--- title: 'Dependiendo solamente del Señor' date: 2003-07-08 activity: 1 place: city: Santa Marta state: Magdalena country: CO duration: 01:43:12 public: false youtube: rm: true translations: files: --- Muy buenos días, ministros compañeros en el Cuerpo Místico de Cristo en la Iglesia del Señor Jesucristo; es para mí una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final. Para ver porqué estamos nosotros en esta Tierra y porqué estamos trabajando en la Obra de Jesucristo, leemos en el Salmo 127, Salmo 127, lo que nos dice ahí, 127 del 1 en adelante, dice: “*Si Jehová no edificare la casa,* *En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad,* *En vano vela la guardia.* *Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar,* *Y que comáis pan de dolores;* *Pues que a su amado dará Dios el sueño.”* Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla. Nuestro tema es: **“DEPENDIENDO SOLAMENTE DEL SEÑOR.”** “*Si Jehová no edificare la casa,* *En vano trabajan los edificadores* (o sea, los que la edifican)*.”* Ahora, siendo que éste es un tema muy importante, ya que la Casa de Jehová, la Casa de Dios, es el lugar de morada de Dios. En el Cielo Dios tiene Su morada. Y cuando Dios creó al ser humano en la Tierra, el ser humano es el Templo humano de Dios, el lugar de morada de Dios en el ser humano, acá en el alma del ser humano. Y como territorio pues era el Huerto del Edén. Ahora, encontramos que la Casa de Dios, el ser humano como Casa de Dios, en el Génesis allá, cuando el diablo se hizo carne en la serpiente y engañó a Eva; y luego Eva dio a comer a Adán, y él comió y pecó, y por consiguiente la casa de Dios humana: el ser humano, cayó de la bendición de Dios. Pero Dios ha estado reflejando a través del templo terrenal físico que estableció para que el pueblo hebreo construyera, el cual el templo en Jerusalén - el primero fue el templo de piedra que construyó el rey Salomón. Antes de eso estaba el arca del pacto y el tabernáculo donde estaba el arca del pacto. Ahora, el templo en Jerusalén fue destruido, y ahora para el tiempo del Profeta Zacarías encontramos que vendría una restauración de ese templo. En el capítulo 6 de Zacarías, verso 12, dice... y recuerden que aquí es Dios el que edifica la casa, pero usa instrumentos para ese propósito. Dice capítulo 6 de Zacarías, verso 9 al 12, dice... o un poquito más, dice: “*Vino a mí palabra de Jehová, diciendo:* *Toma de los del cautiverio a Heldai, a Tobías y a Jedaías, los cuales volvieron de Babilonia; e irás tú en aquel día, y entrarás en casa de Josías hijo de Sofonías.* *Tomarás, pues, plata y oro, y harás coronas, y las pondrás en la cabeza del sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac.* *Y le hablarás, diciendo: Así ha hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: He aquí el varón cuyo nombre es el Renuevo, el cual brotará de sus raíces, y edificará el templo de Jehová.* *El edificará el templo de Jehová, y él llevará gloria, y se sentará y dominará en su trono, y habrá sacerdote a su lado; y consejo de paz habrá entre ambos.* *Las coronas servirán a Helem, a Tobías, a Jedaías y a Hen hijo de Sofonías, como memoria en el templo de Jehová.* *Y los que están lejos vendrán y ayudarán a edificar el templo de Jehová, y conoceréis que Jehová de los ejércitos me ha enviado a vosotros.* *Y esto sucederá si oyereis obedientes la voz de Jehová vuestro Dios.”* Ahora, aquí encontramos que Zorobabel sería el príncipe que edificaría la casa y junto a Zorobabel estaría el príncipe religioso, que es el sumo sacerdote Josué. Por lo tanto, para la restauración del templo físico allá en Jerusalén, estarían dos personas muy importantes, dos príncipes: uno, el príncipe político, y el otro, el príncipe religioso. Y encontramos que esos serían los dos instrumentos principales de Dios, por consiguiente son tipo y figura de los Dos Ungidos de Apocalipsis, capítulo 11, verso 2 en adelante, que son los Dos Ungidos que están delante de la presencia de Dios y son también los Dos Ungidos de Zacarías, capítulo 4, verso 8 en adelante, dice: “*Vino palabra de Jehová a mí, diciendo:* *Las manos de Zorobabel echarán el cimiento de esta casa, y sus manos la acabarán; y conocerás que Jehová de los ejércitos me envió a vosotros.* *Porque los que menospreciaron el día de las pequeñeces se alegrarán, y verán la plomada en la mano de Zorobabel. Estos siete son los ojos de Jehová, que recorren toda la tierra.”* Esos son los siete Ángeles Mensajeros de las siete edades, que aparecen también en el capítulo 3, verso 9 de Zacarías, también dice: “*Porque he aquí aquella piedra que puse delante de Josué; sobre esta única piedra hay siete ojos; he aquí yo grabaré su escultura, dice Jehová de los ejércitos, y quitaré el pecado de la tierra en un día.* *En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, cada uno de vosotros convidará a su compañero, debajo de su vid y debajo de su higuera.”* Y ahí nos habla del Reino Milenial, en donde será en esa forma. Ahora, veamos en Apocalipsis, capítulo 1, verso 4, dice Juan: *“Juan, a las siete iglesias que están en Asia: Gracia y paz a vosotros, del que es y que era y que ha de venir, y de los siete espíritus que están delante de su trono.”* Y ahora, los siete ojos que están sobre la piedra o en la piedra que fue puesta delante de Josué, y que son también los siete ojos de Jehová que recorren toda la Tierra, ahora están aquí en Apocalipsis, capítulo 1, verso 4; y también están aquí en Apocalipsis 4, verso 4 al 5, donde dice: “*Y alrededor del trono había veinticuatro tronos; y vi sentados en los tronos a veinticuatro ancianos, vestidos de ropas blancas, con coronas de oro en sus cabezas.* *Y del trono salían relámpagos y truenos y voces; y delante del trono ardían siete lámparas de fuego, las cuales son los siete espíritus de Dios.”* Ahí aparecen los siete espíritus de Dios nuevamente. Y Apocalipsis, capítulo 5, verso 5 al 7, dice. “*Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.* *Y miré, y vi que en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y en medio de los ancianos, estaba en pie un Cordero como inmolado, que tenía siete cuernos, y siete ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra.* *Y vino, y tomó el libro de la mano derecha del que estaba sentado en el trono.”* Y ahora, encontramos al Cordero que tiene los siete ojos en los siete cuernos. Los siete cuernos son las siete edades y los siete ojos son los siete Ángeles Mensajeros, cada uno en cada edad. Y ahora, esos son los siete ojos de Jehová. Y ahora, dice la Escritura que son los siete ojos de Jehová; y ahora los encontramos ¿dónde? En el Cordero. “Porque todo lo que tiene el Padre (Cristo dice) es mío.” Por eso dije: “Tomará de lo mío y os lo hará saber.” Dice también: “El Padre a nadie juzga, sino que todo el juicio dio al hijo.” Ahora, eso está en San Juan, capítulo 5, verso 21 en adelante, y también en el capítulo 10 de San Juan, versos... capítulo 10, versos 14 en adelante, 14 hasta el 30; y otro lugar. Ahí en San Juan también, capítulo 16, verso 12 en adelante, dice: “*Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.* *Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la* *verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.* *Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.”