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| Misterios bajo el Séptimo Sello | 1998-02-12 | 1 | Fusagasugá | Cundinamarca | CO | 02:21:55 | false | true |
Muy buenas tardes, ministros y colaboradores en este curso para ministros. ¿Cuál tema tiene, Miguel? “Los Servidores De Cristo”. Es para mí un privilegio muy grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir unos momentos con ustedes alrededor del tema: “MISTERIOS BAJO EL SÉPTIMO SELLO”.
Para lo cual quiero leer en Apocalipsis, capítulo 8, verso 1 en adelante (1 al 5), donde dice:
“Cuando abrió el séptimo sello, se hizo silencio en el cielo como por media hora.
Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas.
Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos.
Y el ángel tomó el incensario, y lo llenó del fuego del altar, y lo arrojó a la tierra; y hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto”.
Que Dios bendiga Su Palabra en nuestras almas y nos permita entenderla, y bendiga nuestras almas con Su Palabra.
Nuestro tema es: “MISTERIOS BAJO EL SÉPTIMO SELLO”.
Este Séptimo Sello del Libro de los Siete Sellos, del Libro de la Redención, del Libro de la Vida del Cordero, contiene los misterios del Programa Divino correspondientes a este tiempo final.
Dijo el precursor de la Segunda Venida de Cristo, hablando del Séptimo Sello, en el mensaje… en el libro de Los Sellos en español, página 80, dice:
“[102]. Entonces salió el Cordero y Sus días de intercesión habían cesado, los días de mediación; entonces es cuando este Ángel aparecerá. Espere hasta que lleguemos a los sellos mismos y Él dirá: ‘El tiempo no será más’. Entonces entra a la media hora de silencio; y fíjense bien las cosas que sucederán durante esa media hora del Séptimo Sello, Dios mediante”.
Hemos visto que, durante ese tiempo de la media hora del Séptimo Sello, cosas estarán sucediendo aquí en la Tierra. En el Cielo hay silencio como por media hora, y luego ¿qué sucede? Luego dice que:
“Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas.
Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos.
Y el ángel tomó el incensario, y lo llenó del fuego del altar, y lo arrojó a la tierra; y hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto”.
Ahora vean cómo todo esto que está señalado aquí estará sucediendo bajo el Séptimo Sello, porque todas las cosas que sucederán después de las siete etapas o edades de la Iglesia gentil corresponden a los misterios bajo el Séptimo Sello.
Y por eso es que, tanto las cosas que Dios hará en medio de Su Iglesia gentil como en medio del pueblo hebreo, están todas bajo el Séptimo Sello, porque la Gran Voz de Trompeta o Séptima Trompeta, así como el Séptimo Sello, son ¿qué? La Venida del Señor. La Venida del Señor es el evento más grande prometido en la Escritura para la Iglesia del Señor Jesucristo.
Encontramos en la página 84 y 85 del libro de Los Sellos en español, donde el precursor de la Segunda Venida de Cristo: William Marrion Branham dijo, vamos a ver:
“‘Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?
El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y le resucitaré en el día postrero.
(Estas dos Escrituras están en San) Juan 11:25-26, (y San Juan) 6:54
120. Ya sea que duerma con Dios en la primera, segunda, tercera, cuarta, quinta, sexta o aun en la séptima vigilia (o sea, séptima edad, ya sea que duerma en la primera edad, segunda, tercera, cuarta, quinta o séptima edad), donde quiera que suceda, ¿qué sucederá? La trompeta de Dios sonará, y esa última trompeta sonará al mismo tiempo cuando el último ángel esté predicando su Mensaje y cuando se abra el último sello; y la última trompeta sonará y el Redentor venga para tomar Su posesión redimida, la Iglesia lavada en la Sangre (o sea, en Su Sangre).
121. Ahora, toda la Creación está en Sus manos. El plan entero de la redención está sellado con siete sellos misteriosos en este Libro que Él tomó. Ahora fíjense bien: Sólo Él puede revelarlo a quien Él desea. Lo tiene en la mano y prometió que sería revelado en este tiempo. Está sellado con siete sellos misteriosos, eso es el Libro de la Redención”.
Y pasamos a la página 85, donde sigue diciendo:
“123. Pero ahora en este Libro de aspecto séptuple de los sellos de la redención, el que el Cordero tomó, y Él fue el único que pudo tomarlo, y lo tomó de la diestra de Aquel que estaba sentado sobre el Trono; ahora viene para reclamar Sus derechos que redimió para mí y usted. Viene para reclamar lo que redimió para nosotros, todo lo que tuvo Adam en el Huerto del Edén. Él nos ha redimido de nuevo a todo aquello. Ahora, viendo el Cordero con el Libro en la mano, estamos listos para rogar Su gracia y misericordia sobre nosotros, para que nos abra este Libro con los siete sellos y nos deje ver un poquito más allá de la cortina del tiempo.
124. Note que cuando Él tomó el Libro, el acta del título, estaba sellado. Retenga eso bien en la mente. Ahora abre los sellos de los misterios para revelarlos y traerlos a todos Sus súbditos redimidos. Ahora cuando llegamos a esto en el estudio de los Sellos vamos a ver aquellas almas bajo el altar clamando: ‘Señor, ¿hasta cuándo? ¿hasta cuándo?’. Y aquí está como Mediador sobre el altar, diciendo: ‘Un corto tiempo más, porque hay otros que tienen que sufrir como ustedes’. Pero ahora Él viene de ese lugar en el último sello ( ¿en qué Sello es que Él viene? En el último Sello, en el Séptimo Sello) ya no es Mediador sino Rey. Y ¿qué hace? Si es el Rey, entonces tiene que tener súbditos, y Sus súbditos son aquellos que ha redimido. Y ellos no pueden venir ante Él hasta que Él tome los derechos de la redención. Y ahora Él sale de Su posición de Mediador, de donde la muerte nos entregó a la tumba, Él ahora viene con los derechos (¡Amén!); y aun aquellos que están vivos y han quedado hasta ver Su Venida (miren lo que será para aquellos que han quedado hasta ver Su Venida), no estorbarán a aquellos que duermen, porque la trompeta de Dios sonará, en la última trompeta, cuando el último sello es abierto, cuando el séptimo ángel haya dado su Mensaje, entonces sonará la última trompeta (o sea que será después que el séptimo ángel de las siete edades haya dado su Mensaje, después de eso viene ¿qué? La última Trompeta) y los muertos en Cristo resucitarán, y nosotros que estamos vivos, que hayamos quedado, seremos arrebatados juntos para recibir al Señor en el aire. Él ahora se presenta para reclamar Su posesión”.
Ahora podemos ver aquí lo que está prometido para suceder. Y vean ustedes, vamos a ver aquí en la página 454 y 459, dice:
“112. Entonces es entre el Sexto y Séptimo Sello cuando Él llama esta gente, los cuales fueron mencionados por Jesucristo en Mateo 24:31. Cuando la Trompeta suena, será la Trompeta de los dos testigos de la edad de gracia para los judíos”.
Esa Gran Voz de Trompeta ¿es qué? La Trompeta de los dos testigos, que son los Dos Olivos y los dos candeleros de oro de Apocalipsis, capítulo 11. Dice:
“Suena una Trompeta… Ahora veámoslo más claro acá en Mateo 24:31: ‘Y enviará sus ángeles (no es solamente uno, sino dos) con gran voz de trompeta’. ¿Qué es? Cuando Dios habla, se oye el sonido de trompeta. Siempre ha sido así la Voz de Dios, llamando a la batalla. Dios está hablando. Estos dos ángeles vienen con el sonido de la Trompeta. Y noten bien: Pero en los días de la voz del séptimo ángel, suena la Trompeta. En los días de la voz del primer ángel, sonó la trompeta. En los días de la voz del segundo ángel, sonó una trompeta, y así fue cuando Él mandó a cada uno”.
Esto fue cuando Él mandó a cada Ángel Mensajero en cada edad de la Iglesia gentil.
“113. Pero cuando fueron anunciados los Sellos, estaban todos juntos en una gran escena Divina para llamar un grupo de gente, y hubo el sonido de una sola Trompeta; y fueron abiertos siete Sellos. Él está reuniendo Sus judíos escogidos de los cuatro ángulos de la Tierra.
114. Como hemos visto, Él habló de los seis Sellos, pero no dijo nada del Séptimo Sello. Vemos en Mateo 24:32 que Jesús entra a hablar en parábolas relacionadas al tiempo del llamamiento de los judíos escogidos”.
Ahora vean cómo esa Gran Voz de Trompeta es la Trompeta de los dos testigos; o sea que antes de sonar esa Gran Voz de Trompeta bajo el ministerio de los dos testigos, antes de sonar no puede haber resurrección de los muertos en Cristo ni transformación de nosotros los que vivimos, y por consiguiente tampoco el rapto de los escogidos de Dios, porque es a la Final Trompeta.
Cuando se habla de la Final Trompeta, pues no vienen más trompetas después, la última Trompeta que es la Trompeta, vamos a ver, página 130 del libro de Citas, dice en el párrafo 1164 tomado del mensaje “Cisternas Rotas”, página 35, dice:
1164 – “Recuerden que ‘los que están vivos y queden, no impedirán a los que están durmiendo; porque la Trompeta de Dios, esa última Trompeta…’ La sexta acaba de tocar. Y esa última Trompeta, como el último Sello, será la Venida del Señor. (Sonará) ‘Tocará, y los muertos en Cristo se levantarán primero”.
Ahí tenemos, vean ustedes el misterio de esa Séptima Trompeta o última Trompeta de estas Trompetas de Apocalipsis. En Apocalipsis, capítulo 11, verso 15 en adelante, dice:
“El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos”.
Vean cómo el Mensaje de la Gran Voz de Trompeta del Evangelio del Reino es el que da a conocer todos estos misterios de la Venida del Reino de Dios y del establecimiento del Reino de Dios, para reinar Cristo sobre este planeta Tierra, sobre el pueblo hebreo y sobre toda la raza humana.
Es bajo esta Séptima Trompeta que es dado a conocer este misterio, en donde los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de Su Cristo, y Él reinará por los siglos de los siglos.
