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title: 'Fundamentados en Jesucristo'
date: 2001-07-23
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city: Teziutlán
state: Puebla
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Muy buenas noches, amados amigos y hermanos presentes aquí en Teziutlán, Puebla; es para mí una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final.

Para lo cual quiero ir a los tiempos de nuestro amado Señor Jesucristo, y escuchar todos aquí, lo que habló Cristo en los días de Su ministerio terrenal a Sus Apóstoles, y la bendición que habló sobre el Apóstol San Pedro. Dice en San Mateo, capítulo 16, versos 13 en adelante:

“*Viniendo Jesús a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?*

*Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas.*

*El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?*

*Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.*

*Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.*

*Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.*

*Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.*

*Entonces mandó a sus discípulos que a nadie dijesen que él era Jesús el Cristo.”*

Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla.

Nuestro tema es: **“FUNDAMENTADOS EN JESUCRISTO.”**

¿Por qué se requiere que estemos fundamentados en Jesucristo? Porque Jesucristo es el único Hombre con Vida eterna, que le puede dar Vida eterna a todo ser humano. Los demás seres humanos no pueden ofrecerle Vida eterna a ninguna persona porque no tiene Vida eterna, no son eternos; no importa lo mucho que hayan estudiado en las universidades, no tienen Vida eterna y por consiguiente no pueden ofrecerle Vida eterna a las personas.

Le pueden ofrecer del conocimiento que tienen, dándoles clases, orientando a las personas, pero darle Vida eterna a otras personas no pueden, porque no tienen Vida eterna.

Por lo tanto, para la persona tener Vida eterna tiene que estar fundamentado en Jesucristo, que es la Vida eterna. El dijo: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida; y nadie viene al Padre sino por mí.”

Por lo tanto ninguna persona puede llegar a Dios, al Padre Celestial, y obtener Vida eterna, excepto por medio de Jesucristo, nuestro Salvador.

El dice que El tiene ovejas que el Padre le ha dado, y El dice que El les dará Vida eterna, ¿ven? El es el único que puede darle Vida eterna al ser humano.

El ser humano de sí mismo no puede darse Vida eterna, por lo tanto, no es por las buenas obras que la persona haga, que la persona pueda vivir eternamente.

La persona de sí misma solamente puede vivir el tiempo que le permita su cuerpo físico, algunas veces logran llegar hasta 100 años algunas personas, pero al final siempre, siempre mueren, porque el cuerpo físico no tiene Vida eterna, la persona no tiene Vida eterna, por lo tanto no le puede impartir Vida eterna a su cuerpo físico y por eso se muere.

El ser humano, por consiguiente necesita una persona que tenga Vida eterna y que le imparta Vida eterna a esa persona que quiere vivir eternamente; y solamente hay una persona con Vida eterna y que es la Vida eterna, y es nuestro amado Señor Jesucristo.

Para poder vivir eternamente necesitamos a Jesucristo, necesitamos estar fundamentados en Jesucristo, nuestro Salvador, ése es el Hombre con Vida eterna, que le imparte Vida eterna a los creyentes en El.

“*El que oye mi palabra, y cree al que me ha enviado, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.”* (San Juan, capítulo 5, verso 24) También en San Juan, capítulo 3, dice Cristo desde el verso 13 en adelante:

“*Nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo; el Hijo del Hombre, que está en el cielo.*

*Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado,*

*para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”*

¿Cómo podemos obtener Vida eterna? Por medio de Jesucristo, nuestro Salvador, siendo fundamentados en Jesucristo obtenemos Vida eterna, El nos imparte Vida eterna. Y así la persona no morirá, sino que vivirá eternamente.

Los que mueren ¿qué sucede? Son las personas que no están fundamentadas en Jesucristo, y por consiguiente el tiempo de vida en un cuerpo físico, es el tiempo que pasan aquí en la Tierra en el cuerpo físico, y luego terminan sus días aquí en la Tierra y van a vivir a otra dimensión.

Y por cuanto hay solamente dos dimensiones a las cuales el ser humano puede ir a vivir después que vive aquí en la Tierra y muere, y esas dos dimensiones son: el Cielo y el infierno, y a una de esas dos dimensiones la persona va.

Si no es un creyente en Jesucristo va al infierno al morir, y allí vive en su cuerpo espiritual que es parecido al cuerpo físico pero es de otra dimensión, y allí está preso, encarcelado en esa dimensión, en ese mundo espiritual hasta que sea resucitado para ir al juicio final, y ser juzgado y condenado y echado luego al lago de fuego donde será quemado en cuerpo, en espíritu y en alma también, y dejará de existir como si nunca hubiese existido.