* Ahora, ¿se quedó el Padre sin nada entonces? No, porque el Padre ¿dónde estaba? En Cristo. Por lo tanto, Dios con todo lo que tiene se colocó en Su Templo humano llamado Jesús. Por lo tanto, todo pasó a Jesús. Y es como cuando usted tiene algo, usted lo tiene, es suyo; pero vean, usted es alma viviente. Por lo tanto, todo lo que usted tiene como alma viviente, ¿dónde lo tiene? En su cuerpo, pertenece a su cuerpo. Por ejemplo, usted como alma viviente tiene hijos, pues vinieron a través de su espíritu y su cuerpo físico. Usted tiene riquezas, pues vinieron a su cuerpo físico; pero todo es suyo, porque usted está dentro de ese cuerpo de carne. Y como Dios está en el cuerpo llamado Jesús, todo lo que Dios tiene Cristo lo tiene. “Todo lo que tiene el Padre es mío.” Porque en Cristo está Dios en toda Su plenitud. Por lo tanto, todo el poder de Dios está en Jesucristo. Vean, los siete espíritus de Dios que recorren toda la Tierra, ahora los encontramos como las siete estrellas en la diestra del Señor Jesucristo. Ésos son los siete espíritus de Dios, las siete estrellas, los siete Ángeles Mensajeros, esos siete espíritus de Dios manifestados en carne humana en la persona de cada Ángel Mensajero de cada edad; son espíritus administradores enviados desde la presencia de Dios a la Iglesia del Señor Jesucristo. En Hebreos, capítulo 1, verso 14, dice: “*¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?”* ¿Enviados para qué? Para traer la revelación divina a cada edad en que Dios envía un espíritu ministrador, un Ángel Mensajero. “Porque Él hace a Sus Ángeles espíritus y a Sus ministros llama de Fuego.” Eso está también en Hebreos, capítulo 1, verso 7, por ahí, ¿verdad? Y también ahí en el capítulo 20, verso 27 de Proverbios, ahí también dice: “Lámpara de Jehová es el espíritu del hombre.” “*Lámpara de Jehová es el espíritu del hombre, La cual escudriña lo más profundo del corazón.”* Y ahora vean, el espíritu del hombre es el que escudriña lo más profundo del corazón, o sea, lo más profundo del alma; porque nadie conoció las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en Él. Y nadie conoció las cosas de Dios sino el Espíritu de Dios. Y ahora, vean ustedes, es el espíritu del hombre el que escudriña las cosas del alma del hombre. En palabras más claras: el espíritu del hombre escudriña lo que hay allá en el lugar santísimo del ser humano; y el lugar santísimo del ser humano es el alma del ser humano. Y el que escudriña las cosas de Dios es el Espíritu de Dios, y ése es Cristo en Su cuerpo angelical, el *Logos*. Por eso toda revelación divina tiene que venir a través de Jesucristo. Y por eso el Espíritu de Cristo es el que nos revela todas las cosas. Por eso dice Primera de Juan, capítulo 3, por ahí como el verso 15, vamos a ver si... ahora le vamos a confirmar el lugar exacto... es donde dice que no tenemos necesidad de que nadie nos enseñe, debo tenerlo marcado aquí con... 2:27: “*Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros , y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él.”* Y ahora, es el Espíritu Santo el que Cristo dijo que nos enseñaría todas las cosas. Por lo tanto, la unción del Espíritu Santo de edad en edad en el Mensajero de cada edad, ha estado hablándole a la Iglesia del Señor Jesucristo. Por eso en Apocalipsis, capítulo 3, y también en Apocalipsis, vamos a ver, Apocalipsis, capítulo 6, verso 1 al 16, encontramos... vamos a leer aquí primero: Apocalipsis, capítulo 3... también el capítulo 2, capítulo 2, verso 1 al 18 y capítulo 3, verso 1 al 21. Pero vamos a leer solamente quizás un lugar, dice capítulo 3, verso 20 al 22 (Nota - Apocalipsis): “*He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta , entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.”* Esto es aplicado a individuos y es aplicado también a la Iglesia como Cuerpo Místico de creyentes. “*Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono.* *El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.”* Y ahora, Dios por medio de Su Espíritu Santo, el cual es Cristo en Espíritu Santo en medio de Su Iglesia, está hablando en medio de Su Iglesia de edad en edad, está hablándole a Su Iglesia y está hablándole a cada individuo también; y le está hablando a la Vid Verdadera y le está hablando también a la vid falsa, le está hablando a la Iglesia y le está hablando también al mundo entero. ¿Y cómo es que todo esto acontece en la Iglesia del Señor Jesucristo? Vamos a ver lo que dijo Dios, lo que dijo el Espíritu Santo por medio del Rvdo. William Branham en la página 265 del libro de *“Las Edades,”* dice: “*Y le daré la estrella de la mañana.’* ‘*Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente, y de la mañana. (Apocalipsis 22:16).’* ‘*...hasta que el día esclarezca, y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones. (2 Pedro 1:19).’* *Según estos versículos, Jesús es la Estrella de la Mañana. El Espíritu está haciendo una promesa a los escogidos de las Edades del Oscurantismo en relación a Sí mismo, y luego a las edades por venir.* *Como ya hemos mencionado, Jesús se identifica con el mensajero de cada edad.”* Si Jesús se identifica con el Mensajero de cada edad, la identificación de Jesucristo en cada edad es en y con el Mensajero de cada edad. Por lo tanto, cuando una persona oye el Mensaje, la Voz de un Mensajero enviado de Dios para una edad, está escuchando la Voz de Cristo en Espíritu Santo en ese Mensajero, está escuchando al hombre, al único hombre para esa edad identificado por el Espíritu Santo, el único hombre identificado por Dios, porque Jesús se identifica con el Mensajero de cada edad. Si conseguimos a ese Mensajero habremos conseguido al hombre identificado por Jesucristo, con el cual Cristo está identificado y por consiguiente está dándole la revelación a ese Mensajero; y a través de ese Mensajero Cristo en Espíritu Santo está manifestándose y revelándose a Su Iglesia todo lo que Cristo quiere que Su Iglesia conozca en ese tiempo. ¿Y qué hace cuando ese Mensajero... ? ¿Qué hace Cristo cuando ese Mensajero habla esa Palabra revelada? ¿Qué sucede? Veamos aquí lo que sucede. Leo de nuevo: “*Como ya hemos mencionado, Jesús se identifica con el mensajero de cada edad. Ellos reciben de Él la revelación de la Palabra para cada edad. Esta revelación de la Palabra saca del mundo a los escogidos de Dios.”* Ven cómo es que son sacados. ¿Cómo sacó Dios a los hebreos de la esclavitud en Egipto? Por medio del Mensajero Moisés, con el cual Dios estaba identificado. Dios por medio de Cristo, el Ángel del Pacto, estaba identificado con Moisés. Por lo tanto, recibieron un Mensajero identificado por Dios, por Cristo. Y esa revelación es la que saca del mundo ¿a quién? A los escogidos de Dios, a toda persona escrita en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero desde antes de la fundación del mundo. ¿Y para qué lo saca? Para colocarlos ¿dónde? En Su Iglesia, en Su Cuerpo Místico de creyentes, la Casa de Dios como Templo Espiritual que Cristo está construyendo. Cristo es nuestro Zorobabel y nuestro Sumo Sacerdote Josué. Él es el Sumo Sacerdote del Templo Celestial y Él es el Rey que está sentado en el Trono del Padre. Por lo tanto, Él es el que está construyendo ese Templo Espiritual, que es la Iglesia de Jesucristo, y a cada persona como Templo Espiritual. “*Esta revelación de la Palabra saca del mundo a los escogidos de Dios y los coloca en unión completa con Cristo Jesús.”