Ahora vean cómo en esa Trompeta es que viene el anuncio de la Venida del Reino de Dios, viene el anuncio de Cristo tomando los reinos de este mundo, viene el anuncio de Cristo para reinar por los siglos de los siglos. O sea que la revelación divina de la Segunda Venida de Cristo como Rey de reyes y Señor de señores viene bajo la Séptima Trompeta, y leímos:
“… porque la Trompeta de Dios, esa última Trompeta…’. La sexta acaba de tocar. Y esa última Trompeta, como el último Sello, será la Venida del Señor. (Sonará) ‘Tocará, y los muertos en Cristo se levantarán primero. Sólo descansando hasta ese tiempo”.
¿Cuándo se levantan los muertos en Cristo? Cuando haya sonado, cuando haya dado Su Mensaje esa Trompeta Final, esa Séptima Trompeta, que es la Trompeta de los dos testigos, que es el Séptimo Sello, y que es el Mensaje que traen los dos testigos.
El Mensaje que traen los dos testigos, los ministerios de los Dos Olivos, los ministerios de Moisés y Elías, es el Mensaje del Séptimo Sello, es el Mensaje de la Segunda Venida de Cristo como el León de la Tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo. Ese es el misterio más grande contenido bajo el Séptimo Sello y bajo la Séptima Trompeta de Apocalipsis, capítulo 11 y verso 15 en adelante.
Vean, cuando fue abierto el Séptimo Sello hubo silencio en el Cielo, y luego de eso… (esto está en Apocalipsis, capítulo 8, verso 1), y luego de eso, dice:
“Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas”.
Y sigue enumerando ahí todas estas cosas, y luego dice:
“Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono”.
¿Quién era el que ofrecía, con el incensario, las oraciones allí? El Sumo Sacerdote. Vean, es Cristo, el cual es el Sumo Sacerdote, y el cual luego se convertirá en el Juez de toda la Tierra. Sigue diciendo:
“… y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos”.
¿Por qué? Porque todos los santos que han partido durante las siete edades de la Iglesia gentil, han orado por su regreso a la Tierra en un cuerpo eterno, han orado por la resurrección prometida para el Día Postrero.
“Y el ángel tomó el incensario, y lo llenó del fuego del altar, y lo arrojó a la tierra; y hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto”.
Ahora vamos a ver esto aquí en Apocalipsis, capítulo 11, verso 15 en adelante esto, donde hubo truenos, voces y relámpagos y un terremoto, dice así:
“El séptimo Ángel tocó la trompeta…”.
Ahora vean, allá era bajo el Séptimo Sello y ahora acá bajo la Séptima Trompeta, porque la Séptima Trompeta, así como el Séptimo Sello es la Venida del Señor, sonará y los muertos en Cristo se levantarán primero en cuerpos inmortales, y luego nosotros seremos transformados, pero primero tiene que sonar esa Trompeta.
“El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.
Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios,
diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.
Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra.
Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo”.
¿Ven que sucede lo mismo que sucedió bajo el Séptimo Sello?, sucede bajo la Séptima Trompeta, porque estos son misterios bajo el Séptimo Sello y también bajo la Séptima Trompeta, porque la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello son la Venida del Señor, la Segunda Venida de Cristo; y por eso es que los Dos Olivos, que son los que suenan esa Gran Voz de Trompeta para llamar y juntar a los escogidos de Dios de en medio del pueblo hebreo, lo que les estarán predicando ¿es qué? La Séptima Trompeta, que es el Séptimo Sello, que es la Segunda Venida de Cristo.
O sea que lo mismo que suena, que es revelado, que es predicado a los escogidos de entre los gentiles, a la Iglesia del Señor, es predicado al pueblo hebreo ¿y qué es? La Segunda Venida de Cristo. Con otra cosa no pueden ser llamados los escogidos de entre los gentiles en este tiempo final, para ser preparados y ser transformados en este tiempo final, y los muertos en Cristo resucitar, y tampoco pueden ser llamados y juntados los escogidos del pueblo hebreo: 144.000 hebreos.
Por eso pueden ir misioneros predicando el Evangelio de Jesucristo en Su Primera Venida, predicando la Primera Venida de Cristo y el pueblo hebreo no creerá, porque el pueblo hebreo está esperando la Venida del Mesías en este tiempo final.
En medio del pueblo hebreo está ese ambiente espiritual en el alma de todo el pueblo hebreo en este tiempo, porque ellos han regresado de otras naciones para ver y recibir al Mesías en Su Venida, y ellos dan testimonio de que este es el tiempo para Su Venida.
Y por esa causa es que ellos están en esa búsqueda del Mesías en Su Venida y también de Elías preparándole el camino, porque, para y bajo la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello encontramos ¿qué? Miren ustedes, bajo la Séptima Trompeta encontramos a Moisés y Elías, los Dos Olivos sonando la Trompeta, y bajo el Séptimo Sello encontramos la Venida de Cristo.
Ahí tenemos a Moisés, a Elías y a Jesús, es la Venida del Espíritu de Dios manifestando los ministerios de Jesús por segunda vez, de Elías por quinta vez y de Moisés por segunda vez; eso es la Séptima Trompeta sonando, y llamando y juntando a todos los escogidos de Dios, porque la Séptima Trompeta, esa Gran Voz de Trompeta como el Séptimo Sello es la Venida del Señor, sonará y los muertos en Cristo resucitarán primero, y luego nosotros los que vivimos seremos transformados.
Estamos en el tiempo más glorioso de todos los tiempos, en el tiempo en que misterios bajo el Séptimo Sello están siendo abiertos, revelados a todos nosotros en este tiempo final bajo la Séptima Trompeta para el pueblo hebreo y Séptimo Sello para la Iglesia del Señor Jesucristo.
Lo que contiene y revela el Séptimo Sello para la Iglesia de Jesucristo es lo que contiene y revela la Séptima Trompeta para el pueblo hebreo: la Segunda Venida de Cristo como el León de la Tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo, en donde nos estaría mostrando todas las cosas relacionadas a Su Venida, todo el orden de Su Venida, todas las cosas que Él estará haciendo en Su Venida; y esos son misterios bajo el Séptimo Sello para la Iglesia del Señor Jesucristo y bajo la Séptima Trompeta para el pueblo hebreo.
Ahora hemos visto que la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello son la Venida del Señor, sonará y los muertos en Cristo resucitarán primero.
Hemos visto también en la página 57 del libro de Los Sellos en español, lo que dice el precursor de la Segunda Venida de Cristo, el reverendo William Branham, dice:
“‘Y vi otro ángel fuerte descender del cielo, cercado de una nube, y el arco celeste sobre su cabeza…’.
17. Ahora, si usted se fija bien, notará que esta persona es Cristo, porque aun en el Antiguo Testamento Él fue llamado el Ángel del Pacto; y Él ahora viene directamente a los judíos porque la Iglesia ha llegado a su fin (viene a los judíos porque la Iglesia ¿qué? Ha llegado a su fin, ¿y quién es el que viene? El Ángel Fuerte de Apocalipsis, capítulo 10, que es Cristo en Su Venida):
‘… y su rostro era como el sol, y sus pies como columnas de fuego’.
18. ¿Recuerdan el Ángel de Apocalipsis capítulo 1? Este es el mismo. Un ángel es un mensajero, y él es un mensajero a Israel”.
¿Cómo viene? Viene como el Mensajero a Israel, el Ángel de Apocalipsis, capítulo 10, verso 1 en adelante. Ahora, sigue diciendo:
“Un ángel es un mensajero, y él es un mensajero a Israel. ¿Ve usted? La Iglesia está a punto de ser raptada, Él viene por Su Iglesia”.
Ahora vean, el Ángel del Pacto de Apocalipsis, capítulo 10, es el mismo Hijo del Hombre de Apocalipsis, capítulo 1 que aparece con Su vestidura hasta los pies, ceñido por el pecho con un cinto de oro, con Sus ojos como llama de fuego, con Su rostro como el sol resplandeciendo, y una espada saliendo de Su boca, y con Sus pies como columnas de fuego o como bronce bruñido; y vean ustedes, es el mismo Ángel, es el Hijo del Hombre viniendo en el Día Postrero.
Ahora, vean en la página 148 del libro de Citas, dice… vamos a ver 147, dice, el párrafo 1310:
1310 - “Ahora, Jesús Mismo dijo, en el día cuando el Hijo del Hombre se está revelando; en otras palabras, el Hijo del Hombre, el ministerio de Jesucristo Mismo”.
¿Qué es la manifestación del Hijo del Hombre o Venida del Hijo del Hombre? Es el ministerio mismo de Jesucristo.
“La iglesia pasará por la justificación por Lutero, por la santificación por Wesley, por el bautismo del Espíritu Santo por los Pentecostales, y crecerá bien en adelante en la perfección del Hijo del Hombre, eso cuando Marido y Esposa serán la misma Persona. Dios será tan manifiesto en Su Novia, Su Iglesia, hasta que ellos dos serán el mismo”.
¿Por qué? Porque ella será parte de Él y Él parte de ella.
Ahora, podemos ver también en la página 13A, párrafo 128, dice:
128 - “Ahora, ¿qué prometió Él? - Vindicarse a Sí Mismo en un hombre, un cuerpo humano, como le hizo a Abraham, cuando el Hijo del Hombre… Sería el Hijo del Hombre, no - no - no – no el Hijo de Dios ahora, el Hijo de Dios en el Hijo del Hombre. En el capítulo 1, versículo dos o Ezequiel, Jehová llamó a Ezequiel, el Hijo del Hombre, exactamente como Jesús se llamó a Sí Mismo. Ustedes entenderán eso a través de la enseñanza de la semana. Vean, ¿qué es el Hijo del Hombre? - profético. ¿Qué sería Malaquías 4? - un profeta. ¿Cuáles eran estas cosas que han de suceder en los últimos días? Ahora, Él no dijo cuándo, Él dijo que sucederían; sucedieron. Ahora… si usted… Él aún es el Hijo de Dios, el Hijo del Hombre, listo para ser revelado en los últimos días en el trono de David como Hijo de David… Él es esa Palabra y - y Él sólo está cambiando Su máscara de lo que no podía verse a lo que está absolutamente declarado - la Palabra hecha carne”.
Y vamos a ver otro lugar, vean cómo es Dios en morphe, y lo que cambia es el velo de carne. Ahora, página 12A, 126, dice:
126 - “¿Por qué Él no fue reconocido como Hijo del Hombre? El Hijo del Hombre era la revelación espiritual de profeta; hijo del hombre significa profeta. Ahora, si ustedes tornan sus Biblias a Ezequiel capítulo 2 y versículo 1, ustedes encontrarán que Ezequiel era el profeta, la Palabra de Dios para aquel día y el Mismo Jehová lo llamó hijo del hombre. Jehová llamando a un hombre, hijo del hombre – tal como Jesús se reveló a Sí Mismo como Hijo del Hombre. ¿Qué era eso? La Palabra prometida de aquella hora siendo manifestada”.
