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Caminando con Dios	2000-06-22	2		Chicago	Illinois	US	01:15:29	true

Muy buenas noches, amados amigos y hermanos presentes aquí en Chicago, Norteamérica; es para mí un privilegio grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final. Para lo cual quiero leer en el libro del Génesis, capítulo 5, versos 21 al 24, donde dice:

“Vivió Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén.

Y caminó Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos años, y engendró hijos e hijas.

Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años.

Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios.”

Y en Hebreos, dice San Pablo en el capítulo 11, verso 5 en adelante:

“Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios.

Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”

Y pasamos a Judas (y no el Iscariote), el mismo capítulo 1 (pues contiene solamente un capítulo), versos 14 al 15, donde dice:

“De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares,

para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él (éste Judas es el hermano de Santiago).”

Y ahora, vean ustedes cómo nos habla acerca de Enoc, y de lo que profetizó Enoc: profetizó de la Venida del Señor con sus santas decenas de millares.

Nuestro tema para esta ocasión es: “CAMINANDO CON DIOS.”

Como caminó Enoc con Dios y fue traspuesto (o sea, raptado), y se lo llevó Dios en el Rapto, lo rapto; así nosotros tenemos que caminar con Dios. Y Enoc antes de ser traspuesto tuvo testimonio de haber agradado a Dios. Y los que van a ser raptados, transformados y raptados, antes tendrán testimonio de que han agradado a Dios.

“CAMINANDO CON DIOS.”

Y ahora, solamente hay una forma de caminar con Dios y de agradar a Dios: para agradar a Dios hay que caminar con Dios, y para caminar con Dios hay que caminar de acuerdo a Su Palabra correspondiente al tiempo en que la persona está viviendo, tiene que caminar con Dios en el Programa Divino correspondiente a la edad y dispensación que le ha tocado vivir a la persona.

Por eso es tan importante conocer el tiempo que a nosotros nos ha tocado vivir en el Programa de Dios, para caminar con Dios y esperar nuestra transformación, y luego ser raptados, traspuestos con Cristo y por Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo.

Y ahora, tenemos que examinar la historia de todos los que han caminado con Dios, los cuales son los héroes de la fe. Todas estas personas que caminaron con Dios en la edad y dispensación que les tocó vivir en el Antiguo Testamento, encontramos que aunque ellos estaban bajo los sacrificios de animalitos, ellos estaban en el tipo y figura bajo el Sacrificio de Cristo (en el tipo y figura), porque aquellos animalitos que eran sacrificados, representaban a Cristo y Su Sacrificio en la Cruz del Calvario. Por eso era que funcionaba para ellos esos sacrificios, y sus pecados eran cubiertos con la sangre de esos animalitos que eran sacrificados en lo que llegaba el Sacrificio Perfecto, el Cordero Perfecto, el Cordero de Dios, el cual sería el Mesías, el cual moriría como el Sacrificio Perfecto para quitar el pecado.

Y cuando ese Cordero de Dios muriese, entonces los pecados de todos aquellos que los tenían cubiertos con los sacrificios que ellos habían efectuado, y con la sangre de esos sacrificios, entonces el pecado de ellos sería quitado; mientras tanto estaría cubierto con la sangre de aquellos animalitos.

Por eso cuando Cristo murió en la Cruz del Calvario derramando Su Sangre, el pecado que estaba cubierto de aquellos santos del Antiguo Testamento, fue quitado; y cuando Cristo resucitó se levantaron con Cristo en la resurrección, aparecieron a muchos en la ciudad; y cuando Cristo estuvo por 40 días con Sus discípulos apareciéndole en diferentes ocasiones, ellos aparecieron a muchos en la ciudad de Jerusalén, a muchos de sus familiares, y cuando Cristo ascendió al Cielo, ascendieron con El al Cielo, y ese fue el Rapto de los escogidos del Antiguo Testamento.

Y ahora, ellos tuvieron testimonio de que habían caminado con Dios, y habían agradado a Dios al caminar con Dios de acuerdo a Su Palabra correspondiente al tiempo en que ellos vivieron y conforme a la edad y dispensación que les tocó vivir.

Luego, tenemos la Primera Venida de Cristo, y El cuando tenía 12 años de edad y se quedó en Jerusalén en templo; y estuvo allí hablando con los doctores de la Ley y con todos aquellos sabios, ellos le hacían preguntas y El contestaba sus preguntas, y El le hacía preguntas a ellos también; y se maravillaban de la sabiduría del niño Jesús.

Y cuando regresan buscando al niño Jesús (José y María), se encuentran que El está en el templo hablando con los doctores allí de la Ley, y le dicen a Jesús, le dice María a Jesús: “¿Hijo porqué nos has hecho esto? Tu padre y yo te hemos estado buscando.” Jesús le dice: “¿No sabías que en los negocios de mi Padre me conviene estar?” Y ahora, El estaba en los negocios de Su Padre aunque era un niño todavía de 12 años.

Por lo tanto, todos los niños, no importa la edad que tengan, desde que nacen en esta Tierra pueden estar haciendo la Voluntad de su Padre Celestial; porque para eso aparecemos en este planeta Tierra, para que desde el momento en que hemos nacido, sirvamos a Dios y estemos trabajando en los negocios de mi Padre, de nuestro Padre Celestial, cumpliendo así el Programa Divino que El ha determinado para nuestra vida; y así cumplamos las Escrituras correspondientes a nuestro tiempo, que tienen que ser cumplidas en nosotros.