* Porque la Iglesia de Jesucristo es el Cuerpo Místico de Cristo, es Cristo en la forma de Su Iglesia. Como Él dijo: “Si el grano de trigo no cae en tierra y muere, Él solo queda. Pero si cae en tierra y muere, mucho fruto lleva.” Y Cristo es el grano de trigo y la Iglesia es la planta de trigo. La planta de trigo estaba ¿dónde? En el grano de trigo. Cuando Cristo murió en la Cruz del Calvario, estaba muriendo ahí también la Iglesia del Señor Jesucristo. Por eso es que la Escritura nos dice, San Pedro y San Pablo nos dicen que hemos sido crucificados con Cristo; el viejo hombre fue crucificado allá cuando Cristo fue crucificado. Por lo tanto, hemos estado todo el tiempo con Cristo, como la planta de trigo todo el tiempo estuvo en el grano de trigo, hasta que fue sembrado en tierra el grano de trigo, y entonces nació la planta de trigo; como en Adán todo el tiempo que Adán estaba en el Paraíso, ahí estaba Eva, pero no estaba manifestada. Dios creó al hombre a Su imagen, y después a Su semejanza, la parte física. Por lo tanto, la Escritura dice que Dios creó al hombre varón y hembra (varón y hembra); esto fue cuando le dio el cuerpo angelical. Y aun cuando le da el cuerpo físico todavía era varón y hembra. Encontramos que solamente dos personas han aparecido en la Tierra, han aparecido en la Tierra que han sido varón y hembra: El primero fue ¿quién? Adán, y el segundo Jesucristo nuestro Salvador. Ahora, encontramos que cuando Dios le formó un cuerpo femenino para que fuera la compañera de Adán, lo sacó ¿de dónde, ese cuerpo? Del costado de Adán, de ahí sacó la parte con la cual Dios construiría, haría, ese cuerpo femenino; y colocó el espíritu femenino que estaba en Adán, lo colocó en Eva. Y Adán quedó con el espíritu masculino en él, y un cuerpo masculino. Y ahora, un cuerpo femenino con un espíritu femenino era la compañera de Adán. Y el Segundo Adán es el segundo hombre que aparece en la Tierra siendo varón y hembra. Ahí está el misterio grande, pero en esta ocasión no lo vamos a abrir. Pero recuerden que con la apertura de ese misterio, se abriría un panorama demasiado de grande. Pero vamos a leer las Escrituras que hay, que hablan de esto. Dice el Rvdo. William Branham ahí en el libro de *“Citas,”* que contiene extractos de diferentes Mensajes, dice en la página 58, párrafo 508: “*Dios no es una mujer; Dios es un hombre. Y hay nada más uno verdaderamente y ése es un hombre. Una mujer es un producto secundario de un hombre. ¿Ven? Si Uds. nada más abrieran su entendimiento espiritual. ¿Ven ustedes? ¿Ven? Hombre... cuando el hombre primero vino sobre la tierra, él era los dos, VARÓN Y HEMBRA, FEMENINO Y MASCULINO, antes que él llegara a ser sexo* (o sea, antes que él llegara a ser sexo)*. ¿Ven? UN ESPÍRITU FEMENINO, EL ESPÍRITU MAS BAJO, ÉL ES EL QUE ES TÍMIDO. Y ENTONCES TAMBIÉN HAY MASCULINO,* *HOMBRE. Pero cuando Él lo hizo y lo puso en diferente... a fin de reproducir el mundo, Él trajo el espíritu femenino fuera de él y puso de él una costilla de su lado e hizo una hembra* (o sea, una mujer)*.”* Ahora, vamos a la página 146... esto es como buscar leer el texto, y después buscar ¿qué, Miguel? El contexto. Y el que es antes de ése ¿cómo se le llama Miguel? Sí, pre-texto. Los que no buscan el antes y después entonces lo que buscan es pretexto para no escudriñar las Escrituras y conseguir toda la verdad; pretexto que es otra cosa. Pero vamos a buscar ¿el qué Miguel? No, el que va después... Contexto. En la página 146, párrafo 1299, dice: “*Dios nunca había separado la Novia del Novio todavía. Así que cuando Dios miró hacia abajo sobre el Cuerpo de Cristo, Él vio ambos, varón y hembra. Todo fue redimido en ese cuerpo.* *¿Ven? Ellos son uno, la misma Palabra. La misma Palabra que habló del Novio, habla de la Novia.”* ¿Por qué? Porque ambos estaban primero en un solo cuerpo, el cuerpo de Jesucristo nuestro Salvador. Y aun más: toda la creación estaba en Cristo. Veamos en Colosenses, capítulo 1, dice verso 15 en adelante, dice: “*El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación.”* La imagen es el cuerpo angelical, o sea, que Él es la imagen del Dios invisible. “*Porque en él fueron creadas todas las cosas.”* ¿Ven? En Él fueron creadas todas las cosas; así como en el grano de trigo está creada toda la planta de trigo con todas las hojas y todo lo que tenga, y todos los granos de trigo; el tallo y todo está creado ya en el grano de trigo. De ahí es que surge toda la planta de trigo con todos los granos de trigo. Así como en el árbol de aguacate o de mango encontramos que todo eso estaba creado en una semilla de aguacate o en una semilla de mango, si el árbol es de mango. Ahí estaban creadas, creado todo el tallo, la parte de madera, las ramas, las hojas, las flores, y el fruto, todo estaba creado ya ahí; si no estaba allí no puede surgir. Por eso lo que no está en el original no puede aparecer luego en la manifestación de eso que el original está manifestando. Y Él es el principio, el Primogénito de toda la creación. Todo estaba en Jesucristo. “*Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.* *Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;* *y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia;* *por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las* *que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.* *Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado* *en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él.”* Y ahora, vean dónde estábamos nosotros: estábamos en nuestro amado Señor Jesucristo. Ahora, vamos a leer aquí una Escritura: Gálatas, capítulo 4, verso 4 en adelante: “*Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley,* *para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.* *Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre!* *Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.”* Y ahora, encontramos que el Día de Pentecostés Cristo cumplió Su promesa. Él dijo: “Me conviene que Yo me vaya, porque si Yo no me voy, no puede venir el Espíritu Santo, el Consolador. Pero si Yo me voy, Yo lo enviaré.” En otros lugares dice: “El Padre lo va a enviar.” Y no hay ninguna contradicción, porque el Padre está ¿dónde? En Él. Ahora, ahí está un misterio tan grande, aun más grande que el misterio de Adán y Eva. Solamente que en el misterio de Adán y Eva se reflejó el misterio grande de Dios en Cristo, y la Iglesia del Señor Jesucristo. Así que lo grande es en el Segundo Adán, en el Segundo Adán y la Segunda Eva; porque la orden que tenía Adán de reproducirse, tenía que reproducirse en hijos e hijas de Dios, pero a causa del pecado ya no pudo reproducirse en hijos e hijas de Dios, en esos hijos e hijas de Dios escritos en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero desde antes de la fundación del mundo. Dice el Rvdo. William Branham que Adán perdió el Título de Propiedad, ese Libro sellado con Siete Sellos. Vamos a ver en la página 69 del libro de *“Los Sellos:”* “*El título de propiedad que se había perdido ahora está en las manos del dueño original, Dios Todopoderoso. Cuando Adán perdió el título de la tierra y de la Vida eterna, las manos inmundas de Satanás no lo pudieron tomar, entonces volvió a su dueño original, Dios mismo. Vamos a ver estas cosas en seguida, porque allí está Él sobre el trono con el título en la mano. Eso* *hace sentirme religioso. El título de propiedad de la Vida Eterna, el título de la Vida eterna, cuando Adán lo canjeó por la sabiduría, lo cual anhelaba más que la fe, entonces volvió directamente a las manos del Dueño original, Dios Todopoderoso.* *¡Qué cosa tan tremenda!