--- title: 'Teniendo el mismo amor' date: 2001-10-03 activity: 1 place: city: Santa Cruz state: country: BO duration: 00:23:00 public: false youtube: rm: true translations: files: --- Muy buenas tardes, ministros compañeros en el Reino de Jesucristo; es para mí una bendición y privilegio grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final. Para esta ocasión tenemos la lectura en Filipenses, capítulo 2, verso 1 en adelante, donde dice: “*Por* *tanto,* *si* *hay alguna consolación en Cristo,* *si* *algún consuelo* *de* *amor,* *si* *alguna* *comunión* *del* *Espíritu,* *si* *algún* *afecto* *entrañable, si alguna* *misericordia,* *completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.* *Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo;* *no* *mirando* *cada* *uno* *por* *lo* *suyo* *propio,* *sino* *cada* *cual* *también por lo de los* *demás.* *Haya,* *pues,* *en* *vosotros* *este* *sentir* *que* *hubo* *también* *en* *Cristo* *Jesús,* *el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,* *sino* *que* *se* *despojó* *a* *sí* *mismo,* *tomando* *forma* *de* *siervo,* *hecho semejante a los* *hombres;* *y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.* *Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,* *para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que* *están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;* *y* *toda* *lengua* *confiese* *que* *Jesucristo* *es* *el* *Señor,* *para* *gloria* *de Dios* *Padre.”* Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla. Nuestro tema es: **“TENIENDO EL MISMO** **AMOR** **UNANIMES** **EN LA OBRA DE** **CRISTO.”** Tenemos que tener el mismo Amor, y ese es el Amor de Cristo en nosotros, y unánimes en la Obra, o sea, en la Obra de Cristo en el Cuerpo Místico de Cristo, estando unánimes y sirviendo a Cristo y esperando nuestra transformación; como estuvieron unánimes en el Aposento Alto los 120 creyentes que allí estaban unánimes esperando la Venida del Espíritu Santo (en el libro de los Hechos, capítulo 2, verso 1 en adelante), y estuvieron allí unánimes juntos hasta que recibieron el Espíritu Santo. El Aposento Alto nos habla de un lugar alto, y por consiguiente, vean ustedes, por cuanto vino la promesa correspondiente al Día de Pentecostés, el Día de Pentecostés es el día 50, y el día 50 es el día en que Dios envió el Espíritu Santo sobre los creyentes que estaban ¿cómo? Unánimes juntos esperando la promesa del Espíritu Santo. Para este tiempo final los escogidos de Dios están esperando la promesa del nuevo cuerpo que Cristo ha prometido para nosotros, y estamos en el Aposento Alto de la Edad de la Piedra Angular, ahí estamos unánimes juntos. Ahora vean, ellos estaban juntos literalmente, y ahora nosotros estamos juntos en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad de la Piedra Angular; no está uno por otra edad pasada, sino está junto en la misma edad, no está uno por allá por su cuenta caminando a como él quiere, sino unidos ahí en la misma edad juntos y unánimes en la misma edad. Allá como Pedro era el líder que tenía las llaves del Reino, vean ustedes, Pedro llevaba la voz cantante. El Rvdo. William Branham dice: “Así como Pedro y Pablo trajeron el Evangelio a los gentiles, los gentiles lo llevarán de regreso a los judíos.” Y él señala que esos que llevan a los judíos el Evangelio son los Dos Olivos, Moisés y Elías, y dice que son los gentiles los que llevan el Evangelio a los judíos; por lo tanto entre los gentiles en la Iglesia de Jesucristo en la Edad de la Piedra Angular, ahí estarán los ministerios de Moisés y Elías. Bajo esos ministerios estará el Cuerpo Místico de Cristo unido, ahí sintiendo una misma cosa y teniendo el mismo Amor, el Amor de Cristo en nuestros corazones. Siendo que es la