Hemos nacido para estar en los negocios de nuestro Padre Celestial trabajando, hemos nacido para caminar con Dios haciendo Su Voluntad, trabajando en Sus negocios, y así obtener el testimonio de que hemos agradado a Dios.

Y ahora, tenemos al niño Jesús el cual va creciendo, y a medida que va creciendo Lo encontramos trabajando en los negocios de Su Padre Celestial, aunque desde la edad de aproximadamente dos años de edad hasta los 12 años no aparece nada escrito de El, pero dice ahí mismo en el capítulo 2, que ellos acostumbraban a ir cada año a Jerusalén a la fiesta; por lo tanto estaba siempre en los negocios de Su Padre Celestial, aun en su etapa de niño.

Luego de los 12 años, de ahí en adelante no sabemos más acerca de Jesús hasta que tiene cerca de 30 años. Durante esos años El también estuvo trabajando en esta Tierra como carpintero y por eso le llamaron “Jesús el carpintero de Nazaret.”

Y ahora, cuando ya tiene El cerca de 30 años —digamos 29 años y medio— comienza Su Ministerio, y para comenzar Su Ministerio ya estaba en la Tierra el precursor de la Primera Venida de Cristo predicando, el cual era primo de Jesús según la carne, pues Elisabet la madre de Juan el Bautista era pariente o parienta de la virgen María; por lo tanto, Juan el Bautista era primo de Jesús.

Y ahora, Juan el Bautista comienza su ministerio llamando el pueblo al arrepentimiento y anunciando que el Mesías está por ser manifestado en la Tierra, y Juan dice: “Yo les bautizó en agua, con bautismo de arrepentimiento, pero el que viene después de mí es mayor que yo, el que viene tras mí es mayor que yo, del cual yo no soy digno de desatar la correa de su calzado. El les bautizará con Espíritu Santo y fuego.”

Cualquier persona podía pensar: “Inmediatamente que aparezca ese Hombre, el Mesías, recibiremos el bautismo del Espíritu Santo.” Pero no comprendían que tenía que llevar a cabo un Ministerio de tres años y medio y luego tenía que llevar a cabo Su Obra de Redención en la Cruz del Calvario: muriendo en la Cruz del Calvario, siendo sepultado luego y luego siendo resucitado, luego estando por 40 días con Sus discípulos (ya resucitado el Mesías), y los santos del Antiguo Testamento también resucitados y apareciéndole a muchos en la ciudad de Jerusalén; y luego de los 40 días ascender al Cielo el Mesías, el Cristo, con los santos del Antiguo Testamento.

Y luego de ascender al Cielo, diez días después, el día de pentecostés, sería derramado el Espíritu Santo como Dios lo había prometido, porque Dios dijo que derramaría del Espíritu Santo sobre toda carne, sobre toda carne que se ha arrepentiría de sus pecados y recibiría a Cristo como su Salvador y serían bautizados en el Nombre del Señor Jesucristo.

Sobre toda carne que arrepentido de sus pecados buscaría a Cristo y Lo recibiría como su Salvador, sobre esas personas sería el cumplimiento de la promesa de ser llenos del Espíritu Santo, y así obtendrían el nuevo nacimiento y obtendrían un cuerpo teofánico de la sexta dimensión; y para el Día Postrero obtendrán un cuerpo eterno, inmortal, incorruptible, aunque hayan partido, aunque hayan partido o muerto; aunque hayan muerto físicamente, serán resucitados en cuerpos eternos y glorificados, y los que queden vivos hasta la Venida del Señor y la resurrección de los muertos en Cristo, seremos transformados cuando los veamos a ellos resucitados.

Y ahora, los que serán resucitados en cuerpos eternos, tienen testimonio de que han caminado con Dios y han agradado a Dios en la edad que les tocó vivir; y los que serán transformados en este tiempo final, tendrán testimonio que habrán caminado en la edad que les ha tocado vivir, y tendrán testimonio de que han caminado con Dios, sirviendo a Dios y trabajando en la Obra de Dios en este tiempo final.

Vean, de los escogidos de entre los gentiles, y también de los escogidos del pueblo hebreo en el tiempo de los apóstoles, encontramos que los que caminaron en el tiempo de los apóstoles sirviendo a Cristo, y luego los que caminaron en cada edad en el tiempo de cada mensajero, en la edad correspondiente a cada mensajero, y escucharon la Voz de Cristo en cada edad; porque Cristo dijo en San Juan, capítulo 10, versos 14 en adelante:

“Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen,

así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.

También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor.”

¿Y cómo van a oir la Voz de Cristo, si el murió resucitó y ascendió al Cielo? La Voz de Cristo, dice que estará siendo escuchada por la ovejas que El tendrá y que serán llamadas, las cuales no son del redil del pueblo hebreo, sino que son de entre los gentiles. Y el misterio de cómo Cristo estaría llamando y juntando estas ovejas es por medio de Sus ángeles mensajeros que El enviaría de edad en edad. Cristo en Espíritu Santo ha estado en cada ángel mensajero y eso ha sido la manifestación de los siete espíritus de Dios, es la manifestación del Espíritu Santo en cada ángel mensajero de las siete etapas o edades de la Iglesia entre los gentiles. Esos son también los siete ojos del Cordero, los siete ojos de Dios que recorren toda la Tierra, y son también las siete lámparas de fuego que están delante de la Presencia de Dios.

