarde en que habría Luz.
Y luego, encontramos que hay anunciado que ha de venir, ¿qué? Se lo voy a leer por aquí, si es posible, déjeme ver es en la página, 10 del mensaje: “¿Por qué Clamas? ¡Habla!” Ahí al ladito, finalizando casi dice:
“Cuando esa Luz alumbra desde el cielo, y la Trompeta suene y el cuerpo Cristo será juntado rápidamente y en un momento será cambiado y llevado al Cielo.”
¿Cuándo? Cuando la Luz alumbre desde el Cielo. Ahora vea la Luz de la tarde diciendo que la Luz... (y fíjese) está preguntando aquí me parece q es en el ‘63, y está anunciando que va a venir la Luz y va a alumbrar desde el Cielo, ¿para qué? Para hacer algo, para el cuerpo de Cristo ser juntado rápidamente y en un momento será cambiado, para ser juntado y cambiado. Y luego, ¿qué más? Ser llevado al Cielo. ¿Eso es cuándo? Cuando la Luz alumbre desde el Cielo.
Encontramos que está prometido que va a alumbrar esa Luz desde el Cielo y mire lo que va a ocurrir, dice:
“Cuando la Luz alumbre desde el Cielo, va haber un sonido de Trompeta...”
¡Oh! Cuando la Luz alumbre del Cielo va a haber un sonido de Trompeta. La Trompeta, ¿va a qué? A sonar; ahora es desde el Cielo. Ahora, recuerde que hay cielo literal y Cielo espiritual; igual como hay una nueva Jerusalén literal que será después del Milenio, y hay una Nueva Jerusalén espiritual que es la Novia del Señor. ¿Ve?
Entonces ya vimos estas cositas aquí, vimos la Luz de la tarde, y la Luz de la tarde con la Luz de la tarde, nunca se trabaja las labores de esos días que se comienza, ¿ve? Con la Luz de la tarde los hijos de Dios que son el trigo de Dios, no pueden madurar mientras están en el tiempo de la tarde, sino que solamente maduran las primicias, y las primicias, ¿quién fue? El hermano Branham, el primero que llegó a madurez.
Pero cuando la Luz salga por la mañana y alumbre desde el Cielo, entonces en ese día entonces madurarán el resto de los escogidos y llegaremos a la completa madurez, a la completa estatura de Cristo, o sea, nos convertiremos en la Palabra en carne, ¿ve? Entonces, ¿qué es lo que hace que el trigo madure? El Sol, ¿ve? Y el Sol viniendo en la tarde, viene en Elías, brillando en Elías y madura, ¿qué? Las Primicias, que es nuestro amado hermano Branham que llegó a la completa madurez, fue la Primicia, fue la gavilla mecida de Lucas 17:30, Malaquías 4:5, fue esa la primer gavilla que fue madurada y fue mecida, ¿ve?
Entonces, fíjese el Sol cuando brilla, ¿es qué? Es la Palabra, la Palabra viniendo a través de carne, es siempre de esa manera. El mismo Señor en una ocasión dijo: “Yo soy la Luz del mundo.” [San Juan 8:12]. ¿Ve? Él lo dijo, ¿y qué era eso? Que Él era el Sol; porque la Luz del mundo es el Sol, ¿ve? Entonces, luego les dijo a Sus discípulos: “Vosotros sois la Luz del mundo.” [San Mateo 5:14]. ¿Por qué? Porque Dios brillaría a través de ellos también, pero en ellos no hubo la plenitud de Dios.
Ahora, encontramos que tenemos, conforme a la Palabra de Dios, el orden de la Segunda Venida del Señor; ya vimos que Elías vino primero y restauró todas las cosas, y vimos que colocó al pueblo de Dios, a los hijos de Dios como grupo, los colocó, ¿dónde? En el Reino de Dios, pero como individuos no sabíamos dónde estábamos. Por eso dice en: “Cristo el Misterio de Dios Revelado,” página 33, ahí dice:
“¡Oh, si la Iglesia únicamente conociera su posición! Así será algún día, entonces acontecerá el rapto, o sea, cuando ella reconozca lo que es.” ¿Ve usted?
Ahora, vea usted que como individuos aunque Elías nos colocó en el Reino de Dios como grupo, como individuos no sabíamos dónde estábamos; porque el Reino de Dios es la Edad de la Piedra Angular, pero no sabíamos que estábamos ahí colocados, sino que creíamos que estábamos en la séptima edad, todos creíamos así, ¿ve? Pero sin embargo como grupo estábamos colocados en la Edad de la Piedra Angular; eso lo hizo Elías, ¿ve?
Ahora, encontramos que esa Luz de la tarde tiene que salir por la mañana; porque la Luz de la mañana, dice el hermano Branham que la Luz de la mañana es la misma Luz de la tarde, ¿ve? La Luz de la mañana y la luz de la tarde es la misma, lo que pasa es que la Luz de la tarde alumbra un tiempo, un lapso de tiempo, y si es en verano es el tiempo que más alumbra. Por eso, estando en el tiempo de verano para la cosecha del Trigo, la Luz de la tarde estuvo alumbrando muchísimo tiempo. Pero luego tuvo, ¿tuvo que qué? Luego tuvo que ocultarse, tuvo que ser guardada la Luz de la tarde y luego que la Luz de la tarde desaparece, ¿qué es lo que viene después de la Luz? Después de la Luz viene la noche, las tinieblas, pero después que pasa la noche viene la mañana; aparece nuevamente, ¿qué? La Luz del Sol que brilló por la tarde, vuelve a brillar por la mañana, o sea, vuelve a recorrer el mismo camino otra vez, como nos dice el hermano Branham, él dice: “Yo recorreré esta senda otra vez.”
¿No era él la Luz de la tarde? La Luz de la tarde estaba diciendo. “Yo recorreré esta senda otra vez.” ¿Ve? O sea, si la vuelve a recorrer, entonces tiene que salir por la mañana, cuando vuelve a aparecer tiene que ser por la mañana; porque el Sol después que alumbra un tiempo y se guarda, se oculta entonces cuando vuelve a aparecer ya es por la mañana, pero en ese lapso de tiempo de la mañana, entre la mañana y la tarde está la noche, y en la noche entonces es donde... en el tiempo de la noche es donde, bueno tomarlo de esta manera más sencillo; mire mientras hay luz en una casa, es difícil que se vean las ratas, los animalitos y todas esas cosas dañinas que son hijas de la noche, ¿ve? Pero cuando usted apaga la luz, aparece cuanta rata, cuanta cosa mala hay, aparece para dañar la comida, para dañar todo lo bueno que hay, para dañar las ropas, las vestiduras suyas, para dañar la comida suya y para hacer todo eso aparece cuanta plaga mala hay escondida. Fíjese usted puede decir: “En mi casa no hay ratas, no hay insectos, no hay nada.” Bueno, la única forma de usted saber si hay o no hay, es cuando usted está durmiendo de momento prenda todas las luces y chequee y deje comidita por allí, por algún sitio y cosas que a ellas le guste a ver si hay o no hay.
Es como, fíjese, usted dice: “Por ahí por cualquier lugar usted dice; por aquí no hay hormigas, ponga cualquier dulce, azúcar o algo que a ellas les guste en algún lugar y después de un rato de la vuelta, no se saben cómo aparecen; no se sabe cómo, pero la cosa es que de momento, ¿De dónde aparecieron tantas hormigas? Bueno, para mí eso ha sido realmente para mí un misterio de cómo aparecen las hormigas sin nadie avisarle en un sitio donde ellas no estaban.
Bueno, aparentemente cuando la Luz de la tarde ha estado brillando, aparentemente todo lo que estaba en la Luz de la tarde y todos los que habían en el mensaje, pues todos eran ungidos de Dios, todos eran escogidos, pero lo único que falta es que venga, que la Luz deje de brillar y entonces se manifiesta cuanto falso ungido hay y después que se manifiestan, de momento es prendida por la mano de Dios la Luz en la mañana, y quedan descubierto, ¿qué? Todo lo que se manifestó ahí; en el tiempo de la mañana, en el tiempo del día, no pueden manifestarse, ¿por qué? Porque quedan al descubierto. Pero, ¿qué pasa? Ya en el tiempo de la noche, ya se habían manifestado; lo que la Luz por la mañana hace es que deja ver quiénes son los verdaderos y quiénes son los falsos, eso es lo que hace la Luz de la mañana.
No es que en el tiempo de la mañana van a aparecer falsos ungidos, sino es que en el tiempo de la noche se manifestaron ya. Y fueron ¿quiénes? Los que por poco engañan a los escogidos; pero cuando aparece la Luz de la mañana, entonces los escogidos dicen: “¡Por poco me engañan! Pero, gracias al Señor que ahora la Luz ha brillado y ahora ve las cosas como son.” ¿Ve?
Ahora vea, yo no les estoy hablando de la Luz de la tarde, de la Luz de la mañana y de la noche, y del tiempo de la noche, así por que quiera hablarles, sino... vamos a ver si es Dios el que dice estas cosas, porque si no, si no el que está mal soy yo. Leyendo por aquí en la página 7-B y 8-B, del “Libro de Citas,” dice; y mire, esto tiene que ver con la visión de la Carpa también por lo que veo aquí, yo nunca lo había leído desde acá en Sábana Seca, en Fajardo, en Ponce, pero nunca me parece había leído todito el párrafo este, es el párrafo 72, nos dice:
“No hace mucho tiempo diciéndome acerca de lo que iba a acontecer; como yo estaba predicando desde el sol...”
Imagínese si Elías es la Luz de la tarde, es el Sol de Justicia manifiesto en él. ¿No estaría predicando desde el Sol?
“Y yo tenía una gran audiencia (y sucederá)...”
¿Estará profetizando ahí?