Edad del Amor Divino, la Edad de la Piedra Angular, vean ustedes, es ahí donde hay una manifestación del Amor Divino en medio del Cuerpo Místico de Cristo, lo cual nos mantiene unidos en Amor Divino. Y ahora, nos mantenemos unánimes también ahí, y juntos en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad de la Piedra Angular esperando nuestra transformación, o sea, la doble porción que Cristo ha prometido para los creyentes en El. Vamos a ver aquí lo que dice en la página 4-A, el verso 30, dice: “*Yo* *prefiero* *tener* *una* *iglesia* *que* *no* *conoce* *nada* *sobre* *ningún don* *espiritual* *y* *que* *sólo* *esté* *así* *en* *amor* *entre* *unos* *y* *otros* *y* *con Cristo.* *Yo* *prefiero tener eso que tener cada don espiritual operando* *en* *la* *iglesia.* *Ahora* *eso* *puede* *sonar* *horrible* *en* *un grupo* *pentecostal, pero yo prefiero tener eso. Donde hay dones ellos fallarán,* *donde* *hay* *dones* *ellos* *traerán* *confusión,* *donde* *hay* *dones* *ellos* *pueden ser cuestionados, pero donde hay amor hay perfección. Y si usted tiene amor perfecto, usted tendrá dones perfectos. Así que trabaje primero con amor; eso trae compañerismo y el compañerismo trae* *dones.”* Ahora, podemos ver que tenemos que estar en Amor, y en nuestra edad es la Edad del Amor, porque es la Edad de la Piedra Angular. Así como la Edad de la Primera Venida de Cristo, que fue la Edad de la Piedra Angular, es allá la Edad del Amor, en donde Dios amó de tal forma al mundo, a la humanidad, que ha dado a Su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en El cree no se pierda mas tenga Vida eterna. “*De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo* *unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”* (Nota - San Juan 3:16). Y ahora, hemos llegado de nuevo a una edad perfecta, la Edad de la Piedra Angular, la Edad del Amor Divino. Allá la Edad del Amor Divino fue para llevar a cabo la Obra de Redención en la Cruz del Calvario, acá la Edad del Amor Divino es para llevar a cabo la Obra de Reclamo. Ahora, hemos llegado a la Edad del Amor Divino. Por lo tanto, sabiendo que permanecen la fe, la esperanza y el amor, conforme a Primera de Corintios, capítulo 13, verso 13, la fe, esperanza y el amor, y dice San Pablo: “Pero el mayor de ellos es (¿cual?) el amor.” Asíque teniendo el Amor Divino en nuestra Edad, tengamos también el Amor Divino en nuestros corazones. Recuerden que la Edad del Amor Divino es la Edad del Lugar Santísimo, y el lugar santísimo en el individuo es el alma; por lo tanto *aquí* en el alma es el lugar del Amor Divino, para Dios morar ahí, manifestar Su Amor Divino. Por lo tanto, vean ustedes cómo todo se junta en la Edad de la Piedra Angular, para una manifestación del Amor Divino enla Iglesia de Jesucristo, y del Amor Divino en el alma de cada creyente. Y para que la Iglesia exprese, deje manifestarse el Amor Divino en ella, y cada persona como individuo también deje manifestar el Amor Divino en su vida. Y todas las cosas que hagamos en la Obra de Cristo sea una Obra de Amor. “Todo lo que hagáis hacedlo en Amor.” Dice la Escritura. Por lo tanto, es en Amor que hay que llevar a cabo la Obra de Dios, siendo que la Obra de Dios a través de Cristo es una Obra de Amor. *“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado* *a* *su Hijo unigénito, para que todo aquel que en* *él* *cree, no se* *pierda,* *mas tenga vida eterna.”* (San Juan, capítulo 3, versos 13 al 19). Ahora, la Obra que es realizada por la Iglesia del Señor Jesucristo tiene que ser una Obra ¿de qué? De Amor también. Por lo tanto obremos en Amor. La fe también obra ¿cómo? En Amor, por el amor; sin amor la fe no funciona bien. Ahora, vean ustedes en Jeremías, capítulo 31, verso 3, nos habla Dios ahí de Amor también. Dice: “*Jehová se manifestó a* *mí* *hace* *ya* *mucho* *tiempo,* *diciendo:* *Con amor eterno* *te* *he* *amado;* *por* *tanto,* *te* *prolongué* *mi* *misericordia.”