¿Cómo estaba siendo manifestada? Estaba siendo manifestada en carne humana, estaba siendo manifestada en un hombre, en un profeta.
“El mismo Dios - Dios del tiempo de Ezequiel; Dios del tiempo de Jesús - Hijo del Hombre. Él no fue - en aquel tiempo Él fue el hijo del hombre porque Él había venido para revelarse a Sí Mismo a Israel como un profeta. Y ellos lo rechazaron y esa era la profecía, que ellos le recibirían a Él en el Nombre del Hijo del Hombre, un profeta, porque eso estaba de acuerdo a la Palabra. En Deuteronomio 18:15 dice: ‘El Señor tu Dios levantará un profeta como yo,’ Y cuando Él vino se identificó a Sí Mismo con Su ministerio, como hombre, no como Hijo de Dios, sino como Hijo del Hombre. Dios es Espíritu y Él se reveló a Sí Mismo como Hijo del Hombre, lo que estaba supuesto a ser y ellos estaban ciegos y no lo pudieron ver. Pero ahora en los gentiles Él se revela a Sí Mismo como el Hijo de Dios el cual es el Espíritu Santo… A través de las edades la Iglesia ha servido en el bautismo del Espíritu Santo, pero Jesús dijo aquí, para hacer que Malaquías 4 y el resto de estas Escrituras sean reales para ustedes (¿ven?), que en los últimos días, justamente antes de la Venida, la condición mundial sería como la de Sodoma y el Hijo del Hombre se revelaría a Sí Mismo como el Hijo del Hombre, tal y como lo hizo en los días de Sodoma. Acusadores ciegos, ¿no pueden ver eso? ¡Sus Palabras son verdaderas! ¡Sin clavos, sin cicatrices ni huellas, sin espinas, es el Hijo de Dios personificado en Su Iglesia como Hijo del Hombre! Tiene que cumplir a Malaquías 4 y el resto de las Escrituras… El Hijo del Hombre revelado entonces como profeta, Hijo de David el Rey y ahora el Hijo de Dios para las edades de la iglesia (o sea, para las siete edades de la Iglesia). Como Dios no es hombre (Dios es Espíritu), y el Espíritu - Hijo es el Espíritu Santo el cual está revelando la edad de la iglesia; pero está prometido aquí, que en los últimos días el Hijo del Hombre sería Revelado”.
Y ahora, la página 22 y 23 del libro de Citas, párrafo 183, dice:
183 - “El Hijo del Hombre está ahora siendo revelado desde el cielo. ¿Vendrá después de un tiempo, hermano Branham? Es ahora; y yo deseo no hacer esto tan personal en esta reunión, espero que su espíritu dentro de usted que es dado por Dios, pueda leer lo que estoy hablando. El Hijo del Hombre ya ha venido de Su gloria y se está revelando a sí mismo por los cuantos años pasados, a Su Iglesia en Su misericordia; enseñándoles Su gran presencia, haciendo las mismas cosas que El hizo cuando Él estuvo aquí en la tierra, revelándose a sí mismo como Él lo hizo a Abraham antes de la destrucción (o sea, de la destrucción de Sodoma y Gomorra). Él ha venido ahora en misericordia revelándose a sí mismo a la Iglesia; se han reído y lo han escarnecido (Vino revelándose a Su Iglesia a través de carne humana en el reverendo William Branham, pero vino en misericordia manifestado).
La siguiente vez que Él se revele a sí mismo, será en el juicio al mundo y las naciones que se olvidaron de Dios y pecaron su manera de gracia… Su día de Gracia, más bien”.
Ahora vean, se reveló dos mil años atrás a través de carne humana en Jesús, luego para la Iglesia del Señor Jesucristo se reveló en el reverendo William Branham en misericordia, y la próxima vez que se revela el Hijo del Hombre es en juicio, porque la Venida del Hijo del Hombre bajo el Séptimo Sello y Su cumplimiento entrará a esa etapa de juicio divino.
O sea que la revelación del Hijo del Hombre luego del ministerio del reverendo William Marrion Branham, o sea, la próxima manifestación del Hijo del Hombre, que será por medio de carne humana, en donde estarán los ministerios de los Dos Olivos y de los dos candeleros, de los ministerios de Moisés y Elías manifestados en carne humana también, y el ministerio de Jesucristo, el ministerio del Hijo del Hombre manifestado en carne humana también, será en el cumplimiento de la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, que es la Venida del Señor.
Ahora, dos mil años atrás, cuando Jesús nació en Belén de Judea, se estaba cumpliendo (¿qué?) la Primera Venida de Cristo. Pero luego tuvo que esperar cerca de 30 años para comenzar Su ministerio; y luego que comenzó Su ministerio tuvo que esperar tres años y medio, para, al final de los tres años y medio cumplir la Obra de Redención en la Cruz del Calvario.
De nada hubiera valido la Primera Venida de Cristo si Cristo no muere en la Cruz del Calvario. Él decía: “Si es posible pasa de mí esta copa” [San Mateo 26:39, San Marcos 14:36, San Lucas 22:42], pero no era posible pasar de Jesús esa copa y el mundo seguir existiendo.
Y no será posible para el tiempo final, el mundo continuar existiendo bajo el reino de los gentiles, no será posible al cumplirse la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello; y si no se cumple el Séptimo Sello y Séptima Trompeta, tampoco será posible para el mundo continuar existiendo, porque el juicio divino también destruiría la raza humana, incluyendo a los escogidos de Dios.
Pero con la Venida del Hijo del Hombre, en la apertura en cuanto a cumplimiento del Séptimo Sello y Séptima Trompeta, en donde Cristo viene para llevar a cabo Su Obra de Reclamo, encontramos que, así como cuando Jesús nació en la Tierra estaba cumpliéndose la Primera Venida de Cristo, pero la Obra que Él haría en Su Primera Venida sería al final de Sus días aquí en la Tierra en carne humana.
Y ahora, al final de la Obra que Cristo estará haciendo en el Día Postrero como Hijo del Hombre e Hijo de David, al final de Su Venida o al final de Su manifestación, que es al final del Séptimo Sello, quedará realizada esa Obra.
Vean, en la página 464 y 465 en el libro de Los Sellos en español, dice:
“[138]. Debemos recordar que este séptimo Sello es el fin del tiempo de todas las cosas”.
O sea que uno de los misterios que está encerrado bajo el Séptimo Sello es el fin de todas las cosas, es el fin de los reinos de este mundo, es el fin de los reinos gentiles en los pies de hierro y de barro cocido, porque vean, la Piedra no cortada de manos de Daniel, capítulo 2, verso 35 al 45, es el que les pone fin a los pies de hierro y de barro cocido, y a la estatua completa que representa el Reino de los gentiles desde el tiempo de Nabucodonosor hasta este tiempo final.
“[138]. Debemos recordar que este Séptimo Sello es el fin del tiempo de todas las cosas. Correcto. Las cosas escritas en el Libro de la Redención, sellado desde antes de la fundación del mundo con siete sellos, todo termina. Es el fin de este mundo agitado, el fin de la naturaleza agitada y es el fin de todo. En eso también encontramos el fin de las Trompetas, de las Copas, de la Tierra; y aun es el fin del tiempo. El tiempo termina, así nos lo dice la Biblia en Apocalipsis 10:1-7, donde el Ángel dijo: ‘El tiempo no será más’, Y eso será en el día cuando este gran evento suceda (¿qué gran evento? El Séptimo Sello). Allí todo termina.
139. Al final de este Séptimo Sello es el fin de la edad de la Iglesia; es el fin del Séptimo Sello, es el fin de las Trompetas, es el fin de las Copas y aun es el fin de la entrada al Milenio. Todo eso es contenido en el Séptimo Sello”.
Y luego comienza a decir que el Séptimo Sello es como un cohete que es disparado y hace esas explosiones, y del cual salen primero cinco estrellas y una estrella de esas explota y sale cinco estrellas más, y de esas cinco estrellas… y luego todo termina, vamos a leerlo para que lo tengan claro, dice:
“140. Es como disparar un cohete al aire. Este cohete hace una explosión por aquí cerca; y luego mucho más alto hace otra explosión, y de allí salen cinco estrellas. Una de esas cinco hace una explosión, y de allí salen otras cinco estrellas; y una de esas estrellas explota, y de allí salen otras cinco estrellas; y después desaparece gradualmente. Así es el Séptimo Sello. Allí termina el tiempo para el mundo. Es el fin del tiempo para esto y aquello y todas las cosas. Todo termina con el Séptimo Sello. Ahora, ¿cómo lo va a hacer Dios? Eso es lo que no sabemos, no lo sabemos. En esto será el tiempo para todas estas cosas y la entrada del Milenio”.
Ahora vean cómo bajo el Séptimo Sello está el misterio de la entrada al Milenio también, cómo bajo el Séptimo Sello está también el misterio de los Dos Olivos, de Moisés y Elías tocando la Trompeta Final o Gran Voz de Trompeta, o Séptima Trompeta de Apocalipsis, capítulo 9.
Vean cómo bajo el Séptimo Sello todo el Programa Divino se estará llevando a cabo, al* correspondiente al Día Postrero; y al final del Séptimo Sello, o sea, al final del ministerio del Hijo del Hombre aquí en la Tierra, al final será el fin de todo: el fin del mundo, el fin de los reinos de este mundo, el fin del tiempo, el fin de las copas, el fin de las trompetas y el fin de la entrada al Milenio; o sea que al finalizar el cumplimiento del Séptimo Sello aquí en la Tierra, entonces entraremos al glorioso Reino Milenial. Todos estaremos siendo preparados por el Séptimo Sello, bajo todo el tiempo de la manifestación del Séptimo Sello, que es la Venida del Señor.
Ahora, este misterio, vean ustedes, comienza en una forma sencilla como fue la Primera Venida de Cristo: estaba naciendo allí el Cordero de Dios en Belén de Judea, pero todavía no estaba manifestado como Cordero de Dios.
Cuando Juan el Bautista lo vio cuando tenía cerca de 30 años, dijo: “He aquí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo” [San Juan 1:29, 1:36], estaba comenzando Su ministerio como Cordero de Dios; pero no llevaría a cabo Su Obra de Cordero de Dios hasta el final de ese ministerio. Al final de Su ministerio de tres años y medio sería la culminación de la Primera Venida de Cristo como Cordero de Dios muriendo en la Cruz del Calvario, y llevando nuestros pecados y redimiéndonos con Su Sangre preciosa.