“...(y sucederá), y yo estaba predicando y mi audiencia era una catedral en el bosque. Y el sol sobre el cual yo estaba parado estaba brillando sobre muchos lugares. Yo tenía que hacer dos culminaciones, (Dos) y yo estaba mostrándoles a ellos sobre sanidad divina, sobre visiones y cómo Dios había prometido, y todas las cosas y ellos se estaban regocijando. Pero entonces cuando bajé para realizar la primera culminación, era para decirles a ellos que todas estas cosas eran la Palabra; y cuando yo tuve que decir que todos tenían hambre (yo predico tremendamente largo), (ese es Elías, ¿qué será cuando venga Moisés?), pero ellos tenían hambre y querían conseguir algo para comer. Y ellos empezaron a salir y yo dije: ¡Esperen un minuto! Ustedes no han escuchado, vean yo quiero decirles de dónde viene: es la Palabra, la Palabra y cuando comencé a decir hablando otra vez sobre la Palabra y cómo fue hecho por la Palabra, todos se fueron. Bueno, esa fue la forma en que sucedió. Y cuando yo me paro allí, las Escrituras vienen a mí, en la visión, estando en una silla en mi hogar como a las nueve de la mañana... y ustedes saben que cuando nuestro Señor estaba en Su ministerio joven, cuando Él estaba sanando a los enfermos y todas estas cosas, aquel joven Rabino de Galilea, Él era un gran hombre. Pero un día Él empezó a profundizar en la Palabra y cuando entró en la Palabra, la gente se marchó, los setenta lo dejaron. Y entonces Él se tornó a los doce y les dijo: ‘¿Quieren irse ustedes también?’ Y entonces sucedía que yo pensaba en la visión.”
Fíjese con lo que está relacionada la visión que él tuvo, aquella gente yéndose relacionada con la ida aquella cuando el Señor comenzó a profundizar de que el que no comiera Su carne, comer Su carne y beber Su Sangre, y esas cosas y diciendo: “¡Qué si vieres al Hijo del Hombre que sube donde estaba primero!” Diciendo de donde era y adonde regresaba, diciendo que Él era el Hijo del Hombre, Dios hecho carne, ¿ve? Entonces dice:
“Y entonces sucedía que yo pensaba en la visión (o sea, la misma cosa): Sí, eso es correcto. ¿Ven? Tengo otra culminación, una gran culminación que tengo que hacer, pero ahora el sol está brillante. Pero dentro de poco, las sombras de la noche estarán cayendo...”
¿Estaba brillando el Sol o no estaba brillando en el tiempo de la tarde? Porque en el tiempo de la tarde habría Luz. ¿Qué era eso? Malaquías 4:5, el Elías que habría de venir, el Hijo del Hombre manifestado, o sea, la Segunda Venida del Señor en Su primera parte. ¿Ve? El Sol brillando en la tarde. Entonces después dice, después de la tarde, después del Sol deja de brillar viene la noche. Y dice:
“...dentro de poco, las sombras de la noche estarán cayendo todos ellos estarán regresando otra vez; entonces realizaré esta otra culminación (¿qué le parece? ¿Ve usted?). Yo levanté mis manos y dije: ¡Gloria a Dios! No tengo que estudiarlo más porque el encargo que yo recibí al principio fue: ¡Quédate con la Palabra! Y yo me quedaré con eso. Y luego cuando yo empiece otra vez, sólo mantendré retirado lo que he dicho y entonces esperaré por esta culminación. Y pensé: ‘No debo olvidarlo,’ y salí de la visión. Yo no sé qué qué texto tenía, pero de seguro que viene otra culminación.” ¿Ve?
El tiempo de la tarde ahí estuvo una culminación, pero hay otra culminación, que es en el tiempo de la mañana, en que el Sol vuelve a brillar en el tiempo de la tarde era Elías, ¿ve? El Señor viniendo en Su Reino, porque ese es el orden; vino la Palabra en Elías. Tiene que venir entonces la otra culminación, el Sol tiene que salir de nuevo y recorrer ese sendero otra vez, como Él está supuesto a hacerlo conforme al orden establecido en la Palabra. Porque luego que el Sol deja de brillar en la tarde, entonces eso es un testimonio de que viene una mañana con el Sol brillando, ¿ve usted?
Ahora, vemos que si el Sol de la tarde, ¿fue qué? Elías, el Sol de la mañana, ¿quién será? Porque así es el orden de la Segunda Venida, no se le puede quitar ni se le puede añadir a eso. Entonces vemos que el Sol de la tarde brillando fue Elías, que alumbró. Pero en todo ese tiempo que estuvo brillando, solamente maduró él, porque solamente él entendía lo que estaba siendo traído; él mismo dijo que lo mal interpretaron y que no entendían, pero él dijo: “Después que yo me vaya, entonces entenderán.” ¿Ve? Después que el sol de la tarde se fue, entonces es el tiempo (más adelante) que maduraríamos; porque entonces brillaría el Sol por la mañana, y cuando brillara empezaría a madurarnos a nosotros en el conocimiento de la Palabra que fue traída y entonces comenzaríamos a entender lo mismo que él entendió.
Luego encontramos que al empezar a madurar, ¿es qué? La Palabra encarnándose en nosotros a medida que la vamos oyendo y recibiendo, y entonces vamos madurando en nuestra fe, la fe de esta tercera dispensación. Pero él había madurado y él sabía todas las cosas, él sabía cuál era el Nombre nuevo. Bueno ahí, mire, habló ahí cuando el Sol brilló en la tarde, todo eso que brilló y alumbró fue tremendo, lo que pasa ¿es que qué? Que nosotros como grupo fuimos colocados en la Edad del Reino, pero como individuos estábamos dormidos con la edad denominacional, en la edad de Laodicea, creyendo que estábamos allá abajo. ¿Y cómo íbamos a ver las cosas que habían arriba estando abajo? Estando en la edad de Laodicea, ¿ve? Estando en la edad de la noche.
Entonces vemos que después que el Sol de la tarde brilló, ¿qué pasó? Entró en un lapso de tiempo de noche el pueblo de Dios, porque fueron metidos como individuos en la edad de Laodicea, habiendo comenzado un nuevo día, estábamos metidos de pies y cabeza en la noche de Laodicea, todos creyendo que estábamos allá abajo y entonces practicando e imitando las cosas que eran de esta dispensación tercera, con las cosas que eran de la segunda dispensación; ligando las cosas que eran de este tiempo, de la Edad de la Palabra, ligándolas con la edad de Laodicea, y las cosas de doctrina la edad de Laodicea, y lo que teníamos ¿era qué? Una liga, ¿ve?
Y entonces, ahí aparecieron ¿qué? Los falsos ungidos, en ese lapso de tiempo de Luz es que aparecieron los falsos ungidos pervirtiéndole la Palabra al pueblo de Dios; y por poco engañan a los escogidos, ¿ve? Metiéndolo, ¿para adónde? Para Laodicea, para un tiempo de oscuridad, todo eso; porque Laodicea quedó en oscuridad y Dios se la mostró en el Cielo en aquel eclipse que hubo de siete etapas, la última etapa, la séptima, ¿fue qué? Tinieblas y oscuridad, ¿ve?
Entonces, encontramos que Dios cuando la Luz alumbra por la mañana, ¿qué es lo que hace? Cuando la Luz alumbra por la mañana es que llama a todo el pueblo trabajador a levantarse para irse a las labores de ese día. El sol es el despertador de los trabajadores, cuando está rayando el Sol y saliendo el Sol ahí se están levantando, ¿quiénes? Los que van a trabajar en ese día, ¿ve? O sea, que la salida del sol es la llamada de Dios a los hijos de Dios para ese día glorioso de esa tercera dispensación, que está amaneciendo y entonces viene a ser para ellos, ¿qué? Un nuevo amanecer, ¿ve?
Entonces, encontramos que en ese tiempo de noche entre la Luz de la tarde y la Luz de la mañana, un tiempo para descansar, descansar, pero ahí se levantaron los falsos ungidos, mal interpretando, ¿qué? Mal interpretando esa Luz de la tarde.
Entonces, vinieron ¿a ser qué? Vinieron a ser imitadores; la Luz de la tarde alumbró y brilló, porque era Cristo a través de Elías; pero los imitadores vienen, ¿cómo? No tienen la Luz, ¿ve? Entonces vienen con la luz artificial, porque en la noche lo que se usa es luz artificial, es una luz artificial, pero cuando sale la Luz del Sol en la mañana, mire no importa la Luz tan potente que alguien pueda tener, la pone frente ahí frente a la luz del sol cuando sale, no alumbra nada. ¿Ve? Más bien es una vergüenza prender una luz allá donde el sol está alumbrando ** prender una Luz artificial, ¿por qué? Porque eso es ignorancia de cualquier persona tratar de alumbrar con una linterna, o con un cincel, o con cualquier cosa de esas cuando el sol está brillando tan fuerte que no hay necesidad de nada de eso.
Entonces, ¿qué pasa? Entonces ahí es que se ve quiénes estaban con luz artificial tratando de alumbrar y eso solamente parecía bueno en la edad de Laodicea que estaba oscuro y cuando se veía a alguien con una luz artificial tratando de alumbrar, ¡oh, qué mucha luz tiene! Pero era luz artificial; pero cuando sale el Sol, ¿para qué hay necesidad de luces artificiales? ¿Ve? Entonces es el llamado, ¿a quién? A los Hijos de la Luz, ¿ve? A los Hijos de la Luz es el llamado, ¿para qué? Para despertar, para ser alumbrados por la Luz en el tiempo de la mañana.
Entonces ya vimos que el tiempo de la tarde y la Luz de la tarde fue Elías; cuando la Luz salga en la mañana, será Moisés. La Luz que es la Palabra, que es Cristo brillando a través, ¿de qué? De Moisés. Entonces cuando brille, entonces así como la Luz de la tarde llamó al pueblo de Dios, a la Novia como grupo la llamó de las denominaciones y la sacó, entonces faltaba a nosotros como individuos, ser sacados como individuos; porque aunque habíamos salido como grupo, como individuos estábamos allá todavía en la edad de Laodicea, ¿ve?
Entonces tiene que haber, ¿qué? Una resurrección espiritual de los hijos de Dios como individuos para salir de los sepulcros denominacionales, salir de allá de la edad de Laodicea que es la edad de la oscuridad, es la edad en que se está de noche. Y entonces, fíjese para la Novia como grupo salir de allá, se necesitó la Luz de la tarde, y salió, pero para nosotros como individuos, ¿ve? Porque el trato en la mañana es como individuo, para eso suceder entonces tiene que brillar la Luz por la mañana. Fíjese aquí dice, página 15, del mensaje titulado: “Ya Salido el Sol,” página 15, dice comenzando arriba un poquito dice:
“Él fue mecido sobre la Simiente prometida que tenía promesa de Vida; Él fue mecido en el día de Pentecostés, cuando allí vino un sonido del Cielo como un viento recio, poderoso, mecido; y fue mecido sobre el pueblo pentecostal que estaba arriba en Pentecostés esperando que llegara la bendición, y para ser mecido nuevamente, nos damos cuenta, en este día final, conforme a Lucas 17:30 en el día del Hijo (S-o-n d-a-y) (Día del Hijo o Día del Sol.) nuevamente en los días que el Hijo (S-o-n) del hombre seria revelado, o mecido nuevamente sobre el pueblo.