Y ahora vean cómo se materializa en la Tierra lo que está en el Templo Celestial. Los siete espíritus de Dios que son esas siete lámparas de fuego que están ante la Presencia de Dios, cuando se cumplen aquí en la Tierra son los siete ángeles mensajeros en los cuales está el Espíritu Santo manifestado, y por consiguiente un espíritu teofánico está en cada uno de esos ángeles mensajeros operando el Ministerio correspondiente a cada edad, son ángeles ministradores enviados de parte de Dios a los herederos de salvación, como dice San Pablo en Hebreos, capítulo 1, verso 14; y también son espíritus y son llamas de fuego, porque en Hebreos, capítulo 1, verso 7 también San Pablo nos habla, diciendo:

“Ciertamente de los ángeles dice:

El que hace a sus ángeles espíritus,

Y a sus ministros llama de fuego.”

Por lo tanto, estos ángeles son espíritus ministradores enviados a los herederos de salvación, y también son llama de fuego, porque son ministros enviados para ministrar la Palabra en la edad en que Dios los envía. En Proverbios, capítulo 20, verso 27, dice:

“Lámpara de Jehová es el espíritu del hombre.”

Y ahora, estos siete espíritus de Dios enviados a recorrer toda la Tierra, para en las siete edades llamar y juntar a los escogidos de Dios, son esas siete lámparas, porque “lámpara de Jehová es el espíritu del hombre.” Y el espíritu de estos mensajeros son esas siete lámparas que están delante de la Presencia de Dios, así como hubo un candelabro con siete lámparas en el lugar santo del tabernáculo que construyó Moisés y del templo que construyó el rey Salomón.

Y ahora vean de dónde viene ese candelabro con siete lámparas: viene como tipo y figura de esas siete lámparas de fuego que están delante de la Presencia de Dios.

Y ahora, encontramos que por medio de esos mensajeros el Espíritu Santo estuvo manifestado de edad en edad hablándole al pueblo con el Mensaje del Evangelio de la Gracia, y así llamando y juntando a Sus escogidos en cada edad por medio del mensajero de cada edad; ese fue el misterio de Jesucristo de las siete edades de la Iglesia, fue el misterio de Cristo en Espíritu Santo manifestado en cada edad en el mensajero de cada edad, hablándole a sus ovejas, llamándolas y juntándolas en el Redil del Señor que es la Iglesia del Señor Jesucristo. Y Cristo dijo: “Y oirán mi Voz, y habrá un Rebaño y un Pastor.”

Y ahora en el Día Postrero, en el tiempo final, cuando ya han transcurrido, han pasado, las siete edades de la Iglesia, podemos mirar hacia atrás y ver lo que fue ese recorrido de Cristo en Espíritu Santo por medio de los siete ángeles mensajeros y la Obra que llevó a cabo; y podemos ver quiénes caminaron con Dios y tuvieron testimonio de haber agradado a Dios: los que escucharon la Voz de Cristo por medio del mensajero que Cristo envió en cada edad, a través del cual Cristo estuvo en Espíritu Santo manifestado.

Y para este tiempo final cuando ya han transcurrido las siete etapas o edades de la Iglesia y ya Cristo ha hablado por medio de esos siete ángeles mensajeros, pasamos a la etapa más importante de la Iglesia de Jesucristo; ya han transcurrido las siete edades que corresponden al Lugar Santo de ese Templo Espiritual, y ahora pasamos al Lugar Santísimo del Tempo Espiritual de Cristo. El Templo Espiritual de Cristo es Su Iglesia, la cual El está creando, construyendo como un Nuevo Templo, un Templo que será para toda la eternidad.

Así como el ser humano como individuo es diseñado como Templo de Dios, así la Iglesia de Jesucristo ha sido diseñada por Dios como Templo de Dios, para Dios morar en ella.

Y ahora, la Iglesia de Jesucristo como también el ser humano han sido diseñados en la misma forma que está el Templo Celestial de Dios.

Y ahora, pasamos al Lugar Santísimo para escuchar la Voz de Cristo, la Voz de Dios. ¿Y cómo vamos a escuchar la Voz de Dios? En el lugar santísimo sobre el arca del pacto estaban los dos querubines de oro sobre el propiciatorio; el propiciatorio era la cubierta del arca del pacto, la tapa del arca del pacto, y estaban dos querubines de oro también, porque el propiciatorio era de oro puro y también los dos querubines de oro. Y en medio de los dos querubines de oro estaba la Columna de Fuego, la Shekinah, estaba Dios allí manifestado como El lo prometió. Por eso dice en Levítico, capítulo 16, hablándole Dios al Profeta Moisés, le dice... capítulo 16, verso 1 en adelante de Levítico, dice:

“Habló Jehová a Moisés después de la muerte de los dos hijos de Aarón, cuando se acercaron delante de Jehová, y murieron (ellos murieron porque fueron, entraron al lugar santísimo cada uno con un incensario, y llevaron fuego extraño; y era el sumo sacerdote el que tenía el ministerio para entrar al lugar santísimo con el incensario de oro y con el fuego que Dios había ordenado, y con la sangre de la expiación).

Y Jehová dijo a Moisés: Dí a Aarón tu hermano, que no en todo tiempo entre en el santuario detrás del velo, delante del propiciatorio que está sobre el arca, para que no muera; porque yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio.”

¿Cómo aparecía Dios en el lugar santísimo sobre el propiciatorio? En la nube de fuego, la Columna de Fuego.

Y ahora, leemos en el capítulo 25 del Exodo, versos 21 en adelante, dice:

“Y pondrás el propiciatorio encima del arca, y en el arca pondrás el testimonio que yo te daré.