Y es algo triste y doloroso, que personas que están conscientes que existen, vayan a pasar por esa etapa de dejar de existir; pero solamente podemos decir una cosa, y es que toda persona ha tenido la oportunidad de evitar morir eternamente, ha tenido la oportunidad de obtener Vida eterna por medio de Jesucristo, nuestro Salvador.

Por lo tanto los que dejarán de existir, los cuales serán echados al lago de fuego, estarán recibiendo lo que merecen ellos por ser incrédulos a Jesucristo, nuestro Salvador, por no haber buscado la Vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Salvador.

Se predica el Evangelio de la Gracia, dándole a conocer a todo ser humano que la única esperanza de Vida eterna es Jesucristo, nuestro Salvador, para que así esté al alcance de toda persona la Vida eterna que Cristo, nuestro Salvador, le otorga gratuitamente a toda persona que lo recibe como su Salvador, lava sus pecados en la Sangre de Jesucristo, y es bautizado en el Nombre del Señor Jesucristo en agua y Cristo le da el bautismo del Espíritu Santo, y la persona así obtiene el nuevo nacimiento del cual le habló Cristo a Nicodemo, en el capítulo 3 de San Juan, cuando le dijo:

“*De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.”*

Nicodemo pensando en la Vida eterna y en entrar al Reino de Dios, porque Nicodemo es un hombre muy religioso y uno de los grandes lideres de Israel, un gran maestro, él no entendía este misterio del nuevo nacimiento, y le pregunta a Cristo: “¿cómo puede hacerse esto? Puede acaso el hombre ya siendo viejo...”

Por lo que vemos ahí ya Nicodemo estaba avanzado en edad: “...ya siendo viejo, puede caso entrar en el vientre de su madre y nacer de nuevo?” O sea, que Nicodemo pensó en un nuevo nacimiento a través de una mujer, un nuevo nacimiento así como hemos nacido aquí en la Tierra.

Pero Cristo le está hablando de un nuevo nacimiento que Cristo en Espíritu Santo va a producir en la persona creyente en Cristo. Y le pregunta: “¿Puede acaso el hombre ya siendo viejo, entrar en el vientre de su madre y nacer?” Cristo le dice:

“*De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de Agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.”*

Y ahora, ¿cómo entramos al Reino de Dios? Creyendo en Cristo como nuestro Salvador, lavando nuestros pecados en Su Sangre, siendo bautizados en agua en Su Nombre y recibiendo Su Espíritu Santo, y así nacemos del Agua y del Espíritu, y entramos al Reino de Dios y venimos a formar parte de la Iglesia del Señor Jesucristo.

Así somos sacados del reino de las tinieblas y colocados en el Reino de nuestro amado Señor Jesucristo con Vida eterna.

Y ahora, al nacer de nuevo recibimos el cuerpo angelical teofánico de la sexta dimensión; por lo cual al morir físicamente el cuerpo físico del creyente en Cristo, va a vivir la persona en cuerpo angelical al Cielo, al Paraíso, que es la sexta dimensión, porque estaba bien fundamentado en Jesucristo nuestro Salvador.

Toda persona tiene que estar bien fundamentada para que vaya al Cielo a vivir con Cristo cuando terminen sus días terrenales.

Y ahora, todo lo que vivirá eternamente tiene que estar fundamentado en Jesucristo, así es para toda la Creación, para el universo completo, pues Cristo es la Piedra Angular de toda la Creación.

Y por medio de Cristo, el Angel del Pacto, el Verbo, creó Dios todas las cosas, por lo tanto toda esa Creación está bien fundamentada, está fundamentada en Cristo.

El fundamento de la Creación es Jesucristo nuestro Salvador, porque El fundó toda la Creación, las galaxias, los sistemas solares, El fundó toda la Creación, todo el universo, y por consiguiente está bien fundado el universo. El fundó el planeta Tierra también.

El fundó la raza humana, por lo tanto la raza humana tiene la oportunidad de ser restaurada a la Vida eterna por medio de Jesucristo nuestro Salvador, y permanecer bien fundada en Jesucristo, que es el fundador de la raza humana.