Ahora, ¿Quién es este Hijo del Hombre? En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios (¿qué es el Hijo del Hombre? La Palabra hecha carne). Y el Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros... Y de toda la enseñanza que tenemos y confirmación de la Palabra de Dios, por Palabra de Dios, por señales, por maravillas, vemos, hoy (que en el Libro de Lucas aquí, que según acabamos de citar del capítulo 17 y el versículo 30, y Malaquías 4, y las diferentes Escrituras con las cuales estamos familiarizados), que esa Palabra es mecida sobre el pueblo nuevamente, que las tradiciones muertas del hombre están muertas y el Hijo de Dios vive nuevamente con el Bautismo del Espíritu Santo en medio de nosotros y está dándonos Vida.
Según Cristo fue el primero en levantarse de entre todos los profetas y así por el estilo (aunque tipificado en muchos lugares, Él fue la Primicia de los que durmieron), en la Novia viniendo de Cristo, saliendo fuera de la iglesia, tiene que haber una Gavilla mecida nuevamente en los últimos días. ¡Oh, vaya! (Eso es Elías).
Mecer la Gavilla. ¿Qué era la Gavilla? El primero que llegaba a la madurez, el primero que probó que era trigo, que probó que era una Gavilla. ¡Aleluya! ¡Estoy seguro que ustedes ven acerca de lo que estoy hablando! Fue mecida sobre el pueblo y la primera vez ahí surgirá para la Edad de la Novia, para una resurrección del tenebroso denominacionalismo, será un Mensaje donde la madurez de la Palabra ha regresado nuevamente en todo Su poder y siendo mecida sobre el pueblo por medio de las mismas señales y maravillas que Él hizo en el pasado.”
Ahora, ¿vio usted que era esa gavilla, y qué es mecer esa gavilla? Fíjese, la Primera gavilla fue Jesús, era la Palabra, era el trigo, la Palabra era la Palabra en carne humana, fue mecida cuando estuvo en Su ministerio aquí sobre la Tierra; y luego fue mecida por segunda vez, el Día de Pentecostés, sobre la gente, ¿ve? Luego la Segunda gavilla que llegaría a madurez sería, ¿cuándo? Sería en el tiempo final para producir una resurrección fuera del tenebroso denominacionalismo.
Entonces, vemos que aquella gavilla primera fue el primero que llegó a madurez y el primero que se levantó de entre los muertos literales; la segunda gavilla es el primero que llega a madurez y se levanta de entre los muertos espirituales, los muertos espirituales metidos en las denominaciones, ¿ve? Porque las denominaciones son sepulcros y los que están ahí son muertos, por lo tanto, no mueren. Por lo tanto, los santos de Dios que hay en esos sepulcros espirituales, están colocados, solamente están durmiendo esperando, ¿qué? Esperando el día en que la Voz del Hijo del Hombre los llame; porque todos los muertos oirán la Voz del Hijo del Hombre, y se levantarán, unos para Vida (los escogidos) y unos para vergüenza y confusión.
Entonces, vemos que eso se cumple en lo literal y se cumple en lo espiritual. Ahora, en lo espiritual es muy glorioso para el pueblo Dios que la segunda gavilla se levantó de los sepulcros denominacionales, ¿ve? Es el primero que se levantó y el primero que estuvo con el poder resurrectivo, y el primero que estuvo parado sobre la tierra ya resucitado de dogmas, credos y tradiciones, ya resucitado del sepulcro denominacional. Y entonces ¿será qué? Esa gavilla que estaba siendo mecida, y luego esto daba testimonio de que el resto del trigo del Señor, el resto del trigo serían resucitados espiritualmente también, del sepulcro denominacional, ¿ve? Una resurrección espiritual para resucitar, ¿qué? Para resucitar espiritualmente del tenebroso denominacionalismo.
Y recuerde que las edades se denominaron. Por lo tanto, ¿de dónde es que serían levantados espiritualmente los escogidos? De en medio de las edades denominacionales, ¿ve? Por eso es, que cuando entonces la gavilla es mecida por segunda vez, es mecida sobre el pueblo, ¿ve? Entonces al ser mecida sobre el pueblo como lo fue el Día de Pentecostés, fue mecida sobre el pueblo, ¿ve? Entonces es mecida sobre el pueblo, sobre los escogidos no importa donde se encuentren, al ser mecida entonces produce una resurrección espiritual del tenebroso denominacionalismo, ¿ve?
Por lo tanto, no importa en qué sepulcro denominacional o con qué creencias denominacionales están los escogidos, ellos serán resucitados, y saldrán de toda creencia denominacional; ya sea de la creencia denominacional de los luteranos, o de a creencia denominacional, de los sepulcros wesleyanos, o pentecostales, de donde sea; ellos saldrán, ¿cuándo? Cuando oigan la Voz del Hijo del Hombre llamándole. Porque ¿es qué? La Luz de la mañana, brillando y llamándolos a salir fuera.
Y entonces como individuos, todos los escogidos saldrán fuera de toda idea denominacional y entonces presentados o colocados como individuos en el Reino de Dios; donde ahí el Sol está brillando siempre, donde no habrá necesidad de linterna, ni de faroles, ni de nada artificial; porque el Sol brilla en todo su esplendor. No hay necesidad de luna, no hay necesidad de nada; porque el Sol brilla ahí como brillará allá en la Nueva Jerusalén literal, que brillará y alumbrará toda la Nueva Jerusalén.
Pero, sabemos que allá será colocado en la parte de arriba, será colocado un grupito de escogidos, allá en el Trono, ¿ve? Entonces vemos que así como en lo literal el Sol de Justicia brillará allá sobre la pirámide, el Pilar de Fuego estará brillando allá y alumbrará toda la Ciudad, no habrá necesidad de Sol acá material ni de luna tampoco para brillar allí, sino que allí está el Pilar de Fuego brillando, la Shekinah brillando allá arriba, y el Cordero y el León estarán allí. Entonces encontramos que el pueblo caminará allí a la luz de la Piedra Angular, ¿ve?
Ahora vemos que el Sol donde único brilla en todo Su Poder, ¿es dónde? En la Edad de la Piedra Angular, ¿ve? En la Edad de la Piedra Angular es que el Sol brilla en todo Su Poder y es s el tiempo en que la Luz de la Palabra brilla sobre todos los Escogidos.; y los escogidos pueden ver todo lo que hay ahí en esa Edad de la Piedra Angular, todo lo correspondiente a esa Edad y pueden ver el mensaje, la Palabra que corresponde a esa Edad de la Pablara y a esa tercera dispensación, que es una dispensación eterna; porque es la Edad de la Palabra y la Palabra es eterna, ¿ve? Es la dispensación del Espíritu Santo, es eterno.
Ahora, encontramos, bueno por aquí si les leo algo, página 4 del mensaje titulado: “La Estatura de un Hombre Perfecto,” ahí vamos a encontrar algo muy maravilloso, dice página 4, párrafo 3, nos dice:
“Estamos acercándonos a Los Siete Sellos. Acabamos de estudiar Las Siete Edades de la Iglesia, y este mensaje de enseñanza ayuda a aparejar a todo aquel que es redimido por la sangre del Señor Jesús, y que estará en aquella Edad de la Iglesia la Edad Eterna de la Iglesia.”
¡Oh hay una Edad eterna de la Iglesia! ¿Cuál es esa Edad eterna de la Iglesia? La Edad de la Novia, la Edad de la Palabra, la Edad de la Piedra Angular, porque las otras, no son eternas, por lo tanto tenían que terminar. Por eso usted encuentra que el hermano Branham nos dice: “Las edades de la Iglesia ya terminaron.” Y fueron edades denominacionales; porque se denominaron, ¿ve? Por eso es que de ahí es que nos saca el Señor a nosotros.
Ahora, ya sabemos entonces que la Venida del Señor tiene dos partes, ¿ve? Y cuando el Señor aparece que es la Luz, el Señor es el Sol de justicia brillando, aparece brillando en el tiempo de la tarde en Elías y luego por la mañana aparece brillando nuevamente para madurar a los escogidos como individuos, como individuos, ¿ve? Porque no habíamos madurado como individuos en el conocimiento del mensaje que la Luz de la tarde nos trajo, no habíamos madurado.
Por lo tanto, la Luz de la tarde dio testimonio de que vendría la Luz de la mañana, y la Luz de la mañana lo que hace, ¿es qué? Lo que hace es lo mismo que hizo la Luz de la tarde; brillar, ¿ve? Alumbrar. Entonces, encontramos que la Luz de la tarde y la Luz de la mañana es la misma Luz, es el mismo Señor, es la misma Palabra; pero encontramos que tiene dos partes la Venida del Señor; en la tarde y en la mañana. Elías primero y después Moisés y así es el orden de la Segunda Venida del Señor... [Cote de audio].
...fíjese, la Luz de la tarde, la Luz de la tarde apareciendo luego por la mañana. Mírelo aquí, está aquí es muy sencillo para entenderse; el hermano Candelario lo leyó ayer en la noche, página 124, que viene a ser me parece la página 46 de “Notas,” (si no me equivoco) dice de la siguiente manera, fíjese esa es la Luz de la tarde, va hablar aquí y va a hablar aquí la Luz de la tarde diciendo como Él vendrá por la mañana, vamos a verlo:
“Ahora, estos dos profetas, ¿qué harán ellos? Son Moisés y Elías que se levantarán en la escena y ellos le dirán a estos judíos su error, y ese grupo de judíos que están allí ahora serán los ciento cuarenta y cuatro mil, que Él los llamará con esos dos profetas. (¿Qué es eso? ¿Qué son esos dos profetas? Vamos a ver que es.) El Espíritu de Elías fuera de esta Iglesia Gentil sólo continuará directamente hacia dentro de esa iglesia judía, irá directamente hacia dentro y llamará a Moisés con él.
¿Ve usted? El Espíritu de Elías llamando a Moisés con Él, ¿ve usted la Luz de la tarde? La Luz de la tarde que estaba brillando en Elías, ese Espíritu ministerial que estaba ministrando ahí la Palabra, ¿qué pasará? Llamará entonces a Moisés con Él. Entonces, será Elías y Moisés o Elías con Moisés, ¿ve usted?
Entonces, ¿eso será qué? Por la mañana, fíjese: “El Espíritu de Elías fuera de esta Iglesia Gentil sólo continuará directamente hacia dentro de esa iglesia judía.”