Y de allí me declararé a ti, y hablaré contigo de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, todo lo que yo te mandare para los hijos de Israel.”

¿Desde dónde le hablaba Dios al Profeta Moisés cuando ya estaba establecido el tabernáculo, cuando ya estaba establecida el arca del pacto, para Dios manifestarse sobre el propiciatorio? Pues de sobre el propiciatorio le hablaba Dios al Profeta Moisés; todo lo que Dios tenía que decirle al pueblo hebreo se lo hablaba al Profeta Moisés y el Profeta Moisés lo hablaba a todo el pueblo hebreo.

“Porque no hará nada el Señor Jehová, sin que antes revele Sus secretos a Sus siervos Sus profetas.”

El profeta por cuanto viene con las dos conciencias juntas, puede pasar a otras dimensiones y puede oir la Voz de Dios y luego comunicarle al pueblo de Dios la Palabra que Dios le ha hablado, puede darle al pueblo la revelación divina que ha recibido de parte de Dios.

Y ahora, podemos ver desde dónde le hablaba Dios a Moisés para luego que Moisés le hablara al pueblo hebreo. Y en el Cuerpo Místico de Cristo, que es el Templo Espiritual de Jesucristo, tenemos el Lugar Santo y el Lugar Santísimo.

Y ahora, ¿de dónde vendrá el Mensaje de Dios para el pueblo hebreo? Pues del Lugar Santísimo de sobre el Propiciatorio de en medio de los Dos Querubines de oro.

Y ahora, de en medio de los Dos Querubines de oro viene el Mensaje para el pueblo hebreo. Los Dos Querubines de oro en el Cielo son los Arcángeles Gabriel y Miguel, y los Dos Querubines de oro en la Tierra, en el Templo Espiritual de Cristo son los Ministerios de Moisés y de Elías. Y por eso es que encontramos el ministerio de Moisés en el Templo Espiritual de Cristo en el Lugar Santísimo, y también el ministerio de Elías por quinta ocasión lo encontramos en el Templo Espiritual de Cristo en el Lugar Santísimo, porque el ministerio de Elías, vean ustedes, ha estado en la Casa de Dios, el Templo de Dios; estuvo en el Atrio en el tiempo de la Ley y estuvo en el Atrio todavía, luego de estar en Elías Tisbita estuvo en Eliseo, y luego estuvo todavía en el Atrio en el tiempo de Juan el Bautista que fue el tercer Elías, Elías, el ministerio de Elías manifestado en el tercer hombre que vino con el espíritu y virtud de Elías; y vino con un nombre nuevo en cada ocasión en que vino el ministerio de Elías.

El ministerio de Elías en la primera ocasión vino en Elías Tisbita y por eso es llamado ese ministerio como el ministerio de Elías, y el hombre en el cual viene manifestado ese ministerio es conocido también como Elías, el Elías correspondiente a ese tiempo. Y el Elías correspondiente a cada tiempo, encontramos que aparece con el nombre que sus padres le han colocado. Por eso el segundo Elías, el segundo hombre donde estuvo el ministerio de Elías en una doble porción fue Eliseo; el tercer Elías en el cual estuvo el ministerio de Elías por tercera ocasión, su nombre fue Juan (el arcángel Gabriel se encargó de que le pusieran por nombre Juan); y el cuarto Elías en el cual estuvo el ministerio de Elías por cuarta ocasión manifestado, su nombre fue William Marrión Branham; y el quinto Elías en el cual estará el ministerio de Elías manifestado por quinta ocasión, tendrá por nombre el nombre que sus padres terrenales le hayan puesto.

Ya no es un misterio el primer Elías, el segundo Elías, el tercer Elías y el cuarto Elías; pero el quinto Elías es un misterio, el misterio correspondiente al tiempo final en cuanto al ministerio de Elías, en cuanto al ministerio de los Dos Olivos; y el ministerio de Moisés es el ministerio de uno de lo Dos Olivos de Zacarías, capítulo 4, versos 1 al 14, y Apocalipsis, capítulo 11, verso 3 en adelante.

Y ahora, el Moisés que estará presente en el Día Postrero como uno de los Dos Olivos, será el hombre ungido con el Espíritu Santo operando el ministerio de Moisés por segunda ocasión y de Elías por quinta ocasión; o sea, que será un hombre del tiempo final, un hombre que estará viviendo en el Día Postrero; será el Espíritu Santo el que estará en él operando los ministerios de Moisés por segunda vez, de Elías por quinta ocasión y de Jesús por segunda ocasión.

Y ahora, podemos ver que en el tabernáculo que construyó Moisés estaba Dios, el Angel del Pacto, allí manifestado sobre el propiciatorio que era la tapa que cubría el arca del pacto; allí tenemos a un querubín a un lado, a otro querubín al otro lado y a Dios en medio de ellos manifestado en la Columna de Fuego.

En el Monte de la Transfiguración donde Cristo estuvo mostrando el misterio (pero en visión), mostrando el misterio que estará manifestado en el Día Postrero en la Venida del Hijo del Hombre con Sus ángeles, aparecieron también Moisés a un lado, Elías al otro lado y en el centro Jesús; uno a cada lado del Señor Jesucristo, y Jesucristo con Su rostro como el Sol, allí lo tenemos resplandeciendo como el Sol.

