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| Palabras de saludo | 2007-06-23 | 1 | La Paz | BO | 00:00:00 | false | true |
Muy buenas tardes ministros, compañeros en el Reino del Señor Jesucristo. Es una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, como también estuve en la actividad anterior, en donde estuvimos viendo el Programa del Reino de Dios y de la Paz en Su Reino.
No hay paz para el malo, para el impío, [Isaías 57:21] dice la Escritura. Y entonces, ¿cómo es que el ser humano puede, como individuo, obtener la paz? Entrando al Reino de Cristo bajo el Nuevo Pacto. Y todo eso está bajo la expiación de Cristo, para que el hombre pueda volver a tener paz en su alma y vimos cómo también para naciones.
Las naciones, para que tengan la paz perpetua, tienen que entrar al Reino que va a ser establecido, el Reino del Mesías; lo cual, pues, ya todo está preparándose para lo que está durante dos mil años en la esfera espiritual, venga en la esfera física para Israel, y para todas las naciones, y para los creyentes en Cristo, en donde recibiremos nuestra transformación; y entonces entraremos al Reino en la forma física también; y entonces ahí en ese Reino, pues habrá paz para todos los creyentes, la paz en la parte física también.
Así es que hemos visto hoy ese Programa Divino y cómo se ha venido desarrollando hasta nuestro tiempo; y la parte que corresponde a nuestro tiempo, donde habrá el cambio de dispensación también, y donde hay el cambio del Reino espiritual viniendo a ser el Reino físico también, que es el Reino de David.
Para este tiempo, sabemos que va a haber una manifestación plena de Dios, que será la adopción de los hijos de Dios, la manifestación de los hijos de Dios, en donde el poder de Dios estará manifiesto en toda su plenitud; y que el hermano Branham pues lo vio, vio esa etapa, y la señaló como la Tercera Etapa, en donde también él vio esa manifestación en un cuartito pequeño que estaba dentro de una Carpa.
O sea que todo eso va a llegar hasta… va a culminar ahí, en ese cuartito pequeño, donde estará la manifestación plena de Dios.
Y para que una cosa llegue a esa parte culminante: tiene que comenzar primero gradualmente todo, yendo en forma gradual, hasta llegar a esa plenitud del poder, que es de Dios.
En palabras más claras: que no va a surgir todo eso sin que esté conectado a la Iglesia y que esté conectado a la edad correspondiente, bajo el ministerio correspondiente a la edad presente.
O sea que no puede venir otro que está en una edad pasada para cumplir eso; sino que Dios lo va a cumplir en la edad que corresponde, con el mensajero que corresponde a esa edad, y con el pueblo que corresponde a esa edad.
Y ahí, pues, muchos millones de personas van a ser beneficiadas; y el pueblo hebreo también va a ver esa manifestación.
En Puerto Rico, pues, se ha estado trabajando para la construcción de un nuevo auditorio, una Carpa Catedral grande. Él vio algo grande, pues no vamos a construir una cosa pequeña, porque no vamos a esperar que se cumpla una cosa que fue vista en un lugar grande, que se cumpla en algo pequeño. Lo pequeño será el cuartito pequeño. Pero estará dentro de algo grande que será construido. Así es que estamos esperando, pues que Dios, pues, obre y eso podría repetirse en otros países también y esperamos, pues, que Dios obre a lo menos que aparezca el primero y tenemos que trabajar para eso.
Yo aprecio mucho todo lo que han estado haciendo ustedes y todos los ministros y congregaciones de otros países para que Puerto Rico, pues, tenga un lugar así como fue hablando, un lugar grande en donde esperamos, pues, grandes bendiciones de Dios.
Dios lo prometió, Dios lo va a cumplir. A nosotros nos toca hacer el lugar, como le tocó a Moisés construir el tabernáculo, y como le tocó a Salomón construir el templo.
Bueno muchas gracias por toda la colaboración de ustedes hacia Puerto Rico para ese propósito del terreno y del auditorio. Oren mucho por Puerto Rico y por toda esa labor para que pronto esté todo construido. Mientras más tiempo uno espera, más caro salen las cosas. Así es que esperamos tenerlo y que Dios, pues, disponga de él para el momento que Él lo necesite.
Eso pues, todo eso es una obra de fe creyendo lo que fue dicho y trabajando basados en lo que fue dicho. Por lo tanto, es una obra de fe y eso es fe viva, fe que está materializando lo que fue hablado.
Bueno, que Dios les bendiga, que Dios les guarde y ya nos veremos muy pronto, nos veremos nuevamente y oren mucho por mí, porque hay mucho trabajo por delante. Ya me encontraré con Miguel el sábado, Dios mediante, en Brasil. Nos encontraremos allá en San Pablo.
Y oren también mucho por Miguel, él tiene mucho trabajo por delante también, y por Joel también. Estén brazo a brazo junto a Miguel, junto a Joel y en todo este programa de AMISRAEL pues se está trabajando también. Pero sepan hacer la separación de lo que es AMISRAEL y de lo que es, pues, la Iglesia. Bueno, no mezcle las cosas para que así, pues, todo funcione correctamente.
Bueno, que Dios les bendiga, les guarde y con nosotros Joel por aquí.
(Joel habla)
Claro, digamos que es uno de los brazos, uno de los brazos del trabajo en el Programa Divino que tiene que ver con el mundo, con las demás Iglesias y tiene que ver con Israel también. Y todo, pues, bien en orden y sin fanatismo, siendo realistas y basados en lo que ya ha sido hablado en la Escritura.
Bueno, el delegado de AMISRAEL acá es Joel, y junto a su esposa, pues, ella por cuanto está con él brazo a brazo, pues los dos son los que están a cargo. Y también su hija Gaby y el esposo de Gaby, están brazo a brazo con él. Así es que son los co-delegados. Está bueno que esté así en familia, ellos, pues, se amanecen trabajando, son gente de trabajo.
Desde que conozco a Joel, pues, siempre ha sido una persona de trabajo y que se ha mantenido en el Mensaje sin fanatismo, se ha mantenido bien, junto a Miguel, trabajando en la Obra del Señor.
Manténganse, pues, unidos, no se separen para formar otros grupitos de ministros, sino manténgase unidos, unidos trabajando en la Obra del Señor y recibiendo la dirección correcta para que así pues, todo funcione perfectamente como debe suceder.
“PALABRAS DE SALUDO”.