¿Saben ustedes que la edad gentil terminó hace tiempo? Terminó hace tiempo y al terminar hace tiempo entonces la Edad de la Palabra, la Edad de la Piedra Angular no es una edad gentil; porque las edades gentiles ya terminaron. Es la Edad del Reino y la Edad del Reino no es una edad gentil, ¿ve usted? Vamos a ver por aquí en el mensaje de: “Los Sellos,” página 30, dice:
“Ahora, ¿cuándo volverá el evangelio a los judíos? Cuando se haya terminado el día de los gentiles. El eslabón ya está listo para volver a los judíos ¡Oh si tan sólo les pudiera decir algo que está a punto de suceder hoy en este nuestro día! Esta gran cosa que va a suceder atravesará hasta Apocalipsis 11, y aquellos dos profetas o aquellos dos testigos, aquellos dos profetas Moisés y Elías trayendo el Evangelio de nuevo a los judíos. Estamos listos, todos está en orden, igual como los judíos trajeron el Evangelio a los gentiles, así también los gentiles se lo llevaran de vuelta a los judíos y el rapto sucederá.”
Primero el Evangelio regresa a los judíos y después que regresa y ellos lo reciben después sigue el rapto, ¿ve usted? Él nos dice esto y tienen que aparecer quienes le van a llevar el Evangelio a los judíos, ¿cuándo aparecen? Entre los gentiles, pero que esos gentiles no estarán viviendo una edad gentil, sino que son llevados a una Edad que no es una edad gentil, son llevados a la Edad del Reino, ¿con quién? La Luz de la tarde, Elías como grupo nos llevó a todos a esa Edad de la Piedra Angular, pero como individuos no sabíamos donde estábamos. Entonces, la Luz de la mañana es Moisés y viene y nos mete como individuos a la Edad de la Palabra, Él nos saca de la edad de Laodicea y nos sube arriba, lo mismo que oyó Juan cuando dice que oyó una Voz de Trompeta más arriba, arriba en el Cielo y cuando miró vio una puerta abierta, ¿ve?
Vio una puerta abierta, y cuando vio esa puerta abierta arriba, saben ustedes que dice el hermano Branham que la ascensión, el rapto de Juan cuando él vio esa puerta abierta y fue subido, dice que Juan representa a la Novia, y cuando él fue raptado, eso representa el rapto de la Novia, ¿ve? Y cuando él fue raptado, ¿fue cuándo? Cuando oyó esa Voz de arriba, gran Voz, ¿de qué? Trompeta y entonces cuando miró vio una puerta abierta en el Cielo, ¿ve? El hermano Branham dice que eso ocurre cuando las edades han terminado, entonces es que ocurre eso y entonces ya entonces Dios no le puede hablar más a Juan, que tipifica la Iglesia o la Novia, no le puede hablar más abajo en las edades de la Iglesia; porque ya la Voz de Dios no está ahí, cuando terminan las edades de la Iglesia, sino que está la Voz de Dios arriba como de Trompeta y hay una puerta abierta arriba, ¿para qué? Para subir y entonces al subir nos ha dicho: “Sube acá y yo te mostraré todas las cosas que han de ser después de estas.” ¿Ve? * Mostrar arriba, ¿dónde están los Truenos? ¿Ve usted? ¿Dónde está Moisés y Elías? Arriba, en el Reino, ¿ve usted? Solo hay una puerta para entrar ahí a la Edad del Reino y entonces si uno entra ahí, entonces lo puede ver todo; porque ahí es donde único les es prometido que le va a ser mostrado todo.
Entonces, déjeme ver si puedo mitrar algo por aquí para leérselo, déjeme ver, página 18 del mensaje titulado: “Revelación, Capitulo 4,” Parte 1, dice:
“Esta puerta establecida en el Cielo, esa puerta cuando él miró hacia arriba, él vio al Señor Jesús. Oh vigilen la parte siguiente de esto, esta puerta el Señor Jesús. Yo mire y he aquí una perta abierta en el Cielo y la primera Voz que oí era una Voz de Trompeta.
Ahora la escena está cambiando, Juan está vigilando a Patmos, o en Patmos, y ahora mira hacia arriba, ¿por qué? Él ve acontecer algo aquí en la tierra, esta será una Iglesia, ¿ve? (Él vio acontecer las edades de la Iglesia). Después de eso, después que cesaron las edades de la Iglesia, él oyó una Voz, y él alzó sus ojos hacia el Cielo y vio una puerta abierta y la primera Voz sonó como una Trompeta, muy bien la escena cambio de Patmos al Cielo, la Voz fue la misma Voz que anduvo en los candeleros de oro, la misma Voz.”
La Voz no cambió, es la misma Voz, la Voz no cambió es la Voz de Dios, la cual estaba en las edades pero que ahora ya han terminado las edades y no están las edades sino que está arriba.
“*La Voz cambió, pero la Voz, ¿dónde estaba cuando él la oyó la primera vez? ¿Cuántos recuerdan la primera edad de la Iglesia? Detrás de él, que fue del Espíritu en el día del Señor. Revelación 1, del 1 al 10, en el Espíritu del Señor, vayamos hacia atrás en Revelación 1, del 10 al 13. “Y yo Juan fui en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una voz como de trompeta, y sonaba como muchas aguas y cuando me volví para mirar vi uno parado en medio de los siete candeleros de oro.
Ahora, después que él les mostró todos esos misterios de los siete candeleros sosteniendo las siete estrellas y una peluca blanca sobre Su cabeza, etcétera, vestido como bronce y Sus ojos como fuego (los símbolos). Entonces oyó... (recuerde que todo eso son símbolos.) Entonces oyó la misma Voz hablando desde el Cielo. Y él levantó sus ojos y vio una puerta abierta. Oh una puerta abierta en el Cielo. ¿Cómo usted entra? Por Cristo Jesús esa puerta única, un camino ningún otro camino. Cualquier hombre que sube en cualquier otra forma, el mismo es un ladrón y robador y en la parábola del que subió y estuvo en la Cena nupcial sin traje, fue hallado culpable y atado y echado a las tinieblas de afuera. Pero un camino para entrar a la Cena nupcial.”
Ahora, vamos a parar esto aquí, vemos que después que la Voz de Dios ha terminado de hablar en las edades de la iglesia, a través de cada uno de los mensajeros, después no habla más en las edades de la Iglesia sino que habla desde el Cielo y entonces cualquiera que quiera escuchar la Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo; y vuelto, vi siete candeleros de oro, Voz de Dios, tiene que subir como Juan subió, ¿a dónde? Al Cielo, y cuando se mira hacia arriba y se oye esa Voz se ve una puerta abierta, al verse esa puerta abierta arriba entonces, ¿qué sucede? Entonces la invitación es: “Sube acá.” Hay que subir entonces, ¿de dónde? De las edades ¿a dónde? A un lugar más alto donde la Voz de Dios está hablando y donde es la misma Voz lo único que cambió, ¿de qué? De sitio, primero estaba hablando en la tierra y después, ahora no está más hablando en la tierra, está hablando en el Cielo.
Por lo tanto, es la Edad celestial, una Edad eterna, la cual es la Edad de la Palabra, la Edad de la Piedra Angular; entonces esa puerta abierta que en una de las edades de la Iglesia el Señor le dijo: “...delante de ti una puerta abierta.” Es esa puerta abierta, estaba delante de él y ante de esa edad. Entonces, esa puerta es la puerta que es abierta después que las edades terminan, entonces es abierta la puerta en el Cielo para entonces entrar a una Edad celestial.
Entonces, vamos a ver por aquí, quiero mostrarles por aquí esa puerta, es puerta la cual no es una puerta corriente, una puerta literal, sino que es una puerta espiritual; y entonces encontramos que esa puerta sería abierta, pero estaría abierta después que las edades terminasen y entonces al estar abierta entonces desde arriba sale una Voz como de Trompeta, ¿para qué? Para llamar: “Sube acá.” ¿Ve? Es para subir, ¿adónde? A ese lugar o a esa Edad de la Piedra Angular, en donde debemos de entrar y entonces se nos promete que nos será mostrado o dado a conocer todo lo que habría de suceder.
Por lo tanto, encontramos que subir ahí es la cosa más gloriosa y más grande por causa que nos es prometido que nos seria mostrado todo lo que no llegamos a entender en las edades de la Iglesia. Ahora siendo una promesa tan grande como esa de parte de Dios para los que pueden subir ahí arriba, entonces sabemos que no es tampoco del que quiera ni del que corre sino de Dios que tiene misericordia y que ha predestinado a aquellos que han de subir a ese lugar.
Quiero buscar algo por aquí, déjeme ver si lo consigo para leérselo y ustedes van a ver mucho más claro de qué se trata todo el asunto y es que, si es que todavía no han visto algo lo vamos a ver ya mismo, página 151, párrafo 1349 del “Libro de Citas,” ahí vamos a ver a Dios hablándonos de esa puerta y vamos a ver lo que dice, vamos a leer ya finalizando ese párrafo, dice:
“No comiencen ni traten nunca una organización. No traten de edificar sobre cualquier otra cosa, pero quédense humildes ante el Señor su Dios, porque parece que las puertas puedan abrir a la tierra prometida pronto. Entonces entraremos con el verdadero canto y regocijo, cuando la Novia y Novio tomen su lugar en el trono.”
¿Dónde? En el Trono, ¿ve? Entonces qué puerta esa es que va a ser abierta, la puerta de la Edad de la Piedra Angular, de la Edad del Trono donde será abierta esa puerta y al ser abierta entonces entraremos y cuando entremos, ¿dónde lo encontraremos? En el Trono de Dios, tomando y ocupando nuestro lugar para el cual hemos sido predestinado y cuando miramos, entonces si hayamos oído esa Voz de Trompeta, miremos hacia arriba, veamos esa puerta abierta, entonces entramos y al entrar, ¿qué pasa? Oh ya no me encuentro en la edad de Laodicea, ni tampoco la de Wesley, ni en la de Lutero. ¿Dónde se encuentro entonces? En la Edad de la Piedra Angular, ¿por qué? Porque la puerta fue abierta, oyó la Voz como de Trompeta y entonces entro y cuando entró, ¿adónde se encuentra ahora? En la Edad de la Piedra Angular, en la Edad del Reino, ¿ve?