Y al final del Séptimo Sello, al final del cumplimiento de la Segunda Venida de Cristo, será que los muertos en Cristo resucitarán y la Obra de Reclamo estará realizada para la Iglesia de Jesucristo; y luego le tocará al pueblo hebreo escuchar esa Gran Voz de Trompeta o Trompeta Final o Séptima Trompeta de Apocalipsis, capítulo 11, verso 15. Vean dónde está la Séptima Trompeta: en el capítulo 11, que es el capítulo de los Dos Olivos y dos candeleros de oro, que son los ministerios de Moisés y Elías.
Y vean cómo estos misterios están bajo el Séptimo Sello, bajo la Segunda Venida de Cristo como el León de la Tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo.
El precursor de la Segunda Venida de Cristo nos habló acerca de la Venida del Señor para el Día Postrero, y nos dijo un sinnúmero de cosas con relación a la Venida del Señor, y dijo que todo sería tan sencillo que si no vigilábamos nos pasaría por encima. En la 472, dice (del libro de Los Sellos):
“164. Noten bien el Mensaje del tiempo del fin (este Sello) (¿cuál es el Mensaje del tiempo del fin? El Séptimo Sello) … Él nos ha revelado los seis Sellos, pero no dice nada del séptimo. El Sello del tiempo del fin, cuando empiece será algo completamente secreto, según la Biblia. Pero antes de conocer eso… Recuerden Apocalipsis 10:1-7: que al fin del Mensaje del séptimo ángel TODOS los misterios de Dios serian conocidos. Estamos en el tiempo del fin —la apertura del Séptimo Sello.
165. El domingo pasado, hace una semana hoy, cuando estaba predicando sobre: ‘Sed humildes, sed humildes, recuerden que Dios obra en cosas pequeñas’, en verdad no me daba cuenta de lo que estaba hablando, pero ahora lo veo bien. Será de una manera tan humilde. Uno pensaría que una cosa tan tremenda sería revelada allá en el Vaticano, pero más bien viene como vino Juan el Bautista, viene como el nacimiento de nuestro Señor, ¡allá en un establo! ¡GLORIA A DIOS! ¡La hora está a la mano! ¡Aquí estamos! ¡Oh hermano!”.
¿Viene cómo? Viene como vino Juan el Bautista, y viene como el nacimiento de Jesús allá en un establo. ¿Y por qué coloca a Juan el Bautista? El Séptimo Sello viene como Juan el Bautista y sin embargo, miren ustedes, el precursor de la Segunda Venida de Cristo vino como Juan el Bautista, pero ahora él no era el Séptimo Sello; pero ahora el Séptimo Sello, la Venida del Señor viene como el Juan el Bautista y como el nacimiento de Jesús. ¿Y por qué como Juan el Bautista? Porque viene con Sus Ángeles, y Sus Ángeles son Moisés y Elías, y Juan el Bautista era el tercer Elías de aquel tiempo.
Y ahora viene como Juan el Bautista, que era Elías, ahora viene como Elías en su quinta manifestación y viene como el nacimiento del Señor Jesucristo allá en un establo; o sea que viene como Elías, y viene como Jesús, y también viene como Moisés, así viene el Séptimo Sello, porque el Séptimo Sello y la Séptima Trompeta es la Venida del Señor; y la Trompeta Séptima la suena ¿quién, de Apocalipsis, capítulo 11? Pues Apocalipsis 11:3 en adelante, que es Moisés y Elías, los Dos Olivos son los que suenan la Trompeta, y esa Séptima Trompeta es la que proclama y revela el fin de los reinos de este mundo, que vienen a ser los reinos de nuestro Señor, o sea, pasarán a ser de nuestro Señor y de Su Ungido o de Su Cristo o del Mesías, del Ungido.
Ahora vean cómo estos misterios bajo el Séptimo Sello estaban ocultos hasta el tiempo del Séptimo Sello.
Ahora, la apertura del Séptimo Sello, en cuanto a su cumplimiento aquí en la Tierra, tiene que ocurrir primero, o sea, cumplir todo lo que luego para el pueblo hebreo y para la Iglesia del Señor Jesucristo sería el cumplimiento de la Segunda Venida de Cristo. Como para la Iglesia del Señor Jesucristo, la Primera Venida de Cristo y Su Obra de Redención en la Cruz del Calvario tenía que cumplirse primero para luego ser predicada Su Venida a los gentiles.
Y el Séptimo Sello, así como los demás Sellos, antes de ser tomado el Libro de la Redención en el Cielo por Cristo, por el Cordero, y abrirlo en el Cielo, primero el cumplimiento de esos Sellos se lleva a cabo aquí en la Tierra de etapa en etapa, de edad en edad; o sea que se abre (en cuanto a su cumplimiento) aun estando sellado y cerrado ese Libro de los Siete Sellos en el Cielo; y después cuando es abierto el misterio de esos Sellos, se ve lo que ocurrió bajo el cumplimiento de esos Sellos aquí en la Tierra.
El Libro de los Siete Sellos en el Cielo no puede ser abierto hasta que se cumpla el Séptimo Sello aquí en la Tierra, y luego Cristo toma el Libro y así toma Sus derechos, toma Su gran poder al tomar el Libro, como dice Daniel, capítulo… vamos a ver, capítulo 7 de Daniel, dice, verso 13 en adelante, dice:
“Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de él.
Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido.
Se me turbó el espíritu a mí, Daniel, en medio de mi cuerpo, y las visiones de mi cabeza me asombraron.
Me acerqué a uno de los que asistían, y le pregunté la verdad acerca de todo esto. Y me habló, y me hizo conocer la interpretación de las cosas.
Estas cuatro grandes bestias son cuatro reyes que se levantarán en la tierra.
Después recibirán el reino los santos del Altísimo, y poseerán el reino hasta el siglo, eternamente y para siempre”.
Ahora vemos cómo a este Hijo del Hombre se le dio que se acercara delante del Anciano de días que está sentado en el Trono.
“Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido”.
Eso es lo mismo que sucede en Apocalipsis, capítulo 5 y en Apocalipsis, capítulo 11, verso 9 en adelante; y luego vendrá el juicio divino sobre la raza humana y se cumplirá entonces Apocalipsis, capítulo 6, verso 12 en adelante, donde dice… capítulo 6, verso 12 en adelante, dice:
“Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre;
y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento.
Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar.
Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes;
y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero;
porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie? (El gran día de Su ira, que es la gran tribulación, ha llegado, dice aquí)”.
Ahora vean cómo se abre la gran tribulación bajo el Sexto Sello, y bajo el ministerio de los Dos Olivos.
Y en el libro de Los Sellos en español dice, página 362, vamos a ver cómo dice aquí, tenemos que comenzar un poquito antes, dice… hablando de los ministerios de Moisés y Elías, dice:
“150. Entonces en Daniel 12 leímos que todos aquellos cuyos nombres fueron hallados escritos en el Libro, esos serán libertados. Ahora, aquí Dios está a punto de dar libertad a su segundo hijo, Israel, después de la tribulación. Ahora, Israel, es el hijo de Dios, y Él lo va a libertar en el tiempo de la tribulación, exactamente de la misma manera como lo hizo en Egipto (o sea que se estará repitiendo lo que sucedió allá en Egipto).
151. Nos conviene hacer otra pausa aquí y ver otro detalle importante. Fíjense en lo que harán estos dos profetas, igual como hicieron allá en el principio:
‘Y daré a mis dos testigos, y ellos profetizarán por mil doscientos sesenta días, vestidos de sacos.
Estas son las dos olivas, y los dos candeleros que están delante del Dios de la tierra.
Y si alguno les quisiere dañar, sale fuego de la boca de ellos (ustedes recuerdan que de la boca de Cristo sale la espada —la Palabra), y devora a sus enemigos: y si alguno les quisiere hacer daño, es necesario que él sea así muerto.
Apocalipsis 11:3-5.
152. Sabemos que el fuego del capítulo diecinueve de Apocalipsis, viene de Cristo, una espada sale de Su boca, la cual es la Palabra. ¿Correcto? Oh, hermano, obtenga el conocimiento de estas cosas para la apertura del séptimo Sello mañana. Con la espada, Dios devora a Sus enemigos.
153. Ahora fíjense en esto: Cuando estos dos profetas están profetizando, si cualquier hombre les hace daño, entonces fuego sale de su boca, el Fuego del Espíritu Santo -la Palabra. La Palabra es Dios, la Palabra es fuego, la Palabra es Espíritu, la cual procede de sus bocas. Fíjense en Moisés: Allá en Egipto estaban maltratando a los judíos. Faraón no los dejaba ir. Entonces Dios puso Su Palabra en la boca de Moisés; eran los pensamientos de Dios entrando al corazón de Moisés, y entonces él sale para expresar estos pensamientos, y cuando los expresa, vienen a ser la Palabra de Dios. Estiró la mano y dijo: ‘Sean las moscas’. Y de repente aparecieron moscas. Entonces, ‘Si alguno les dañare, sale fuego de sus bocas y devora a sus enemigos’. Allí está. Pueden hablar lo que les plazca, y así sucederá. ¡Amén! ‘Y si alguno les quisiere hacer daño, es necesario que él sea así muerto’.
154. Sí, hermano, Dios estará en la escena entonces. Ellos tendrán el poder para cerrar los cielos para que no llueva durante el tiempo de su profecía - el ministerio de Elías. Él sabe cómo hacer eso, porque lo ha hecho antes. ¡Amén! Moisés también sabe cómo hacerlo, porque lo ha hecho antes. Por esa razón, estos dos fueron reservados para este tiempo. ¡Amén!
155. Aquí yo podría decir algo muy tremendo, pero creo sería mejor dejarlo para mañana. Bien. Y tendrán poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y también poder para herir la tierra con las plagas cuantas veces quieran. ¿Qué es? ¿Qué otra cosa fuera de la Palabra puede producir estas cosas? Ellos podrán hacer que la naturaleza haga lo que ellos quieran.
156. ¡Aquí está! Ellos son los que producen este sexto Sello. Lo descubren y lo abren; es el poder de Dios para interrumpir la naturaleza. El sexto Sello es totalmente una interrupción de la naturaleza.