Y El en Su Primera Venida vino como la cabeza de una Nueva Raza con Vida eterna, Cristo es el fundador de la Nueva Raza con Vida eterna. Y esa Nueva Raza con Vida eterna de etapa en etapa ha sido conocida como la Iglesia del Señor Jesucristo.

Por eso es que la Iglesia del Señor Jesucristo estaría fundada sobre la revelación de Jesucristo en y para cada etapa, para cada edad de Su Iglesia, tendría la revelación de Jesucristo en cada etapa, en cada edad; y cada miembro de la Iglesia de Jesucristo tendría la revelación de Jesucristo para cada etapa, para la etapa en que le tocaría vivir a cada miembro de la Iglesia del Señor Jesucristo.

Tenemos todos que estar bien fundamentados, como la construcción, la casa que el hombre prudente construyó, fundó, la cual la fundó sobre la roca, y vinieron tempestades, vinieron ríos, tormentas, y dio sobre aquella casa y no cayó porque estaba fundada sobre la roca.

Y la Roca ahí representa a Cristo, la revelación de Cristo para el tiempo en que a la persona le toca vivir; por lo tanto nosotros como una casa espiritual, tenemos que estar bien fundados, fundados sobre Jesucristo.

Y la Iglesia del Señor Jesucristo como una Casa Espiritual, un Templo Espiritual, está fundada la Iglesia de Jesucristo, el Templo Espiritual de Cristo está fundada sobre Jesucristo, la Roca.

La revelación de Jesucristo es la Roca, la Piedra sobre la cual está fundada la Iglesia de Jesucristo, sobre la cual está fundamentada cada persona como individuo, cada creyente en Cristo, cada miembro de la Iglesia de Jesucristo. Y está fundado el universo completo también, sobre Jesucristo, la Roca de los siglos.

Y ahora, podemos ver porqué es tan importante estar fundamentados en Jesucristo; todo lo que está fundamentado en Jesucristo vivirá eternamente, todo lo que no está fundamentado en Jesucristo dejará de existir.

Por lo tanto, todo ser humano quiere una Vida eterna; no quiere vivir un tiempo acá y después dejar de existir, para que pueda vivir eternamente, pueda continuar existiendo por toda la eternidad su alma, tiene que estar fundamentado en Jesucristo.

Cristo dijo en San Marcos, capítulo 16, versos 15 en adelante, antes de Su partida al Cielo, esto lo dijo Cristo luego de estar resucitado. Capítulo 16, versos 15 al 16 de San Marcos:

“*Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.*

*El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.”*

Ahí podemos ver claramente que hay solamente dos cosas frente al ser humano: La Vida eterna o la condenación. Y Cristo dice: “El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere será condenado.”

Todo ser humano debe saber si quiere ser condenado, o si quiere ser salvo y vivir eternamente.

Todo ser humano tiene que enfrentarse a esta realidad, porque Dios ha colocado delante del ser humano la Vida eterna y la muerte; ha colocado el Arbol de la Vida delante del ser humano, y ha colocado también el árbol de ciencia del bien y del mal, que es el árbol de la muerte.

Por lo tanto, el ser humano tiene que enfrentarse a esta realidad, porque de cómo enfrente esta realidad será su futuro después que termine su vida en el cuerpo de carne.

Y ahora, es muy importante comprender todo este misterio de porqué es necesario estar fundamentados en Jesucristo.

Vean ustedes en San Lucas, luego que Jesucristo resucitó en el capítulo 24 de San Lucas, versos 44 en adelante, dice:

“*Y les dijo: Estas son las palabras que os hablé, estando aún con vosotros: que era necesario que se cumpliese todo lo que está escrito de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos.*

*Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras;*

*y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día;*

*y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén.*

*Y vosotros sois testigos de estas cosas.*

*He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.”*

Ahora, en la predicación del Evangelio se le enseña a todo ser humano que el arrepentimiento y el perdón de pecados es en el Nombre del Señor Jesucristo, Cristo dijo que se predicase en Su Nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados.

Por lo tanto, una persona se arrepiente de sus pecados al recibir a Cristo como su Salvador, al recibir a Cristo como su Salvador arrepentido de sus pecados, confiesa a Cristo sus pecados, es bautizado en agua en el Nombre del Señor Jesucristo, la persona lava sus pecados en la Sangre de Cristo, recibe el perdón de los pecados y recibe Vida eterna.