¿No dice ahí que entraremos con el verdadero canto y regocijo? (El verdadero canto y regocijo) cuando la Novia y Novio tomen su lugar ¿dónde? En el Trono; porque el Trono es el lugar del Señor reinar, es el lugar del reino. Por lo tanto, ahí en la tarde de arriba de la pirámide fue que el Señor apareció con Moisés y Elías, entonces cuando la puerta sea abierta y entremos a la Edad de la Piedra Angular, encontraremos y veremos, ¿a quién? A el Señor como el Sol de Justicia, ¿con? Elías y Moisés a cada lado; porque eso fue lo que vieron allá en el Monte de la Transfiguración.
Vea usted que en la Edad de la Piedra Angular es que se puede ver al Señor viniendo en Su Reino con Elías y Moisés, nunca antes habíamos visto la Venida del Señor en Elías, ¿verdad? ¿Hasta qué? Pero cuando subimos ahí arriba, entonces vimos que el Elías de esta Edad ¿era qué? El mismo Señor Jesucristo; vimos que el Elías de esta Edad trajo el Nombre del Señor Jesucristo *que es el mismo, ¿ve usted?
Entonces vemos que sencillo que es todo esto, entonces encontramos que la invitación de parte del Señor, a través de la Voz de Trompeta clamando; porque Voz de trompeta es un mensaje llamando al pueblo, ¿ve? Entonces, ese mensaje llamando al pueblo, ¿de dónde viene? De arriba, ¿de dónde? De la Edad de la Piedra Angular, que no es una edad terrenal, no pertenece a las edades de la Iglesia, ellas fueron edades terrenales, pero la Edad de la Piedra Angular es una Edad celestial y ahí están, ¿qué? Moisés y Elías para llamar al pueblo.
Ahora vemos, entonces quién abrió la puerta en la segunda dispensación para entrar al Reino de Dios allá en el Día de Pentecostés. Uno que tenía la llave, tomó la llave abrió la puerta y entraron, ¿a qué? Al Reino de Dios, a la segunda dispensación y así siguieron entrando porque la puerta estaba ya abierta. Cuando fueron a entrar los gentiles Dios le dijo (al que tenía la llave) “Ve allá, a la casa de Cornelio y abre la puerta para que ellos empiecen a entrar también.” Cuando la abrió la puerta entraron también y después estaba la puerta abierta para judíos y gentiles, la puerta del Reino de los Cielos, ¿ve? Después podía entrar todos aquellos que estaban predestinados para entrar; porque el llamado de Dios estaba siendo hecho, pero antes no podía entrar, hasta que no le fuera abierta la puerta. Para los judíos fue primera abierta, para los gentiles ser después fue primera abierta. ¿Ve usted?
Ahora vea usted, que de la misma manera que los judíos nos trajeron el Evangelio a los gentiles eso, ¿cómo fue? Los judíos lo recibieron primero en el Día de Pentecostés, allí fue abierta la puerta para ellos, y después se lo trajeron a los gentiles en la casa de Cornelio, le fue abierta la puerta a ellos también. Entonces vemos, que de esa misma manera que los gentiles entonces se la traerán, se lo llevaran a los judíos, entonces así como los judíos primero entraron, porque le fue abierta la puerta, entonces luego los gentiles entraron después, y ahora es al revés: los gentiles a los gentiles le es abierta la puerta del Reino de Dios, ¿ve? Porque estaba cerrada entonces le es abierta y metida la llave, le es abierta la puerta. La puerta es Cristo, entonces le es abierta la puerta a los gentiles primero. ¿Qué fue lo que hizo Pedro allá en el Día de Pentecostés? Proclamó la Primera Venida del Señor en carne humana, en Jesús, ¿ve? Él tenía la revelación, la llave y usó la llave y abrió a Cristo la Palabra para el pueblo, lo dio a conocer y entraron por esa puerta todos los predestinados entraron por Cristo y recibieron el beneficio y entonces también los gentiles.
Luego la puerta aquí del Reino de Dios, de la Edad de la Piedra Angular, una Edad celestial, una Edad eterna, tiene que ser abierta. Entonces encontramos, que cuando Juan oye la invitación oye una Voz como de Trompeta, y una Voz de Trompeta es un mensaje saliendo, ¿ve? Entonces al oírla mira y ve la puerta abierta para entrar, la puerta de Dios para entrar y entonces encontramos que así como ocurrió allá entre los judíos trayéndonos el mensaje acá, entonces acá la puerta le es abierta a los gentiles primero como fue abierta allá en el Día de Pentecostés, es abierta acá en el año de Pentecostés, que es el año cincuenta, que es el año del jubileo. Entonces le es abierta la puerta a los escogidos gentiles y entonces es el llamado de subir.
Entonces es el llamado de subir, salir de Laodicea; subir arriba a la Edad de la Piedra Angular donde le es mostrado todo, donde es mostrado el Nombre nuevo, la Segunda Venida del Señor, donde nos es mostrado la tercera dispensación, donde nos es mostrado la forma para adorar, donde nos es mostrado todo lo que nunca antes había sido mostrado en las edades de la Iglesia.
Ahora, vemos que allá así fue; luego encontramos que acá estará Moisés, por ahí parado, porque él tendrá la revelación para abrirle la puerta a los ciento cuarenta y cuatro mil. Moisés y Elías, ¿no son los que le abren la puerta a ellos? Ellos tienen la llave de la revelación para abrirle la puerta, ¿a quién? A los ciento cuarenta y cuatro mil. ¿Pero no saben que primero se la abren a los gentiles? ¿Ve? Entonces cuando hayan subido todos los escogidos, hayan entrado, hayan sido sellados, entonces después se cierra para los gentiles y se abre para los judíos, ¿ve usted? Entonces, encontramos que ese es el orden de la segunda Venida del Señor.
Ahora, encontremos algo que tenemos que vigilar, fíjese en Elías, la Palabra estaba encarnada. Ahora, vamos a ver como aparece Moisés, como... porque será Moisés y Elías, ¿ve? ¿Por qué? Porque el mismo Espíritu ministerial que estaba en Elías, tomará o llamará a Moisés, lo tomará y entonces estará el Espíritu de Elías en Moisés, entonces habrá un ministerio doble, el Espíritu ministerial de Moisés y el Espíritu ministerial de Elías, como Elías podrá ministrar a gentiles, para abrirle la puerta a gentiles, la puerta del Reino de Dios y meterlos dentro; porque dice el hermano Branham que Elías ministró a judíos y a gentiles. ¿No lo han visto en “Los Sellos”? ¿Ve?
Entonces, como el quinto Elías podrá ministrarle a los gentiles, traerles la Palabra, pero será Moisés, entonces será Moisés y Elías un ministerio doble, podrá ministrarle a gentiles y a judíos, a gentiles le tiene que ministrar primero y cuando termine entonces le ministra a los judíos. Entonces, ¿saben ustedes que a los dos pueblos le ministra antes del rapto? Vean a ver lo que nos dice aquí o no lo dice; porque si no... mire aquí, página 159, de: “Los Sellos,” ahí dice, ese es del Ángel del cual ellos se van a agarrar, dice:
“Entonces Jacob echó mano a algo que era real. Hubo un ángel que bajó del cielo, y Jacob mantuvo sus brazos alrededor del ángel, y allí se mantuvo. Este ángel le dijo: ‘Tengo que irme, ya está amaneciendo.’ Hermano: ¡El Día está por aparecer, está por llegar!”
¿Qué está avisando ahí? La mañana está por llegar. El Sol de la mañana está por salir, eso es lo que dice ahí:
“Tengo que irme, ya está amaneciendo.’ Hermano: ¡El Día está por aparecer, está por llegar!” Pero Jacob dijo: ‘¡No te voy a dejar ir si no me bendices! No puedes partir, yo me voy a quedar contigo. Yo quiero que venga un cambio a mi situación.’ Esos son los ciento cuarenta y cuatro mil, los ganadores de dinero que han sido tan deshonestos con las finanzas, pero cuando ellos por fin ven la cosa verdadera y la posibilidad de agarrarse de ello, allí estarán Moisés y Elías. ¡Amén! Ellos también lucharán con Dios (¿quién? Moisés y Elías), Ellos también lucharán con Dios, hasta que los ciento cuarenta y cuatro mil de las doce tribus de Israel sean llamados y sacados fuera.
Eso sucede justamente antes de comenzar la tribulación. ¡Cuán hermoso! Estos dos profetas, predicarán como Juan el Bautista y les dirán: ‘El reino de los Cielos está a la mano. ¡ISRAEL, ARREPIÉNTETE!”
Ahora, ¿ven la clase de mensaje que ellos le predican? Por eso es que vamos a conocer a Elías y Moisés, ¿por qué? Por el mensaje que ellos predicaran, he aquí la clase de mensaje que ellos predicaran, esa misma clase de mensaje que le predicaran a los judíos nos lo tienen que predicar a nosotros; porque no tienen otro mensaje. Vamos a ver página 361, nos dice:
“En este sexto Sello es cuando Israel recibe el Mensaje del Reino por medio de los profetas de Apocalipsis once. Recuerden: Israel es una nación, un pueblo; ellos son los siervos de Dios. Y cuando Israel dé el paso de entrada al Reino (¿adónde es que va a entrar? No entrar a la edad de Laodicea, sino al Reino), eso tendrá un carácter nacional. En Israel, durante la Edad del Reino (¿en qué edad estamos? Estamos en la Edad del Reino, la Edad eterna), será cuando el Hijo de David se sentará sobre el trono. Por eso fue que aquella mujer en Mateo 15:22 clamó: ‘¡Hijo de David!’ porque Dios le juró a David que Él levantaría su Hijo que tomaría su trono y sería un trono perpetuo, que no tendría fin. Salomón fue el tipo cuando edificó el templo.”
Ahora, vimos ahí la clase de mensaje que van a tener Moisés y Elías para predicarles a los cientos cuarenta y cuatro mil y vemos que eso ocurre, ¿cuándo? Antes de la tribulación y como lo vimos aquí en las edades de la Iglesia, página 30, aquí dice:
“Igual como los judíos trajeron el evangelio a los gentiles, así también los gentiles lo llevaran de vuelta a los judíos y el rapto sucederá.” ¿Ve usted?
Los gentiles lo llevaran el Evangelio a los judíos, ¿cómo? A través de Moisés y Elías; porque ellos son los que le llevan el Evangelio del Reino a los judíos, sacan los ciento cuarenta y cuatro mil, son sellados con el mensaje, ellos agarran y entran adonde entran los escogidos de la Novia, ¿dónde? Vamos a ver, vamos a ver dónde son encontrados ellos. Apocalipsis, déjeme ver si es el 15 o el 10, capítulo 14 dice, mire ahí están los ciento cuarenta y cuatro mil, Sion, ¿cuál es el Monte de Sion? ¿La cima del monte de Sion cuál es? La Edad de la Piedra Angular, ahí arriba . Ahora mire, capítulo 14, dice:
“Después miré, y he aquí el Cordero estaba en pie sobre el monte de Sion...”