* *Ahora, ¿qué está sucediendo? El título está en las manos de Dios, esperando ser reclamado por medio de la redención. Él hizo un camino para la redención, una manera de volver, y algún día el Redentor lo tomará de nuevo. Ahora, ¿Ve Ud. hacia donde vamos? Fíjese bien en éste que esta sobre el trono. Ahora bien, está esperando el reclamo por la redención, su propia redención.* *¿Qué es este Libro de la redención, este título de propiedad? Es un título que ha sido examinado hasta su origen. Es como el ejemplo que dimos esta mañana de la gotita de tinta. Cuando la tinta cayó en el cloro, volvió hasta su origen. Y cuando el pecado ha sido confesado y ha caído en la sangre del Señor Jesucristo,* *¡oh, hermano! le es dado un título abstracto directamente al Creador, y Ud. llega a ser un hijo de Dios. El título de propiedad está en las manos del Todopoderoso. Su redención significa una posesión legítima y completa a todo lo que fue perdido por Adán y Eva. ¡Oh hermano! ¿Qué deberá hacer eso para un cristiano renacido? Su posesión legal al título de propiedad de Vida Eterna, significa que Ud. posee todo lo que Adán y Eva perdieron. Hermanos, ¿qué de esto?”* Ahora, estos nombres escritos en el Libro de la Vida del Cordero, el Título de Propiedad de Dios, es el Título de Propiedad que Adán recibió, para traer a existencia los hijos e hijas de Dios con Vida eterna. Pero por cuanto Adán perdió esa bendición, porque pecó, pecaron Adán y Eva, entonces el Título de Propiedad regresó a las manos de Dios, y entonces Adán y Eva trajeron hijos pero mortales. Y el mismo Adán, vean ustedes, al tomar a Eva, se hizo pecado también por ella y se hizo mortal. Por supuesto, ahí se está reflejando también todo lo que va a suceder con Cristo, el Segundo Adán, tomando los pecados de los hijos e hijas de Dios escritos en el Cielo, en Libro de la Vida del Cordero. Ahora, encontramos que Adán no ha podido traer hijos e hijas de Dios con Vida eterna. Pero el Segundo Adán, el cual vino a la Tierra y el cual era varón y hembra, y del cual saldría una compañera, Dios sacaría una compañera para Él, y vino a ser la Iglesia del Señor Jesucristo. El Día de Pentecostés vino sobre ciento veinte creyentes el Espíritu Santo, y ahí nació la Segunda Eva, la compañera para Jesucristo, el Hijo de Dios. Y ahora, ese Espíritu ha estado en medio de la Iglesia todo el tiempo, en la formación de la Iglesia del Señor Jesucristo. Ése es el Espíritu Santo, del cual dice el Rvdo. William Branham en la página 134 del Mensaje del libro de *“Los Sellos,”* página 134, dice: “*Y noten Uds.: Cuando este Espíritu Santo que tenemos llegue a encarnarse, el que está en nuestro medio ahora mismo en la forma del Espíritu Santo, cuando Él llegue a ser encarnado en la Persona de Jesucristo, entonces nosotros le coronaremos como ‘Rey de Reyes y Señor de Señores.”* Y en la página 146, dice, del mismo libro de *“Los Sellos,”* al final del último párrafo: “*Y al mismo tiempo que el diablo cae del Cielo y se encarna en un hombre, el Espíritu Santo sube y viene encarnado en un hombre.”* Y la página 352, del mismo libro de *“Los Sellos,”* dice el Rvdo. William Branham, en el penúltimo párrafo: “*Y sucederá que al tiempo cuando el anticristo venga en su plenitud, Dios también vendrá en Su plenitud para redimirnos. Siempre corren paralelos. Caín y Abel, el cuervo y la paloma en el arca, Judas y Jesús, etc.”* Y ahora, encontramos que para la Redención física, que es nuestra transformación, y la resurrección de los muertos en Cristo en cuerpos glorificados, viene Dios en toda Su plenitud en el Día Postrero. Y en medio de la cizaña pues viene el diablo encarnado en el anticristo, en el hombre de pecado. Ahora, así como cada edad produce gemelos, vean, cada dispensación también. Cuando vino Cristo vino Judas también por allí. Cuando descendió Cristo en Espíritu Santo, descendió, vino, o subió del infierno el espíritu de Judas, y es el que ha estado en la vid falsa; ese espíritu de Judas es el que ha estado en la vid falsa, y por consiguiente para el tiempo final el diablo se encanará en el hombre de pecado, en el anticristo, conforme a la profecía de Segunda de Tesalonicenses, capítulo 2, verso 1 al 15; y otras Escrituras más, como en el Apocalipsis, capítulo 17, versos 8 al 18, y Apocalipsis, capítulo 19, versos 19 en adelante. Ahora, hemos visto que el espíritu de Judas estaría ¿dónde? En la vid falsa, y el Espíritu de Cristo estaría en la Vid verdadera, la Iglesia del Señor Jesucristo. O sea, que con la cizaña estaría el espíritu de Judas, y con el trigo estaría el Espíritu de Cristo. Y ahora, la Iglesia del Señor Jesucristo ha estado siendo creada, porque es una Obra de Creación. Y ésa es la forma en que el Templo de Dios, que son los seres humanos, será restaurado para Dios morar en Espíritu Santo en toda Su plenitud, en todos los creyentes en Cristo nacidos de nuevo. Tenemos la primicia del Espíritu, que es el bautismo del Espíritu Santo, y tenemos la promesa de que recibiremos la plenitud. Vamos a ser transformados y entonces tendremos la plenitud, tendremos el cuerpo angelical y el cuerpo físico glorificado. Eso es la doble porción, ésa es la Redención total; porque primero obtenemos la primera parte de la Redención, que es la transformación interior, donde obtenemos el nuevo nacimiento y obtenemos el cuerpo angelical, y después obtenemos la parte física, que es el cuerpo nuevo, el cuerpo glorificado, y entonces todos seremos iguales a Jesucristo con cuerpos físicos glorificados, y con el espíritu angelical dentro de ese cuerpo, y nuestra alma dentro de ese cuerpo angelical. Ahora, hemos visto que si Jehová, Dios, no edifica la Casa, Su Casa, en vano trabajan los edificadores. Miren ustedes allá en el tiempo del Señor Jesucristo los edificadores eran los líderes religiosos, el sumo sacerdote y el concilio del sanedrín. Pero vean, Dios no estaba obrando a través de ellos, Dios estaba obrando a través de Juan el Bautista y luego a través de Jesús, y ellos rechazaron la Obra que Dios estaba haciendo a través del precursor y luego a través del precursado. Por lo tanto, esos líderes religiosos rechazaron, tropezaron en la Piedra no cortada de manos y la rechazaron. Los edificadores rechazaron a Cristo, la Piedra del Angulo, y pidieron Su muerte, y fue crucificado. Por eso Cristo en el capítulo 4, dice, del libro de los Hechos... Capítulo 4 del libro de los Hechos, San Pedro predicando dice verso 5 en adelante, dice: “*Aconteció al día siguiente, que se reunieron en Jerusalén los gobernantes, los ancianos y los escribas,* *y el sumo sacerdote Anás, y Caifás y Juan y Alejandro, y todos los que eran de la familia de los sumos sacerdotes;* *y poniéndoles en medio, les preguntaron: ¿Con qué potestad, o en qué nombre, habéis hecho vosotros esto?* (o sea, la sanidad del hombre que había sido sanado) *Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: Gobernantes del pueblo, y ancianos de Israel:* *Puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo, de qué manera éste haya sido sanado,* *sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano.* *Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo.* *Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.”