Recibe el Espíritu de Cristo, el Espíritu Santo, el Espíritu de Vida, y la persona ya ha sido sellada con el Sello del Dios Vivo, el Espíritu Santo, ha sido sellada con Vida eterna, por lo tanto ya esa persona vivirá por toda la eternidad; aunque su cuerpo físico muera Cristo lo resucitará en el Día Postrero, y le dará un cuerpo eterno, inmortal y glorificado, igual al cuerpo glorificado de Jesucristo, y será un cuerpo jovencito para toda la eternidad.

Y vivirá la persona en una condición de joven, representando siempre de 18 a 21 años de edad, será un cuerpo con Vida eterna, inmortal, incorruptible, un cuerpo glorificado, como el cuerpo glorificado de nuestro amado Señor Jesucristo. Toda esta bendición está señalada por Dios para los que están fundamentados en Jesucristo.

Por lo tanto, el ser humano no puede perder esta bendición de Dios tan grande, que hay para los que se fundamentan en Jesucristo; por lo tanto esté usted fundamentado en Jesucristo como individuo, y esté en el Cuerpo Místico de Cristo, que es Su Iglesia, Su Cuerpo Místico de creyentes que están fundamentados en Jesucristo.

Y ahora, para este tiempo final miramos hacia la historia de la Iglesia del Señor Jesucristo, y podemos ver que ha pasado por diferentes edades, etapas, y en cada etapa ha sido bien fundamentada, porque ha estado en la Roca de la revelación de Jesucristo, la Roca de la revelación de quién es Cristo en cada edad.

Y ha sido fundamentada porque ha sido edificada la Iglesia en cada edad, o sea, cada etapa de la Iglesia ha sido edificada sobre la revelación de Jesucristo para cada edad enviada por Cristo, por el Espíritu Santo a través del Mensajero de cada edad.

Y ahora, vean ustedes cómo está fundamentada cada etapa de la Iglesia de Jesucristo: está fundamentada sobre la revelación de Jesucristo correspondiente a cada edad.

Pablo dijo en Primera de Corintios, capítulo 3, verso 10: “Yo como perito arquitecto puse el fundamento...” Vamos a leer para que tengan así el cuadro claro de este misterio del Reino de Dios, dice... vamos a comenzar, Primera de Corintios, capítulo 3, verso 9 en adelante, dice:

“*Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.*

*Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica.*

*Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.”*

Y ahora, podemos ver que el fundamento sobre el cual está fundada la Iglesia, es Jesucristo, es la revelación de Jesucristo, de quién es Jesucristo, sobre la cual está fundada la Iglesia de Jesucristo.

Y cada edad es fundada, construida sobre la Roca de la revelación de quién es Jesucristo en cada edad. Esa revelación viene la Iglesia de Jesucristo en cada edad, a través del Espíritu Santo manifestado en el Mensajero de cada edad, y son llamados y juntados los escogidos de cada edad, en la parte correspondiente a cada edad.

Y son así colocados en la edad que les corresponde, y es fundada cada edad de la Iglesia sobre la Roca de la revelación de Jesucristo para esa edad, la cual viene por medio del Mensajero de cada edad. Y así es para nuestro tiempo también, en donde Cristo, en donde Cristo está fundando la etapa de la Edad de la Piedra Angular, está siendo fundada sobre la Roca de la revelación de Jesucristo para nuestro tiempo.

Por lo tanto, la edad correspondiente a este tiempo es una edad que está bien fundamentada, está fundamentada en Jesucristo; y los miembros de esta edad están como individuos fundamentados en Jesucristo. Y para que podamos entender bien, Jesucristo dice con esa Voz de Trompeta en Apocalipsis, capítulo 4, verso 1:

“*Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas.”*

¿Y a dónde vamos subir? Cada etapa de la Iglesia ha sido como una escalera en donde Cristo ha estado en el Angel Mensajero, llamando y juntando a Sus escogidos, los ha llamado a subir al escalón correspondiente a cada edad.

Y ahora, nos llama a subir a la Edad de la Piedra Angular, que es la Cámara del Rey, es el lugar más importante del Templo Espiritual de Cristo; por eso en el libro de Cantares, dice: “El Rey me metió en Su Cámara, y Su bandera sobre mí fue amor.” Y también habla del Vino que es el estímulo causado por la revelación de Dios para nuestro tiempo.

Y ahora, estando nosotros en la etapa más importante, Cristo en la Cámara del Rey, que es la Edad de la Piedra Angular; así como la Cámara del Rey en el Templo es el lugar santísimo donde está el Rey, Dios en Su manifestación en el Angel del Pacto, sobre el propiciatorio en el tabernáculo que construyó Moisés y el templo que construyó el rey Salomón, y así como está en el Cielo en el Lugar Santísimo sobre Su Trono.