Porque el Señor viene y cuando Él viene por segunda Vez, ¿adónde viene? Al monte de Sion, a la cima del monte de Sion y cuando viene; ¿viene cómo? Con Moisés y Elías o en Moisés y Elías, y dice:
“...he aquí el Cordero estaba en pie sobre el monte de Sion, y con él ciento cuarenta y cuatro mil, que tenían el nombre de él...”
Ellos reciben el Nombre del Señor, el Nombre eterno.
“...tenían el nombre de él y el de su Padre escrito en la frente.”
¿Ve? El Nombre de Él y de Su Padre escrito, ¿dónde? En la frente, y si es escrito en la frente es que tenían la revelación del Nombre de Dios.
“Y oí una voz del cielo como estruendo de muchas aguas, y como sonido de un gran trueno.” Miren las cosas que son oídas ahí. Y la voz que oí era como de arpistas que tocaban sus arpas.
“Y cantaban un cántico nuevo delante del trono, y delante de los cuatro seres vivientes, y de los ancianos; y nadie podía aprender el cántico sino aquellos ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de entre los de la tierra.
Estos son los que no se contaminaron con mujeres...”
¿Saben lo que dice el hermano Branham que son mujeres?... Ah entonces no es literal, ¿verdad? No es que no tienen esposa, es que no se contaminaron con denominaciones, con... las rameras que son esas mujeres, ¿ve?
“...pues son vírgenes.”
¿Qué son? Vírgenes oh vea usted, están las vírgenes prudentes los escogidos y hay otras vírgenes.
“...son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero;
y en sus bocas no fue hallada mentira, pues son sin mancha delante del trono de Dios.”
¿Ve usted? ¿Dónde son encontrados? En el Trono de Dios. Ahora miren otro grupo aquí que también son sacados con el ministerio de Moisés y Elías, no es que yo lo digo, es Dios a través del hermano Branham quien lo dijo. Déjeme ver si lo puedo buscar y leer directamente de aquí, para que así veamos la explicación que nos da el hermano Branham, página 51 del “Libro de Citas,” párrafo 439, nos dice:
“Ahora en Revelación 15 (se los iba a leer aquí, ahora aquí está citado y luego la explicación también), ‘Ahora en Revelación (Apocalipsis) 15, el remanente de la simiente de la mujer, el cual eran los santos de la tribulación, que pasaron por la tribulación, fueron hallados. (Mire) parados en la mar (Ahora recuerde que no es un mar literal, de agua literal ahí lo vamos a ver más adelante)...parados en la mar y estaba lleno con fuego, sangre, llamas coloradas lamiendo hacia adelante el fuego de Dios. Ellos habían obtenido la victoria sobre la bestia, Roma, sobre su número, sobre la letra de su nombre y sobre su imagen...”
Usted sabe que ¿es quién? El Concilio mundial de iglesias, aquí lo dice:
“...(la confederación de iglesias) y habían salido. (Ahí tiene otro grupo saliendo.) Y por la predicación de Moisés y Elías, esos dos profetas que aparecerán a Israel para sacar fuera este grupo de gente, los santos del período de la tribulación en este tiempo que serán traídos dentro. (¿quién? Moisés y Elías, la predicación de Moisés y Elías) ¿Ven?, la iglesia es raptada ya... ¿Lo ven ustedes?, ellos ya están en Gloria y aquí están los santos de la tribulación, los santificados, que han... siendo la falta mía y suya: ellos nunca han oído la Palabra. Si ellos la hubieran oído y rechazándola, ellos fueran adelante para el infierno. Ellos hubieran sido echados fuera dentro de la obscuridad exterior porque ellos rechazaron la Palabra. Pero si ellos nunca la han oído, Dios es justo el período de tribulación viene a ellos...
Ahora vamos y comencemos dentro aquí en el segundo verso del capítulo quince. Y yo vi como un mar de vidrio mezclado con fuego, y esos que habían obtenido la victoria sobre la bestia y sobre su imagen y sobre su marca y sobre el número de su nombre, estaban parados en la mar de vidrio teniendo arpas de Dios. (Ahora ustedes ven, ellos nunca habían entrado dentro, pero ellos habían oído la Palabra; ahora escuchen, ven qué clase de doctrina oyeron ellos (¿qué clase de doctrina? Vamos a verlo); ven qué clase de doctrina oyeron ellos; vean si ello compara con la iglesia ahora. Y ellos cantaban el canto de Moisés el siervo de Dios (eso es después que Moisés había cruzado al otro lado) y el canto del Cordero, diciendo, Grandes y maravillosas son tus Obras, Señor Dios Todopoderoso. (¿Quién es ese cordero? Señor Dios Todopoderoso). Justos y verdaderos son tus caminos, Tú, Rey de los Santos. (Ven lo que ellos le reconocieron ser.”
Le reconocieron ¿ser qué? Rey de los Santos, en las edades no fue eso. Pero, ¿qué pasó? Tenían la doctrina ¿de quién? De Moisés, la doctrina de Moisés lo proclamaba como Rey de los Santos, Rey de reyes y Señor de señores, Hijo de David. Bueno vamos a seguir:
“No, ninguna tercera persona de la trinidad...”
Oh mire, Moisés los saca de la trinidad, los saca de creer esa falsedad.
“No, ninguna tercera persona de la trinidad, pero el Señor Dios Todopoderoso, el Rey de los Santos, Escuche. ¿Está usted listo? Verso cuatro) Quién no te temerá, oh, SEÑOR, Elohim, y glorificará (¿Quién es ese? ) no sea que ellos no te teman y glorifiquen tu nombre. Ellos fueron lavados por las mismas aguas por las que ustedes han sido lavados, oyendo la Palabra en la fe (por las aguas de la Palabra, lavados por las aguas de la Palabra), oyendo la Palabra en la fe, y poder de Jesucristo viendo El Todopoderoso. Es la revelación entera, en el principio. La cosa entera está envuelta en la revelación de quién es Jesucristo: Dios hecho carne entre nosotros.”
¿Ve usted la revelación que ellos recibieron? La revelación que les dio, ¿quién? Moisés. ¿Y qué revelación tenía Moisés? La revelación de la Palabra hecha carne en este tiempo; Él tenía la revelación, ¿de qué? De Elohim, de Señor, del Señor, Dios Todopoderoso viniendo en carne humana en el Elías que habría de venir. Él tenía la revelación de quién era ese que vino, Él tenía la revelación de que era el Rey de reyes y Señor de señores, el Hijo de David y les dio esa revelación y les sacó de la trinidad y los libertó y entonces ellos mueren por esa doctrina, ellos lo reconocen, ¿ser cómo? Le reconocen Rey de reyes y Señor de señores, y reconocen el nombre del Rey de reyes y Señor de señores; por eso dice: “¿Quién no temerá Tu Nombre?”
O sea, lo que leímos ahí del Nombre, así que ya usted sabe que le reconocen y reconocen el Nombre de Rey de reyes y Señor de señores. Dice:
“...no sea que ellos no te teman y glorifiquen tu nombre.”
¿Ve? Todo eso ocurre para que ellos, ¿qué? Para que ellos no vayan a fallar en no tener a Dios y no glorificar el Nombre del Señor Elohim, de Dios hecho carne en este tiempo como se hizo carne en el Elías que habría de venir en la luz de la tarde.
Ahora vea, la Palabra estuvo en Elías y Él fue la Palabra hecha carne y cumplió la Segunda Venida del Señor, la primera parte de la Segunda Venida del Señor, por eso él dice, él dice en muchas ocasiones el Señor ha venido ese es el misterio del Séptimo Sello, esa es la Venida del Señor; pero ustedes vieron en las edades y en el capítulo 17 de San Mateo, que la Segunda Venida del Señor tiene dos partes: Elías a un lado y Moisés al otro. Elías a un lado, en el lado del tiempo de la tarde. y Moisés en el tiempo de la mañana, ¿ve?
Entonces encontramos que ese es el orden de la Venida del Señor, lo mismo que es el sexto Sello, es también el séptimo Sello. ¿Ve usted? El sexto Sello, ¿es qué? Dos profetas, el hermano Branham dice: “Tomen ese conocimiento para la apertura del séptimo.” ¿Ve? Entonces vemos que la Palabra vino, toda la Palabra estaba en carne humana en el hermano Branham y entonces fue traída, fue predicada, el Sol brilló y ahora cuando vuelve a brillar por la mañana, ¿qué es? El Sol surgiendo de nuevo. Entonces esa Palabra que fue traída, esa Palabra entonces comenzará a surgir; porque el Sol comienza a surgir, ¿ve?
Entonces esa Palabra comienza a encarnarse en Moisés, ¿ve? Porque dice en “Los Sellos,” por ahí, quinto o sexto Sello, dice que él no podrá hablar nada hasta que no le sea dado para hablar. ¿Qué es eso? Es que en él, en Moisés, o Moisés y Elías (como usted quiera llamar). En Él, la Palabra va a ir viniendo y luego de venir se encarna en Él y entonces la predica y entonces se encarna en los escogidos que tenga que encarnarse y también en los ciento cuarenta y cuatro mil, cuando les llegue su tiempo.
Por eso dice que Apocalipsis 19, (eso es Apocalipsis 19 también), Elías primero y Moisés después, eso es lo que dice el hermano Branham, dice que: “La Palabra en carne.” Ahora vean que la Palabra vino en carne en Elías, eso fue Apocalipsis 19, dijo que recorrería ese camino otra vez, que del Occidente vendría un jinete en un caballo blanco y dice: Cabalgaremos, ¿cómo? Ahí tiene dos, Él en ese otro jinete, Elías cabalgando con Moisés. ¿Dónde van a cabalgar? En un solo caballo, en ese caballo, por eso aparece como un jefe de indio sobre un caballo poderoso y aparece cabalgando una vez y después dice que: “Cabalgará ese camino nuevamente.” Cuando lo cabalga por segunda vez, ¿ve? Que los científicos son confundidos y vienen los terremotos y se estremece la tierra, como el terremoto de California.