* Y ahora, San Pedro identifica a estos líderes religiosos como los edificadores del pueblo. Y fueron los mismos que rechazaron a Cristo, la Piedra del Ángulo, fueron los mismos que pidieron Su muerte. Por lo tanto, como en todo caso en donde una persona manda a matar a otro, tan culpable es uno como el otro, los dos son acusados y condenados en el juicio por asesinos. Por eso Pedro lleno del Espíritu Santo, o sea, el Espíritu Santo en Pedro los acusa de ser los que crucificaron a Cristo, fueron los asesinos intelectuales de la muerte de Cristo. Ahora, Cristo al morir vino sobre Él ¿qué? El sueño, porque los santos no mueren sino que duermen. Por lo tanto, Él durmió allí como Adán durmió cuando Dios fue a sacar de su costado una costilla para formar una compañera. Y luego que formó esa compañera, despertó a Adán y vio la compañera que Dios formó para él, una ayuda idónea para él; y el espíritu femenino que estaba en Adán estaba ahora en otro cuerpo, el cuerpo de la compañera que Dios le dio para Adán. Ahora, esto es un misterio grande, tanto en Adán y Eva y unos cuantos millones de veces más grande entre Cristo y Su Iglesia. GRANDE ES ESTE MISTERIO. Pero sabemos que desde el Día de Pentecostés está el Espíritu de Cristo, el Espíritu del Hijo de Dios está en Su Iglesia, y ha estado manifestándose de edad en edad en cada Ángel Mensajero, y ha estado hablando y llamando y juntando Sus ovejas, Sus escogidos en el Redil del Señor, que es la Iglesia del Señor Jesucristo. Eso que sucede ahí, juntando las ovejas en el Redil es lo que sucede en la planta de trigo, juntando los granos de trigo ¿dónde? En la planta de trigo; porque ustedes no ven que nacen granos de trigo en un árbol de mango; lo que nacen son mangos en un árbol de mango. Pero en la planta de trigo lo que nacen son granos de trigo. Y en la Iglesia de Jesucristo lo que nacen son hijos e hijas de Dios, por medio del nuevo nacimiento, en donde el Espíritu Santo obra ahí en cada tiempo, en cada edad, en la manifestación correspondiente a cada tiempo. Ahora, podemos ver que algo grande ha estado sucediendo, y eso es la construcción del Templo Espiritual del Señor Jesucristo, una Casa para Dios, para Dios morar en toda Su plenitud en ese Templo Espiritual y en cada miembro de ese Templo Espiritual. Por eso es que somos piedras vivas, como Cristo es la Piedra Viva, la Piedra del Ángulo que fue rechazada, nosotros somos piedras vivas. Por eso Cristo dijo: “En el mundo tendréis aflicción, mas confiad, yo he vencido al mundo.” También Él dijo que como a Él lo habían rechazado, también a nosotros nos rechazarían. Él dijo que el mundo ama lo suyo. ¿Pero por qué no lo amaban a Él? Porque Él dijo: “Yo no soy del mundo.” Y también dijo de los escogidos de Dios: “No son del mundo como tampoco yo soy del mundo.” Por eso los miembros de la Iglesia de Jesucristo de edad en edad han sido perseguidos como Cristo fue perseguido. Pero lo importante es que el Espíritu de Dios está en nosotros y con nosotros en el Cuerpo Místico de Cristo. Ahora, encontramos, por ejemplo el caso, luego del pecado en el Edén, el fruto del pecado fueron dos personas: Caín y Abel. Caín cuando pecó Eva con la serpiente, y Abel cuando pecó Eva con Adán. Por eso Abel tenía que morir, y representa tanto a Cristo tomando nuestros pecados y haciéndose pecado por nosotros, y también representa a cada persona con el viejo hombre, pero como el viejo hombre que recibe la revelación de Dios para entrar al Nuevo Pacto y recibir Vida eterna. Y luego cuando recibe a Cristo como su Salvador, lava sus pecados en la Sangre de Cristo, es bautizado en agua en el Nombre del Señor Jesucristo, y recibe el Espíritu Santo, se levanta un nuevo hombre, eso es un Set, como Set. Fue cuando Set y el hijo de Set, que empezaron los hombres a llamarse por el nombre de Dios, a invocar el Nombre de Dios. Y es en medio del Set espiritual, de los creyentes en Cristo nacidos de nuevo, que se invoca el Nombre del Señor. Y, vean ustedes, la descendencia de Abel no la encontramos, la descendencia del viejo hombre no puede aparecer, pero la del nuevo hombre tipificado en Set, fue la que luego continúo hacia adelante, bajo el Nuevo Pacto, un Nuevo Pacto bajo una nueva dispensación. Ahora, Cristo, como también tipificado en Abel, se hizo pecado, tomó nuestros pecados, y vino a ser el Abel que tenía que morir por los pecados del ser humano. “Porque la paga del pecado es la muerte.” Por eso vino la muerte sobre Abel y vino la muerte sobre Cristo, y todo ser humano tiene que morir para nacer de nuevo; porque el que no naciere de nuevo no puede ver el Reino de Dios. “El que no nazca del Agua y del Espíritu no puede entrar al Reino de Dios.” Y Cristo no podía ser glorificado y ascender al Cielo victorioso y sentarse en el Trono de Dios, si no moría. Y murió, resucitó glorificado, y se sentó en el Trono de Dios. Por eso ahora tiene un cuerpo glorificado, tuvo un cambio. Y ahora, lo encontramos ya adoptado, Adán no llegó a la Adopción, pero Cristo sí llegó a la Adopción. Y cada creyente en Cristo llegará a la total adopción. Primero recibimos la Adopción Espiritual al recibir el Espíritu Santo, y luego recibiremos la Adopción física, que será cuando recibamos el cuerpo nuevo. Ahora, hemos visto ese misterio de Adán y Eva y de Abel y de Set. Vean también lo que citó nuestro hermano Bermúdez acerca de Ciro, lo cual está en el capítulo 45 y también el 44 también, está refiriéndose a Ciro. Vean, Ciro era el que tenía que dar la orden para la construcción del templo, y tenía que ayudar. Y Ciro representa al Mesías; y representa al Mesías en Su Primera Venida y en Su Segunda Venida; porque alrededor de la Primera Venida y Segunda Venida de Cristo gira la construcción del Templo de Cristo, primero la parte espiritual del Templo de Cristo y después la parte física, que es nuestra transformación. ¿Ven? Todo gira alrededor de Cristo. Por eso ustedes encuentran la relación que hay de Cristo con los gentiles, porque Cristo nació de la tribu de Judá, como descendiente del rey David. Y si usted busca la ascendencia de Cristo, encontrará (en cuanto a la carne) encontrará mujeres gentiles en esa ascendencia como Rut (Rut, la moabita), como Rahab (la ramera) y como Tamar (la esposa de un hijo de Judá); y luego Judá a través de Tamar trajo también los dos hijos, y en la línea de uno de ellos es que viene toda esa bendición para la tribu de Judá, y por esa línea es que viene David, y por esa línea viene la virgen María y por esa línea viene José también, el padre adoptivo de Jesús. Ahora, vean todos los problemas que hubo en esa línea, pero Dios trajo a través de esa línea, vean, al Mesías. La línea sobre la cual hubo un número grande de problemas. No sé, en otras líneas hubo problemas también, pero en esa línea hubo ya problemas más delicados. En la línea de José también tuvo sus problemas, porque José tipifica a Cristo, los dos hijos de José: Manasés tipifica a los hebreos, y Efraín tipifica a la Iglesia del Señor Jesucristo. Y la Bendición de la Primogenitura pasó ¿a quién? A Efraín. La bendición de la Primogenitura pasó a la Iglesia del Señor Jesucristo. Por eso, ¿dónde nacen los Primogénitos de Dios escritos en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero? Nacen, ese nuevo nacimiento ¿dónde? En la Iglesia del Señor Jesucristo. Esa bendición la perdió el pueblo hebreo cuando rechazó a Cristo. Mateo, capítulo 21, versos 42 al 46, ahí Él dice que el Reino de Dios será quitado de en medio de ellos y dado a otro pueblo que lleve los frutos de Él. Ahora, podemos ver que es la Iglesia del Señor Jesucristo la cual ha estado trayendo a existencia en el Reino de Cristo, por medio de la manifestación de Cristo en Espíritu Santo en medio de Su Iglesia, donde Cristo ha