Ahora, Cristo en la Edad de la Piedra Angular se encuentra en el Lugar Santísimo de ese Templo Espiritual, ese Templo Espiritual es Su Iglesia; y el Lugar Santísimo de ese Templo es la Edad de la Piedra Angular, esa es la Cámara del Rey, y esa Cámara del Rey: la Edad de la Piedra Angular del Cuerpo Místico de Cristo, en este tiempo está bien fundamentada, porque está fundamentada sobre Jesucristo nuestro Salvador.

Y ahora, encontramos que hemos sido llamados a subir a la Cámara del Rey, a subir a la Edad de la Piedra Angular, a subir al Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo, para escuchar Su Voz dándonos a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto.

Y así como El estuvo hablando en cada edad por medio del Mensajero de cada edad, Cristo en Espíritu Santo estuvo en el Mensajero de cada edad, revelándole a Su pueblo Su Palabra para así fundar cada edad, y fue fundada sobre la revelación de la Palabra de Cristo para cada edad, y eso es estar fundados sobre Jesucristo.

Y ahora, ¿por medio de quién nos estará dando Cristo la revelación del Día Postrero, para estar bien fundados y conocer todas estas cosas que deben suceder pronto en este tiempo final? Veamos por medio de quién promete Dios, promete Cristo que nos dará a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, las cuales El prometió darlas a conocer a nosotros en este tiempo final. Apocalipsis 22, verso 6, dice por medio de quién nos dará a conocer todas estas cosas que deben suceder, dice:

“*Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto.”*

¿A quién ha enviado? A Su Angel, ¿para qué? Para mostrar a Sus siervos las cosas que deben suceder pronto. ¿Y quién lo ha enviado? El Señor, el Dios de los espíritus de los Profetas. El Dios de los espíritus de los Profetas es el que ha enviado a Su Angel.

Y este Angel que le dio a Juan la revelación del Apocalipsis es un Profeta, el cual en ese tiempo estaba en cuerpo angelical, cuerpo teofánico. Y para este tiempo final Jesucristo ha prometido enviar Su Angel a Su Iglesia. Apocalipsis 22, verso 16, tiene Cristo aquí esa promesa para Su pueblo, para Su Iglesia, dice:

“*Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.”*

¿A quién dice que ha enviado? ¿A quién Jesucristo dice que ha enviado? A Su Angel. ¿Para qué dice que lo ha enviado? Para dar testimonio de estas cosas en las iglesias.

Ese es el Angel Mensajero de Jesucristo, el Profeta final de Jesucristo, enviado a la Iglesia del Señor Jesucristo para darle la revelación de Jesucristo, de todas estas cosas que deben suceder pronto, y así quedar edificada la Iglesia de Jesucristo en la Edad de la Piedra Angular, sobre la revelación de Jesucristo para este tiempo final; y así estar la Iglesia de Jesucristo en la Edad de la Piedra Angular bien fundamentada, fundamentada en Jesucristo; y así también cada miembro de la Iglesia del Señor Jesucristo estar bien fundamentado, estar fundamentado en Jesucristo, y estar conociendo todas estas cosas que deben suceder pronto en este tiempo final.

Y ahora, para todos los que están fundamentados en Jesucristo, colocados en el Cuerpo Místico de Cristo, Cristo por medio de Su Angel Mensajero nos da a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, y nos habla de la resurrección de los muertos en Cristo, la cual está muy cerca, y de la transformación de nosotros los que vivimos, para recibir nosotros un nuevo cuerpo, un cuerpo glorificado, eterno, inmortal e incorruptible, igual al cuerpo glorificado de nuestro amado Señor Jesucristo.

Y con ese Mensaje con el cual Cristo envía a Su Angel revelándonos, dándonos a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, somos preparados para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero, con esa revelación que El envía por medio de Su Angel, nos da la fe, la revelación para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero, al Cielo, a la Casa de nuestro Padre Celestial.

Ahora, hemos visto porqué es tan importante estar fundamentados en Jesucristo.