* Y ahora, la Misericordia de Dios es prolongada a la persona, y también a la Iglesia del Señor Jesucristo, por causa ¿de qué? Del amor eterno con el cual El nos ha amado. Eternamente El nos ha amado, y por consiguiente Su Misericordia ha sido extendida a todos nosotros. El mismo Señor Jesucristo en el capítulo 15 de San Juan, verso 9, dice: *“Como* *el* *Padre* *me* *ha amado, así también yo os he amado;* *permaneced en mi amor.”* En la misma forma en que el Padre amó a Jesús, Jesucristo nos ha amado a nosotros, con el mismo amor: Amor Divino. También dice en el mismo capítulo 15, verso 17: “*Esto os mando: Que os améis unos a otros.”* Esto es con Amor Divino. También en el capítulo 17, verso 24, dice Cristo: “*Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también* *ellos* *estén* *conmigo,* *para* *que* *vean* *mi* *gloria* *que* *me* *has dado; porque* *me* *has amado desde antes de la* *fundación del* *mundo.* *Padre justo,* *el* *mundo* *no* *te* *ha* *conocido,* *pero* *yo* *te* *he* *conocido, y éstos han conocido que tú me enviaste.* *Y* *les* *he* *dado* *a* *conocer* *tu* *nombre,* *y* *lo daré* *a* *conocer* *aún,* *para que* *el* *amor* *con* *que* *me* *has* *amado,* *esté* *en* *ellos,* *y* *yo* *en* *ellos.”* Y ahora, el mismo amor con el cual Dios amó a Jesús, Cristo dice para que esté ¿dónde? En nosotros también. Ese es el Amor Divino, el Amor de Dios, Amor Agape en nuestras vidas, en nuestras almas como individuos, y en la Iglesia del Señor Jesucristo en este tiempo final, en la Edad de la Piedra Angular, que es el alma de la Iglesia del Señor Jesucristo. Y ahora, todo lo que hacemos en la Obra de Cristo es en Amor, por lo tanto es una Obra de Amor, así como la Obra de Cristo hecha en Su Primera Venida fue una Obra de Amor también. Y la Obra que Cristo está haciendo en Su Iglesia es una Obra de Amor también; por lo tanto la Obra que nosotros realizamos en el Cuerpo Místico de Cristo tiene que ser una Obra de y en Amor también. Y ahora, hemos llegado a la Edad de la Piedra Angular, que es la Edad del Amor Divino; por lo tanto la Obra de la Edad de la Piedra Angular es una Obra de Amor Divino; de parte de Cristo para nosotros, y de parte de nosotros para Cristo es una Obra de Amor Divino la Obra correspondiente a la Edad de la Piedra Angular, en donde esperamos con paciencia, con fe y con Amor nuestra transformación. Ahora, no nos paleemos los unos con los otros; vean cómo en algunas ocasiones entre los discípulos hubo algunas diferencias, pero eso muestra la parte humana de las personas. Pero en Amor esas diferencias se echan a un lado y nos damos la mano y nos agarramos bien los unos de los otros para seguir adelante, sirviendo a Cristo en Amor Divino, y ayudándonos los unos a los otros. Nos ayudamos en todos los sentidos, y aun también ayudamos a nuestras congregaciones, el uno al otro puede ayudar a la congregación de su compañero ministro, para que también crezca cuando él necesite que usted le ayude; le ayude en las diferentes formas que se puede ayudar a otra congregación. Yo aprecio mucho también la ayuda que ustedes han efectuado en favor de la congregación de Puerto Rico, la ayuda en todos los sentidos de ustedes aquí en Bolivia (en Santa Cruz, Bolivia, y en La Paz, Bolivia, y en los diferentes lugares de Bolivia), y también los diferentes lugares de toda la América Latina y el Caribe. Les agradezco a los ministros y a sus congregaciones la ayuda que nos han dado en y a Puerto Rico en todos los sentidos. Ahora, vean ustedes cómo nos ayudamos los unos a los otros en diferentes formas, y orando los unos por los