estado reproduciéndose en hijos e hijas de Dios. Todos pues estábamos en Cristo. De Cristo hemos venido y con Cristo estaremos por toda la eternidad en Su glorioso Reino; somos hijos de Dios por medio del Segundo Adán. Y todos los escritos en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero, en el Libro de los Siete Sellos, que no pudo traer a existencia Adán con Vida eterna, ahora los trae con Vida eterna a existencia, Cristo nuestro Salvador, en la construcción del Templo de Dios, en la construcción de la Casa de Dios. Por eso todo depende del Señor Jesucristo. Y nosotros dependemos solamente del Señor Jesucristo. “No es con Ejército ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los Ejércitos.” Eso esta en el capítulo 4 de Zacarías. Por lo tanto, es una Obra del Espíritu Santo la que se ha estado llevando a cabo para la formación de la Casa de Dios, la Iglesia del Señor Jesucristo. Vean, en Hebreos, capítulo 3, verso 5 en adelante para no leer mucho, dice San Pablo, está hablando de Moisés y de Cristo. Si leen desde el verso 1, pero solamente el verso 5 al 6, dice: “*Y Moisés a la verdad fue fiel en toda la casa de Dios, como siervo, para testimonio de lo que se iba a decir;* *pero Cristo como hijo sobre su casa, la cual casa somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin la confianza y el gloriarnos en la esperanza.”* Y ahora, Cristo está sobre la Casa de Dios, que es Su Casa, Su Iglesia. Él es la cabeza de Su Iglesia, la cabeza de esa Casa, el Primogénito y también el Esposo de la Iglesia, de Su Iglesia, para reproducirse en hijos e hijas de Dios. En algunos lugares aparece Cristo como el Esposo y la Iglesia como Su Esposa; y en otros lugares aparece la Iglesia como una virgen pura para Cristo, como si no estuviera casada. En lo físico para producir físicamente hijos e hijas de Dios, o sea, hijos e hijos de Dios con cuerpos glorificados eternos, todavía la Iglesia es la Novia. Pero para reproducirse Cristo en lo espiritual y producir el nuevo nacimiento en las personas, la Iglesia es Su Esposa. Veamos Efesios, capítulo 2, verso 19 en adelante, dice: “*Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios* (o sea, que somos miembros de la Familia de Dios, somos hijos e hijas de Dios)*,* *edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,* *en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor;* *en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.”* Y ahora, hemos visto que el propósito divino es que en cada uno de nosotros Dios obre o Dios esté en Espíritu Santo en toda Su plenitud. Y para con Su Iglesia el propósito es que Cristo esté en Su Iglesia en toda Su plenitud, por eso el Espíritu de Cristo está prometido para en el tiempo final el... este mismo Espíritu que está entre nosotros, dice el Rvdo. William Branham: “*Y noten Uds.: Cuando este Espíritu Santo que tenemos llegue a encarnarse, el que está en nuestro medio ahora mismo en la forma del Espíritu Santo, cuando Él llegue a ser encarnado en la Persona de Jesucristo, entonces nosotros le coronaremos como ‘Rey de Reyes y Señor de Señores.”* Y ahora, el propósito divino es que el Espíritu de Cristo se haga carne en medio de Su Iglesia y more en medio de Su Iglesia en carne, en un cuerpo físico, el cual será luego glorificado; y entonces Cristo estará en medio de Su Iglesia físicamente en un cuerpo de carne. Ahora, vean ustedes, el Espíritu de Cristo ha estado en Su Iglesia desde el Día de Pentecostés de edad en edad; antes pues estaba allí con Sus discípulos, el Consolador, pero Él lo iba a enviar a los creyentes en Él y se iba a formar la Iglesia, la Segunda Eva. Ahora, para el Día Postrero la promesa es que este mismo Espíritu Santo que ha estado en la Iglesia de Jesucristo todo el tiempo y que ha estado manifestándose por medio de cada Ángel Mensajero, en cuerpos temporales, se ha manifestado en un cuerpo, en una edad, luego en otro cuerpo, en otra edad, y por consiguiente en el Cuerpo Místico de Cristo en una edad y luego en otra edad. Pero la promesa es que vendrá un momento en que el Espíritu Santo se hará carne, estará en un cuerpo físico en medio de Su Iglesia, y por consiguiente en una edad eterna. Y ahí la Iglesia llegará a Su transformación para los que están vivos y para los muertos en Cristo a su resurrección; y entonces quedará en pie el Templo de Dios, el Templo humano de Dios como Iglesia, como Cuerpo Místico de creyentes, para Dios habitar en medio de Su Iglesia en toda Su plenitud, y manifestarse en Su Iglesia en toda Su plenitud, para así Dios vivir entre los seres humanos en medio de Su Iglesia. Y por eso es que para antes del Reino Milenial nos lleva con Él a la Cena de las Bodas del Cordero y luego regresamos con Él después de los tres años y medio de la Cena de las Bodas del Cordero, de esa gran Fiesta Celestial, que para los seres humanos que quedarán aquí en la Tierra, no será una fiesta sino la gran tribulación. Pero para los que irán con Cristo, irán a una gran Fiesta Celestial, la Fiesta más grande del Cielo, la Fiesta de las Bodas del Cordero; como la fiesta más grande en un hogar para una hija, es la fiesta de las bodas y la recepción, la recepción es la fiesta más grande que se puede llevar a cabo en un hogar para una hija de ese matrimonio. Ahora, encontramos que esa gran fiesta que va a ser llevada arriba en el Cielo, pronto se va a realizar, cuando haya entrado al Cuerpo Místico hasta el último escogido de Dios, escrito en el Cielo en el Libro de la Vida del Cordero. Ahora, para este tiempo final como en cada edad, como en cada edad la Iglesia de Jesucristo y todos los miembros de la Iglesia de Jesucristo dependieron de Dios en la manifestación de Dios en Espíritu Santo en el Mensajero de cada edad, a través del cual vino la revelación divina y vino esa Palabra para el pueblo, con la cual al escuchar las personas fueron llamadas y juntadas en el Cuerpo Místico de Cristo. Y ahora, ¿cómo es que Dios va a completar Su Iglesia en este tiempo final? Con la Palabra revelada para el tiempo final. Ya las demás edades tuvieron su tiempo, tuvieron su Mensaje, tuvieron la manifestación del Espíritu de Cristo en cada edad, y el Espíritu de Cristo, el Espíritu Santo, trajo la Palabra con la cual llamar y juntar los escogidos en cada edad. “El que tiene oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.” Por lo tanto, escucharon los escogidos, que son los que tienen oídos para oír, escucharon la Voz de Cristo. Vean, si usted habla español y viene un chino que no sabe español y está escuchando, está escuchando porque tiene oídos, pero no tiene oídos para escuchar el español; oye y no entiende. Pero el que tiene oídos para oír la Voz de Dios, escucha y entiende, porque los entendidos entenderán. “Mis ovejas oyen mi Voz y me siguen.” Eso está en el capítulo 8, verso 47, y capítulo 10, verso 14 al 17 de San Juan. “El que es de Dios, la Voz de Dios oye.” Eso está en el capítulo 8, verso 47 de San Juan, y lo otro está el capítulo 10, verso 14 al 17. Y también capítulo 10, versos 26 al 30 de San Juan. Y el que no es de Dios, pues no oye la Voz de Dios. Por eso fue que Cristo les dijo en ese mismo capítulo 10, verso 26 en adelante: “Ya lo he dicho antes (cuando ellos quisieron saber o que Cristo les dijera abiertamente).” — “Si Tú eres el Cristo dínoslo ya y no nos turbes más el alma.” Cristo les dice: “Yo lo he dicho, se lo he dicho a ustedes ya, y no han creído, porque ustedes no son de mis ovejas.” Y ésa es una