Bueno, vigilen eso porque fíjese, cuando Elías... él tiró una piedrita, y Alaska por poco se hunde, y dice: “Eso fue solamente mostrando lo que Dios haría en una escala mayor.” ¿Ve? Cuando aparece en la visión, en la visión ahí cabalgando en ese caballo blanco, cuando aparece por segunda vez, aparece y reprende a los científicos y entonces cabalga en el... [Corte de audio].
...Cabalgaremos, ya eso está cumplido, estaba cumpliéndose esto que dice aquí, como ya lo leí, tengo que ir a la Palabra, ¿por qué? Porque no podemos hablar de otra cosa, porque ya todo lo que va a ser hablado está ahí hablado por Elías. Dice: “Cuando cabalgue otra vez.” Dice: Cabalgaremos, así que Elías con Moisés, los dos, dice: “El Espíritu del Elías de esta edad gentil justamente continuará y entrará a esa Iglesia Judía y llamará a Moisés con Él.”
¿Para qué? Para cabalgar ese camino en el caballo blanco, conforme a Apocalipsis, ¿qué es el caballo de qué? Un caballo es un Poder, y blanco es el color de la Palabra pura. Cabalgando sobre la Palabra pura. Entonces es que en esta segunda ocasión en que Él lo hace es que ocurren las cosas que no ocurrieron en el ministerio del cuarto Elías.
Porque el ministerio del cuarto Elías, luego viene y llama a Moisés y entonces viene a ser el ministerio ¿de qué? Del quinto Elías; es el mismo espíritu ministerial llamando a otro y cabalgando esa senda otra vez. Y entonces, ¿qué pasa? Entonces, ahí todo lo que no ocurrió allá, tiene que ocurrir ahí, las visiones y lo que no se cumplió de las visiones allá que él quiso cumplir el cuarto Elías, cuando venga, porque esto es principalmente a los Estados Unidos, ¿qué están esperando? Él dijo que volvería, Elías el cuarto Elías, dijo que volvería, pues cuando vuelva ... el quinto Elías, ¿por qué? Porque si el cuarto se fue, cuando vuelva otra vez, es la otra Venida y entonces al ser la otra Venida de Elías es el quinto Elías.
Entonces el mismo Espíritu ministerial estará manifiesto, entonces será Moisés y Elías, ¿ve? Moisés y Elías pero con un solo cuerpo. Ahí también entonces ustedes recuerdan que el hermano Branham, una hermana le vio en sueño que había tenido de que lo habían disparado y lo habían matado. Entonces, el hermano Branham siempre creyó que él iba a morir; entonces el ángel le dice: “Pero eso no es ahora (no es en este tiempo), es más adelante.” ¿Ve? Entonces, cuando venga en el quinto Elías; Apocalipsis 11, dice que ahí va a morir, ¿ve? El cuarto Elías cuando venga en la próxima ocasión vendrá a ser el quinto Elías, y ahí es que se cumple todo eso.
Ahora, encontramos que todas esas cosas que no pudieron ser cumplidas y que el cuarto Elías quiso cumplir; porque él tuvo esas visiones y vio, y se vio a él mismo... ¿en la Visión de la Carpa no se vio él allí? ¿Ve? Pero dice que sería un ministerio de él, (del cuarto Elías, ¿ve?) pero que nadie lo vería a él, solamente escucharían su voz. ¿Ve usted?
Entonces nadie lo podría ver a él, pero el Señor le dijo: “Yo te encontraré ahí; porque esa es la Tercera Etapa, eso es la Tercera Etapa y Yo te encontraré ahí.” Y aunque no pueda ser visto con los ojos naturales, él estará ahí, porque el cuarto Elías vendrá y entonces será el quinto Elías. El Espíritu ministerial del cuarto Elías. Entonces vendrá con Moisés, y cumplirá ¿qué? La Visión de la Carpa en lo literal, luego de cumplirla en lo espiritual; porque primero se cumple en lo espiritual y es oída la voz de él, aunque él no es visto, y se cumple lo que él dijo: “Párese a mi lado, y yo me pararé al suyo.” ¿Ve?
Entonces que es Elías, el cuarto Elías parado al lado de Moisés. Entonces es oída ¿qué? La voz del cuarto Elías, porque la voz del cuarto Elías está aquí grabada, ya está todo grabado, será oído nuevamente, es ser oída la voz del cuarto Elías, oída de la manera correcta. No en quizás, sin ton ni son, lo que él habló, sino que oiríamos, oiremos la Palabra realmente como es en el tiempo correspondiente, y entonces ** Moisés... miren el ministerio de Moisés como el hermano Branham dice: “Para que no se le pierda de vista el Elías, de esta Edad, al cuarto Elías mire el ministerio de Él allá; porque las mismas características y la misma forma de ser, esas características se vez cada vez que se manifiesta ese Espíritu.
Ahora, mire también las características de Moisés, una de las cosas y de la vida ministerial de Moisés, una de las cosas fue que Dios lo llamó, él era un libertador predestinado por Dios, ese lugar nadie lo podía tomar, y lo primero es que él trató de llevar a cabo ese trabajo, pero no pudo llevarlo a cabo cuando él trató, en aquella ocasión que estaba en Egipto, ¿dónde estaba? Estaba entre los gentiles, Moisés entre los gentiles siendo un judío, lo mismo que hemos estado viendo primero estará entre los gentiles y después va a los judíos.
Ahora, encontramos que Él trató de libertar al pueblo de Israel, ¿cuándo? ¿Cuánto tiempo tenía? Cuarenta años o menos de cuarenta años, de treinta a cuarenta años, trató de libertar al pueblo y cuando vio aquella discusión aquella pelea entre un hebreo y un egipcio, se fue de parte del hebreo y mató al egipcio y después lo enterró. Y bueno, dice la Biblia, y dice el hermano Branham que Moisés pensaba que ellos entendían que él era su libertador. Pero, ¿qué pasó? No entendieron, no entendieron.
Por lo tanto, al no entender entonces él tuvo que huir, el hermano Branham dice: “La espera no era por causa de Moisés.” Moisés estaba listo, la espera era por causa del pueblo; porque el pueblo tenía que estar clamando y tener hambre de que Dios cumpliera esa promesa.
Porque si era una promesa el pueblo tenía que estar clamando, ¿por qué? Porque cuando un abismo clama hay otro para responder. Dios lo tenía al profeta libertador en medio de ellos, ¿y qué pasó? No lo reconocían.
Entonces encontramos que tuvo Dios que sacarlo de allí y llevárselo para otro lugar, pero Moisés ya de treinta a cuarenta años, ya podía actuar o quería libertarlos, porque él por la enseñanza de su madre, él sabía que Dios había prometido eso y que él era la persona, él tenía todo ese conocimiento, pero con eso no pudo hacerlo; porque el pueblo no captó que él era el hombre y en vez de ponerse de su parte, ¿qué fue lo que hicieron? Uno le dijo: “¿Si eres tú, ¿quién te ha puesto a ti para hacer esto? ¿Quieres tú hacer lo mismo que hiciste con aquel egipcio?” Y Moisés se fue; porque sabía el problema que iba a tener matar a un egipcio por causa de un hebreo, imagínese. Entonces, se fue y ahí dice, entonces que estuvo por allá cuarenta años pastoreando ovejas. Fue pastor de ovejas. Entonces como pastor, entonces Dios le apareció allá en el monte, en la cima del monte.
Entonces allá, Dios le apareció, Dios habló con él y le dijo: “He oído el clamor de mi pueblo y he descendido para libertarlos.” Y entonces le dio la comisión a Moisés de ir y libertar al pueblo: “Ve y libértalo.” ¿Por qué? Porque Dios estaría con Moisés para hacer ese trabajo; y le dio solamente, tenía una vara solamente y entonces la vara, ya ustedes saben lo que tipifica: tipifica la Palabra.
Así como estábamos hablando, unos de los ejércitos aquí de Colombia, estábamos hablando; porque los vimos con unas espadas y en tiempos, imagínese en tiempos, de usar revólveres y rifles, entonces los vimos con unas espadas, entonces ellos nos explicaron que era... eso lo usaban como símbolo más bien; entonces eso representaba el poder, ¿ve? El poder del ejército. ¿Ve usted? La vara que Moisés tenía, ¿qué representaba? El Poder de la Palabra, ¿ve? Porque representaba la Palabra, una vara de por sí no puede hacer las cosas que Dios hizo a través de esa vara, ¿ve? Porque esa vara era tipo de la Palabra, y por la Palabra todo puede ser hecho, no hay ninguna cosa imposible.
Ahora, vemos que Moisés subió al monte, Dios le habló en la Columna de Fuego y luego... fíjese en la parte de arriba del monte fue que Dios le habló. Así será también con Moisés, no le hablará en la parte de abajo, en la edad de Laodicea, ni en ninguna edad, él tiene que subir arriba a la parte de arriba, a la Edad de la Piedra Angular y Dios le hablará ahí y se le revelará a él y entonces él podrá, entonces ir a libertar a sus hermanos. Sacarlos de la tierra de esclavitud (de las denominaciones). Y subirlos a la Edad de la Piedra Angular, ¿ve? Porque Dios le dijo: “Te vas allá y después me los trae aquí mismo (¿ve?) a donde Yo te aparecí.” Y ellos vieron entonces la gloria de Dios.
Ahora vemos que Moisés tenía que ir para allá, Moisés tenía temor. Moisés tenía mucho temor; porque él sabía fíjese: Moisés había salido de Egipto huyendo, había salido de Egipto huyendo; entonces... y lo que había hecho allá, y después a través de él mismo Dios le dice: “Ahora le vas a dar estos mandamientos.” ¿Y en uno sabe lo que está? “No matarás.” Tú saliste de Egipto huyendo porque mataste ahí.” ¿Ve usted? A través de cual Dios dice que: “No matarás,” ya había hecho algo así, y no solamente eso, después Dios le dice: “Acaben con todos esos filisteos, con todo esos feos (espirituales sabe) todos delante de Dios;” porque imagínese hay cosas feas en lo natural que son bonitas delante de Dios, pero hay cosas bonitas aparentemente que son feas delante de Dios: civilización, religión y todo eso que es “gión” eso es feo delante de Dios, ¿ve?
Entonces lo que el mundo llama feo, eso es bonito delante de Dios, ¿ve? Entonces, fíjese Moisés estaba aguantado, Moisés le decía (estaba luchando allí), entonces le estaba poniendo excusas delante de Dios, y a Dios no le agrada eso. Moisés le dice: “Pero, no van a creer en mí.” Ya él sabía la experiencia que había tenido, y que había tratado de libertarlos, y había tenido que huir por causa de lo que había hecho en favor del pueblo de Dios; y sabía que si lo agarraban allá, pues imagínese, volver para el lugar de donde salió huyendo, era un tremendo problema para Moisés.