Y ahora, allí está el orden de la Segunda Venida de Cristo con Sus ángeles, la Venida del Hijo del Hombre con Sus ángeles fue mostrada allí; por lo tanto para el cumplimiento de la Venida del Hijo del Hombre con Sus ángeles, estará el Ministerio de Cristo manifestado por el Espíritu Santo y el ministerio de Moisés y el ministerio de Elías. Tienen que estar esos tres grandes ministerios manifestados en la Tierra en medio de la Iglesia de Jesucristo en el Lugar Santísimo; y eso será la manifestación de Cristo, el Angel del Pacto, sobre el propiciatorio, el propiciatorio del Templo Espiritual de Jesucristo, donde estarán los Dos Querubines de Oro (uno a cada lado), donde estarán los Dos Olivos, uno a cada lado.

Por eso también encontramos que el rey Salomón construyó dos querubines de madera de olivo y los cubrió de oro y los colocó en el lugar santísimo (eran gigantes), eran de una altura que llegaba hasta el techo —o más— 14 pies con 4 pulgadas (14' 4'') que son 4 metros y medio (4.5). Benjie que sabe de construcción. ¿Aquí tenemos del piso al techo 14 pies o menos de 14 pies verdad? Algunos 12 o 14 pies. O sea, que eran unos querubines gigantes, sus alas extendidas, una llegaba hasta la pared; un ala de cada querubín llegaba hasta la pared: el de un lado hasta la pared de la derecha y el del otro lado hasta la pared de la izquierda; y luego el ala que quedaba para el centro, que estaba sobre el arca del pacto, se encontraba con la otra ala del otro querubín; y bajo las alas de los querubines estaba el arca del pacto y estaban los dos querubines de oro y estaba la Presencia de Dios manifestada.

Todo eso da testimonio de que bajo las alas de los ministerios de Moisés y Elías estará el Arca del Pacto, el Verbo, la Palabra, y estará Cristo, el Angel del Pacto, la Columna de Fuego manifestándose en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo, y de ahí es de donde saldrá el Mensaje, no solamente para la Iglesia Novia del Señor Jesucristo del Día Postrero para darle la fe, la revelación, para ser transformada y raptada, que es la revelación del Séptimo Sello, la revelación de la Segunda Venida de Cristo con Sus ángeles en el Día Postrero, como el León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo; también para el pueblo hebreo será ese Mensaje.

Pero los primeros que obtienen ese Mensaje es el grupo de escogidos que estará viviendo en el Día Postrero y que escucharán la Voz de Cristo hablando por última vez en medio de Su Iglesia en la Edad de la Piedra Angular, hablando en medio de Su Iglesia y llamando a Sus escogidos y juntándolos en la Edad de la Piedra Angular, que es el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo.

Y el que es de Dios, oye la Voz de Dios: “Mis ovejas oyen mi Voz y me siguen,” y siguen a Cristo, caminando con Cristo, caminando con Dios en el Día Postrero; y obtendrán de parte de Dios testimonio de que han agradado a Dios, porque estarán caminando con Dios en el Día Postrero, en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo que es la Edad de la Piedra Angular, y estarán escuchando Su Voz, obteniendo la revelación de parte de Cristo y estarán creciendo espiritualmente en el conocimiento divino, y estarán también trabajando en la Obra de Cristo con Cristo en el Día Postrero; porque en los negocios de Jesucristo nos conviene estar trabajando en el Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual, para y en la construcción del Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual.

Ya no estamos trabajando en el Lugar Santo, sino en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo, y podemos decir: “En los negocios de mi Padre me conviene estar, me conviene estar trabajando en la construcción del Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo.”

Y así como han obtenido testimonio los ángeles mensajeros con el grupo de cada edad, de que caminaron con Dios y agradaron a Dios en su edad, y trabajaron con Dios y en la Obra de Dios en la edad que les tocó vivir; también los escogidos del Día Postrero juntos al Mensajero del Día Postrero que es el Angel del Señor Jesucristo que es enviado por Cristo para dar testimonio de todas estas cosas que deben suceder pronto; porque ya las que sucedieron en el pasado ya son historia, pero las que deben suceder pronto son las que corresponden al Día Postrero, las que corresponden a este tiempo final.

Y el Angel del Señor Jesucristo es el enviado para dar testimonio de estas cosas que deben suceder pronto, y la principal de todas es el Séptimo Sello, la materialización del Séptimo Sello que es la materialización de la Segunda Venida de Cristo con Sus ángeles como el León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo.

Y así es como obtenemos la fe, la revelación, para ser transformados y raptados; así como obtuvimos la revelación de la Primera Venida de Cristo y Su Obra de Redención en la Cruz del Calvario para nuestra transformación interior, para ser transformados interiormente y obtener el nuevo nacimiento y obtener el cuerpo teofánico de la sexta dimensión.

Y ahora, para la transformación física se requiere la fe, la revelación, de la Segunda Venida de Cristo con Sus ángeles como el León de la tribu de Judá para obtener nuestra transformación física, y obtener el cuerpo eterno, inmortal, incorruptible y glorificado igual al cuerpo de nuestro amado Señor Jesucristo. Y así tendremos cuerpo teofánico igual al cuerpo teofánico, al cuerpo angelical de Cristo, y cuerpo físico, eterno y glorificado igual al cuerpo de nuestro amado Señor Jesucristo.

Y ahora vean el porqué somos llamados y juntados en este Día Postrero en la Edad de la Piedra Angular que es el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo.