otros, también nos estamos ayudando; y el que no tiene literatura o no tiene imprenta, si el otro le ayuda supliéndole alguna literatura, le está ayudando también a ese ministro y a su congregación. Así que todo eso debe ser hecho, ¿cómo? En Amor, para que sea una Obra de Amor Divino, que es la única clase de obra que es contada como parte de la Edad de la Piedra Angular, que es la Edad del Amor Divino. O sea, que toda obra hecha en Amor Divino corresponde a la Edad de la Piedra Angular en este tiempo final. Pero toda obra que se haga por contienda, esa no puede ser incluida dentro de la Edad de la Piedra Angular. Por lo tanto, la persona que haga una obra en contienda, esa Obra no tiene premio en la Edad de la Piedra Angular, más bien es una obra desagradable a Dios. Por lo tanto, obremos en y con Amor Divino. Dice que no actuemos por contienda, dice que algunos predican a Cristo por contienda, otros por vanagloria, y otros por amor. ¿Nosotros cómo? Por Amor predicamos a Cristo, llevamos el Mensaje por todos los lugares, ni por contienda ni por vanagloria sino por Amor. Otros también lo llevan por ganancias económicas, pero nosotros lo llevamos por Amor a todas las personas. Así que siguiendo al amor, la verdad y el amor, crezcamos en Jesucristo nuestro Salvador, y crezcamos en el Cuerpo Místico de Cristo. Ahora, ¿cómo crece el Cuerpo Místico de Cristo? En lo físico, en lo literal, el Cuerpo Místico de Cristo crece a medida que van siendo añadidos más miembros al Cuerpo Místico de Cristo. Y crece también en conocimiento a medida que va obteniendo más conocimiento. Y crece en perfección, y así crece en las diferentes formas en que puede crecer el Cuerpo Místico de Cristo. Y cada miembro del Cuerpo Místico de Cristo también va creciendo. Ahora, teniendo Amor entonces podemos trabajar en la Obra de Cristo y todo hacerlo por Amor a Cristo, y en Amor, y así ser una Obra de Amor la que llevamos o llevemos a cabo nosotros en nuestra Edad, porque esa es la Obra que corresponde a la Edad de la Piedra Angular. La Obra de Cristo como Cordero de Dios es una Obra de Amor Divino, y la Obra de Cristo como Reclamador es una Obra de Amor Divino también. Por eso ambas obras corresponden a la Edad de la Piedra Angular, la Edad de la Piedra Angular de la Primera Venida de Cristo, y la Edad de la Piedra Angular de la Segunda Venida de Cristo. Vean, es en la Edad de la Piedra Angular, allá dos mil años atrás, que vino Cristo; y es en la Edad de la Piedra Angular *acá* en donde la Segunda Venida de Cristo será cumplida. Ahora, podemos ver que en esa Edad tiene que estarse llevando a cabo una Obra de Amor, Amor Divino. No amor filio sino Amor Agape, Amor de Dios. Y ahora, todos unánimes crezcamos en la Obra de Cristo, trabajando en Su Obra unidos todos en Amor Divino, teniendo el Amor Divino entre nosotros manifestados, y dejando que se exprese en nosotros hacia los demás compañeros ministros y hacia el pueblo y hacia todos los seres humanos. “**TENIENDO EL MISMO AMOR UNANIMES EN LA** **OBRA DE CRISTO.”** Así permanezcamos sirviendo a Cristo todos los días de nuestra vida. Ahora, podemos ver porqué la Obra de Cristo correspondiente a nuestro tiempo ha estado creciendo tanto: porque es una Obra de Amor Divino. Esa es la Obra que corresponde a la Edad de la Piedra Angular, la cual Cristo hace en la Edad de la Piedra Angular, y por consiguiente la Iglesia trabaja y hace también la Obra que le corresponde a ella, pero la hace, no por intelecto humano sino por revelación divina en Amor Divino. Adelante entonces sirviendo a Cristo, teniendo el mismo amor, unánimes en la Obra de Cristo, sintiendo una misma cosa, y teniendo una misma revelación y no añadiéndole ni quitándole a la revelación divina. Si hay algo que no entienden, en algún otro Mensaje