157. ¿Me entienden? Allí está el Sello. ¿Quién lo hace? Son los profetas, del otro lado del rapto. Ellos con el poder y la Palabra de Dios condenarán la naturaleza. Podrán producir terremotos, convertir la luna en sangre, o hacer bajar el sol, en fin, cualquier cosa que ellos demanden, eso va a suceder.
158. Allí lo tienen. ¿Ven cómo los Sellos se abren juntamente con las edades de la Iglesia, y cómo muestra los mártires? Y ahora vemos a los dos profetas parados allí con la Palabra de Dios para hacer con la naturaleza lo que gusten; y hasta pueden sacudir la tierra. Muestra exactamente quienes hacen esto, son Moisés y Elías, porque esos son sus ministerios repitiéndose (es la repetición de esos ministerios para el tiempo final). ¿Lo pueden ver? ¿Pueden ver lo que es el sexto Sello? Son esos dos profetas.
159. Ahora, fíjense bien y no dejen que esto les escandalice: Fíjense quiénes abrieron este Sello: Profetas. ¡Amén! Allí lo tienen. ¡Oh, hermano! ¡Estamos viviendo en el día del Águila! Ellos abrieron el sexto Sello porque tenían el poder para hacerlo. AMÉN. Allí se está abriendo el sexto Sello.
160. Ahora, retrocediendo un poco, podemos ver que Jesús dijo que esto sucedería, y allá en el Antiguo Testamento Ezequiel también dijo cómo sería. Y ahora aquí vemos el sexto Sello ya abierto. Ud. dirá: ‘Eso es algo muy misterioso. ¿Cómo sucedió?’ Aquí está la clave, el secreto: fueron los profetas, porque así lo dice la Biblia. Ellos lo pueden abrir en cualquier tiempo; pueden hacer lo que quieran con la naturaleza. Y hacen lo mismo que hicieron en su ministerio anterior porque ya saben cómo hacerlo.
161. Cuando yo vi esto, me levanté de la silla y comencé a dar vueltas en el cuarto. Pensé: ‘¡Oh, cuán agradecido estoy, Padre Celestial!’ Allí está, eso es. Ellos abrieron ese sexto Sello. ¡Amén! Fíjense en ellos. Si alguno les dañare, fuego sale de su boca -la Palabra. El Espíritu Santo vino sobre los apóstoles, y también fuego, la Palabra, procedió de sus bocas.
162. Y acá en Apocalipsis capítulo diecinueve vemos la misma cosa: ‘Y de su boca sale una espada aguda (y de Su boca sale ¿qué? Una espada aguda)’. La Palabra. Es Cristo el que viene, y con esta espada aniquila a Sus enemigos, ¿correcto? Ahora, El ya viene. Fíjense bien.
163. Estos tienen poder para cerrar los cielos para que no llueva durante los días de su profecía. ¡Eso sí es poner una interrupción a la naturaleza!”.
Y en el libro de Los Sellos en español, página 254, dice:
“106. Ahora, anoche vimos que venía con su grande espada para matar (o sea, está hablando, vamos a ver, del anticristo que viene con una espada bajo el Tercer Sello), y también vimos que él será muerto con la Espada —la Espada de la Palabra. La Palabra de Dios es una espada de dos filos que lo matará. Espere usted hasta que esos Siete Truenos pronuncien sus voces (espere usted hasta que esos Siete Truenos ¿qué? Pronuncien sus voces); aquel grupo que en verdad puede tomar la Palabra de Dios y colocarla bien, entonces cortará y partirá; podrán cerrar el cielo, podrán hacer esto o aquello o lo que les plazca”.
¿Y quiénes son los que podrán cerrar el Cielo para que no llueva? Moisés y Elías.
Ahora, el anticristo, que en una de las edades vino con una espada, dice:
“107. Él será aniquilado con la Palabra que procede de Su boca (o sea, que procede de la boca de Cristo), la cual es más aguda que toda espada de dos filos. Ellos podrán llamar cien billones de toneladas de moscas si así lo desean. ¡AMEN! Lo que ellos digan así sucederá, porque será la Palabra de Dios procediendo de la boca de Dios (y la boca de Dios siempre es un profeta). Es la Palabra de Dios, pero El siempre usa al hombre para ponerla por obra. Dios pudo haber llamado las moscas allá en Egipto, pero dijo: ‘Moisés esto te corresponde a ti. Yo te digo lo que debes hacer, y tu anda y hazlo’. Así lo hizo. Pudo haber escogido el sol para esa obra, o la luna o el viento, pero dijo: ‘Moisés…’ Él escogió Su hombre”.
Y ahora, página 399 en español, está la pregunta número 11, donde le preguntan quién será ese Elías de Apocalipsis 11 que viene para predicar a los hebreos, dice:
“11. El Elías que viene a predicar a los judíos, ¿es el verdadero Elías que estuvo en los días de Achab, o será solamente el espíritu de Elías en otro hombre?
(Y para no leer mucho, voy a leer este primer párrafo, una parte de este primer párrafo donde dice)
94. Yo he pensado…, déjenme decirlo de esta manera (ojalá los hermanos que oirán esta cinta, lo entiendan bien): Yo he pensado que será un hombre de este tiempo (¿de qué tiempo? De este tiempo) ungido con ese espíritu; porque allá, cuando Elías ya había subido y Eliseo se encontró con los hijos de los profetas, ellos dijeron: ‘El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo’. Es que Eliseo obró igual a Elías”.
El cumplimiento de Apocalipsis, capítulo 11, de los Dos Olivos, vean ustedes lo que será, el cumplimiento de Elías de Apocalipsis, capítulo 11 como uno de los Dos Olivos, en la quinta manifestación del ministerio de Elías para predicarle al pueblo hebreo ¿será qué? Dice:
“Yo he pensado que será un hombre de este tiempo ungido con ese espíritu…”.
Cualquier persona que piense en otra forma no estará pensando como pensó nuestro hermano Branham, y si no estará pensando en la misma forma, pues va a estar todo enredado en cuanto a este misterio de Elías llevándole el Mensaje al pueblo hebreo.
Ahora, muchos esperan que el cuarto Elías venga para llevarle el Mensaje al pueblo hebreo, quizás, como también el pueblo hebreo estaba esperando la Venida de Elías, el Elías que se fue en un carro de fuego, y estuvo después en medio de ellos manifestado por segunda vez y se llamaba Eliseo, pero el ministerio era el de Elías el que estaba en Eliseo. Luego estuvo por tercera vez manifestado en medio del pueblo hebreo y el velo de carne se llamaba Juan el Bautista, luego vino a la Tierra por cuarta vez manifestado en el velo de carne William Marrion Branham, y vendrá por quinta vez manifestado en un hombre de este tiempo final.
Ahora le preguntan en la página 408 del libro de Los Sellos en español, en Preguntas y Respuestas, la pregunta número 17, dice:
“17. Hermano Branham, ¿es el séptimo ángel con el espíritu de Elías, el mismo Elías enviado a los 144.000 judíos durante los tres años y medio de la tribulación después del rapto? Algunos estamos enredados con esta enseñanza”.
Y todo el que piense en la misma forma, que será el séptimo ángel mensajero de la séptima edad de la Iglesia gentil, continuará enredado.
“138. No. No es el mismo”.
Si alguien dice que vendrá, cuando resucite seguirá siendo el séptimo ángel mensajero de la séptima edad de la Iglesia gentil, y él dice que ese no es el que va a Israel.
“138. No. No es el mismo. Son dos hombres distintos. Eliseo, que vino en la forma o lugar de Elías, no fue Elías. Y cuando el espíritu de Elías vino sobre un hombre llamado Juan el Bautista, tampoco fue Elías. Y el hombre, el séptimo ángel, el mensajero enviado al final de la Edad de Laodicea, no será Elías literal; será más bien un gentil a su pueblo.
139. Entonces, el espíritu de Elías viniendo en esta ocasión a esta gente, será un judío. Porque uno es enviado a su propio pueblo. Esa es mi revelación”.
Y en la pregunta que leímos, la pregunta número 11, dice que será un hombre ungido con ese espíritu, un hombre de este tiempo; o sea que no será literalmente el Elías que se fue en un carro de fuego, sino que será un hombre de este tiempo final ungido con ese espíritu.
Ahora, podemos ver que ese es el hombre con el ministerio de Elías por quinta vez y también con el ministerio de Moisés por segunda vez, y ese es el hombre que tendrá esa revelación de los Siete Truenos. ¿Y qué revelan los Siete Truenos? Pues revelan el Séptimo Sello. ¿Y qué es el Séptimo Sello? El Séptimo Sello es la Segunda Venida de Cristo. Y ese hombre será el que tendrá la revelación de los Siete Truenos, la revelación de la Voz de Cristo clamando como cuando un león ruge y Siete Truenos emitiendo sus voces.
Cuando nuestro hermano Branham escuchó los Truenos, en el libro de Los Sellos en español, nos dice en la página 466, dice:
“[143]. Lo que sucedió es: aquellos Siete Truenos que él escuchó y que le fue prohibido escribir, ese es el misterio detrás de esos Siete Truenos consecutivos que salieron”.
O sea, el misterio detrás de esos Siete Truenos ¿es cuál? El Séptimo Sello, la Venida del Señor.
“144. Ahora, ¿por qué? Prosigamos a probarlo: Este es el secreto que ninguno conoce. A Juan le fue prohibido escribirlo y aun de conocer un símbolo. ¿Por qué? Aquí está: No había ninguna actividad en el Cielo, porque de otra manera podría revelar el secreto. ¿Ahora lo ven? Si es tan tremendo, pues tiene que ser incluido, porque tiene que suceder; pero cuando sonaron los Siete Truenos… Ahora noten bien: Cuando vinieron los siete ángeles para tocar sus trompetas, entonces hubo un trueno; cuando Israel fue juntado, hubo una trompeta; cuando el tiempo no será más, entonces será la última trompeta, un trueno. Pero aquí tenemos siete truenos, uno tras otro: uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete —un número perfecto. Siete truenos, uno tras otro, sonaron así rápidamente: uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, pero sin que se entendiera (¿y por qué Juan no entendió? Vamos a ver). Luego, los Cielos no lo pudieron escribir, porque no lo conocen. Ninguna otra cosa tampoco lo conoce, porque no hay en qué basarse; es un tiempo de reposo. Fue tan tremendo que hasta a los Ángeles no les fue dado a conocer. Ahora, ¿por qué? Si Satanás lograra conocer esto, quizás haría gran daño. Y esa es una cosa que él no sabe. Él puede interpretar lo que quiera y personificar cualquier don (ojalá estén aprendiendo), pero él no puede conocer esto, porque ni está escrito en la Palabra. Es un secreto por completo. Los Ángeles y todos se callaron. Si ellos hubieran hecho algún movimiento, quizás eso hubiera servido para revelar algo, por eso se callaron y no se movieron.