Y desde el Propiciatorio de en medio de los Dos Querubines de oro, sale la Voz de Cristo hablándole a Su Iglesia primeramente y después le hablará al pueblo hebreo. El tendrá un Instrumento en este tiempo final el cual es llamado el Angel del Señor Jesucristo:

“Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.” (Apocalipsis, 22, verso 16). Y El dice: “Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana.” Ahí mismo en el verso16, del capítulo 22 del Apocalipsis.

Y luego dice: “Al que tuviere sed...” para el que tuviere sed, dice:

“Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.”

Y aquí en adición a haber tomado el Agua de la vida, al creer en Cristo como nuestro Salvador en Su Primera Venida y lavar nuestros pecados en Su Sangre y ser bautizados en Su Nombre y recibir el Espíritu Santo, al recibir el Espíritu Santo hemos tomado del Agua de la vida eterna para obtener el cuerpo teofánico de la sexta dimensión.

Y para el Día Postrero tomaremos del Agua de la vida al creer en Cristo en Su Segunda Venida como Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo, para recibir el Agua de la vida del cuerpo eterno, inmortal, incorruptible y glorificado, para vivir con Cristo por toda la eternidad.

Pero antes de recibir el cuerpo glorificado, antes de ser transformados, tenemos que tener testimonio de parte de Dios de que hemos agradado a Dios, y de que hemos caminado con El en nuestra edad escuchando Su Voz y guardando Sus mandamientos divinos, obedeciendo Su Palabra y trabajando en Su Obra; porque en los negocios de nuestro amado Señor Jesucristo, en Su Casa, en Su Iglesia, nos conviene estar, trabajando en la construcción del Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual.

El Lugar Santísimo que El está construyendo con piedras vivas, como ha construido el Lugar Santo de Su Templo Espiritual con piedras vivas durante el tiempo de los apóstoles y el tiempo de los siete ángeles mensajeros, y continúa con piedras vivas, construyendo Su Templo Espiritual, la parte del Lugar Santísimo, piedras vivas latinoamericanas y caribeñas, y de vez en cuando encontramos que puede entrar alguno de algún otro continente o nación.

Pero —diríamos— el 90 ó 99 % son latinoamericanos y caribeños; y si no entra alguno de algún otro continente o nación para ocupar ese 10 % ó 1 % que hemos dejado ahí, para que no digan que nos queremos quedar con todo; si no se llena, si no entran de otros continentes y naciones, será lleno el Lugar Santísimo con latinoamericanos completamente, y caribeños; aunque se hayan ido a otras naciones, siguen siendo latinoamericanos o caribeños.

Ahora, dice que cada persona acerca las sardinas (¿a dónde Miguel?) A su fuego. Le digo eso a Miguel porque él fue pescador, y sigue siendo pescador, pero ahora de almas. A su fuego... Y cada mensajero, pues, arrima los peces que pesca a su edad, pues no los va a colocar en otra edad; los arrima, a su fuego, el Fuego de Dios que está siendo derramado en ese tiempo, en esa edad, el Fuego del Espíritu Santo.

Ahora podemos ver que se requiere que cada persona que va a ser raptada como Enoc, haya caminado con Dios y haya tenido testimonio de que agradó a Dios; por lo tanto los que serán resucitados con Cristo, serán aquellos que caminaron con Dios en la edad que les tocó vivir y escucharon la Voz de Cristo por medio del mensajero de su edad.

Si leemos lo que dijo el Rvdo. William Branham con relación a la forma en que Dios usó esos mensajeros, nos daremos cuenta más claramente la labor tan importante que Dios llevó a cabo por medio de esos mensajeros. En el mensaje de las Siete etapas o Edades de la Iglesia en español, editado; este el Libro de “Las Edades,” dice:

“Como ya hemos mencionado, Jesús se identifica con el mensajero de cada edad...”

La identificación de Cristo es con el mensajero de cada edad. Luego de identificarse con el mensajero de cada edad en las siete edades, ¿luego con quién más se va a identificar en el Día Postrero? Pues con el Mensajero de la Edad de la Piedra Angular, con el Mensajero que ministra en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo.

“Ellos reciben de El la revelación de la Palabra para cada edad (¿Quién es el que recibe la revelación para cada edad? El mensajero de cada edad). Esta revelación de la Palabra saca del mundo a los escogidos de Dios, y los coloca en unión completa con Cristo Jesús. Estos mensajeros son llamados estrellas porque brillan con una luz prestada o reflejada, la luz del Hijo Jesús; también son llamados estrellas porque son portadores de luz en la noche, así que en la oscuridad del pecado, ellos traen la luz de Dios a Su pueblo.”

Y ahora, cuando todos los siete ángeles mensajeros de las siete edades reflejados o representados en siete estrellas han terminado de brillar en la noche por la cual ha pasado la Iglesia durante las siete edades, ¿habrá otra estrella para resplandecer? Cualquiera puede decir: “Ya se acabaron las estrellas, ya no habrán más estrellas.” Pero miren ustedes, tenemos la promesa aquí en Apocalipsis 22, verso 16:

“Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana.”

¿Y por medio de quién la Estrella resplandeciente de la mañana va a resplandecer y va alumbrar y a guiar a los escogidos de Dios en el Día Postrero? Pues por medio de Su Angel Mensajero que está enviando. Por medio de Su Angel Mensajero, Cristo, la Estrella resplandeciente de la mañana, resplandecerá, y por medio de Su Angel Mensajero Cristo, la Raíz y el Linaje de David, se manifestará; y ahí tendremos la Raíz y el Linaje de David que es Cristo manifestado en el Día Postrero como el León de la tribu de Judá, Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo, la Raíz y el Linaje de David.