palabra dura, pero es la verdad. Y si es la verdad pues no importa lo duro que suene, es la verdad. Ahora, viendo que Él está llevando a cabo una Obra: la Obra de la construcción de Su Templo Espiritual, Su Iglesia, dependemos solamente del Señor Jesucristo. Así ha sido de edad en edad y así es para nuestro tiempo en esta ocasión. Por lo tanto, con la Palabra que Cristo en Espíritu Santo habló en cada edad por medio del Mensajero de cada edad, fueron llamados y juntados los escogidos de cada edad. ¿Y con qué serán llamados y juntados los escogidos de este tiempo final? Con la Palabra que Cristo en Espíritu Santo estará hablando en este tiempo final por medio del instrumento que Él tendrá en este tiempo final. Ésa es la Palabra para llamar y juntar los escogidos de este tiempo final, y esa es la gran Voz de Trompeta con la cual son llamados y juntados los escogidos de Dios, los elegidos de Dios, los Primogénitos de Dios de entre la Iglesia, de entre los gentiles, para formar la Iglesia de Jesucristo del Día Postrero, o sea, la parte que corresponde a este tiempo final, y para llamar y juntar ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. No habrá otro Mensaje que pueda llamar y juntar los escogidos del Día Postrero en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad de la Piedra Angular, y no habrá ni hay ni habrá otro Mensaje que pueda llamar y juntar los escogidos del pueblo hebreo, ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, para que se forme el grupo de los redimidos o escogidos del pueblo hebreo, y así se forme el grupo de doce mil de cada tribu. Pueden enviar mucha literatura al pueblo hebreo, y muchos misioneros, pero nunca llegarán a llamar y juntar los ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. Pero cuando llegue el momento para Dios llamar y juntar a los ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, dice el Rvdo. William Branham lo que Dios va a hacer: es lo que ha hecho siempre de edad en edad. ¿Qué es lo que ha hecho para llamar y juntar los escogidos de cada edad? Enviar un Mensajero en cada edad. Y al enviar un Mensajero en cada edad han sido llamados y juntados los escogidos de Dios, porque un Mensajero viene con un Mensaje de Dios. Estoy buscándoles aquí... donde... un lugar donde el Rvdo. William Branham dice abiertamente lo que Dios va a hacer. Se los voy a leer o a decir... Él dice que Dios va a enviar un Profeta a Israel, que eso es lo que Dios va a hacer. Por lo tanto, si eso es lo que va Él a hacer, Él tiene que tener un Profeta, y ese Profeta tiene que estar dentro del Nuevo Pacto, no puede estar dentro del pacto antiguo, porque ya el pacto antiguo terminó. Ya la dispensación bajo el pacto antiguo ya terminó, y ahora todo tiene que ser hecho dentro del Nuevo Pacto, dentro del Nuevo Pacto para que pueda Dios respaldarlo. En la página 55, párrafo 482, dice... esto fue cuando él quiso ir a Israel y ya estaba en Egipto, vean: “*La razón por la que yo siempre he creído... ante mi clase aquí... que allí... había alguna cosa, que yo tendría una parte antes que yo muera en traer a Israel para atrás hacia el Señor, porque cuando... a la misma hora conforme la carta Panamericana que Israel fue declarada una nación por primera vez en un espacio de 2,000 años allá desde que ellos habían sido esparcidos, no una gente, era esa misma hora, exactamente la hora, que el ángel del Señor me encontró allá arriba y me envió con el evangelio... la misma fecha y hora... 7 de mayo de 1946 Ahora, entonces otra cosa que me da a saber eso, es restaurando los corazones de los padres a los hijos... el mensaje.* *Noten, Malaquías 4, no 3,. 4. Otra cosa, cuando Billy, mi hijo* *y yo y el hermano Ern Baxter íbamos en nuestro camino para Palestina, después que nosotros habíamos encontrado a los Judíos en casa del hermano Arganbright y ellos vieron la reunión... y yo iba en mi camino y paramos en El Cairo, Egipto; con el boleto en mi mano y quince o veinte minutos del tiempo de llamar* (o sea, faltando como quince minutos para hacer la llamada de embarque)*, algo me dijo: ‘Esta no es la hora todavía. Quédate fuera de Palestina.’ Así que yo pensé, eso sólo era yo pensando eso. Y yo proseguí* (o sea, él pensó que era un pensamiento de él, que fue un pensamiento de su propia mente, y prosiguió haciendo todo para lo del boleto y lo de prepararse ya ahí en el aeropuerto para la salida). *Algo dijo: ‘Esta no es la hora.’ Y yo fui afuera detrás del cobertizo levanté mi cabeza arriba hacia Dios; yo dije: ¿Dios ése eras tú hablándome?* (Y ahora se fue a orar a Dios y a preguntarle: ‘¿Eras Tú hablándome? O sea, era yo en mi propia mente pensando eso o eras Tú hablándome?’) *El dijo: ‘Esta no es la hora. Quédate fuera de Palestina, este no es el tiempo.’ Entonces yo llevé mi boleto y lo cambié y fui de allí arriba a través de Roma y vine para atrás a Lisboa, Portugal; y de allí regresé a los Estados Unidos. La hora no era todavía. La iniquidad de los gentiles todavía no se ha cumplido, está al borde de la copa, pero algún día lo será. Y Dios mandará a alguien allá, que sea un profeta, y comprobará a ellos... yo confío que Dios lo levantará, quien quiera que él sea, que lo levantará pronto. Yo creo que eso tiene que venir.”* Hasta el hermano Branham creía que él era el que tenía que ir a Israel, y también pues todos los seguidores del hermano Branham creyeron lo mismo. Y todavía hay algunos que creen que él tiene que ir. Pero vamos a ver aquí la página 136 del libro de *“Las Citas,”* párrafo 1208, dice: “*¿La Novia antes de que venga Jesús, ella tendrá todo poder del Espíritu Santo para hacer milagros, levantar muertos, y así sucesivamente como en la lluvia tardía? ¿Y es esta lluvia tardía para los ciento cuarenta y cuatro mil judíos? ¿Tendrán todos los ministros esto? ¿Y estamos sólo esperando la venida? Ahora,* *lluvia tardía, ciento cuarenta y cuatro mil judíos, no, eso es cuando Elías y Moisés... allí es donde los milagros, tienen lugar. Las cosas que la gente ha estado buscando, los Pentecostales por milagros, pero donde eso tendrá lugar será debajo de Elías y Moisés... Sólo debemos de esperar la venida del Señor.”* Y ahora, vamos a pasar a otra página: página 138, párrafo 1236, dice... y el 1235, dice: “*El arrebatamiento de la Novia será la misma cosa* (o sea, como cuando Dios rejuveneció a Abraham y a Sara)*. La Palabra que está en Uds., el cuerpo materializará alrededor de esa Palabra, y la misma cosa hizo por Sara.”* ¿Ven? Depende la transformación de la Palabra que tiene que ver con la transformación, que es la gran Voz de Trompeta o Trompeta de Dios. Sigue diciendo en el párrafo 1236: “*Y entonces Él enviará sus ángeles, y juntará sus elegidos de los cuatro vientos, desde el cabo de la tierra hasta el cabo del cielo. Eso está hablando de la resurrección, el arrebatamiento, subiendo. Él enviará Sus ángeles para juntar. ¿Ustedes alguna vez pensaron que son los ángeles? ¿Eh? Mensajeros. Él los juntará, los congregará juntos (¿Ven?), trayéndolos, juntarlos de las partes extremas de la tierra a las partes extremas del Cielo, la Palabra que fue y ha sido hecha manifiesta en la tierra. ¿Ven? ¿Lo captan? la Palabra ha sido hablada; aquí se manifiesta.”