lo van a entender. Lo que no entiendes ahora lo entenderás después. En la actualidad entendemos más cosas de lo que entendieron los discípulos del Señor Jesucristo mientras estuvieron en la Tierra, y aun mientras ellos estuvieron en sus ministerios terrenales. Ellos no entendían este misterio de las edades y de los Angeles de las edades, y ese recorrido del Espíritu de Dios, a través de los Mensajeros de edad en edad, desde Asía Menor, Europa, Norteamérica, y luego llegar a la América Latina y el Caribe, y sin embargo nosotros tenemos ese conocimiento divino. Por lo tanto, con toda esa Palabra revelada nosotros caminamos hacia adelante en la Obra de Cristo trabajando en Amor Divino y llevando ese Mensaje por todos los lugares; está grabado en videos y está impreso en folletos para que pueda ser llevado por todos los lugares sin ser alterado; porque ese Mensaje, esa Palabra es la que hará la Obra de llamar y juntar los escogidos del Día Postrero, y ese Mensaje es el que prepara a todos los escogidos de Dios para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo. Si las personas le añaden o le quitan están quitándole el efecto ya en lo que es la semilla. Si una persona en una semilla de alguna planta o de algún árbol logra quitarle cierta parte, en la parte... que es la vida de la semilla, y le quita la parte que tiene que ver con las hojas, cuando nazca esa semilla será un árbol sin hoja. ¿Ven? Y así cuando las personas le quitan o le añaden a la Palabra, luego los resultados que va a producir esa Palabra será incompleto, no tendrá todo lo que Dios ha prometido, ¿por qué? Porque la persona le quitó o le añadió; pero si permanece pura esa Palabra va a producir la resurrección de los muertos en Cristo y la transformación de nosotros los que vivimos, y después el llamado de los ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. Pero antes de todo eso, pues tiene que producir el llamado y recogimiento de los escogidos entre los gentiles. Alrededor de esa Palabra es que son llamados y juntados los escogidos de entre los gentiles del Día Postrero, y alrededor de esa Palabra es que son colocados en el Cuerpo Místico de Cristo, y alrededor de esa Palabra es que seremos transformados en este tiempo final, alrededor de esa Palabra será que se materializará la transformación del cuerpo eterno y glorificado; como Abraham tenía la Palabra prometida, por lo tanto alrededor de esa Palabra vino un cambio para él, una transformación de ancianos a jóvenes. Y ahora, para nosotros alrededor de la Palabra correspondiente a nuestra Edad, tenemos la promesa de una transformación física, en donde obtendremos un cuerpo físico, eterno, inmortal, incorruptible y glorificado; y para los muertos en Cristo una resurrección en cuerpos glorificados. Todo eso está sellado en la Palabra semilla, simiente; porque siempre cuando en las plantaciones se va a producir una planta, tiene que haber una semilla. Y ahora, en el Programa de Dios, vean ustedes, la Palabra es la simiente, la semilla, es la simiente original; tiene que haber una Palabra creadora para materializarse, para producir el recogimiento de los escogidos, y para producir la resurrección de los muertos en Cristo y para producir la transformación nuestra; tiene que estar esa Palabra ahí, y Dios tiene que hacer algo muy importante: es vindicar esa Palabra, o sea, traerla a vida, vivificarla, cumplirla, lo cual será una realidad para todos nosotros. Antes de usted tener una planta de trigo o de aguacate, un árbol de aguacate o algo así, primero tiene que haber tenido una semilla que haya sido sembrada. Y ahora, nosotros tenemos la semilla para el cuerpo nuevo y eterno: Es la Palabra, la Palabra creadora de Cristo, el Mensaje de la Gran Voz de Trompeta del Evangelio del Reino, el