Y ahora, ¿será posible que esta Estrella la tenga alguien en el Día Postrero? Vamos a ver... Apocalipsis, capítulo 2, verso 28, dice... y podemos leer desde un poquito antes, dice, capítulo 2, verso 26 al 28:

“Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones,

y las regirá con vara de hierro, y serán quebrantadas como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de mi Padre (y esa autoridad es la que es vista en Apocalipsis, capítulo 11, verso 3 en adelante por medio de los Ministerios de los Dos Olivos que son los Dos Ungidos que están delante de la Presencia de Dios), y le daré la estrella de la mañana.”

Ahora, encontramos que a cada ángel mensajero de cada edad le fue dada la estrella, una estrella de la noche; y fueron representados ellos en siete estrellas que corresponden a la noche; pero para el Día Postrero por cuanto se estará viviendo en el tiempo en donde estará rayando el alba, la mañana de un nuevo día dispensacional y de un nuevo Día milenial, el Día nuevo del séptimo milenio, y el Día nuevo o la mañana de la séptima dispensación. Por lo tanto vendrá un mensajero, una estrella, un Mensajero, el Angel del Señor Jesucristo con la Estrella de la mañana, manifestada esa Estrella en ese Angel Mensajero. Dice:

“Al que venciere yo le daré autoridad sobre las naciones...”

Y luego al final dice: “y le daré la estrella de la mañana.” Le daré la Estrella de la mañana, y la Estrella de la mañana es Cristo; por lo tanto él recibirá a Cristo en Su Segunda Venida en el Día Postrero, y Cristo resplandecerá por medio de él en el Día Postrero. Cristo, la Estrella resplandeciente de la mañana resplandecerá, ya no durante las siete edades, ya no durante la noche que corresponde a las siete edades de la Iglesia, sino en la mañana. Y esa será la señal de que un nuevo Día Milenial está comenzando y un nuevo Día dispensacional, la Dispensación Séptima, la Dispensación del Reino, está comenzando y se está entrelazando con la Dispensación de la Gracia; es ahí donde se entrelaza la mañana cuando está rayando el alba, se entrelaza el día con la noche.

Y ahora, la Estrella resplandeciente de la mañana que es Cristo en el Día Postrero manifestado en el Vencedor que recibirá la Estrella resplandeciente de la mañana, será la señal de que está rayando el alba, está rayando la mañana, la aurora de un nuevo día dispensacional y de un nuevo día milenial. Como la estrella resplandeciente de la mañana resplandeciendo cuando ya las demás estrellas han dejado de brillar, es la señal de que está rayando el alba y su mensaje es que un nuevo día está naciendo y que la luz que se está viendo por el Este es la luz del sol que está naciendo.

“A los que temen mi Nombre nacerá el Sol de Justicia y en sus alas traerá salvación.” Sus alas son los Ministerios de Moisés y Elías. Y esto es para los que temen el Nombre del Señor, los cuales estarán caminando con Dios, con Cristo; y obtendrán de parte de Cristo testimonio de que han agradado a Dios. Y esas serán las personas que tendrán la promesa de la transformación de sus cuerpos, y del Rapto o Arrebatamiento para ir a la Cena de las Bodas del Cordero con Cristo.

Hemos visto el porqué se requiere que estemos caminando con Dios en la edad que nos ha tocado vivir, como caminaron con Dios cada mensajero con su grupo en la edad que les tocó vivir, y recibieron testimonio de haber agradado a Dios. Y ahora, toda la labor que ellos llevaron a cabo con el mensajero de su edad, recibió testimonio de que fue agradable ante Dios.

Y ahora nosotros caminando con Dios y trabajando en Su Obra, obtendremos testimonio de parte de Dios de que hemos agradado a Dios, y por consiguiente seremos transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo.

“CAMINANDO CON DIOS.”

Eso es lo que hacemos en este Día Postrero en la Edad de la Piedra Angular, y escuchando Su Voz todos los días de nuestra vida, y siguiendo Su Voz, Su Mensaje, en este tiempo final.

Cualquier persona le puede preguntar a usted o a mí: “¿Qué tu haces en ese tiempo en cuanto a las cosas de Dios?” Y nosotros podemos decir: “Estoy caminando con Dios, caminando con Dios como caminó Enoc, para pronto ser transformado y ser traspuesto (o sea, ser raptado), y llevado con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo.”

Continuamos entonces caminando con Dios. Yo continúo caminando con Dios en este tiempo final en la Edad de la Piedra Angular, ¿y ustedes? [La congregación dice: ¡Amén! - Editor] También ustedes continúan caminando con Dios en este tiempo final. Y de un momento a otro Cristo resucitará a los muertos creyentes en El, porque se completará el número de los escogidos de Dios en la Edad de la Piedra Angular. Eso es lo que ha detenido la resurrección de los muertos en Cristo y la transformación nuestra. ¿Qué es lo que lo ha detenido? Que El está llamando y juntando Sus escogidos. Y hasta que no se complete el número de los escogidos en el Cuerpo Místico de Cristo en la Edad de la Piedra Angular, El no puede terminar Su Obra de Intercesión en el Cielo y no puede salir del Trono de Intercesión para tomar el Título de Propiedad y reclamar todo lo que El ha redimido con Su Sangre Preciosa y resucitar a los muertos en Cristo y transformarnos a nosotros los que vivimos.

Si leemos en los mensajes del Rvdo. William Branham, él pensaba y él creía que ya para el 77, ya todo estaría cumplido, y que ya el juicio divino comenzaría sobre la Tierra.