Si alguna persona de las que está aquí presentes no ha recibido a Cristo como su Salvador, no ha lavado sus pecados en la Sangre de Cristo, no ha sido bautizado en el Nombre del Señor Jesucristo en agua, y no ha recibido Su Espíritu por consiguiente, tiene la oportunidad antes que terminen sus días terrenales en este planeta Tierra, tiene la oportunidad de recibirlo como su Salvador, lavar sus pecados en la Sangre de Cristo, ser bautizado en agua en el Nombre del Señor Jesucristo y recibir el Espíritu Santo, y así obtener el nuevo nacimiento y quedar fundamentado en Jesucristo con Vida eterna, para cuando terminen sus días terrenales en este cuerpo terrenal, pueda vivir eternamente con nuestro amado Señor Jesucristo, en el glorioso Reino de nuestro amado Señor Jesucristo.

Y eso es lo que todo ser humano desea: vivir eternamente en el Reino de Jesucristo, con nuestro amado Salvador Jesucristo.

Por lo tanto, toda persona tiene la oportunidad de recibir a Cristo como su Salvador, lavar sus pecados en la Sangre de Cristo, ser bautizado en agua en el Nombre del Señor Jesucristo y recibir el Espíritu Santo, y quedar así en el Cuerpo Místico de Cristo nacido de nuevo, y quedar por consiguiente fundamentado en Jesucristo.

“**FUNDAMENTADOS EN JESUCRISTO.”**

Y ahora, ¿dónde están los que están fundamentados en Jesucristo, nuestro Salvador? Aquí estamos presentes un grupo que ha sido fundamentado en Jesucristo nuestro Salvador en este tiempo final.

Y Cristo está confirmando Su Nuevo Pacto a cada uno de ustedes y a mí también, y a Su Iglesia en esta etapa de la Edad de la Piedra Angular.

La bendición está en la América Latina y el Caribe, con los latinoamericanos y caribeños en donde Cristo está confirmando Su Pacto: el Nuevo Pacto, a los latinoamericanos y caribeños que lo reciben como su Salvador, lavan sus pecados en Su Sangre, y son bautizados en Su Nombre y reciben Su Espíritu Santo, y así quedan, quedan fundamentados en Jesucristo dentro del Nuevo Pacto: el Pacto que Cristo ha establecido, y quedan bajo la Sangre del Nuevo Pacto, cubiertos con la Sangre del Nuevo Pacto, y sus pecados quedan quitados por la Sangre de Jesucristo que nos limpia de todo pecado.

Ahora, podemos ver todas las bendiciones que hay para los que están fundamentados en Jesucristo.

Hemos visto la importancia de estar: **“FUNDAMENTADOS EN JESUCRISTO.”**

Para los que están fundamentados en Jesucristo hay esperanza. Aunque este mundo no tiene esperanzas ni le puede dar esperanzas a la humanidad, Cristo sí. Cristo le da esperanza a cada uno de ustedes y a mí también, porque estamos esperando una nueva vida en un nuevo cuerpo eterno, inmortal, incorruptible y glorificado, lo cual Cristo ha prometido para cada uno de ustedes y para mí también.

Por lo tanto, permanezcan fundamentados en Jesucristo; y si no nos vemos nuevamente en estos cuerpos mortales, nos veremos en el nuevo cuerpo: el cuerpo glorificado, y nos veremos con Cristo en Su glorioso Reino que El establecerá en este planeta Tierra, y nos veremos también en la Gran Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo.

Ha sido para mí un privilegio grande estar con ustedes en esta ocasión, dándoles testimonio de la importancia de estar fundamentados en Jesucristo.

“**FUNDAMENTADOS EN JESUCRISTO.”**

Ahí es donde yo estoy fundamentado. ¿Y quién más está fundamentado en Jesucristo? Ustedes también. Pues manténgase cada uno de ustedes fundamentado en Jesucristo, y vivirán eternamente en el Reino de Jesucristo, y yo también.

Dejo nuevamente con ustedes a nuestro amigo y hermano Miguel Bermúdez Marín, para finalizar nuestra parte en esta ocasión.

Muchas gracias por vuestra amable atención y continúen pasando una noche llena de las bendiciones de Jesucristo, nuestro Salvador. Mientras cantamos este cántico que nos habla de Jesucristo, el Hombre que nos transformó, todos cantemos ese cántico a medida que lo vamos escuchando en la cinta magnetofónica, y así mientras está este cántico, pasará nuestro amigo y hermano, el Rvdo. Miguel Bermúdez Marín para finalizar nuestra parte en esta ocasión.

Que Dios les bendiga y les guarde a todos.

“**FUNDAMENTADOS EN JESUCRISTO”**