145. Siete es el número perfecto de Dios y hubo estos siete truenos consecutivos uno tras otro. Estos siete truenos sonaron así rápidamente, como si estuvieran deletreando algo”.
Y pasamos a la página *471, donde dice:
“161. En eso la Voz me dijo: ‘No puedes enseñarles las cosas sobrenaturales a los bebés pentecostales. ¡Déjalos!’ Entonces me alzó y me colocó en un lugar muy elevado, donde había una reunión, y parecía una carpa o una especie de catedral. Yo miré, y así a un lado parecía que había una cajita, un lugar pequeño. Y esa Luz que ustedes ven sobre la fotografía estaba hablando con alguien más arriba de donde yo estaba. Se fue volando de donde yo estaba, y se fue a posar sobre la carpa, y dijo: ‘Te encontraré allí. Esto será la Tercera Etapa, y no se lo dirás a nadie’.
162. Y allá en el Cañón Sabino, Él me dijo: ‘Esta es la Tercera Etapa’. Hay tres cosas muy grandes que acompañan la Tercera Etapa. Una de ellas se abrió ayer, otra hoy, y queda una cosa que no puedo interpretar, porque está en un idioma desconocido. Pero estuve allí parado, y lo miré directamente; y esta es la Tercera Etapa, lo que viene. Y el Espíritu Santo de Dios…”.
¿Ven? Lo que viene es el Espíritu Santo de Dios en el cumplimiento del Séptimo Sello, para llevar a cabo la Obra correspondiente al Séptimo Sello, y luego Cristo tomar el Título de Propiedad y reclamar ahí todo lo que Él redimió con Su Sangre preciosa. O sea que es al final del ministerio del Séptimo Sello, es al final del ministerio que Él estará manifestando aquí en la Tierra en el cumplimiento del Séptimo Sello, en la hora de Su Venida.
Y cuando se habla de la hora de Su Venida, vean ustedes, una hora delante de Dios representa 41 años con unos 8 meses, y cuando nos habla de un día delante de Dios son mil años para nosotros, conforme a San Pedro en su segunda carta, capítulo 3, verso 8, y Moisés en el Salmo 90 y verso 4.
Ahora podemos ver cómo para el tiempo del cumplimiento del Séptimo Sello aquí en la Tierra, los siete truenos de Apocalipsis, capítulo 10, estarán emitiendo sus voces y estarán revelando el misterio del Séptimo Sello, o sea, el misterio de Su Venida.
Y cuando termine toda esa labor, en cuanto al cumplimiento del Séptimo Sello siendo abierto aquí en la Tierra, en cuanto a su cumplimiento, luego Cristo toma el Título de Propiedad allá en el Cielo; y el Séptimo Sello en el Cielo es abierto, ese es el último Sello que es abierto en el Cielo. Y el misterio del Séptimo Sello, vean ustedes, luego durante el Reino Milenial se estará dando a conocer a los seres humanos que estarán viviendo en este Planeta Tierra; así como el misterio de la Primera Venida de Cristo se ha estado dando a conocer a los seres humanos que han estado viviendo en estos últimos dos mil años de la raza humana.
Ahora podemos ver todos estos misterios que están bajo el Séptimo Sello, todos estos misterios que están bajo la Venida del Hijo del Hombre, que es la Venida del ministerio de Cristo para el Día Postrero, es la Venida del Jinete del caballo blanco de Apocalipsis 19, con una espada saliendo de Su boca, que es lo mismo del fuego saliendo de la boca de los Dos Olivos.
Y ahora, vean ustedes cómo nos muestra el profeta que es lo mismo. Y en la página 256 encontramos que nos habla acerca de la Venida del Jinete del caballo blanco de Apocalipsis, diciendo:
121. Pero cuando nuestro Señor aparezca sobre la Tierra, Él vendrá sobre un caballo blanco como la nieve, y será completamente Emmanuel —la Palabra de Dios encarnada en un hombre*”.
Si encontramos ese hombre prometido aquí, estaremos encontrando el Séptimo Sello siendo cumplido en la Tierra, y estaremos encontrando la Séptima Trompeta también, porque la Séptima Trompeta como el Séptimo Sello es la Venida del Señor.
Y si encontramos ese hombre donde el Verbo, la Palabra estará haciéndose carne en el Día Postrero, pues estaremos escuchando a través de él todas estas cosas que están prometidas que serán dadas a conocer, y estaremos viendo la Espada aguda de dos filos saliendo de la boca del Jinete del caballo blanco de Apocalipsis 19 viniendo en carne humana, estaremos viendo esa Espada de dos filos, que es la Palabra de Dios correspondiente a este Día Postrero, saliendo de la boca de Dios, saliendo de la boca del Jinete del caballo blanco de Apocalipsis 19.
Y la boca de Dios siempre ha sido un profeta aquí en la Tierra, estaremos viendo la Espada de dos filos: la Palabra de Dios saliendo de la boca de Dios, saliendo de la boca del Jinete del caballo blanco de Apocalipsis 19, saliendo de ese hombre, que es la boca de Dios, en el cual estará el Jinete del caballo blanco de Apocalipsis 19, el Espíritu Santo manifestado en el Día Postrero, viniendo conforme a Apocalipsis 19, y viniendo sobre un Caballo blanco como la nieve, o sea, viniendo sobre la Palabra pura del Día Postrero, y así cumpliendo lo correspondiente al Séptimo Sello, cumpliendo el Séptimo Sello, o sea, cumpliendo el Séptimo Sello y la Séptima Trompeta, que son la Venida del Señor, la cual tendrá diferentes etapas, dice que tiene un propósito triple, es en una forma triple; por lo tanto, tiene diferentes fases o etapas, y no podemos confundir esas diferentes etapas o fases por las cuales estará pasando el Séptimo Sello, el Jinete del caballo blanco de Apocalipsis, el Espíritu Santo viniendo encarnado en un hombre de este tiempo final.
Ahora vean cómo ha sido prometido que el espíritu ministerial de Elías vendrá en un hombre de este tiempo, y ahora también vemos que el Jinete del caballo blanco de Apocalipsis 19, que es Jesucristo en Espíritu Santo, vendrá también encarnado en un hombre, y también así el ministerio de Moisés; y eso es la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles para el tiempo final, eso es la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello: la Venida del Señor; y sonará, y los muertos en Cristo resucitarán primero, luego que haya sonado la Séptima Trompeta, la Venida del Señor, y luego nosotros los que vivimos seremos transformados.
Por eso es tan importante para la Iglesia de Jesucristo y para el pueblo hebreo, el Séptimo Sello y la Séptima Trompeta: porque son la Venida del Señor, que sería manifestada aquí en la Tierra y sonaría la Venida del Señor, bajo el Séptimo Sello y bajo la Séptima Trompeta.
Y vamos a ver, página… vamos a ver qué página es la que nos habla… hay una página que nos habla algo muy importante que no debemos dejar pasar por alto, está en el libro de Citas, vamos a empezar con la página 22, verso 176, dice:
176 - “Y allí están esos dos testigos. Y cuando ellos atormenten al mundo, con sus predicaciones, y reúnan otra vez a los judíos, trayéndolos a arrepentimiento, trayéndolos otra vez a que crean… cuando vean a Jesucristo viniendo por la Novia, ellos dirán: ‘Mirad, este es el Dios a quien esperábamos. ¡Este es Él!’ Pero El no viene por ellos, viene por Su Novia”.
O sea, en esa etapa, mientras está en la etapa con la Novia, Él estará pues ¿dónde? Pues entre los gentiles, porque la Novia es gentil. Cuando dice también: “Así como los judíos, ¿cuándo regresará el Evangelio a los hebreos?, ¿cuándo será?”, página 14, vamos a ver… o página 30, dice, ahora del libro de Las Edades, dice:
“109. ¿Cuándo volverá el Evangelio a los judíos? Cuando se haya terminado la dispensación de los gentiles. El Evangelio está listo para volver a los judíos. Oh, si tan sólo les pudiera decir algo que está a punto de suceder hoy, en este nuestro día. Esta gran cosa que va a suceder recorrerá hasta Apocalipsis 11; y aquellos dos testigos, aquellos dos profetas, Moisés y Elías, trayendo el Evangelio de nuevo a los judíos. Estamos listos. Todo está en orden. Igual como los judíos trajeron el Evangelio a los gentiles, así también los gentiles se lo llevarán de regreso a los judíos, y el Rapto sucederá”.
Ahora vean, dice que será Moisés y Elías los que le llevarán el Evangelio a los gentiles cuando haya terminado la dispensación gentil, y eso es los gentiles llevándole el Evangelio a los judíos, así como los judíos trajeron el Evangelio a los gentiles por medio del ministerio de San Pedro y de San Pablo.
Ahora vean, los ministerios de los Dos Olivos están representados también en San Pedro y San Pablo, y están representados también en Zorobabel, el príncipe descendiente de David (el rey), y el sacerdote Josué.
Ahora, vean cómo es que será cumplido el Evangelio siendo llevado por los gentiles a los hebreos, dice:
“Igual como los judíos trajeron el Evangelio a los gentiles, así también los gentiles se lo llevarán de regreso a los judíos, y el Rapto sucederá”.
O sea que vamos a ver un entrelace, pero vamos a ver ese entrelace acá entre los gentiles, y eso lo vamos a ver plenamente cuando los muertos en Cristo hayan resucitado y nosotros los que vivimos estemos transformados, y ahí estará la manifestación de los hijos de Dios adoptados; y en esa manifestación de los hijos de Dios adoptados, el mundo entero será estremecido, y el pueblo hebreo verá esos ministerios de Moisés y Elías, y el pueblo hebreo verá el ministerio mesiánico manifestado y dirá: “¡Este es al que nosotros estamos esperando!”.
El precursor de la Segunda Venida de Cristo dijo: “Del Occidente vendrá un Jinete en un caballo blanco, recorreremos esta senda una vez más. Es una promesa”. Página 2 del mensaje “El único lugar provisto por Dios para adorar”.