Entonces se poner a poner excusas delante del Señor, ya imagínese en cuarenta años se le había olvidado hablar el idioma de ellos, en cuarenta años se le olvida a cualquiera de todas las cosas, y si se recuerda de algo, cuando empieza a hablar otra vez, ¿qué pasa? Cuando empieza a hablar, ** tanto que es un problema para hacerse entender. “Mira Señor yo soy tartamudo.” Se pone a ponerle excusas, él sabía la responsabilidad que tenía, cuando Dios lo estaba llamando, él sabía que era Dios, entonces él le dice: “Mira yo soy tartamudo, yo no sirvo para ese trabajo.” Dios se enojó con él; porque Dios quería usarlo así de esa manera para Él glorificarse, ¿ve? Lo quería usar de esa manera para que siempre se sepa que no es con ejércitos, ni con fuerza, sino por el Espíritu del Señor. Y así aunque no fuera bien entendido, sería la Palabra de Dios, ¿ve? Dios hablaría de esa manera; porque en lengua, ¿de qué? Hablaré a este pueblo. ¿Ve usted? Eso es Palabra de Dios. Así que a Dios no le agradó eso; porque Dios quería cumplir en él algo.
Bueno, yo me pregunto Él quiso hablar en esa forma a través de Moisés, qué si no lo pudo hacer allá y lo hace acá cuando venga, Moisés tampoco pudo meter al pueblo de Israel a la Tierra prometida, pero Dios le dijo: “Mira, déjame acabar con estos y yo te pongo sobre un pueblo mejor, un pueblo mayor que va a ser obediente y entonces, pues la cosa va a cambiar.”
Ahora, saben ustedes que Dios nos ha dicho a través del hermano Branham que cuando Dios determina algo Él lo cumple, pero que si el pueblo se arrepiente sobre el cual va a caer el juicio es Él no lo hace en ese tiempo, pero lo hace más adelante. ¿No fue eso lo que pasó con Nínive? El pueblo se arrepintió y Jonás se puso muy triste, pero Dios no destruyó a ese pueblo que se arrepintió, pero más tarde, más adelante, en otro tiempo lo destruyó, porque la sentencia de Dios no puede cambiar, ¿ve?
Es igual que cuando al rey fue y le dijo: “Vas a morir.” Pues entonces, el rey se humilló, lloró y pidió que le añadiera años, Dios se los añadió pero de todos modos más adelante murió, ¿ve? Así también a otro rey, me parece que fue que se humilló cuando el pueblo estaba mal y su casa estaba mal se humilló, y entonces Dios le dijo: “ Bueno, no voy a hacerlo entonces ahora, lo haré más adelante.” Entonces, más adelante no se sabe, no recuerdo en qué tiempo, pero fue más adelante, unos años más adelante Dios cumplió eso que Él dijo que iba a cumplir, pero como aquel de aquel tiempo se humilló, pues no lo cumplió en ese tiempo y lo cumplió más adelante. ¿Ve usted?
Ahora, ¿qué cuando venga Moisés? ¿Cumplirá Dios lo que Él quería cumplir? ¿Hablará en boca, en lengua de tartamudo? Bueno, usted piensa: “Bueno, ¿tendrá que ser un gago o un tartamudo?” Bueno, yo le pregunto a usted en esta mañana, ¿cómo hablaría usted , si estoy tratando de hablar chino o griego o si supiera un poquito de inglés? Tratando de hablar inglés o predicando en inglés, qué mucho no hablaría, ¿verdad? Bueno, no necesariamente tiene que ser una persona que ser tartamudo para hablar gago, ¿ve? Es más nuestro propio idioma algunas veces pues, hasta gageamos muchísimo, no encontramos como sacar la palabra y gageamos muchísimo, ¿cuántos más en otro idioma?
¿Qué de la Tercera Etapa cuando venga? El final de la Tercera Etapa que el hermano Branham dice que será, ¿en qué? En un idioma desconocido, ¿para quién? Para el hermano Branham; porque el hermano Branham hablaba inglés, ¿ve? En un idioma desconocido. Y si era en un idioma desconocido que... porque esta Tercera Etapa en un idioma desconocido se cumple en Moisés; porque en un idioma desconocido tiene que ser hablado en algo, tiene que ser predicado algo y cuando es predicado, pues es un idioma desconocido. ¿Qué es? Es la Luz de la tarde apareciendo por la mañana, sale de un sitio o se oculta en un sitio y aparece por otro, alumbrando.
Entonces encontramos que la Tercera Etapa es un idioma desconocido, ¿ve? La Tercera Etapa es la Palabra Hablada; un mensaje saliendo. Entonces esa fase final, dice el hermano Branham que él no la pudo interpretar, no pudo saber, pero dice es... déjeme ver, pero es la Tercera Etapa, no la para de entender, pero sé que es esa Etapa surgiendo; así que no hay problema dice aquí:
“Y allá en el Cañón Sabino, Él me dijo: ‘Esta es la Tercera Etapa.’ Hay tres cosas muy grandes que acompañan la Tercera Etapa (¿Ve que son tres partes que tiene la Tercera Etapa?). Una de ellas se abrió ayer, la otra hoy (ve la Luz de la tarde en Elías vemos que una se abrió ayer, la otra hoy dice él), ( ahora, esas dos están en el pasado) y queda una cosa que no puedo interpretar.” Queda una cosa la fase final, la fase final, pero una cosa no pudo interpretar porque está en un idioma desconocido. ¿Por qué será nuestro hermano Branham quería hablar un idioma, verdad? Él decía de uno quería hablar. Y si él llega a saber hablar ese idioma aquí no estaría entonces escrito: “Está en un idioma desconocido para mí.” Sino que podría decir el idioma que era y lo que fue hablado. Sigue diciendo... (si ya vamos a remediar esto para tomarlo esto otro, dice no lo podemos dejar cortar así de golpe, vamos a terminarlo así, dice:
“ ...y toda una cosa que no puedo interpretar porque está en un idioma desconocido, pero estaba allí parado... (¿cómo? Parado) y miré directamente, y ésta es la Tercera Etapa, lo que viene, y es Espíritu Santo de Dios, ¡Oh, hermano! Por eso fue que todo el Cielo estuvo en silencio.”
Mírelo aquí parado, vamos a verlo parado; porque dice que estuvo allí parado y vio... mírelo aquí, en esa misma página en el párrafo anterior, ahí, mírelo ahí dice:
“En eso vino y me dijo: no puedes enseñar álgebra a los bebés pentecostales, déjalos, entonces me alzo y me colocó en un lugar muy elevado (lo colocó, ¿dónde? En un lugar muy elevado, allá lo tiene colocado, allí lo tiene parado en un lugar muy elevado), donde había una reunión, parecía una carpa o una especie de Catedral, yo miré y hacia un lado parecía que había una cajita, un lugar pequeño y esa Luz que ustedes ven sobre la fotografía, estaba hablando con alguien más arriba de donde yo estaba. . . (está allí parado viendo todo eso), se fue volando de donde yo estaba (oh se fue volando de donde él estaba) y se fue a posar sobre la carpa y dijo: “Te encontraré allí, esto será la Tercera Etapa y no se lo dirás a nadie.”
La Luz, el Pilar de Fuego se fue de él, ¿ve? y se fue para otro lugar. Y él parado allí está viendo todo eso, todo eso y el ángel le dice: “Esa es la Tercera Etapa.” ¿Vieron ustedes que la Tercera Etapa estaba en un idioma desconocido? Entonces el Pilar de Fuego se fue para otro lugar. ¿Qué es eso? El Espíritu ministerial del cuarto Elías volando hacia Moisés; y entonces viene a ser el quinto Elías y el segundo Moisés. ¿Ve usted?
Entonces, él estuvo allí parado y dice que vio eso, pero el ángel le dice: “Tú no vas a decir... no le digas nada a nadie, no se los digas a nadie.” Él dijo, el hermano Branham dijo: “De eso no habrá, ¿qué? No habrá imitación,” porque el diablo no sabe lo que es eso, él no lo entiende, las gentes no le verán, solamente le podrán oír, ¿ve usted?
Ahí usted tiene, ¿qué? La Tercera Etapa, la fase final de la Tercera Etapa prometida en un idioma desconocido, y si nuestros amados hermanos americanos vieran lo que están esperando, si ellos vieran que eso vendrá en un idioma que ellos no conocen, ¡oh si ellos vieron eso! No estarían tan descuidados como están creyendo que lo tienen todo; porque las primeras dos partes de la Tercera Etapa fue en un idioma que ellos conocían y se les pasó por alto. La última fase de la Tercera Etapa será en un idioma que ellos ni conocen; porque si no lo conocía el hermano Branham... sino lo entendieron las primeras dos fases en inglés, entonces en un idioma desconocido menos lo van a entender, a menos que no les sea interpretado o traducido a ellos. Si no entendieron las primeras dos fases de la Tercera Etapa en Elías, menos entenderán la parte final tercera de la Tercera Etapa en Moisés. ¿Ve usted?
Porque dice que la Tercera Etapa estaba en un idioma desconocido, cómo no va a estar la Tercera Etapa en un idioma desconocido sino es algo que es hablado o predicado, ¿ve? Y si es algo que es hablado y predicado, Dios no puede hablarlo o predicarlo a menos que no sea a través de hombres, y si es a través de hombres Dios tiene ¿qué? A Elías para el tiempo de la tarde para traer la Palabra y a Moisés en el tiempo de la mañana para traer la Palabra; en el tiempo de la tarde se cumplieron dos fases de la Tercera Etapa, y en el tiempo de la mañana en Moisés, ¿se cumple qué? La última fase en otro idioma. ¿Ve usted?
Encontramos que estamos en un tiempo más grande y más glorioso de lo que nos podemos imaginar, y ahora en esta mañana no hemos llegado a la mitad quizás, nos falta un poquito, lo vamos a dejar para... vamos a dar un recesito, digerir lo que hemos oído, y después continuaremos, lo continuaremos después; porque imagínese mientras allá el mundo está celebrando algo, nosotros acá estamos viviendo una realidad.
Vamos a estar puestos en pie, y entonces luego continuaremos.
Cantan corito *“Sólo Creed.”*
Corte de audio
“LA VENIDA DEL REINO.”