* Y la página 141, párrafo 1260, dice: “*El no podía depender de alguna cierta iglesia para separarlos... digamos la metodista o la Bautista o los Pentecostales, para separarlos* (o sea, para separar el trigo de la cizaña, los buenos de los malos o los malos de los buenos)*. Él dijo que envía Él Sus ángeles para separarlos. Un ángel viene para traer la separación, la segregación entre lo cierto y lo erróneo, y nadie puede hacer eso sino el ángel del Señor. Él es el que va a decir cuál es cierto y cuál es erróneo. Dios dijo que Él enviará Sus ángeles en el último tiempo... no ángeles abajo aquí* (o sea, no ángeles en las siete edades)*... no ángeles abajo aquí, sino ángeles en el último tiempo... y reuniría. Sabemos que esto es el tiempo* *venidero de cosecha ahora. Ahora un ángel es en realidad, interpretado, un mensajero, y vemos que hay siete ángeles de las siete iglesias... y no ahora, a través de las edades de la iglesia.”* ¿Ven? No es a través de las edades de la Iglesia. Y ahora, veamos aquí página 142, dice, párrafo 1276: “*Pudiéramos decir esto: Se nos ha prometido conforme Malaquías, capítulo 4 otro águila, con la Columna de Fuego, siguiendo para mostrarle a la iglesia errada en este día que Él es Hebreos 13:8, el mismo ayer, hoy y para siempre. ¡Se nos ha prometido otro, el cual vendrá volando del desierto! Cuan propio y conveniente es a Lucas 17:30 donde el Hijo del Hombre-Águila se estará revelando para dejar en ruina todos los otros lugares de adoración, tal como denominaciones y así sucesivamente. Dios escogió su lugar. Juan dijo: ‘Allí está.’ Y se nos ha prometido la misma cosa en este día, para regresar el corazón de los hijos, para hacer ver que él no está muerto; el bautismo en el nombre de Jesús y estas otras cosas no son para otra edad sino para esa edad porque ahora Él es el mismo. ¡Amén! Para dejar en ruina todos estos otros lugares de adoración, eso es lo que el águila del último día ha de hacer, para mostrar que todo el resto de ello es tontería (denominación es bobería), pero para señalarles otra vez con la misma señal que Él hizo, que Él es el mismo ayer, hoy y para siempre.”* Y ahora, aquí lo vamos a dejar, vimos... vamos a ver aquí, tenemos la promesa para el tiempo final de la Venida del Hijo del Hombre. Cristo se reflejó a través de los Ángeles Mensajeros, fue Cristo en Espíritu Santo, y para este tiempo final también Él se manifestará en el Lugar Santísimo estaba la luz de la *Shekinah* en el templo, y en las lámparas estaba la luz que reflejaba, que reflejaba lo que estaba dentro del lugar santísimo. O sea, que la luz que estaba en el lugar santo, en las lámparas o candeleros o candelabros, era la luz de la *Shekinah* reflejada en el lugar santo; porque cuando Moisés dedicó el templo y también cuando Salomón dedicó el templo, vino Dios y el sacrificio allí lo consumió el fuego que descendió. Vean ustedes, luego, de ese fuego encendieron las lámparas. En el lugar santo estaba un reflejo del Fuego de Dios, porque Dios es Fuego consumidor y es Luz, estaba un reflejo del Dios Todopoderoso que estaba dentro del lugar santísimo sobre el propiciatorio. Por eso fue que cuando los hijos de Aarón en el capítulo 10 de Levítico entraron al lugar santísimo con fuego extraño, salió fuego de Dios y los quemó, porque Dios es Fuego consumidor. Ellos no entraron con el sacrificio por el pecado. Toda persona antes de presentarse ante Dios, tiene que tener el sacrificio por el pecado y tener confesados sus pecados a Cristo, para que Cristo con Su Sangre lo limpie de todo pecado. Por eso cuando les enseñó a orar a Sus discípulos, Él les dijo que oraran, diciendo: “Padre nuestro que estás en el Cielo o en los Cielos...” Y siguió explicándoles, y entre las cosas que les dijo que hicieran fue que dijeran: “Perdona nuestras deudas, o sea, nuestros pecados, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores.” Porque es necesario que todo ser humano para presentarse ante Dios, sea limpiado con la Sangre de Cristo de todo pecado. Y el cristiano tiene que tener sus pecados confesados a Cristo, en todo momento que falla ante Dios, está llamado a confesarlos a Cristo para que sean limpiados con la Sangre de Cristo, y pueda presentarse ante Dios, no vaya a presentarse con pecado, y entonces vaya a salir Fuego de Dios y lo vaya a destruir. Recuerden que ya como muestra con un botón basta, con el caso de los hijos de Aarón. Así que es muy importante eso para todo creyente en Cristo. Dice la Escritura que la Sangre de Cristo nos limpia de todo pecado. Por lo tanto, no solamente nos limpió cuando lo recibimos como nuestro Salvador, sino que nos mantiene limpios en cada ocasión que pecamos y lo confesamos a Él, Él nos limpia. Está las 24 horas la Sangre de Cristo disponible para usted y para mí, para que usted nunca se presente sucio con pecados ante Dios, sino que los confiese a Él para que esté limpio y pueda presentarse a Dios y recibir, recibir lo que usted pide a Dios. Bueno, miren, cuando Daniel estaba confesando sus pecados y los pecados de su pueblo, le apareció ¿quién? El Arcángel Gabriel. Queremos tener las bendiciones del Cielo, queremos tener las experiencias como Daniel, queremos tener la visitación angelical, entonces tenemos que hacer ahí como hizo Daniel: luego de confesar sus pecados y los pecados del pueblo, fue que apareció el Arcángel Gabriel. También sucedió así cuando el sacerdote Zacarías ofreció el incienso y le apareció el Arcángel Gabriel. Así usted encontrará en diferentes pasajes estas cosas. Así que nosotros dependemos ¿de quién? Solamente de Dios. La Iglesia del Señor Jesucristo depende solamente de Dios en la construcción, la creación de la Iglesia de Jesucristo, que es la creación de una Nueva Raza. O sea, que, vean, muchas personas que no comprenden piensan que el cristianismo es la persona meterse a una religión. Pero el cristianismo es la creación de una Nueva Raza con Vida eterna, la cual Cristo, el Segundo Adán, está creando en Su Iglesia, la Segunda Eva, donde ha colocado Su Espíritu, para poder crear esa Nueva raza con Vida eterna. Así como Él tuvo el cuerpo angelical primero y después el cuerpo físico, nosotros recibimos el cuerpo angelical primero en el Programa de la creación de la Nueva Raza, y luego recibiremos el cuerpo físico glorificado. Todo es sencillo. Pero todo depende ¿de quién? Del Señor Jesucristo. “Dependiendo... o: Dependemos del Señor.” Vamos a leer el tema tal y como fue: **“DEPENDIENDO SOLAMENTE DEL SEÑOR** (del Señor Jesucristo)**.”** Ha sido para mí una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, dándoles testimonio de nuestro tema: **“DEPENDIENDO SOLAMENTE DEL SEÑOR.”** ¿De qué Señor? Del Señor Jesucristo, el Dios del Cielo y de la Tierra, que se hizo carne, se hizo hombre, y habitó en medio de la raza humana, y vino a ser Emanuel, Dios con nosotros, y habitó en el cuerpo físico llamado Jesús, habitó ahí en toda Su plenitud. Bueno, que Dios les continúe bendiciendo a todos, que Dios también les use grandemente en Su Obra, porque estamos dependiendo solamente del Señor, del Señor Jesucristo. ***Muchas gracias por vuestra amable atención y que Cristo les use grandemente en Su Obra en este tiempo final, llevando el Mensaje por todos los lugares, para que Cristo se reproduzca en hijo e hijas de Dios; y siga añadiendo a Su Iglesia los que faltan de ser añadidos a Su Iglesia, los cuales están escritos en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.*** Bueno, con nosotros nuevamente nuestro hermano y amigo Miguel Bermúdez Marín para continuar. Muchas gracias por vuestra amable atención, y ya dejo con nosotros a nuestro amigo y hermano, misionero, Rvdo. Miguel Bermúdez Marín. “**DEPENDIENDO SOLAMENTE DEL SEÑOR.”**