Ahora, podemos ver de dónde vendrá Apocalipsis 19, la Palabra de Dios encarnada en un hombre: será un occidental de la edad en la cual se cumpla la Venida del Señor, en la cual se cumpla el Séptimo Sello.
Así que no será ni en la primera, segunda, tercera, cuarta o quinta, sexta o séptima, sino en la Edad de la Piedra Angular, y el territorio en donde se cumpla la Edad de la Piedra Angular, de ahí vendrá un Jinete en un caballo blanco: el Jinete de Apocalipsis 19, que es el Espíritu Santo viniendo en carne humana manifestado en el Día Postrero, en un hombre del Día Postrero; y eso es lo que está esperando el pueblo hebreo.
Aquí en Colombia, a través de las noticias, han hablado cosas acerca del pueblo hebreo y de la esperanza del pueblo hebreo, de la esperanza de la Venida del Mesías, y hasta me han dicho que en las noticias han dicho que será del occidente, un occidental, y que… y un sinnúmero de detalles en cuanto a esa persona, tanto en cuanto a la edad más o menos que tendrá, en cuanto a su cabello cómo será, en cuanto a su estatura, todas esas cosas me estuvo diciendo Jairo que estuvieron - que han estado hablándolas por noticias; y un sinnúmero de cosas más, de las cuales pues no les quiero hablar ahora.
Y el pueblo hebreo está a la expectativa esperando el cumplimiento de la Venida del Mesías, para el llamado de la Gran Voz de Trompeta y para así afligirse el pueblo hebreo como se afligía en el Día de la Expiación. Eso es lo que está prometido en Zacarías, capítulo 12 para el pueblo hebreo, que Dios derramará espíritu de oración y de gracia, y buscarán al Señor. Vamos a ver, Zacarías, capítulo 12 dice, verso 10 en adelante:
“Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.
En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el llanto de Hadadrimón en el valle de Meguido.
Y la tierra lamentará, cada linaje aparte; los descendientes de la casa de David por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de la casa de Natán por sí, y sus mujeres por sí;
los descendientes de la casa de Leví por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de Simei por sí, y sus mujeres por sí;
todos los otros linajes, cada uno por sí, y sus mujeres por sí”.
Eso es lo mismo que nos dice Apocalipsis, capítulo 1 y verso 7, donde dice:
“He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron (¿quiénes le traspasaron? El pueblo hebreo); y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén”.
Ahora, podemos ver que esa es una promesa divina para el pueblo hebreo, la cual será cumplida, también los gentiles que le han traspasado en este tiempo final (espiritualmente hablando) lo verán, aunque solamente los escogidos de entre los gentiles lo reconocerán.
Ahora, podemos ver los misterios bajo el Séptimo Sello. Hay muchos misterios, pero todos están bajo un solo misterio: bajo el misterio del Séptimo Sello.
Si una persona llega a conocer el misterio del Séptimo Sello, por medio del misterio del Séptimo Sello conocerá todos los demás misterios, conocerá el misterio del León de la Tribu de Judá, el misterio del Reclamador, el misterio del Juez, el misterio del Rey de reyes y Señor de señores, el misterio del Hijo del Hombre, el misterio del Hijo de David, el misterio del Hijo de Abraham, el misterio del Sol naciente o con Su rostro como el Sol en Su Venida, el misterio de la Estrella resplandeciente de la Mañana, el misterio de los Dos Olivos (o sea, el misterio de Moisés y Elías), el misterio del Hijo del Hombre con Sus Ángeles, el misterio del Ángel del Señor Jesucristo, el misterio de la Trompeta de Dios o Trompeta Final o Gran Voz de Trompeta que suena Cristo en Su Venida, y que también en San Mateo 24:31 suenan Sus Ángeles.
Ahora, con el conocimiento de estas cosas, pues entonces nuestro entendimiento se abre, y podemos ver que el que suena la Trompeta Final en Primera de Corintios, capítulo 15, versos 49 al 55, y el que suena la Trompeta de Dios en Primera de Tesalonicenses, capítulo 4, verso 12 al 17, y el que suena la Gran Voz de Trompeta, los que suenan la Gran Voz de Trompeta en San Mateo 24, verso 31, es el mismo Señor, el Espíritu Santo por medio de Su manifestación en el velo de carne, el hombre en el cual estará manifestado operando los ministerios de Jesús, de Moisés y de Elías.
Por eso se puede decir que el que suena la Trompeta de Dios o Trompeta Final o Gran Voz de Trompeta, es Cristo, Jesucristo en Espíritu Santo en Su manifestación, manifestando esos tres grandes ministerios.
Por eso en algunos lugares dice que son los Ángeles los que suenan esa Gran Voz de Trompeta, y luego en Apocalipsis, capítulo 1, verso 10 al 11, dice que es uno, el cual es Alfa y Omega: primero y último, el cual es nuestro Señor Jesucristo, el que habla con esa Gran Voz de Trompeta en el Día Postrero.
Ahora podemos ver que no hay ninguna contradicción en quién ha de sonar es Trompeta, en quién ha de sonar esa Gran Voz de Trompeta del Evangelio del Reino revelando, proclamando el Séptimo Sello, proclamando la Venida del Señor. Y esa es la Trompeta prometida para este Día Postrero, para el llamado de todos los escogidos de Dios de este tiempo final.
Vamos a ver en una Escritura, en un lugar donde se habla de esta Trompeta y en donde nosotros estaremos escuchando esta Trompeta, vamos a ver dónde es que encontramos esta Trompeta sonando y dándonos a conocer el misterio grande, el misterio de la Venida del Señor.
Dice nuestro hermano Branham que esa Trompeta sonará, página 47 del libro de Citas*, dice así en el párrafo 402, esto es del mensaje de “Las diez vírgenes” que está incluido en Las Siete Edades de la Iglesia, en el libro nuevo que salió, en ese libro de Las Siete Edades aparece. Ahora dice:
402 - “Y nosotros que vivimos y hayamos quedado hasta la venida del Señor, no evitaremos o impediremos a los que duermen. Esos preciosos que sellaron su testimonio con su sangre. ‘No impediremos o estorbaremos a los que duermen, porque sonará la trompeta’. Algo acontecerá, ese algo evangélico sonará, el anuncio de Su venida”.
Ese algo evangélico sonará el anuncio de Su Venida. ¿Evangelio es qué? Buenas nuevas, buenas noticias. ¿Y qué sonarán las buenas noticias? Las buenas noticias del Evangelio del Reino sonarán la buena noticia de Su Venida, el anuncio de Su Venida.
“‘Y los muertos en Cristo resucitarán primero. Y nosotros los que vivimos y permanezcamos seremos transformados’”.
O sea, los que vivimos y permanezcamos hasta que los muertos en Cristo resuciten, entonces seremos transformados. Si alguno se va antes, pues no se preocupe, viene con el grupo que ha de resucitar; pero si permanece y los muertos en Cristo resucitan, entonces será transformado. Vamos a leerlo de nuevo, dice:
“… porque sonará la trompeta’. Algo acontecerá, ese algo evangélico sonará, el anuncio de Su venida. ‘Y los muertos en Cristo resucitarán primero. Y nosotros los que vivimos y permanezcamos seremos transformados’”.
Sin escuchar el anuncio de Su Venida, sin escuchar la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello abierto, que es escuchar la Trompeta sonando, la Trompeta sonando, o sea, la Segunda Venida de Cristo sonando, siendo proclamada, sin escuchar esa Trompeta, sin escuchar la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, que es la Segunda Venida de Cristo, ninguna persona de los que viven en este tiempo podrá ser transformado y raptado; y sin sonar la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, que es la Segunda Venida de Cristo, los muertos en Cristo no pueden resucitar.
Cuando una persona que vive en este tiempo final esté esperando la resurrección de los muertos y su transformación, lo primero que tiene que hacer es buscar esa Trompeta Final o Séptima Trompeta y el Séptimo Sello sonando, y escuchar esa Trompeta del Evangelio del Reino revelando el misterio del Séptimo Sello, el misterio de la Segunda Venida de Cristo, para ser preparada la persona y ser transformada en este tiempo final. Sin la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, que es la Venida del Señor, ni hay resurrección para los muertos en Cristo, ni hay transformación para nosotros los que vivimos, ni siquiera hay preparación para ser transformados y raptados.
Ahora vean todas las cosas que están bajo el Séptimo Sello, todos estos misterios que están bajo el Séptimo Sello.
Pero con el Séptimo Sello y Séptima Trompeta sonando, la Segunda Venida de Cristo sonando, obtendremos el conocimiento de todas estas cosas; y lo estaremos viendo como la Estrella resplandeciente de la Mañana, lo estaremos viendo como el que tiene las llaves del infierno y de la muerte, como el deseado de todas las naciones, como el que recoge el trigo en Su granero y quema la paja en el fuego, porque en algunos lugares, por ejemplo, en San Mateo, capítulo 3, vean ustedes lo que dice ahí, verso 12 en adelante, dice:
“Su aventador está en su mano, y limpiará su era; y recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará”.
También en San Lucas, capítulo 3, verso 16 al 17, dice que es Cristo el que recogerá el trigo en Su granero y quemará la paja en el fuego, pero luego Cristo dice que enviará Sus Ángeles para recoger el trigo. Y vean ustedes cómo este misterio está ligado, y por eso cuando tenía que hablar del Séptimo Sello habló de Israel, habló de la higuera y habló de la restauración de Israel, y de los Ángeles del Hijo del Hombre con Gran Voz de Trompeta llamando y juntando a los escogidos.
También lo estaremos viendo viniendo sobre un caballo blanco como la nieve, lo estaremos viendo viniendo en una nube, lo estaremos viendo como el Esposo de la Iglesia, el Esposo de las vírgenes prudentes, lo estaremos viendo con Su vestidura que le llega hasta los pies y con el cinto de oro sobre Su pecho, lo estaremos viendo con Sus ojos como llama de fuego y así por el estilo, porque estaremos viendo cómo esos símbolos se estarán materializando.
Y así como tuvo siete ojos para las siete edades de la Iglesia gentil, que fueron los siete ministerios para las siete edades, los siete ojos de Jehová que recorren toda la Tierra, que fue el Espíritu de Cristo en esas siete manifestaciones en carne humana en los siete ángeles mensajeros, para el Día Postrero los ojos como llama de fuego del Hijo del Hombre viniendo en el Día Postrero, Sus dos ojos son los ministerios de Moisés y Elías, porque ojos representa la manifestación del Espíritu de Dios en un hombre colocando y operando el ministerio de profeta.