Mensaje prometido por Cristo para este tiempo final, esa es la Palabra creadora para todos nosotros. Vean cómo ha estado creando una nueva edad, eso no lo hace palabra humana, lo hace la Palabra creadora de Dios; así como la Palabra creadora de Dios en cada Angel Mensajero creó la edad correspondiente al tiempo en que Dios envió esa edad, ese Mensajero, y creó esa edad ¿con qué? Con piedras vivas, seres humanos. Y ahora, está creando la Edad de la Piedra Angular con piedras vivas, pero estas piedras son de oro, son las que más peso tienen delante de Dios, son oro puro. Por lo tanto, con piedras vivas de oro Cristo está creando la Edad de la Piedra Angular, que es la Edad del Lugar Santísimo, porque el lugar santísimo era de oro, y la madera o tablas que hubo allí y el arca del pacto, y todo estaba forrado de oro, cubierto de oro. Y ahora, todo en el lugar santísimo era de oro, porque allí estaba Dios, la divinidad, y Dios se representa en el oro. Y ahora, vean ustedes, nuestra edad es la Edad de Oro, porque es la Edad del Lugar Santísimo; por lo tanto estamos viviendo en la Edad de Oro con gente de oro, son todos oro para nuestro Dios; es la Edad de más valor, es la Edad del Trono, es la Edad del Arca del Pacto, es la Edad del Propiciatorio, es la Edad para la presencia de Dios manifestarse en toda Su plenitud, es la Edad de los Dos Querubines de Oro, es la Edad de los Dos Querubines de madera de olivo cubiertos de oro, es la Edad de los ministerios de los Dos Olivos, de Moisés y Elías, de los dos candeleros, es la Edad del Amor Divino. Por lo tanto, en Amor crezcamos en el Cuerpo Místico de Cristo como individuos; estamos viviendo en el tiempo más glorioso de todos los tiempos, estamos viviendo en el tiempo del Amor Divino, la Edad del Amor Divino, la Edad más gloriosa de todas las edades. ***Por*** ***lo*** ***tanto,*** ***teniendo*** ***el*** ***mismo*** ***Amor*** ***unánimes*** ***en*** ***la*** ***Obra*** ***de Cristo,*** ***trabajemos*** ***en*** ***Su*** ***Obra,*** ***crezcamos*** ***como*** ***individuos*** ***en*** ***Su Obra, y que crezca Su Obra, crezca en miembros y crezca en conocimiento y sabiduría y revelación de Dios; y*** ***pronto*** ***Cristo*** ***complete Su Iglesia y resucite a los creyentes en El que han partido, en cuerpos glorificados los resucite y nos transforme a nosotros los que vivimos. Todo*** ***esto*** ***en*** ***el*** ***Amor*** ***Divino*** ***en*** ***este*** ***tiempo final, y como Reclamador en Su Obra de Reclamo, y nos lleve con El a la Cena de las Bodas del Cordero al Cielo. En*** ***el*** ***Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.*** Bueno, ha sido para mí un privilegio grande estar con ustedes en esta tarde, dándoles testimonio de estas cosas, dándoles testimonio del Amor, del mismo Amor de Cristo en nosotros, el mismo Amor de Dios en nosotros. “**TENIENDO EL MISMO AMOR UNANIMES EN LA OBRA DE CRISTO.”** Permanezcamos unánimes en la Obra de Cristo con el mismo Amor Divino, porque estamos en la Edad del Amor Divino. Que Dios les continúe bendiciendo a todos, que Dios les guarde, y dejo nuevamente con ustedes a nuestro amado amigo y hermano Miguel Bermúdez Marín, y también a nuestro hermano Tirzo Ramiro Girón Pinzón, para el cántico que él tenía también. Así que con Miguel vienen a cantarlo... los dos tenían este cántico, por lo tanto ahora es el momento mejor para este cántico. Por Amor, vean ustedes, por Amor Divino vino Cristo para llevar a cabo Su Obra de Redención, morir y resucitar, vencer la tumba, resucitar y ascender al Cielo victorioso para derramar del Cielo todas las bendiciones divinas sobre todos nosotros. Cristo la tumba venció para poder darnos todas las bendiciones del Cielo. “**TENIENDO EL MISMO AMOR UNANIMES EN LA OBRA DE CRISTO.”**