¿Pero qué es lo que ha sucedido? ¿Falló el Rvdo. William Branham? No, un Profeta no falla. Y aunque él dijo: “Yo no profetizo, sino que predico.” Aun con todo y eso, por amor a los escogidos de Dios que todavía no estaban llamados y juntados y recogidos en el Cuerpo Místico de Cristo en la Edad de la Piedra Angular, se ha extendido la Misericordia de Dios a nosotros, por amor a nosotros; no se ha extendido para el mundo, sino para los que tienen sus nombres en el Cielo en el Libro de la Vida del Cordero escritos.

Así como cuando Dios le dijo al profeta Noé que había llegado el tiempo para la destrucción de la raza humana, luego encontramos que transcurrieron de 100 a 120 años, y mientras el tiempo transcurría Noé construía el arca que Dios le dijo que construyera para entrar al arca él y su familia y cierta cantidad de animales, de aves y de reptiles, los cuales se salvarían del juicio divino que vendría sobre la Tierra, el juicio del diluvio.

Y ahora, fue por causa de Noé y su familia, y de los animales que entrarían al arca, que la Misericordia de Dios fue extendida por 100 ó 120 años, y aun cuando luego Dios regresa a Noé y le habla después de transcurrido todo ese tiempo y después de estar construida el arca, le dice: “Dentro de siete días yo haré llover sobre la Tierra, entra tú y tu familia, y los animales y aves y reptiles al arca.” Durante esos siete días nadie más creyó el Mensaje de Noé, continuaron como habían estado en esos 100 ó 120 años mientras Noé construía el arca.

Y la humanidad, así como ha estado durante estos dos mil años, en donde Cristo ha estado construyendo, creando, Su Iglesia, así ha continuado en este tiempo final, en el tiempo correspondiente a la Edad de la Piedra Angular; pero es el tiempo en donde entran al Arca (que es Cristo) los escogidos del Día Postrero. Por eso fue que Cristo cuando habló de la Venida del Hijo del Hombre para el tiempo final dijo que sería como en los días de Noé, y también dijo que sería como en los días de Lot.

En los días de Noé estuvo un Profeta dispensacional el cual fue Noé (en la Tierra), y en los días de Lot estaba un Profeta dispensacional, el cual fue Abraham.

Así que podemos ver el paralelo que hay de la Venida del Hijo del Hombre para el Día Postrero, con Noé y sus días y con Abraham y sus días.

Este es un tiempo como los días de Adán, como en los días de Set, como en los días de Noé, como en los días de Abraham, como en los días de Moisés también; y por eso tenemos la promesa del ministerio de Moisés para este tiempo final. Y como en los días de Jesús también, este tiempo es paralelo; es tiempo paralelo al tiempo de los días de los mensajeros dispensacionales anteriores (de las seis dispensaciones anteriores), porque este es un Día en donde una nueva dispensación se abre y se entrelaza con la dispensación sexta de la Gracia: se abre la Dispensación del Reino y se entrelaza con la Dispensación de la Gracia.

Y para finalizar una dispensación y abrir una nueva dispensación, Dios siempre ha enviado un Profeta dispensacional, y esa es la señal grande del fin de una dispensación y comienzo de una nueva dispensación: la presencia de un Profeta dispensacional para llamar al pueblo a una nueva dispensación, y así el pueblo de Dios pueda caminar con Dios en una nueva edad y una nueva dispensación, escuchando la Voz de Dios por medio de un Profeta dispensacional. Esa es la forma que Dios estará usando en este tiempo final en la Edad de la Piedra Angular, que es la Edad del Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo, donde estarán caminando con Dios los escogidos de Dios del Día Postrero junto al Mensajero de Dios para el Día Postrero. Por eso es que yo estoy caminando con Dios en la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino en este tiempo final, en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo.

¿Y quiénes más están caminando con Dios en el Día Postrero en la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino, en este entrelace dispensacional? Todos ustedes también, todos ustedes que están aquí presentes, y los que están en diferentes naciones que están recibiendo la Palabra de Dios para este tiempo final, para la Edad de la Piedra Angular, para el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo nuestro Salvador.

Ha sido para mí un privilegio grande estar con ustedes dándoles testimonio de cómo caminar con Dios en este tiempo final, y darles testimonio de quiénes son los que están caminando con Dios en este tiempo final. Y Dios nos da testimonio de que estamos caminando con El en este tiempo final, y de que estamos agradándole a El, estamos recibiendo testimonio de parte de Dios, de que estamos caminando con El y de que le estamos agradando a El, al caminar con El en este Día Postrero en la Edad y Dispensación que nos ha tocado vivir, la cual se cumple en el Cuerpo Místico de Jesucristo en este tiempo final, en la Edad de la Piedra Angular que es al Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual.

Que las bendiciones de Jesucristo, el Angel del Pacto, sean sobre todos los que están caminando con Dios en este tiempo final, en el Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual. Que las bendiciones del Lugar Santísimo sean sobre todos ustedes y sobre mí también, y pronto seamos transformados los que vivimos juntamente con los muertos en Cristo cuando sean resucitados. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.

Y ahora, mientras escuchamos el cántico que nos habla del Hombre que nos transformó interiormente y que nos transformará físicamente dándonos un cuerpo eterno, pasará nuestro Hermano y amigo, el Rvdo. Miguel Bermúdez Marín para finalizar nuestra parte en esta ocasión.

“CAMINANDO CON DIOS.”