Y ahora, vean ustedes, también los pies de bronce, cuando se habla de bronce se habla del juicio divino, y los ministerios de los juicios divinos son los ministerios de Moisés y Elías.
Así que podemos ver estos misterios bajo el Séptimo Sello. Todos los misterios correspondientes al Día Postrero de la Obra que Cristo llevará a cabo en Su Venida, los podemos ver bajo el Séptimo Sello, misterios bajo el Séptimo Sello.
Hemos hablado de una cantidad de misterios bajo el Séptimo Sello, pero todavía podemos tomar toda la tarde y toda la noche para continuar hablando de estos misterios bajo el Séptimo Sello. Así que en la noche continuaremos hablando de estos misterios bajo el Séptimo Sello, bajo el tema, ¿cuál será el tema, Miguel? En: “LAS ETAPAS DEL SÉPTIMO SELLO”, ahí estaremos viendo entonces cómo el Séptimo Sello, que es la Venida del Señor, tendrá diferentes etapas, tanto en medio de la Iglesia del Señor Jesucristo, como en medio del reino gentil, y como en medio de los escogidos del pueblo hebreo, y como en medio del pueblo hebreo como nación, porque el Séptimo Sello tiene tres propósitos principales, y con esos tres propósitos abarcará toda la Obra que Él llevará a cabo en este planeta Tierra para todo ser humano.
(¿Confirmaste? Léemelo completo a ver cómo dice). “LAS ETAPAS DEL SÉPTIMO SELLO”, será lo que estaremos viendo; y que Dios me ayude para esta noche, porque yo no dependo de mí mismo, sino que dependo de Él.
Oren mucho por mí para que Él coloque en mi boca lo que yo debo decir en esta noche, lo coloque en mi boca y en mi corazón, o en mi corazón y en mi boca, para hablarlo en esta noche.
Hemos visto en esta tarde: “MISTERIOS BAJO EL SÉPTIMO SELLO”.
¿Y saben ustedes una cosa? Usted también es un misterio, porque es un misterio que usted viva aquí en este planeta Tierra y yo también, somos un misterio bajo el Séptimo Sello. Y estaríamos aquí manifestados y saliendo a vida eterna bajo el Séptimo Sello, o sea que hasta nosotros mismos somos un misterio bajo el Séptimo Sello; y el territorio también, porque ese territorio nadie lo conocía.
Nuestro hermano Branham fue el más que conoció de ese territorio, y no podía hablar nada, solamente tiró cositas así sueltas, cuando dijo que los Siete Truenos emitieron Sus voces y no se entendió lo que fue dicho, hablaron así rápidamente sin que se entendiera, y si hablaron pues tenían que usar un idioma, pero si él no entendió pues no estaba en el idioma de él. Y luego dice que esa séptima etapa y ese Séptimo Sello o los Truenos, hablaron o estaban en un idioma desconocido para él; pero sería un idioma conocido para aquellos entre los cuales estaría siendo manifestado.
Así que podemos ver cuál era el idioma en que los siete truenos de Apocalipsis 10 emitirían sus voces, porque esa es la Voz de Cristo hablando por última vez en este planeta Tierra en el Día Postrero, y así sonando la Trompeta Final, la Séptima Trompeta de Apocalipsis, capítulo 11, verso 9, y sonando o abriendo el Séptimo Sello.
Y la Séptima Trompeta como el Séptimo Sello son la Venida del Señor. Dice: “Sonará, y los muertos en Cristo resucitarán primero”. Luego en la página 47 que leímos, del libro de las Citas, dice: “Ese algo evangélico sonará (¿la qué?) la Venida del Señor, y los muertos en Cristo resucitarán primero”.
O sea que, para sonar la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, que es la Venida del Señor, tiene que haber algo evangélico, tiene que ser el Evangelio del Reino; no puede venir por una idea humana, tiene que venir por medio del Evangelio del Reino, que es el Mensaje de la séptima dispensación, de la Dispensación del Reino.
Por medio del Mensaje de la Dispensación del Reino es que suena la Segunda Venida de Cristo, suena la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, y así es como los escogidos de Dios escucharían la revelación del Séptimo Sello y escucharían la Voz de la Séptima Trompeta de Apocalipsis, capítulo 11, verso 15 en adelante.
Ahora hemos visto este misterio de entre todos los misterios bajo el Séptimo Sello, y estamos escuchando ese algo evangélico, o sea, las buenas nuevas del Evangelio del Reino, dándonos a conocer el Séptimo Sello y Séptima Trompeta, que es la Segunda Venida de Cristo.
Bien dijo nuestro hermano Branham que sería algo tan sencillo, como vino Juan el Bautista y el nacimiento de Jesús, que si no vigilamos nos pasaría por alto, todo sería en simplicidad.
Pero Dios tendría en esta Tierra un grupo de escogidos de entre los gentiles y después del pueblo hebreo, que escucharían la Trompeta Final o Gran Voz de Trompeta y verían el Séptimo Sello. ¿Y quiénes serían? Pues nosotros en la América Latina y el Caribe, porque en ese idioma latinoamericano y caribeño es que sonaría la Séptima Trompeta, la Gran Voz de Trompeta y el Séptimo Sello: la Venida del Señor, en ese idioma es que saldría la revelación del Séptimo Sello y de la Séptima Trompeta: la revelación de la Venida del Señor, y de ahí se va a traducir a otros idiomas. El principal idioma latinoamericano y caribeño es el español.
Ahora podemos ver, vean ustedes, podemos ver porqué nuestro hermano Branham se inclinaba bastante hacia los latinoamericanos, hacia los latinos, y en donde le construyeron la nueva casa, allá en Tucson, Arizona, tiene ese territorio nombres en español, latinos, y aun en la puerta de su casa, la puerta principal en madera tallada. Tirzo que estuvo allá ¿qué es lo que dice en la puerta, y qué tiene?
Hermano Tirzo: “Hay un águila y dice ‘Nido de águila’”
¿Y en qué idioma?
Hermano Tirzo: Español
Ahora vean ustedes, dónde las águilas se congregarán en el Día Postrero: en el nido de las águilas, en la Edad de la Piedra Angular, y ahí reflejó el idioma correspondiente al Día Postrero, fue reflejado ahí y de seguro en otros lugares.
La última comida que comió nuestro hermano Branham ¿dónde fue? Por ahí cerca de Nuevo México, por ahí; después lo buscan ustedes. Y vean ustedes cómo hubo una relación muy directa, pero que estaba sellada con el pueblo latinoamericano y caribeño.
Vean ustedes cómo en muchas ocasiones…; miren, por ejemplo, cuando aparecieron los ángeles (los cuales iban de occidente hacia el este, hacia el… del oeste hacia el este), ¿el trueno de dónde surgió? De la parte sur; y menciona ahí: “territorio de latinos”.
Ahora podemos ver cómo se está señalando a los latinoamericanos y caribeños cuando nos habla estas cosas, pero que no estaban abiertas para aquel tiempo; pero ahora están siendo abiertas bajo “MISTERIOS BAJO EL SÉPTIMO SELLO”, que están siendo abiertos con la apertura del Séptimo Sello.
Con la apertura del Séptimo Sello son abiertos gradualmente todos los misterios que están bajo el Séptimo Sello.
Por ejemplo, la fe para el rapto, ese era un misterio; y toda persona pensaba: “Va a ser algo que uno va a sentir, y va a sentir esa fe que va a ser transformado”. Pero fe es revelación. Y dice: “La Novia está esperando la revelación para el rapto” [Citas, pág. 168, párr. 1498].
Y la revelación para el rapto es la revelación de la Segunda Venida de Cristo. Sin esa revelación no hay fe para ser raptados; como sin la revelación de la Primera Venida de Cristo y Su Obra en la Cruz del Calvario no hay revelación, fe, para recibir salvación.
Bueno, vamos a dejarlo ahí, en la noche continuaremos y veremos las diferentes etapas del Séptimo Sello, porque tiene unas cuantas etapas las cuales van siendo manifestadas de edad o de etapa en etapa, de tiempo en tiempo, porque es como un cohete que explota a cierto nivel y después explota más arriba. Cuando explota a cierto nivel, en el aire, hace cierta labor, cuando explota más arriba hace cierta labor, y cinco estrellas salen y hacen cierta labor (esa es una etapa también), y una estrella de las cinco explota y salen cinco estrellas más, hace una labor y así por el estilo; o sea que en esa forma simbólica son mostradas las diferentes etapas del Séptimo Sello.
Bueno, vamos a dejarlo quietecito ahí, porque todas esas etapas del Séptimo Sello las estaremos viendo en la manifestación del Séptimo Sello, y van a encajar perfectamente con lo que fue prometido. Y lo que fue una profecía, ya sea en forma de símbolos o en alguna otra forma, será una realidad cumpliéndose así lo que fue prometido.
Bueno, que Dios les continúe bendiciendo a todos, que Dios les guarde, y dejo con nosotros nuevamente a Miguel para continuar, y buen provecho primeramente espiritual, “porque no solamente de pan vivirá el hombre, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios” [Deuteronomio 8:3, San Mateo 4:4], y ya nuestro almuerzo fue espiritual primero, y ya viene después el almuerzo literal para nuestro cuerpo físico también, pero ya alimentamos la parte interior de nuestro ser.
Que Dios les bendiga y les guarde, y con nosotros nuevamente Miguel Bermúdez Marín.
Que Dios te bendiga Miguel y que Dios les bendiga a todos; y me alegro mucho, me gozo mucho en verles a todos ustedes de diferentes países, diferentes naciones. Podemos ver a Tirzo de Guatemala, a Juan de Estados Unidos y de México (está representando aquí a Estados Unidos y a México), está representando a latinoamericanos, José de Chile por aquí, y por acá, vamos a ver, de Venezuela, Simón y a Francisco, podemos por aquí ver también de Haití a Joseph y a Guzmán, y por aquí de Panamá (es de México, pero está en Panamá) a Carlos Elizondo, y Venezuela también hay más por aquí, y todos ustedes acá de Colombia.
Y de Puerto Rico, por aquí estamos Benjie y yo disfrutando estos días de compañerismo espiritual, en donde estamos recibiendo grandes bendiciones de parte de Dios. Pero vean lo sencillo que sería todo lo que Dios tendría para este tiempo final.
Que Dios les bendiga y les guarde, y con nosotros Miguel Bermúdez Marín.
“MISTERIOS BAJO EL SÉPTIMO SELLO”.